Memorias Congeladas:
(By Alcoeid)
Aclaraciones: Los personajes de Yu Yu hakusho, no me pertenecen, y este fic no fue escrito con fines de lucro.
- Bla, bla, bla – Diálogo
"Bla, bla, bla" Pensamiento
Bla, bla, bla Recuerdo
Bla, bla, bla Sueño
La Voz
Capítulo 2:
- Ahhhhh – Ambos siguieron caminando en silencio hasta que llegaron a la entrada de la casa de Kurama – Minamino, discúlpame... – Susurró –
- No te preocupes, y dime Shuichi – Dijo con una sonrisa, antes de entrar –
Los dos muchachos entraron a la pequeña casa que Shuichi compartía con su madre, Travis, quedó absolutamente fascinado por todos los cuadros, flores, y demás detalles pequeños pero hermosos de aquella casa.
- Mi... Digo Shuichi, tu casa es preciosa – Exclamó –
- Ese crédito es para mi madre, ya que ella la decoró, yo simplemente vivo aquí y la ayudo a mantenerla limpia – Dijo con su típica y cálida sonrisa – Travis, espérame aquí, iré a preparar algo de comer –
- Espera! Te ayudaré, digo, es lo menos que puedo hacer teniendo en cuento todo lo que has hecho tú por un perfecto extraño – Dijo Travis siguiendo a Kurama a la cocina –
Luego de varias horas y muchos paquetes de harina ambos muchachos terminar lo que se podía llamar con el nombre de pizza.
- Itadaquimasu! – Exclamaron ambos mientras se disponían a comer –
- Estaba delicioso, creo que si como algo más explotaré! – Exclamó Travis mientras sonreía con gusto –
- Igual digo, hacía tiempo que no cocinaba algo que saliera tan delicioso! – Exclamó Kurama –
- Es porque nunca te había ayudado YO a cocinar –
- Eso es cierto "Sr. Humildad" – Afirmó con sarcasmo –
- Igual digo "Sr. Harina" – Afirmó-
- Eso lo dices porque no te has visto al espejo –
Ambos siguieron por horas con los sarcasmos vienen sarcasmos van hasta que decidieron que por fin era hora de dormir, ya que, auque al otro día no tenían clases, la madre de Kurama volvería porque el viaje se había suspendido y debían arreglar el desastre que dejaron en la cocina.
- Por haya está el baño, por si quieres ducharte – Dijo Kurama señalando una puerta cercana a la de su cuarto –
- Sí, gracias – Afirmó sonriendo –
- Toma – El pelirrojo le tendió un par de ropas suyas al joven de cabello bicolor –
- Gracias, de nuevo –
- No hay de que –
Travis entró al baño sin demasiadas vueltas, estaba lleno de harina y un baño no le vendría mal, tanto para lavar su cuerpo como para aclarar su mente.
"Todavía no entiendo a Shuichi: Primero ayuda a un perfecto extraño, luego se queda con él sin dudarlo mientras este sigue inconciente, le ofrece casa y lo trata como a alguien que conociera desde hace siglos, es algo que no entiendo, además, se muestra tan amable... "
No deberías dudar tanto, si no confías en el pues, has lo que mejor sabes, espíalo y se lo ves conveniente mátalo, ya lo has hecho antes
"Tú de nuevo, mira no sé quien eres o qué quieras, pero ya no molestes, además qué es eso de que lo mate de qué ya lo eh hecho antes?"
Es que acaso no lo recuerdas?
"No sé de que estas hablando, ya sal de mi mente!"
Como quieras, pero es mi turno de corroborar teorías
"Qué quieres de... – En eso los ojos del muchacho pierden su brillo usual tornándose de azul marino a un celeste sumamente pálido."
Travis salió del baño, ya cambiado y fue hacia la habitación de Kurama, allí él había tendido un catre a un lado de su cama. Shuichi, yacía desmayado a un lado del catre...
- Qué demonios...? –
Travis se acercó a Kurama y colocó sus dedos en su cuello para tomar su pulso, estaba dormido, al parecer, el cansancio le había ganado, Travis sonrió ante la idea de que él estuviese inconciente, lo levantó como si de una pluma se tratase y lo colocó en su propia cama. El joven de ojos, ahora celestes se quitó algo del cuello, abrió los primeros botones de la camisa de Kurama, y lo colocó en su pecho, lo tocó con dos dedos y una luz se proyectó desde este.
- Es imposible! – Travis estaba más pálido que de costumbre, sus ojos volvieron a aquel extraño color zafiro y se desmayo en su cama –
A la mañana siguiente ambos jóvenes se despertaron sin recuerdos de lo que había sucedido...
- Mi cabeza... – Kurama fue el primero en abrir los ojos, su cabeza le dolía y sentía que todo el mundo le daba vueltas – Travis, estas despierto?
- Qué? Sí... – Dijo más dormido que despierto, luego se incorporó en la cama – Qué te sucedió en el pecho? Tienes como una gota quemada –
- No lo sé, pero si la tocó me duele mucho – Afirmó poniendo una mano sobre la herida – Tú estás bien?
- Sí, me duele todo el cuerpo, pero nada del otro mundo – Dijo girándose y mostrando su espalda desnuda al kitsune de ojos esmeralda –
- Esas alas en tu espalda, dime que son un tatuaje – Dijo totalmente pálido –
- Aunque me gustaría que lo fueran no lo son, daría lo que sea por quitarlas de mi espalda – Dijo con melancolía –
- Por qué?
- Porque duelen, y mucho – Explicó poniéndose su propia camisa – Bueno, creo que deberíamos ir a arreglar la cocina antes de que llegue tu madre, por cierto, a que hora llega?
- No te preocupes, llega a las 12:00, por?
- Por qué solo tenemos una hora para arreglara la cocina, son las once! –
- Qué!
Ambos muchachos se cambiaron y bajaron como descarriados a limpiar los desastres que habían hecho en la cocina, y luego de una hora casi lo habían logrado.
- Solo falta sacar esto afuera – Dijo el pelirrojo mientras sostenía una bolsa de basura en la mano –
- Dámela, la llevaré afuera mientras me voy – Dijo sonriente Travis –
- Te vas? –
- Sí, olvidé que hoy llegaban mis abuelos, a eso de las cuatro y debo arreglar esa cosa que yo llamo casa – Ambos comenzaron a reír –
- Nos vemos – Dijo Kurama –
- Si, nos vemos el lunes Shuichi – Mientras Travis salía paso frente al espejo de la entrada, solo fue por un segundo pero el kitsune de ojos esmeralda podía jurar que lo que se había reflejado no era el rostro de Travis, era otra persona –
- Travis! – Pero era tarde, el joven de cabello bicolor ya había salido –
Fin del Capítulo 2