Disclaimer: Ninguno de los personajes me pertenecen (Muchas ganas no nos falta a cualquiera que le guste Inuyasha verdad?) le pertenecen a Rumiko sama!

Y ni el tiempo borra tu partida

Autor: Aydé

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Capitulo 20.-

-Juego del destino-

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.-Naraku? El mismo Naraku que conozco?- En su mente trataba de aclarar la explicación que Sesshomaru estaba dándole. –Que tiene que ver Naraku con Kagome?

.-Tienes que apurarte, encuentra a Kagome, corre peligro, en este momento salgo para Tokio, espero llegar a tiempo…-

.-Sesshomaru explícame que es lo que pasa!-

Sesshomaru suspiro. Sabía que si no le decía a Inuyasha que era lo que pasaba no lo dejaría en paz.

.-Inuyasha, Kagome ha estado escondiéndose de Naraku todos estos años, y yo la he ayudado a hacerlo-

Inuyasha se quedo pasamano. Como era posible que su propio hermano hubiera hecho eso? Tantos años que estuvo buscando a Kagome y pensando que Sesshomaru lo estaba ayudando cuando en realidad la estaba alejando mas…

.-Como pudiste! Todos estos años… yo…-

.-No hay tiempo para reclamos, lo hice por el bien de Kagome y ahora si no te das prisa la perderás…-

Esto ultimo hizo que Inuyasha saliera de su enfado y pareció contemplar la situación. – Ven lo más pronto posible Sesshomaru- Y colgó.

Salió como alma que lleva el diablo. Se olvido del saco, de los asuntos importantes que tenía que hacer, las llamadas a los inversionistas, de todo.

Sango y Miroku observaban como salía hecho una fiera hacia el elevador. Fue Miroku quien se atrevió a preguntar. –Oye Inuyasha esta todo bien?-

Inuyasha maldijo al ver que el elevador tardaba unos minutos. Miró hacia Miroku y observó a Sango. –Sango!-

La aludida salto al escuchar su nombre. –Si?-

.-Dime la razón por la cual Kagome ha estado incomunicada todos estos años-

Sango se extraño de su pregunta y frunció el ceño. –In-comunicada?-

.-Si, dímelo!-

La actitud de Inuyasha la sorprendía. Se puso a pensar un poco y ella se vio envuelta en la misma pregunta. No sabía la respuesta. Hace varios años antes de que su mamá muriera recordaba que la había prevenido, si la había prevenido de un hombre, un hombre que, según su madre había tenido que ver con la muerta de su recién nacido hijo Kohaku.

.-No lo sé…-

Inuyasha parecía desesperarse aun más. Nadie le daba respuestas. Demonios que era difícil controlarse en una situación como esta. Su hermano decía que Kagome corría peligro por que Naraku quien fuera amigo de su padre hace muchos años antes de que muriera, y que había estado huyendo de él todos estos años que estuvo escondida. Mas por que huía de él?

.-Una vez…-

Miroku e Inuyasha voltearon al oír la voz de Sango que cerraba los ojos como tratando de recordar algo.

.-Una vez, antes de que mi madre muriera, me dijo que tenía que cuidarme de un hombre, que había estado atormentando a la familia, dijo que él había sido el causante de la muerte... de mi hermano Kohaku-

.-Maldito!- Cada vez estaba más seguro Kagome corría peligro. –Tengo que buscarla…-

Al decir eso Sango se levantó de súbito. –Quieres decir que la llamada de Sesshomaru es por él verdad? Quiere a kagome!-

Inuyasha se sorprendió. Como Sango había atado cabos y dado con la misma respuesta que él. Débilmente asintió con la cabeza.

.-Dios!- Sango cayó pesadamente en el asiento mientras sollozaba. Miroku fue a su lado a consolarla y miró a Inuyasha.

.-Entonces la señorita Kagome si tenía una excusa muy poderosa para alejarse. Y ahora donde esta ella?-

.-No lo sé, iré a buscarla al centro comercial, dijo que haría unas compras…-

Sango paró de llorar. –No! Ella se fue al templo-

.-Como!-

.-Dijo que iría al templo por unas cosas que le hacían falta, allí esta sola…-

.-Pues iré con ella-

Presionó el botón del elevador una vez más y este se abrió. Inuyasha entró en él y se perdió de la vista de Miroku y Sango.

Los papados aun le pesaban, pero el temor de no saber donde estaba la obligó a abrirlos un poco más. Reconoció que estaba en el templo, para ser exactos en la parte trasera del templo, donde estaba el famoso pozo devorador de huesos, como su abuelo siempre le había contado.

.-Así que ya despertaste?-

Kagome abrió los ojos enormemente al reconocer la voz de aquella mujer. Que era lo que hacía allí en el templo? Y por que le había hecho eso?

Llegó al pie de las grandes escalinatas del templo Higurashi. El viento soplaba muy fuerte a pesar de que aún no caía la noche. Un escalofrió recorrió su espalda. A que se debían todos estas reacciones que sus sentidos le dictaban? Sacudió su cabeza. Tonterías suyas.

Caminó hacia el templo subiendo las escaleras. Al llegar a la mitad de ellas sintió una mano sujetar fuertemente su cintura mientras sentía en su boca la humedad de un trapo viejo que estaba mojado con una extraño aroma que le llenó los pulmones adormeciendo todo su cuerpo. Minutos bastaron para que dejara de luchar y cerrar sus ojos.

Kagome subió su mano hasta la cabeza de ella, ya que el intenso dolor parecía aumentar al mismo tiempo que ella se levantaba del suelo. –Tsu… baki?-

.-Vaya, me recuerdas!-

Tsubaki camino alrededor de ella aprovechándose de que Kagome aun no se recuperaba de los efectos de la droga que le habían suministrado. –Fuiste muy valiente al venir a este lugar y sobre todo sola sabes que muchas personas te están buscando verdad?-

Kagome abrió los ojos y observó que Tsubaki sonreía mientras hacía un gesto afirmativo con la cabeza.

.-Así es querida Kagome, YO le puse precio a tu cabeza. Te vendí. Te vendí a un hombre que se intereso mucho e ti, muy raro eh? Ya que es un hombre poderoso según sé-

.-Porque? Por que me haces esto Tsubaki?- Estallo Kagome al borde de las lagrimas.

.-Que por que lo hago?- Dijo Tsubaki con sarcasmo que luego cambio por uno de completa ira. –Que por que lo hago! Me quitaste lo que más quería en este mundo!-

.-Yo no te he…-

.-Claro que si! Me has quitado a mi Inuyasha!-

.-Él nunca fue tuyo, siempre estuve en sus recuerdos!-

.-Cállate!- De una bofetada tiro al suelo a Kagome que empezó a sollozar no por el golpe, si no por que no tenia la suficiente fuerza como para levantarse e irse de ese lugar.

.-Ahora tú tendrás que pagar por eso y así Inuyasha y yo seremos felices-

Iba a toda velocidad. El templo quedaba a tan solo dos manzanas de ahí y le parecieron eternas. Al llegar a él ya había caído la noche y con ella el silencio que siempre reinaba en aquel templo. Ni siquiera el grillar de los grillos se podía escuchar. Todo parecía tan tenebroso. Bajo a toda velocidad del auto y subió las escaleras de dos escalones. El palpitar de su corazón estaba tan agitado, parecía presentir que algo malo estaba pasando ahí dentro. Deseaba con todas sus fuerzas verla ahí echando cosas en su maleta como si nada malo pasará y llevársela sana y salva, pero tenía un mal presentimiento.

El templo parecía estar solo. Tal vez Kagome ya se había ido al departamento. De pronto algo lo hizo voltear hacia la parte trasera del templo, sus pies caminaron por si solos, como si algo lo llamará. Entonces vio con horror como había una luz tenue que lo iluminaba y como un hombre de cabello largo entraba en él.

.-Lo siento querida Kagome pero…- De su gabardina negra saco una pistola y apunto hacia ella. –Tienes que morir-

Kagome estaba aterrorizada. Dios iba a morir ahí? En ese momento cuando su vida iba tan bien? Miró suplicante a Tsubaki quien parecía desubicada y movía la cabeza negativamente.

.-No, no, lo siento Kagome, pero me estorbas en mis planes-

.-Pero en los míos no-

Ambas mujeres voltearon hacia la entrada de donde un hombre de melena larga y color café las observaba siniestramente.

Tsubaki pareció haber recobrado la cordura ya que bajo el arma y suavizo su expresión. –Naraku-

Naraku observo a Kagome y luego a Tsubaki. –Que era lo que tratabas de hacerle?-

.-Tan solo estaba adelantándole su dolor-

Naraku cerró los ojos y sonrió. – Y quien dijo que iba a matarla?-

Kagome y Tsubaki se sorprendieron por aquella revelación.

.-De que estas hablando! Ella tiene que morir, yo entregue su cabeza!-

Inuyasha se coló por la entrada que Naraku había dejado abierta. Al dar dos pasos escucho claramente las voces de dos personas que él conocía, y al asomarse los pudo ver claramente.

Tsubaki, Naraku y su pequeña Kagome yacía en el suelo. Asustada.

Naraku sacó su arma y le apunto a Tsubaki. –Quieres decir que no estas conforme?-

Tsubaki levanto hacia él la pistola. –NO, no lo estoy. Creí que la matarías, es por eso que la estabas buscando no es así? Para matarla-

-Te equivocas Tsubaki, Kagome tiene algo muy valioso que tengo que recuperar, lo recuerdas bien querida Kagome?-

Kagome hizo un esfuerzo sobre humano para levantarse. –No, no lo recuerdo-

Naraku dibujo más su sonrisa en su rostro. –Acaso ya no recuerdas aquella perla que me robaste hace años?-

Aquella perla? Se referiría a aquella perla que él había encontrado en aquel jardín y que le había dado a Kagome con tal de no verla llorar?

Kagome se lo esperaba. Naraku quería esa perla que Inuyasha le había dado como su tesoro secreto, siendo que jamás imaginaron todos los problemas que acarrearía. –Por supuesto que lo recuerdo, la valiosa perla Shikon-

.-Así es, es la legendaria perla que posee poderes asombrosos, nunca imaginé que dicha perla existiera, pero al comprobar que existía decidí que tenia que ser mía, te imaginas un hombre con poderes inimaginables, sería grandioso-

.-Esa es solo una leyenda-

.-Al igual que los protectores de la perla, los descendientes de esa raza que protegía la perla en las épocas antiguas, que se han encargado de resguardarlas. Yo seguí su rastro hasta que me llevó a uno de los últimos guardianes de esa raza, me refiero a Inu no Taisho-

Inuyasha abrió los ojos enormemente. Todo lo que decían se oía tan irreal. Como podía creer que su padre era un guardián que ocultaba una perla con poderes mágicos? De donde habían sacado esa idea?

Nada tenia sentido. O quizás si…

El pequeñín de ojos dorados buscaba a su padre que estaba sentado en una de las habitaciones especiales. Una a la que nunca entraba por que estaba prohibido entrar en esa habitación. Muchas veces se preguntaba por que había una habitación a la cual nunca podía entrar. Pero ese día se olvido de eso. Su madre había comprado un pequeño cachorro e Inuyasha estaba feliz. Corrió con el pequeño en sus manos y buscó a su padre por toda la casa, hasta que dio con él en la habitación.

.-Mira papá, mamá me ha traído un perrito!-

Inu no Taisho miró a su pequeño en la puerta y guardó enseguida en un cofre algo que parecía una joya.

.-Papá…?

.-Inuyasha, te he dicho que no debes entrar en esta habitación, por que lo has hecho?-

Inuyasha agacho la mirada avergonzado. Se había olvidado de ese detalle. Bajo al cachorro al suelo empezó a sollozar. –Yo… quería mostrarte… lo que mamá…- No podía hablar. Las palabras se perdían en su garganta, ya que había desobedecido las órdenes de su padre.

Inu no Taisho parecía comprenderlo y suavizo su rostro. Su pequeño hijo tan solo quería mostrarle lo que su madre le había regalado. Observó como el cachorro apenas podía andar y caminaba hasta llegar a él donde en una rara pirueta caía de espaldas graciosamente. Entonces sonrió. –Inuyasha…-

Inuyasha oyó el sonido de voz que su padre acababa de usar. No era el típico que usaba cuando lo reprendía, levanto el rostro y se sorprendió al ver a su padre agachado en el suelo acariciando la barriga del pequeño cachorro.

.-Y como vas a llamarlo?-

Inuyasha sonrió y se acercó a él. –Lo llamaré Hoyo-

Su padre se sorprendió. –Hoyo? Que ese no es el nombre de tu amigo?-

Inuyasha frunció el ceño. –No, él no es mi amigo, siempre quiere estar con Kagome y YO soy el amigo de Kagome, solo yo puedo ser su amigo-

Inu no Taisho sonrió. Inuyasha sería demasiado celoso.

.-Me tomó mucho tiempo hacerme de la confianza de Inu no Taisho, hasta que por fin la tuve y me dijo todo lo que esa joya significaba, así como el lugar donde la guardaba. Ese fue su grave error-

.-Eres un maldito…-

.-Gracias a uno de sus tantos viajes pude hacerme de lamerla sin ningún problema, pero para poder utilizar sus poderes necesitaba de una persona con la suficiente fuerza espiritual para poder despertar el espíritu de la perla y lo hubiera hecho, hasta que tu te llevaste esa perla-

Tsubaki comenzaba a desesperarse. Que demonios le importaba esa joya? Ella quería a Inuyasha para ella y tenia que matar a Kagome a como diera lugar. –Es muy triste su historia, pero con más razón deberías matarla Naraku-

.-Ya te dije que no lo haré Tsubaki, Kagome me es de mucha importancia, no solo por que es la poseedora de la perla, si no que he deseado su cuerpo por muchos años…-

Entonces Tsubaki estallo. –Como puedes decir que no vas a matarla! No sabes por todo lo que he pasado! Todo lo que he hecho para que Inuyasha sea mío! Tuve que decirle a Onigumo que Kikyou estaba aquí en Tokio, él parecía muy interesado en ella, ya que Kikyou iba a casarse con él, pero lo dejó plantado y se enamoro de Inuyasha, que cursi no? Después caso logró desaparecer a Kagome de la faz de la tierra cuando intenté atropellarla, faltó muy poco para conseguirlo, y ahora te he contactado a ti para que la mates y me llevo este fiasco, yo misma acabaré con ella- Al tratar de jalar el gatillo se oyo un disparo.

Kagome gritó.

Inuyasha salió de su escondite y se interpuso delante de Kagome.

.-Inu… yasha…- Después cayo su pesado cuerpo retorciéndose de dolor. La bala le había dado en el estomago.

.-Eso te pasa por entrometerte en mis asuntos

Kagome se escondía en el pecho de Inuyasha, mientras veía con horror como el cuerpo de Tsubaki yacía en el suelo. –Como pudiste ser capaz!-

.-Pero de que hablas Kagome? Ella quería matarte-

Pero… era una persona…

Inuyasha miró al hombre que tanto daño le había causado.

.-Inuyasha que sorpresa! Tanto tiempo…-

.-Como pudiste Naraku, tan solo es una mujer!-

.-Yo no compadezco a nadie, sean mujeres, niños… ancianos…- Su voz tenia la intención de lastimar a Kagome.

Algo en el interior del pecho de Kagome se encogió. Aquellas palabras…. –No, dime que no, no, por favor no…!- Se agacho como si su mundo se derrumbará, Inuyasha no comprendía que le pasaba.

.-Así, que a te diste cuenta, es una pena que no les hayas dicho adiós a tu familia, tan solo queda una Higurashi en el mundo!- gritaba totalmente eufórico.

Continuara…

Se acerca el final no se pierdan los próximos capitulos!

&& Ayde &&