Capítulo 31. Miedo.
Gabriel y yo nos tomábamos un helado, de esos enormes de mil pisos y cuarenta mil sabores. Nos lo merecíamos después de haber sido indultados de algo que no hicimos. Por cierto, me fue restablecido mi honorable 6 en francés y Gabriel recuperó su 6.5 en matemáticas. Ese día, el borlote fue grande porque a Karl Heinz Schneider no le pareció que su hijo hubiese hecho algo semejante, y más porque se lo hizo al hijo de uno de los rivales que más respetaba... Franz estaba más que dolido por el hecho de que Jazmín lo hubiese traicionado, pero se dio cuenta de que se lo merecía pro haberle hecho eso a su hermano menor.
Te ayudaré para el final de francés.- murmuró Liz, cuando todos estaban ocupados con el regaño a Franz.- Vas a pasar con una buena calificación, Dai.
Gracias.- le dije a Liz al oído.- Te deberé la vida.
Sepárense ustedes dos.- gruñó Gabriel, interponiéndose entre ambos.- No por el hecho de que no los haya mandado a freír espárragos significa que haya aceptado lo de ustedes.
Pero si entre Daisuke y yo no hay nada.- protestó Liz.
¿Intercambiar saliva entre ustedes es "no tener nada"?.- gruñó Gabriel.
Ni hablar... Yo mejor no dije nada y fui tras de mi hermana.
Mil gracias, Jaz.- le agradecí.- Sin ti no lo hubiera logrado.
Es mi deber proteger a mi hermano menor.- sonrió Jazmín.
Pues te lo agradezco, en verdad.- sonreí yo también.
En fin, sea como fuere, al finalizar las clases mi padre y el de Gabriel se encontraban ya en la escuela recibiendo junto con nosotros las disculpas del director por habernos acusado de algo que no hicimos. Nuestras calificaciones fueron restauradas, como ya había dicho, ypues nuestro honor había sido limpiado... Gabriel y yo nos lanzamos a una nevería a festejar, aprovechando que nuestros padres se sentían lo suficientemente culpables por haber dudado de nosotros.
Espero que me ayudes con matemáticas.- me comentó Gabriel, lamiendo su cuchara de helado.
Claro.- respondí.- Ya sabes que lo haré.
Y yo te ayudaré con el francés.- insistió Gabriel.
Claro.- respondí, distraído.
¿No quieres que te ayude con el francés?.- insistió Gabriel.- ¿O vas a pdirle a mi hermana que te ayude?
Ella se ofreció.- me delaté.
Uhm.- gruñó Gabriel.
No lo culpaba. Yo me sentiría igual que él de estar en su lugar. Muy seguramente sentiría que su hermana iba a quitarle a su mejor amigo, y que su mejor amigo iba a quitarle a su hermana, excepto porque Liz y yo no somos nada...
Solo besé a Liz una vez.- dije.- Y no lo volveré a hacer.
¿Por qué estás tan seguro?.- cuestionó Gabriel.- Siempre te ha gustado mi hermana.
Y precisamente por eso no creo ser más que solo un amigo para ella.- repliqué.
Gabriel no dijo nada. Sabía que ese tema sería prohibido al menos por un buen tiempo...
Bueno, al menos ya habíamos sido excusados de todo lo que habíamos sido acusados y ya no habría más problemas por ese sentido... Excepto, claro, Katie... La chica entró a la heladería en compañía de un chico de unos catorce años, quien la trataba con mucha familiaridad.
¿Quién es ése?.- preguntó Gabriel, pegando un brinco en la silla.
Eh... .- yo de plano estaba sorprendido.- Creo que es el capitán del equipo de ajedrez.
¿Qué?.- gritó Gabriel.- ¿Bromeas? ¿Qué no los capitanes de ajedrez suelen ser más nerds que otra cosa?
Pues ése no es Vincent.- repliqué.- A muchas chicas les gusta.
Katie desvió su mirada y se topó con los ojos de Gabriel, quien la miró enojado. Ella le sostuvo la mirada, hasta que ella y Vincent salieron de la heladería. Yo suspiré. Me cae que Katie también se pasa...
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Mi madre no pudo ir a las semifinales del torneo que jugaría nuestro equipo. Lily había sido enclaustrada en un cuarto especial, "libre de bacterias", para evitar que cualquier tipo de infección oportunista pudiera matarla ahora que su médula estaba prácticamente destruida. A nosotros se nos prohibió visitarla, los únicos que pudieron hacerlo fueron mis abuelos maternos y mi padre. Jazmín y yo nos tuvimos que conformar con únicamente recibir los cariños que mamá nos enviaba con mi padre...
Suerte mañana, Dai.- me dijo Jaz, la noche previa a las semifinales.- Lo harás bien.
Gracias, Jaz.- sonreí.- Me gustaría que mamá estuviera ahí...
Sabes que ella va a estar ahí.- replicó mi hermana.- No de cuerpo, pero sí de mente.
Eso es cierto.- intervino Kirei.- Kielo va a estar ahí, apoyándote. Tienes que esforzarte al máximo, todos confiamos en ti.
Incluso papá.- sonrió Jazmín.
Y eso era cierto... El día del partido pensé que solo mis padrinos y mi hermana estarían ahí, por lo que me sorprendió sobremanera el ver la gorra roja de mi padre en las tribunas.
Suspiré, al tiempo que me ajustaba los guantes. Debía hacerlo, por papá, por mamá, pero sobre todo, por mí...
Nuestro equipo ganó con un marcador de cinco goles a cero. Pasamos a las finales, las cuales se jugarían un día antes de la fecha señalada para el transplante de médula ósea de Lily, como ya había dicho antes. Yo no creí que hubiera problema con eso, jugaría el partido el sábado y el domingo estaría fresco como una lechuga en el hospital... Ahora que mi honor había sido limpiado, sentí que todo saldría de maravilla...
A menos que...
¿Y si algo salía mal? ¿Y si el doctor Lacoste pinchaba en algún sitio que no debía o sacaba médula de más? ¿Y si la aguja con la que extraían la médula estaba contaminada y yo contraía una infección grave?
Creo que no era un buen momento para ponerse a pensar eso...
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El partido de los chicos mayores de 16 años se jugó después del nuestro. Franz no jugó, debido a que su padre le prohibió seguir en el equipo de fútbol, al menos hasta que pagara por su castigo... Pero el equipo contaba con una nueva estrella: Louis Le Blanc. La supermodelo y madre de Louis, Claire Ford, hizo acto de presencia y causó revuelo entre los presentes. La mujer, por cierto, tuvo un acto de consideración que se ganó mi corazón cuando me entregó un ramo de flores exóticas.
Son para ti.- me dijo Claire.- Espero de todo corazón que tu madre se recupere y que puedas ayudarla como deseas. Lily es una mujer excepcional y se merece otra oportunidad de seguir viviendo.
Gracias.- musité.
Claire se agachó y me dio un beso en la frente, cosa con la cual me sentí muy apenado. Gabrie, Eiki y Jun me miraron con la boca abierta y Liz frunció el entrecejo. En fin, el partido se jugó y Louis fue la estrella. El equipo ganó con una contundente victoria de diez goles a dos, con ocho tantos anotados por el francés. El club de fans de Le Blanc estaba vuelto loco.
El hijo salió igualito al padre.- suspiró Genzo.
Lo has de decir por las fans.- comentó Taro.- Porque Louis no me parece tan engreído.
Pierre no es engreído, una cosa es que te lleves mal con él.- rió Genzo.
No nos llevábamos mal, simplemente éramos rivales.- protestó Taro.
Como era de esperarse, Carol y Valentina eran las que gritaban más fuerte, Jaz y Liz las apoyaban, pero su entusiasmo no se comparaba con el de las dos primeras. Junto a ellas se encontraba una linda muchacha a la que no conocía y que supuse que se trataba de Umi, a juzgar por lo que Louis me había dicho y por el beso que le lanzó éste cuando anotó un gol. lo malo fue que Carol estaba sentada junto a Umi y Eiki pensó que el beso de Louis fue para ella...
Al final del partido, Carol, Umi y Valentina se le dejaron ir a Louis, pero dado que los Le Blanc se encontraban presentes, Louis y Umi solo se comportaron como amigos. Nosotros decidimos retirarnos, pues Genzo quería regresar con Lily para hablarle de mi actuación el partido, así que lo que pasó después me lo contó el propio Eiki. Después de que Carol felicitó a Louis, ella fue a comprar algo de beber. Eiki se fue tras ella, como quien no quiere la cosa.
Hola, Carol.- saludó él.
Qué tal.- sonrió ella.- ¿Viste el partido?
Yo jugué en él, ¿se te olvida?.- protestó Eiki.
Ah, es cierto.- rió Carol.- Perdona, pero es que soy una distraída.
Todo su comportamiento era parte de una estrategia planeada por Louis. Cunaod él se enteró de que a Carol le gustaba Eiki y que éste no parecía muy interesado en ella, el francés le sugirió que lo ignorara por un tiempo.
A los hombres no nos gusta sentirnos ignorados.- había dicho Louis.- Si no le prestas atención, Eiki va resentir el cambio y si le interesas, va a ir detrás de ti.
Carol dudó por mucho tiempo el que Louis tuviera razón pero al parecer, sí la había tenido...
Supongo que nada más te fijaste en Le Blanc.- gruñó Eiki.
Louis llama mucho la atención.- Carol se encogió de hombros.
¿Te gusta?.- preguntó Eiki, directamente.
¿Quién?.- Carol fingió demencia.
Ya no juegues conmigo así.- gruñó Eiki.- No es agradable.
¿Quién está jugando contigo?.- cuestionó Carol.- Como no me hacías caso cuando te hablaba, pensé que no te agradaba y decidí dejar de molestarte.
Carol pagó su té helado y echó a andar. Eiki fue tras ella.
Si no me agradaras, te lo hubiera dicho.- dijo Eiki.- Cuando alguien me molesta, se lo digo de frente.
Ah, lo siento.- dijo Carol.- Yo pensé que no te agradaba...
Pues pensaste mal.- Eiki decidió lanzarse con todo.- ¿Quieres ir al cine mañana en la tarde?
Carol sonrió. Supongo que ya conocen la respuesta...
(¿Notaron que los tres últimos párrafos los empecé con el nombre "Carol"? XD).
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Una vez más, volví a tener el Sueño esa noche. Curiosamente, desdeque acepté ser el donador de Lily, había comenzado a soñar un terrible desenlace. Nuestros amigos y conocidos lloraban desconsoladamente, y mi hermana estaba acurrucada en un rincón, llorando abrazada a sus piernas y no respondió cuando la llamé por su nombre...
¿Qué está pasando?.- murmuré, al ver que mi hermana no reaccionaba.
Hiciste lo que pudiste, Daisuke.- me dijo Kirei, con el rostro crispado.- No es tu culpa...
¿De qué hablas, Kirei?.- yo seguía sin entender.
El cuarto de mis padres estaba abierto. Yo entré y encontré a Genzo, sentado en la cama como siempre, sosteniendo la mano de Lily. Genzo me miró y sus ojos demostraban una decepción tan profunda que mi corazón no pudo evitar encogerse... Fue entonces cuando supe que Lily estaba muerta, y que no había fallecido porque el transplante no había funcionado, sino porque yo me había arrepentido...
Me desperté muy agitado y bañado en sudor. Para qué negarlo...
Estaba muriéndome de miedo...
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El doctor Lacoste revisaba los últimos aspirados de médula ósea de Lily. El conteo estaba casi en ceros, un último ciclo de quimioterapia y su médula quedaría completamente destruida, eso si su cuerpo lo toleraba.
Termine con esto de una vez, doctor.- pidió Lily, al borde del agotamiento.- No puedo más...
Estás a un paso de conseguirlo.- animó Jean.- No te rindas ahora.
Piensa en todos los que confían en ti.- animó Dafne.- Están esperando que luches con todo hasta el final.
Supongo que sí.- mi madre estaba tan débil que apenas y podía hablar.
Y cuando Genzo no podía estar con Lily, Emily lo cubría. Todos los demás nos teníamos que conformar con quedarnos afuera de la burbuja de cristal que se había construido alrededor de mi madre, esperando que todo terminara pronto...
Debiste haber visto a Daisuke.- sonrió Genzo.- Jugó increíble. Heredó tu determinación, mi amor.
No digas tonterías, corazón.- contradijo Lily, sonriendo.- Daisuke es tu viva imagen. Todo lo heredó de ti, tu carisma, tu fuerza de voluntad, tu gran corazón...
Genzo sabía que no debía hacerlo, pero se quitó el cubrebocas y besó a Lily en los labios.
Resiste un poco, por favor.- murmuró él, al separarse.
Lily sabía que tendría que sacar fuerzas de algún lugar...
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Por cierto, como era de esperarse, debido a su edad avanzada, mi tía Lara tuvo que ser operada de urgencia para que el bebé pudiera nacer. La presión arterial se le subió muchísimo a Lara, lo que convirtió el embarazo en un potencial desastre... Chiara Ashley Takahashi Del Valle (me cae, para nombres jalados de la neurona, Lara e Ian se llevan el premio), la última de mis primas, nació en la madrugada por vía cesárea, un mes antes de la fecha de nacimiento prevista. Sin embargo, la niña nació con buen peso para su edad y en general no estaba tan prematura como para tener tantos problemas para sobrevivir. El susto que le pusieron a mi tío Ian fue tan grande que se hizo la vasectomía al día siguiente...
Bien dicen que el miedo no anda en burro... Si lo sabré yo...
Notas:
La vasectomía es un procedimiento hecho en los hombres para que ya no tengan descendencia, jeje.
No creo tardarme más de dos capítulos para el final, quizás en el próximo ya loo finalice, quizás no.
