Disclaimer: Inuyasha y Kagome-chan no me pertenecen (ni los demás tampoco); ya que kikyou sino ya estaría muerta muuuuuuuuuuuuxaaaaaaaaaaas veceeeeeeeeeeees

-----------------------------

Desde hacía días que el grupo de Inuyasha no se habían movido de la aldea, puesto que la semana había sido muy movida y todos los hechos eran demasiado para el grupo. Había sido una semana llena de luchas y confrontaciones tanto físicas como anímicas. Miroku y Sango aún les dolía el cuerpo y seguían heridos a causa de una ultima pelea con Naraku, por eso habían decidido hospedarse en la aldea, como siempre. Inuyasha por su parte ya se había curado del todo; aunque su semblante era triste y su cara se la veía llena de duda. Evidentemente nadie dijo nunca nada al respecto de lo que la primera noche de ésa larga semana pasó.

El medio demonio cerró los ojos y empezó a recobrar los sucesos de la semana anterior…

En la primera noche Kagome y él estaban solos en la cabaña y al llegar al anochecer él tuvo una visita del todo inesperada, y evidentemente secreta:

Flash back

Era ya de noche y Kagome se había quedado dormida apoyada a la pared de la cabaña tapándose con una fina manta; Inuyasha por su parte estaba a unos pocos metros de ella medio despierto vigilando que nada pasara, sentado tenía la espada entre sus piernas cruzadas delante de él. Mientras la pelinegra dormía, Inuyasha la observaba fijamente todo el rato, la mirada fija en la chica parecía mostrar odio, rabia, furia e incluso una pizca muy grande de celos, sin que el hanyou lo supiera. Y todo a causa de un pequeño suceso después de la batalla:

"¡Qué rabia¡Maldito Kôga! Siempre igual no lo soporto. Como se ha atrevido casi a besar a Kagome... ese maldito lobo rabioso cuando lo vea se va a enterar..."

El hanyou apretó el puño hasta que los dedos parecieron blancos y pálidos.

"Si no fuera por el maldito collar y su conjuro seguro que habría terminado con él. ¡Keh! Además no se porque tenia que querer besar a esa niñata malcriada"

Miró de reojo y con ansia a Kagome, como si en su blanca piel se entreviera la respuesta "¡Jah¡Como si eso de besar gustara! Y además a mi Kagome…"

Durante unos segundos siguió con la mirada taciturna y enseguida se sonrojó, poniendo una cara de preocupación, turbado de que alguien hubiera oído sus pensamientos.

"¡Baka Inuyasha no baka!" dándose golpes a sí mismo. "¡Mierda¡No puedo dejar de pensar en esto llevo toda la puñetera tarde con lo mismo! Seguro que besarla sería como besar a un... a un... ¡no sé¡Algo de seguro muy asqueroso!"

El hanyou se giró turbado, dándose cuenta en la línea en la que sus pensamientos iban, empezando por hablar de besar… luego besarla a ELLA y terminar hablando de su SABOR, como si el olor no lo atormentara ya lo suficiente. Se quedo mirando a los labios de la niña que dormía plácidamente... poco a poco se fue acercando a ella. La miró a la cara muy de cerca, ya que gracias a una pequeña ventana que había justo delante de ella, su cara quedaba iluminada por la luna.

"Si, seguro que saben fatal…" Sin darse cuenta se iba acercando a su cara... inhalando con delicadeza su aroma, dejando la katana a un lado de él, y caminar a cuatro patas hacía ella, como enloquecido por sus no-ganas de besarla.

"Así que no es necesario que lo compruebe… Porque saborearan fatal... quiero decir que serán muy desagradables... así que tengo que alejarme de ella..." Pero sus pensamientos y sus acciones no tenían nada que ver, Inuyasha no podía no acercarse a ella... la razón le hacia separase pero el corazón... su olor, sus labio rosados…

"No puedo separarme... es por este maldito olor... no puedo dejar de oler este perfume..."

De repente Kagome giró la cara y se quedó a pocos centímetros de rozar los labios del hanyou; él se asustó puesto que temía despertarla, ya era frustrante parecer débil cuando ella estaba dormida, más dolor en su orgullo sería si ella se despertará y supiera lo que había avivado en el hanyou. Sin evitarlo posó su mano en su mejilla, ella no abrió los ojos y el hanyou se quedo embobado mirándola.

"Kagome..." Entrecerrando los ojos "No me lo hagas más difícil... por favor Kagome no lo hagas... en verdad quiero alejarme pero es que yo...no... puedo..."

Y como si Kagome supiera como detonar la bomba que se encendía dentro de Inuyasha aunque fuera de manera inconsciente, dijo en un susurro tan solo una pequeña palabra... muy despacio... de una manera muy tierna.

"Inu... yasha"

Sorprendido abrió muchos los ojos y se acercó a ella sin poder parar sus instintos. A pocos centímetros de ella se paró para admirarla, y enseguida se acercó más y rozó con suavidad sus labios con los de la chica... los sintió cálidos y suaves... sintió como un choque eléctrico envolvía todo su cuerpo y le hacía cerrar las manos y apretarlas al suelo con impaciencia como si deseará mucho más... desgraciadamente tuvo que separarse de repente cuando un olor de una no muerta le llegó a su nariz.

Mierda justamente ahora!", pensó con frustración.Tendría que ir a verla¿pero y Kagome? Se preguntó. Podría despertar y no encontrarlo salir a buscarlo y...

"'¡Dita sea!".

Se apoyó a la pared, justo al lado de la chica, y se quedó con la mirada fija en sus párpados cerrados. Pensó en que tal vez Kikyou estaría herida, y necesitándolo; luego recordó que la última vez que la había visto no parecía ni necesitarlo ni querer que él la protegiera. Kagome si que lo necesitaba, y si que lo quería con ella, así que pensó que para un día que no se fuera a ver a la no muerta no pasaría nada, además de que una vez le habría prometido a Kagome que nunca la dejaría sola para ir a ver a Kikyou. Se lo había prometido, y después de tantas promesas que había roto a Kagome ésta vez no rompería ninguna hecha a la chica del futuro.

Inuyasha no podía dejar de dudar cuando se le ocurrió que tal vez Kikyou fuera a verlo y despertara a Kagome expresamente, no sabía que hacer. De repente Kagome cayó delicadamente sobre su hombro, el hanyou se ruborizó y durante unos segundos siguió dudando... después una mano de la chica se agarró fuertemente al haori del hanyou.

"Kagome... ¡Está bien tú ganas! Me quedaré hoy contigo...no quiero verte llorar..."

Justo en el momento en que Inuyasha ponía el brazo detrás de la espalda de la chica para poder abrazarla más fuerte la ex-miko abrió la puerta de la cabaña con su sigilo perfecto.

"Muy bonito Inuyasha." Se oyó susurrar con un aire sarcástico y frustrado. Él siguió sentado al lado de Kagome, sin ni tan solo mirar a la 'persona' que acababa de llegar.

"¡Te estaba esperando ahí fuera¿Se puede saber porqué no venías?"

"Por qué estoy con Kagome" respondió él sin pensar, aún mirando a Kagome.

"¡Tú ERES MíO Inuyasha! Y cuando te digo que vengas… ¡Vienes Y PUNTO!" El hanyou se giró a mirarla en el mismo momento en el que empezó a chillar como una posesa; luego volvió su vista hacía su niña para comprobar que seguía durmiendo y con delicadeza para no despertarla sacó el brazo de detrás de ella que había puesto segundos antes, se levantó y se acercó a la mujer que acaba de entrar sin ningún permiso

"Sh. No ves que está durmiendo." Dijo justo cuando estuvo delante de Kikyou.

"A mi que más me da" respondió la mujer entre hablando y chillando.

El hanyou se giró para volver a mirar a Kagome durante unos segundos; luego al girarse se dio cuenta de la cercanía de la cara de Kikyou. Se quedó sin respiración, sin saber que hacer, él cerró los ojos más por duda que por querer hacerlo, esperando el momento de frustración donde la no muerta le besaba solamente por el hecho de que Kagome estuviera en la misma habitación, como si quisiera que él traicionara a la chica en su propia cara. Sintió su respirar ahogado y el frío de sus suspiros rozando su piel, recordó el casi beso de Kagome... recordó esos cálidos labios y esa sensación tan agradable le hizo decir algo que terminaría con el "romanticismo" del momento.

"Ka... gome"

Kikyou se separó de él y se quedó mirando a Inuyasha con frivolidad y sin sentimientos. Él camino unos pasos hacia atrás y un silencio incómodo inundo la pequeña cabaña.

"Ella vino a terminar mi tarea... la tarea que yo no pude terminar... puesto que ni pude empezarla." Kikyou levantó su mirada de odio y la descargó en los ojos dudosos de Inuyasha. "Ella vino a amarte y a hacerte feliz."

Kikyou se quedó mirando al hanyou y luego vio como él se giraba, ella entendió ése movimiento como un rechazo, un desprecio… y su odio aumentó. Kikyou se acercó hacia él dejando un espacio considerable entre ellos y siguió hablando.

"Tú decías amarme ¿no es así?" Silencio. "Si me amabas a mi también debes amarla a ella." Habló con un aire de evidencia y de desprecio, notorio en su débil voz. "Inuyasha, tú y yo somos almas gemelas... mi reencarnación y yo somos la misma persona... con las mismas almas..." El hanyou entonces se giró poco a poco, y se quedó mirando a la no muerta con sus ojos ambarinos llenos de dudas. ¿Amar a Kagome¿Almas gemelas? De que estaba hablando, se preguntó. "Si tu y yo debíamos estar juntos... ella también debe formar parte del mismo círculo. Yo estoy muerta así que no debería estar aquí." La mujer siguió hablando con desprecio, demostrando los verdaderos y únicos sentimientos que en ella habitan. Finalmente… "¡Aún así ella tampoco debería permanecer aquí demasiado tiempo¡Y lo sabes!"

"Ella me ayuda con los fragmentos." Expuso como si esa fuese la única respuesta, entre turbado y nervioso.

"Yo también podría ayudarte. Pero nunca me lo has pedido a mí… nunca" Sus palabras sonaban extrañas, entre tristes y furiosas. Inuyasha se quedó unos momentos pensando y se dio cuenta que debía hablar sin pensar así seguro diría algo de ayuda.

Tal vez sincerarse sin uno saberlo arreglaría algo, puesto que las cosas ya no podían complicarse más.

"Yo la necesito a ella. Ella me da fuerzas; me anima cuando sonríe; confía en mi sea cual sea la situación en la que estamos; me enseñó a confiar en los demás, en tener amigos y nunca me reprocha nada de lo que decido aunque le afecte directamente a ella. Yo quiero estar a su lado de la misma manera que ella quiere estar al mío."

Kikyou cerró los ojos: ésa maldita cría había hecho todas esas cosas con Inuyasha sin ella saberlo; mientras ella se pasaba el día pensando en su venganza y su odio, la niña había entrado en el corazón de Inuyasha mucho más de lo que había conseguido ella en sus años de vida.

Por otra parte Inuyasha sorprendido intentó recordar todo lo que había dicho. Cada palabra parecía que la hubiera elegido expresamente; pero curiosamente era lo que pensaba, lo que en su corazón habitaba y que hasta ahora se habían quedado en su garganta sin salir del todo.

"Está bien. Haz lo que quieras, ahora no pienso llevarte conmigo al infierno. Pero cuando Naraku muera…" Kikyou fijó su vista en los ojos de un Inuyasha sorprendido "Vendré a buscarte y ni nada ni nadie te apartará de mi lado."

Kikyou se giró y salió de la cabaña dejando a una miko durmiendo y a un hanyou lleno de dudas y preguntas...

Se sentó al lado de Kagome y recordó las palabras de Kikyou. Si Kikyou y Kagome tenían las mismas almas, según las palabras de Kikyou si la había amado a ella, también debería amar a Kagome. Recordó todos los celos, la ternura y sus sentimientos de posesión y protección además de muchos otros, y llegó a la conclusión de que esa era su manera de amar a Kagome, no era que como había amado a Kikyou amaba a Kagome, sino que simplemente amaba a Kagome por su forma de ser, de pensar, de hablar, por ser ella, no porqué anteriormente había sido el alma de Kikyou. La amaba por ser Kagome.

Aún así las palabras que menos entendían eran las referentes a la tarea que ella decía que le habían encargado y que ahora Kagome debía hacer, la de amarlo y hacerlo feliz, una tarea que ni Kikyou había empezado. Así que en realidad ella nunca lo había amado… pero en cambio Kagome sí. Kagome lo amaba y le hacía feliz, y lo llamaba tarea… más que tarea pensó que era una bendición.

El amor que sentían él y Kagome había traspasado el tiempo y el espacio, cuando uno estaba en peligro el otro siempre lo sabía y era el único que podía ayudarlo; estaba claro que el amor de Kagome era diez veces más fuerte que el que Kikyou había asegurado sentir; de la misma manera que él sentía que debía estar y amar a Kagome mucho más de lo que había amado a Kikyou.

Las últimas palabras de Kikyou resonaron en su mente.

"Si me deja libre luego tendré que volver con ella... per yo..." giró y se quedo mirando a Kagome "Yo quiero a Kagome..."

Esa era la conclusión quería a Kagome y no había nada más que contar. La noche pasó sin más incertidumbres por suerte por Inuyasha, no durmió mucho, por no decir nada, ya que quería poder disfrutar de la cara de esa niña plácida durmiendo. Kagome se despertó radiante y feliz como siempre al día siguiente, eso le agradó mucho ya que, ni tan solo cuando la dejó sola, escuchó sollozos o cualquier cosa en la lejanía que le indicara que ella supiera que una no muerta había ido a hacer una pequeña visita al hanyou; unas horas más, y llegarían a la aldea

Fin FlashBack

Y así empezaba ésa fatídica y larga semana de sucesos extraños, largos, dolorosos pero útiles al fin y al cabo…


Ueno esto va a ser un one-shot hasta nuevo aviso XD, y si pongo los demas que van junto al terminar la semana seran un par más, o tal vez tres.

gracias por leer, y ya que estás aqui dejas un rw a una autora que habia desaparecido del mapa?

Inu: ojala termina la semana rapida, pesada, no puedo hacer de extra aqui y tener a mi perra contenta!

Dy¿Con que me sales ahora? No eres el extra eres el prota!

Inu¿Sabes en cuantos fanfics e historias, videos y mierdas tengo que estar a la vez! SABES COMO SE LO TOMA MI PERRA! NI SIQUIERA PUEDO DORMIR ¡ME PASO LA NOCHE MENEANDO EL MASTIL!

Dy: oye imbecil aqui nada de palabras guarras! y no te quejes pk en la mayoria tmbn sale TU perra, y tmbn te la pasas metiendole tu cacho de carne inchada!

Inu: jah! una cosa es como lo hacemos en publico y la otra en privado...

Dy: pero si debeis llevar un morbo dentro sabiendo que decenas de personas os 'veen'

Inu¡Lo he oido!

Dy: tse!

Inu: kagome es mucho más perra en la intimidad y...

Kag: Inuuuuuuuuuuuu! estoy esperando, y yo sola no me divierto lo suficiente! NO PUEDO MOVERME SI ME ATAS Y ME DEJAS!

INu: ups... ueno me voy -

y mientras yo me lleno de ropa roja, y enceindo l mp3 para no oir ruidos raros, vosotros debeis estar riendo... XD...TT sino que gracia tiene esto¿