- Se... ¿se cerró? - pregunto Ai, toda en estado casi en shock - Con... ¿Con ellos adentro?
- Tenemos que sacarlos de ahí - mencionó Takato, recuperándose un poco de la impresión - Yamaki tiene que saber como...
- Pero Alice dijo los riesgos de usar ese programa, y ellos lo aceptaron - dijo Ai, aun en su estado casi en shock - aunque todo programa tiene una falla... ¿o no?
- Entonces vamos al Hypnos, debe de haber alguna explicación... - Henry tomó a Terriermon y comenzó a caminar.
Ya en el Hypnos, los Tamers presentes, mas los Tamers recientes (mas conocidos como sus hijos) se encontraban algo aturdidos, y mas los niños Akiyama, que se preguntaban donde estaban sus padres, mientras su abuela Rumiko intentaba tranquilizarlos un poco.
- Vamos Alice... empieza a contar que paso con ese programa... - dijo Henry, algo molesto.
- Logramos identificar al virus, de nuevo es el D-Reaper, pero en versión 8.6...
- Y eso que significa? - preguntó Ai.
- Gracias a este nuevo programa, al que llamamos "Miracle" pudimos contrarrestarlo - Alice se puso muy será, mirando a Henry directamente - pero se necesitaba que los poderes de los D-Arc estuvieran por ambos frentes para cerrar el vortex completamente...
- Así que les pusieron nombre... ¿Vortex?
- Así es Takato - respondió la rubia, comenzando a ver algo que le señalaba Shibumi - No puede ser...
- Que pasa ahora Alice? - interrumpió Yamaki, acercándose a ver.
- Aparecieron dos vacunas nuevas... miren esto...
La rubia tomó un control, y en una enorme pantalla aparecieron unos datos, donde claramente se podían distinguir dos puntos con su respectivo nombre; uno de ellos decía "Moonfighter" y el otro "Digital Surviver", ambos acercándose a un punto que parecía ser un virus.
- Mitsuo, llevare a los niños a casa - mencionó Rumiko, llamando a sus nietos - no tiene caso que estén aquí... ustedes tienen mucho que hacer...
- Esta bien, llévatelos...
- Podría llevarse a los nuestros también? - dijo Juri, mientras llamaba a los suyos - Para que no se aburran...
- Claro! Ya saben que pueden contar con nosotros! Si quieren también me llevo a los niños Wong!
- Lo agradecería mucho - mencionó Henry, ajustándose los lentes - pasaremos por ellos mas tarde...
Rumiko Makino se llevo a todos los niños en la camioneta de Mitsuo, dejando a los demás adultos intentando interpretar todos los datos que pasaban, mirando como las dos nuevas vacunas peleaban contra un poderoso virus.
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Mientras tanto en el digimundo, dos cuerpos se levantaban de entre la arena, algo agotados por los esfuerzos de cerrar la puerta con su propia energía, enfocándola en el D-Arc.
- Donde estamos...?
- En algún lugar del digimundo... creo yo...
- Eso es obvio Akiyama, dime algo que yo no sepa...
- Huelo algo Ryo... - interrumpió Cyberdramon, poniéndose alerta - un olor demasiado familiar...
- "Milleniumon... no es posible... después de tanto tiempo..."
- Pues acabemos con ese de una vez para poder buscar la salida - mencionó la pelirroja, sacudiéndose el polvo de todos lados - Yo ya no estoy para estas cosas...
- Guarda silencio...
Ambos se quedaron callados. Renamon avanzó silenciosamente hacia su Tamer, mientras Cyberdramon intentaba hacer lo mismo. El silencio gobernó durante unos instantes, mientras el viento caliente del digimundo soplaba lentamente. Rika estaba algo extrañada, pero aun así miraba fríamente al horizonte.
- Es el... o me equivoco?
- Siempre le atinas amor - mencionó Ryo, de espaldas a ella junto con Cyberdramon - pero lo bueno es que traemos las cartas de Ryoji con nosotros...
- Da gracias a que siempre cargo con los D-Arc, porque si fuera por ti... - Un temblor sacudió el digimundo, Renamon sostuvo a su Tamer y Cyberdramon atrapo al suyo - Que... que fue eso...?
- No lo se... Pero te prometo que si salimos de esta... nos casamos legalmente, no como la ceremonia relámpago que tuvimos hace...
- Definitivamente el susto te esta afectando las neuronas - respondió la pelirroja, pero se volvió a sentir el temblor - Creo que es hora de pelear... además no es momento para hablar de nuestros problemas matrimoniales...
- Rika, estamos a punto de luchar contra EL - exclamo Ryo - y realmente quisiera que antes de morir arregláramos esos problemas... ¿Cuanto nos ha costado aparentar? Estamos al borde del divorcio!
No pudieron seguir discutiendo, el enemigo salía en esos precisos momentos frente a ellos
- Luego discutimos sobre eso...
- Acaso nuestro matrimonio no es importante para ti?
- Solo dime una cosa Rika, y eso será suficiente para rescatar lo que queda de nuestra unión... ¿Por qué estas aquí conmigo? Porque te recuerdo a los niños...
- Porque no quiero quedarme viuda antes de tiempo...
- ¿Estas diciendo que me amas?
- Piensa lo que quieras...
- Entonces me amas...
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- ¿Que esta pasando?
- Las nuevas vacunas están peleando...
- Oh dios, espero que no les pase nada malo...
Alice y Henry miraban atentos la pantalla, mirando como las dos vacunas peleaban arduamente contra el virus, como retrocedían o avanzaban conforme la pelea. Yamaki seguía jugando con su encendedor, intentando esconder los nervios que tenía por la batalla. Horas después festejaban la derrota de ese virus maligno, ahora estaban precisamente en la gran casona Akiyama, donde Rumiko y Suzie ya habían puesto a dormir a los niños, mientras que los adultos discutían el alto precio que pagaron por ganar esa batalla.
- Y Rika? - preguntó Rumiko Makino, cuando se dio cuenta de que faltaba algo – Donde esta mi hija?
Mitsuo Yamaki negó con la cabeza, haciendo que la rubia alzara las manos a la cara y comenzara a sollozar.
- Ellos... lograron derrotar al virus...
- Mitsuo...
- Tranquila Rumiko... ella esta bien... lo se... lo sabemos todos...
Henry y Alice eran los únicos que no se encontraban con ellos, ya que estaban desarrollando un programa para rescatar a la pareja, pero había algo que no concordaba en los códigos de programación que les impedía realizar tal empresa. Horas después ambos se aparecieron también en la casa Akiyama, con caras bajas.
- Cuanto creen que se tardara el programa ese? - mencionó Rumiko.
- No lo sabemos - respondió Henry - para cuando podamos sacarlos a la mejor es tarde...
- ¿Y mi mamá?
Junto a la entrada de un pasillo, apareció una de las gemelas Akiyama, conteniéndose las lagrimas de los ojos. Detrás de ella iba Aoshi Wong, que había despertado al no encontrar a su amiga y fue a buscarla.
- Shizuka... - Mitsuo se acercó a su nieta, pero ella lo rechazó.
- Quiero.. a... mis... papas...
La pequeña se fue corriendo, seguida de Aoshi Wong, encerrándose ambos en una de las habitaciones. Rumiko intentó seguirla, pero Mitsuo la detuvo.
- Es mejor que lo asimile, tarde o temprano lo iba a saber...
- Pero apenas es una niña...
La sala se quedó en silencio, mientras todos los miembros en ella se miraban unos a otros, en silencio, sin saber que hacer. El problema se había extendido bastante, primero con una pareja perdida en el digimundo, y luego quedaba el problema de los hijos de dicha pareja.
Unos días después seguían sin poder acceder al digimundo. La pequeña Shizuka se cerró en su mente y se volvió mas callada, intentando recordar los momentos que pasó con sus padres; luego estaba su hermana, que parecía que había retrocedido en sus conocimientos unos años, ya que en los días siguientes parecía que se le olvidaba todo. El chico mayor lo asimiló muy bien, aunque a veces se miraba nostálgico. Debido a las actividades de los abuelos, los tres niños pasaban demasiado tiempo en casa de los Matsuki, con excepción de Shizuka, que se la pasaba mayormente con los Wong. Rumiko pensó demasiado, y llegó a una solución temporal.
- Crees que necesitan un cambio de ambiente, Mitsuo?
- Creo que si... y si los llevamos a Fukuoka con su otro abuelo?
- No creo que Shizuka quiera irse... tal vez Ryoji y Shiraze si, pero Shizuka... es igual a Rika... creo...
Después de varios intentos, lograron convencer a los chicos, aunque la gemela Shiraze solo aceptó ir hasta que le dijeron que Aoshi Wong podía ir con ella para que no se aburriera. Camino a Fukuoka, Ryoji y Shiraze se la pasaron peleando por tonterías, mientras Shiraze miraba por la ventana mientras se apoyaba en el joven Wong, su mejor amigo.
Mientras en Shinjuku, Henry estaba como loco intentando descifrar los códigos para abrir un nuevo portal, pero no lograba avanzar nada, ni el ni ninguno de los trabajadores del Hypnos.
- algún avance Henry?
- Nada señor Yamaki, aun no hemos logrado nada... no podrán regresar hasta que los saquemos... además hay que mantener libre el digimundo de los virus...
- Cuanto podría tardarse el programa en desarrollar?
- Todo depende, el digimundo se desarrolla a pasos agigantados, y si tomamos en cuenta eso para el desarrollo del programa, podríamos tardarnos unos meses... o años...
Los programas en la gran computadora se mezclaban entre si, mientras que los puntos "Moonfighter" y "Digital Surviver" vagaban por el digimundo, deteniéndose solo en varias ocasiones.
- Se detuvieron hace 3 horas... - explicó Alice - luego se separaron, hace como una hora se volvieron a juntar...
- Rayos! A este paso tardaremos milenios!
- No seas pesimista Wong!
- No soy pesimista, soy realista, que es otra cosa...
- Dejen sus peleas maritales para después - interrumpió Mitsuo Yamaki, guardando el encendedor con el cual jugaba momentos antes - pase el tiempo que pase, los sacaremos de allí...
