Un murciélago entre magos
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Parte 1
Hogwarts, primeros meses
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Bruce miró con ojos perdidos a su hermana y sus padres, que se despedían de él en la Plataforma 9 3/4. No podía creer realmente todo lo que estaba sucediendo. Él solamente quería cumplir con su promesa de vida, ¿cómo podría hacerlo si Hermione estaba tan lejos?
Suspiró tratando de encontrar un lugar donde sentarse. Todos los compartimientos estaban llenos, menos uno donde estaban dos hermanos pelirrojos que hablaban animadamente sobre las travesuras que harían en Hogwarts. Se sentó junto a ellos sin pedir permiso.
-Hola -murmuró al tiempo que colocaba su equipaje a un costado.
Los hermanos le miraron e hicieron una reverencia, como quien saluda a un príncipe. -Buenos días, somos George... -comenzó a decir uno de los gemelos apuntando al otro. -Y Fred... -continuó el otro, apuntando al primero. -Weasley, encantados de conocerte. -Terminaron juntos.
Bruce parpadeó repetidas veces. -Soy Bruce Granger. Ustedes son hijos de magos, ¿verdad?
El muchacho que Bruce pensaba que era Fred sonrió. -Que observador... ¿Cómo te diste cuenta?
Él se encogió los hombros. -Vi toda la gente tres vagones atrás... la mayoría de los de primer año parecen asustados... ustedes son distintos, no creo que un hijo de muggles pudiera actuar como lo hacen ustedes. -Explicó como si fuera la más simple suposición del mundo.
Batman sin embargo no estaba preocupado por los hermanos Weasley. Le preocupaba más todo el asunto de la magia y el hecho de que el mundo mágico estuviera separado del muggle. ¿Por qué era esto así?
Solamente una palabra se dibujó en su mente.
Poder.
La magia trae mucho poder. Especialmente teniendo en cuenta lo variada que era esta magia. Ya había leído un par de libros al respecto luego de la visita de Dumbledore a su casa. Toda su vida él se mantuvo cauteloso al respecto de los 'Metas' en Tierra-1. ¿Qué tenían los magos que los hacían diferentes? Pues... simplemente, no se metían con las vidas de las personas normales.
Le fascinaba la idea de que una persona con poder no pensara siquiera en abusar de ello. O tal vez tenía algo que ver con las leyes del mundo mágico. Seguramente era eso...
Bruce levantó la cabeza de pronto. -¿Puedo hacerles una pregunta?
George asintió vehentemente. -Por favor, mi buen granjero.
-Granger -corrigió Bruce entre dientes.
Fred rió mientras asentía. -Eso mismo.
-¿Por qué el mundo mágico y el muggle están separados? -Cerró sus ojos, ¿dos niños de once años lo sabrían? -es que sinceramente no entiendo por completo.
Fred y George se miraron. -Pues... supongo que los muggles querrían soluciones fáciles a todo.
Los ojos de Bruce brillaron por momentos. Esa simple respuesta... tenía significado más allá del entendimiento de los hermanos. Batman lo entendía. El sólo pensar de que seres superiores se abstuvieran de interferir por el simple motivo de que al hacerlo harían un mundo más fácil... menos laborioso... menos mundo. Tenía sentido. Realmente lo tenía.
De hecho, era totalmente lo opuesto a lo que había visto en Tierra-1.
Ahí los 'súper-héroes' y diversos seres mágicos actuaban sobre el hombre común sin importar lo que sucediera. Muchos pensaban que habían hecho un mundo mejor... pero... ¿Si hay un dios, no debería haber un demonio también? Al traer un gran bien, también traían un gran mal.
Bruce se mordió el labio. Batman recordaba... la sola existencia de Superman tal vez había traído millones de muertes por los cientos de enemigos hiper poderosos que había atraído. O tal vez no... no era la existencia en sí lo que lo provocaba... era el hecho, el hacer. El tomar acción.
No era que Batman estuviera en contra de la acción, no. Simplemente pensaba que... los humanos debían encargarse de asuntos de humanos. No podía un alienígena o hechicero venir y cambiar las reglas de pronto.
El mundo de Bruce Granger era distinto... muy distinto a Tierra-1. Sabía que no existían los Súper-Héroes ni nada remotamente similar. Y los hechiceros no eran exactamente lo que él se había imaginado. Eran otra civilización, oculta debajo de la normal. Nada más, nada menos. Los poderes... la magia que ellos tenían, los hacía especiales y al mismo tiempo los hacía comunes. Todos en esa civilización tienen magia... entonces ¿la magia podía ser considerada un poder... o simplemente una herramienta?
Batman estaba indeciso, debía aprender más sobre la magia de este mundo si quería encontrar la respuesta a esa pregunta.
Otra pregunta que también le carcomía era... ¿Batman... el justiciero, debía resurgir?
Tal vez... en el mundo de los magos, ¿o tal vez en el de los muggle? No habría de ser él quien decidiera eso. No. Bruce tenía derecho a veto total.
De pronto, Fred tosió a drede, como queriendo llamar la atención de Bruce. -¿Estás ahí? Tierra a Bruce... Tierra a Bruce... de no responder a la cuenta de tres nos veremos obligados a utilizarte de conejillo de indias... ¿Tierra a Bruce? ¿Tierra a Bruce? Uno...
-Dos... -continuó George.
Bruce bostezó. -No es necesario... ya estoy aquí.
Fred bajó su varita. Bruce parpadeó, no había notado que el Weasley la tenía en lo alto. Luego Fred se sonrió. -Estabas como ido.
Bruce asintió lentamente. -Me pasa a veces... no es raro.
Los hermanos se miraron y sonrieron. -No creemos que sea raro, simplemente diferente.
-Supongo... a mi hermana también le pasa a veces, pero sospecho que no es por el mismo motivo -aclaró pensativamente.
Fred asintió. -Y dime... Bruce, ¿en qué casa crees que estarás?
Bruce parpadeó repetidas veces. -¿Casa? Oh... no estoy seguro. Depende de que parte de mí examinen.
-¿Cómo dices?
Bruce se encogió de hombros. -Podría estar en Gryffindor supongo, Slytherin y Ravenclaw también. Incluso Hufflepuff no sonaría raro para mí.
Fred parpadeó. -Vaya... no es algo muy común.
George asintió. -Nada común... nosotros, en cambio, ya sabemos en cual estaremos.
-¿En cual? -cuestionó Bruce arqueando una ceja.
-Gryffindor, por supuesto. ¿Qué otra casa tiene el coraje de reírse en la cara de quien sea que se le pone enfrente? ¡Es la casa del bromista! -Aseguró George.
Bruce parpadeó repetidas veces... y de pronto, recordó algo.
Recordó quién mató a Jason Todd.
Joker.
El Bromista, el más grande bromista que jamás haya conocido. Uno con un pésimo sentido del humor, por supuesto... pero era un bromista al fin y al cabo.
Se mordió el labio. -¿Bromista?
George asintió efusivamente. -Eso somos, planeamos hacer tantas travesuras podamos hacer... claro, sin llegar al limite de que nos echen de Hogwarts, por supuesto.
Fred giró sus ojos como aburrido. -'¡Niños por favor no me den un susto! ¡Asegúrense de ser como su hermano Percy!' No... mejor no, prefiero ser yo mismo. Pero bueno... le debemos al menos que no nos echen de Hogwarts.
George lo pensó por un momento. -De cualquier manera para hacer una tienda de bromas necesitaremos de la educación... aunque lo estrictamente académico no sea importante...
Bruce parpadeó repetidas veces, olvidando a Todd y Joker. -¿Tienda de bromas?
-Sí... como esa que dicen que está en Hogsmeade. Cuando dejemos Hogwarts planeamos ganarnos la vida así.
Batman se relajó. Estos dos no eran ni nunca serían otros Jokers. Estaban hechos con otra madera.
Se relajó... y esperó a que el tren llegara a su destino.
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No le sorprendió el tamaño de Hogwarts. Tampoco que fuera un castillo.
Ni siquiera se inmutó ante cómo se decidía quién iba a que casa...
Pero...
Cuando se sentó en aquél banquito y le pusieron el sombrero encima... todo cambió.
-Bien, bien, bien... ¿Qué tenemos aquí? ¿Dos mentes?
Batman quiso gruñir. -¿Puedes detectarme?
El sombrero hubiera reído. -Claro que puedo... ¿Pero a quién debo seleccionar?
-A él -murmuró Batman.
-Claro... claro... si fueras tú me dolería la cabeza. Tienes el valor de un Gryffindor... pero tu habilidad para engañar y manipular te colocan en Slytherin... sin embargo tu objetivo no es la victoria personal, es otra cosa... más... social. Tienes la mente de un Ravenclaw... pero tu mente es solo una herramienta, nada más... hubieras sido un buen Hufflepuff. -El sombrero dijo como hablando solo.
Bruce parpadeó. -¿Entonces estoy en Hufflepuff?
-No... no... tú eres... ¡GRYFFINDOR!
Bruce parpadeó mirando alrededor. Escuchó a varios de la casa Gryffindor vitorearlo. Entre ellos estaban los gemelos Weasley. Se quitó el sombrero y caminó hacia la mesa. Se sentó junto a George.
-Brillante, ¿eh? Un sombrero... ¿Quién lo hubiera dicho? -comentó el Weasley.
Bruce asintió. -Brillante la verdad... distinto cuando menos.
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Su vida en Hogwarts cambió de arriba abajo con respecto a la que llevaba antes de conectarse con el mundo mágico. Ya no tenía peleas violentas ni nada por el estilo. Sus principales objetivos eran estudiar y aprender magia para poder entenderla y más adelante combatirla. Ya sabía lo que quería ser cuando pasara el séptimo año: Auror. Había leído sobre estos policías mágicos en el periódico, el Daily Prophet.
Pero no todo eran libros y clases para Bruce. También había algo de diversión.
Más que anda por sus intentos de controlar a los gemelos Weasley. Curiosamente la mitad del tiempo terminaba ayudándolos a hacer bromas.
Estaba seguro de que Batman estaba detrás de la otra mitad en la que no les ayudaba. Después de todo... ¿Batman... bromista? Demasiado extraño, no era correcto.
Sin embargo había encontrado un nicho, él, George, Fred y otro Gryffindor, Lee Jordan. Eran un grupo curioso. Bruce más que nada se encargaba de que los Weasley no se propasaran con sus bromas y Lee... Lee por lo general simplemente reía con estas, aunque les ayudaba más seguido de lo que Bruce lo hacía.
De tanto en tanto George y Fred se burlaban de Bruce, diciéndole que a veces se parecía a su hermano Percy. El mayor de los Weasley que iba a Hogwarts no terminaba de caerle bien a Bruce... algo estaba fuera de lugar. Tal vez Batman simplemente sabía diferenciar las personas mejor que él.
Otro de sus pasatiempos preferidos era escribir a casa. Principalmente a Hermione. Le explicaba como era el colegio, como eran sus experiencias con la magia y con las personas que la practicaban. Realmente estaba sorprendido. Esperaba algo más oscuro y encontró una escuela 'normal'.
Su mejor materia era Defensa Contra las Artes Oscuras. Materia que las dictaba un profesor joven de nombre Andrew Prewett. El profesor curiosamente parecía conocer a los gemelos Weasley, pero no les hablaba mucho. Curiosamente durantes sus clases ellos se quedaban callados y... por una vez en su vida, no hacían bromas de ningún tipo.
Su segunda materia preferida era, obviamente, Pociones. No por el profesor, no. Bruce detestaba a Snape, eso era claro. Batman simplemente encontraba al hombre interesante, enigmático de cierta manera. Pero en cuanto a la materia en sí... los conocimientos de química de Batman le vinieron bien a Bruce. Resulta que a pesar de los repetidos intentos de Snape de encontrar errores en sus pociones, nunca encontraba nada... y estaba obligado a darle buenas notas. Por supuesto, de tanto en tanto tenía alguna excusa que no tenía nada que ver con la asignatura para reducirle un poco el valor a su trabajo.
El resto de las materias las encontró entretenidas, pero más que nada las estudiaba para comprender cómo podían ser usadas en crímenes. Particularmente le interesó Historia, principalmente por las cartas que recibía de Hermione. Ella había conseguido una copia de 'Hogwarts, una historia' y en ocasiones le mandaba preguntas sobre tal o cual cosa... lo cual le provocaba preguntarse sobre el pasado de la comunidad de los magos.
Ahí fue donde encontró algo curioso... o más bien dicho, tenebroso. Una prueba de que el mundo en el que habitaba no era totalmente distinto a Tierra-1. Tú-Sabes-Quién, o el Innombrable. Le fascinó el asunto, más que nada por la discreción con la que se enfrentaban los magos. Sin embargo el libro de historia que había encontrado no era lo suficientemente completo como para saber exactamente qué había sucedido exactamente con el Innombrable, salvo que había sido derrotado por el Niño que Vivió, Harry Potter.
En una ocasión se había encontrado con Dumbledore en el pasillo. -¡Oh! Profesor, ¿puedo hablarle un momento -preguntó, como fingiendo que su duda era académica.
El director de la escuela no parecía apurado, así que no se molesto en decirle que no. -Claro, claro mi muchacho, ¿algún problema? Veo que has mejorado mucho desde que llegaste.
Bruce asintió. -Estuve leyendo algunos libros de historia... y encontré en algunos de los más recientes información sobre un tal 'Tú-sabes-quién' o 'El Innombrable' me preguntaba si había alguna manera en la que pudiera conseguir algún libro que hablé más sobre él, o tal vez alguien que me quiera decir su nombre.
Dumbledore asintió, sorprendido de que un chico de primer año se dirigiera a él con semejante cuestión. -Arreglaré una hora de la próxima semana para darte recomendaciones de libros que tal vez encontrarás interesantes... pero por ahora solamente te digo su nombre. Voldemort es el que él eligió.
Bruce arqueó una ceja. -¿Voldemort? Supongo que no es su nombre real.
Dumbledore rió. -Vaya... bien, puedes decirlo sin temor... no, no es su nombre real. Es Tom Riddle, tal vez puedas encontrar algo por tu cuenta con esta información, más tarde te daré una lista de libros para tu... ¿estudio personal?
Bruce se sonrió. -No soy hijo de magos, así que creo que tengo que buscar toda la información que pueda sobre la magia, la historia me interesa, y las guerras contra personas injustas siempre me llaman la atención. Mi plan es, con un poco de suerte, ser un auror más adelante.
Los ojos de Dumbledore parecieron brillar ante el último comentario. -Sí... Voldemort es un mago oscuro... del tipo que siempre va a ser enemigo de todo ser justo en este mundo... y no puedo negar que estoy sorprendido ante tus intenciones de ser un Auror, pocos niños de doce años saben lo que quieren, es un regalo... bueno, ya me tengo que ir, creo que Hagrid tiene problemas con Fluffy.
Bruce vio a Dumbledore alejarse a un paso normal. No parecía del todo apurado. -¿Fluffy? -se preguntó el Granger arqueando una ceja.
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El asunto de Fluffy no le interesó del todo como para investigarlo... pero tuvo que comentárselo a los gemelos Weasley...
Fred formó una mueca en su rostro. "¿Fluffy? ¿Estás seguro?"
George se paró y comenzó a hablar lento. "Hagrid... tal... vez... tenga... una... mascota... nueva"
Bruce arqueó una ceja ante la reacción de los gemelos. "Supongo que es una mascota... no sé para qué se los comenté"
Lee se rascó el mentón. -¿Y de cualquier manera por qué hablaba con Dumbledore?
Bruce levantó so mano y la movió como quitándole importancia a la pregunta de Lee. -Nada que les interese, simplemente le pregunté sobre Voldemort. -Al oír el nombre del innombrable, los tres dieron un salto como de miedo. Bruce frunció el ceño mortificado ante la reacción.
-¡No puedes decir ese nombre así como así! ¡Da mala suerte! -gritó Lee agarrando a Bruce del cuello de su camisa.
Fred fue el primero en calmarse. -Bueno... supongo que no sabes la historia sobre Tú-Sabés-Quién.
Bruce soltó una sola carcajada, fingida por supuesto. -He estado estudiando el asunto, por eso le pregunté a Dumbledore sobre él... me sorprende que la gente pueda ser tan supersticiosa de pensar que un nombre tenga tanto poder. Si temes el nombre, temes a la persona.
George asintió. -Y tal vez tengas razón... pero a nadie le gusta saber sobre eso, mamá dice que fue una época horrible.
Lee asintió. -Será mejor que tú también lo llames así... si en algún momento quieres hablar de él, y yo por mi cuenta no tengo la más mínima intención de hablar del asunto.
Bruce miro a sus amigos sorprendido. Esperaba verlos reír y decirle que estaban bromeando. Que no le tenían miedo a un nombre... no dijeron nada de eso. -Ustedes... son unos cobardes.
Fred y George se miraron y luego suspiraron. -No es eso -murmuraron al unísono.
Lee asintió, y miró hacia otra parte. Parecía que quería ir a otro lado. - Tú-Sabés-Quién no es motivo de risas, es cuestión de respeto a las victimas... no lo entenderías.
Bruce bajó la vista asintiendo lentamente. -Entiendo perfectamente. Simplemente pensé que ustedes estarían por encima de semejante creencia de que decir su nombre trae mala suerte... o no sé que sea lo que piensan. De cualquier manera, volvamos al tema de Fluffy... ¿les interesa averiguar el asunto?
Lee asintió. -Cualquier cosa por cambiar de tema.
George entonces saltó y caminó hacia el retrato de la dama gorda. -Pues vamos, es domingo, podemos averiguar sin que nadie nos moleste.
Fred y Lee le siguieron sin pensarlo dos veces. Bruce sin embargo se quedó pensando en la guerra entre magos... le parecía más interesante leer alguno de los libros que había encontrado que hablaban de Tom Riddle en lugar de averiguar a qué podía llamar Hagrid 'Fluffy'. Pero claro, él se había metido en ese lío solo.
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No tuvieron problemas en averiguar QUE era Fluffy. Sin embargo, el perro de tres cabezas casi le saca una mano a Lee.
Bruce se mordió el labio mirando a los hermanos, que seguían riendo ante la expresión que había hecho Lee al ver al perro saltarle encima. Afortunadamente no era muy grande...
Bruce hizo una mueca. -Tres meses... no puedo creer que ese bicho tenga tres meses. -Hagrid los había encontrado y fue él quien salvó a Lee. Luego les dijo que hacía tres meses que había nacido el perro.
Fred asintió. -Bill nos habló de esos animales. Gringotts los usan para algunas bóvedas... los más grandes tienen como tres metros de largo creo.
Bruce parpadeó repetidas veces. -¿Gringotts? ¿El banco verdad? Cuando fuimos a comprar mis cosas para el colegio mi padre tuvo que cambiar dinero ahí por Galleones.
Fred asintió. -Bill trabaja ahí.
George sacó su lengua. -Bill es como Percy, en el sentido de que era Prefecto y fue Premio Anual...
Fred miró a su hermano como si le hubiera salido una segunda cabeza. -¡Ojala Percy no sea Premio Anual!
Bruce masajeó los ojos. -Ustedes tienen un don para perderse entre sus comentarios... ¿Por qué no quieren que Percy sea Premio Anual? De cualquier manera... falta mucho para eso.
Lee se sonrió, ya olvidando el ataque del perro de tres cabezas. -Es porque no lo soportan, obviamente.
Bruce se incorporó. -Bueno, como sea, voy a leer esto que me esta matando la impaciencia. -Comentó mostrándoles el libro que hablaba de Tom Riddle 'Grandes y Tenebrosos Magos Famosos'.
Fred miró con curiosidad el libro. -¿Y por qué querrías leer eso? No tenemos ninguna tarea al respecto.
Bruce estuvo por responderle simplemente con un 'Voldemort', pero luego decidió cambiar su respuesta. -Para mi futuro trabajo, nada más.
Fred y George se miraron y sonrieron pícaramente. -Trabajo... Suenas a...
Bruce los interrumpió levantando su mano. -Sí, sí... Percy, lo que sea. Voy a la biblioteca. -Y con eso se alejó de sus amigos, quienes estallaron en risas.
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Bruce averiguó un par de cosas, primero que nada: algunos hechiceros eran muy poderosos. Demasiado poderosos, de hecho.
Batman sin embargo, agradecía el hecho de que no existía ningún Superman en este mundo que se colocara como un Dios sobre el resto de los mortales. No se necesitó un Súper Hombre para derrotar a Tom Riddle, no, se necesitó un Bebé.
¿Pero por qué habría Voldemort de atacar un bebé? Bruce no lo entendía.
Recordó entonces una historia de la Biblia. Herodes se le atribuyó la matanza de los niños de Belén para eliminar al 'rey de los judíos'... a Jesús. Pero falló, no lo mató.
¿Podría ser el caso de Harry Potter similar?
Batman dejó el pensamiento por un segundo. No tenía tiempo de pensar en Dioses hechos Hombre. No. Tenía que ver el asunto como el detective y científico que era. Voldemort quiso matar a Harry Potter... ¿Pero por qué querría matar a un bebé? Estaba seguro de que en el libro no decía nada sobre los Mortifagos o Voldemort matando niños pequeños. Entonces... ¿Por qué empezar con Harry Potter?
Bruce cerró el libro y se masajeó la frente. -Esto no es algo que un chico de doce años debería investigar.
Batman decidió entonces que sería un buen momento para que Bruce descansara. Tom Riddle podía esperar...
Solamente entonces el Caballero Oscuro recordó algo que había dicho Dumbledore... 'Sí... Voldemort es un mago oscuro... del tipo que siempre va a ser enemigo de todo ser justo en este mundo...' Siendo la palabra clave 'ES' y no 'ERA. Lo cual significaba, según la experiencia de Batman... que Voldemort seguía vivo... o por lo menos, no estaba muerto.
Bruce cerró sus ojos y colocó su cabeza sobre el libro, no podía más. Se quedó dormido en la biblioteca.
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Final de la Parte 1
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Notas del Autor: Repito lo que dije en el prologo, Bruce no va a ser ningún Martin Stu. Va a ser un personaje letrado, como Hermione. Pero no va a ser perfecto. De hecho, ya tiene sus problemas. Batman sin embargo... es otra cosa, él es Batman, el Caballero Oscuro, la Justicia Ciega...
Y sí, sé que Batman no es precisamente un 'fan' de los poderes o la magia en particular. Pero él ahora está metido en una sociedad llena de personas así. Un hechicero no se mosca por una piedra de Kriptonita ni nada por el estilo, así que tiene que aprender de la magia si quiere, en algún momento del futuro, enfrentarla.
Batman ha asumido como proyecto personal averiguar sobre Voldemort y Harry Potter, encuentra ridículo que las personas tengan miedo de llamar a Voldemort por su nombre.
Probablemente actualice esto una vez a la semana. Si me aburro, una vez al mes, pero prometo que pase lo que pase lo voy a terminar. En el próximo episodio voy a avanzar un poco más. Un par de detalles más del primer año de Bruce y luego al segundo.
Por cierto, la comparación entre Fred y George con Joker era demasiado obvia como para no mencionarla. Sin embargo Batman sabe que los dos bromistas no tienen nada de similares aparte de las ganas de reír con el bromista asesino.