Eran las 6:30 de la tarde y Naruto estaba muy nervioso, no sabía porque, todo esto era rutina para él estaba acostumbrado a la presión, pero en solo pensar que en una hora tenía que salir a la cancha para hacer lo que mejor sabía hacer lo ponía nervioso, y no lograba estar concentrado. Durante el entrenamiento que hicieron por la mañana no había logrado al estar al 100%.

- Vamos amigo, todo estará bien tranquilo hoy ganamos y mañana volvemos a la normalidad - Kiba se para junto a Naruto viendo hacia la cancha que dentro de poco estarán pisando y se apoya en el barandal.

- Si de eso estoy seguro, pero no sé, me siento nervioso, así como si jugara por primera vez -

- Si es por lo de tu promesa puedes estar tranquilo, el equipo está muy bien y si solo te dedicas a meter goles como siempre mañana volverás como el héroe que cumplió su promesa -

- Gracias amigo realmente necesitaba algo de aliento, creo que ya me siento motivado. Vamos necesitamos prepararnos ¡tenemos que ganar! -

Naruto y Kiba vuelven con el resto del equipo para escuchar la estrategia de Gai sensei y ver qué planes tiene para ganar el día de hoy. Naruto se sienta en su espacio asignado, empieza a sacar todo el equipo de su maleta y ve una cajita que contiene la cadena con el dije del zorrito, solo sonríe y lo aparta donde nadie lo pueda tirar y empieza a cambiarse.

Mientras tanto:

- ¡Mira Hinata, esta es una playera de Naruto póntela! Si vas a ir apoyar a mi hijo lo tienes que hacer bien. Puedes pasar a cualquier habitación, estas en tu casa querida - Kushina abraza a Hinata en cuanto sale del tocador con la playera puesta, no lo puede negar ella le agrada para Naruto, le cree a Ino cuando le dijo que ella es perfecta para él.

- ¡Prima te queda muy bien! Mi primo le va a encantar verte y más con esa playera puesta. Vamos que se nos hace más tarde - Salen las tres muy contentas reuniéndose con el resto del grupo organizándose para ir.

Después de 15 minutos en donde se había repartido para ir a ver al rubio, después de que la madre de Naruto estuviera muy animada hablando con Hinata, Ino, Sakura y Tenten y escoltando al chofer la familia Hyuga llegaron al solo 15 minutos de que empezará el juego.

Kiba que está a un costado de Naruto calentando para el encuentro le avisa, para que voltee a las gradas viendo como todo el grupo completo de amigos van apoyarlos, sonríe de solo pensar que todo el grupo fue hasta las afueras de la ciudad solo para verlos y ve a una peculiar persona con una de sus playeras favoritas puesta. En ese momento los nervios que tenía previo al encuentro desaparecen y una enorme sonrisa se forma en su rostro.

Durante el juego estuvo muy peleado, los dos equipos estaban dando lo mejor de sí, jugadas de fantasía, entradas duras, e inclusive goles espectaculares. Naruto estaba dando el mejor partido de la temporada y Kiba no se quedaba atrás los dos hacían un tremendo equipo. No necesitaban hablarse para saber dónde estaban ubicados, simplemente se pasaban el balón de una manera muy fácil de ver y muy difícil de detenerlos. Estaban a 5 minutos del final del juego y estaban empatados en un resultado muy llamativo de 3-3, Naruto no quería que se quedaran las cosas así. A pesar del cansancio que ya tenía simplemente no quería rendirse, el quería cumplirle la promesa a la chica que había ido a verlo, esa persona que se había entregado todo el juego gritando y apoyándolo sin tener pena a que fuera el centro de atención o que los demás espectadores la miraran feo por apoyar al equipo contario. No podía fallar y menos por que todos estaban esperando en las gradas lo único que faltaba en el partido. Un gol del rubio, ese que da el triunfo definitivo, había puesto dos pases a gol y provoco la falta que les diera el tercero. Solo faltaba el broche de oro.

En eso se había acabado el tiempo de juego, pero el árbitro había agregado 2 minutos más por los tiempos muertos durante el juego. En eso Naruto ya con su último esfuerzo empezó a manejar el balón por la banda de la izquierda quitándose jugadores rivales con mucha facilidad, el ultimo defensa que le quedaba por quitarse de encima lo intenta derribar para que el rubio no tenga posibilidad de anotar, pero Naruto o se deja caer y como puede sigue corriendo y manteniendo el poco equilibrio que le queda, alza la vista y ve una sola posibilidad de tener un disparo a gol desde el punto en donde esta, el árbitro en cualquier momento pita el final del partido, eso Naruto solo patea el balón, la última oportunidad de cumplir la promesa. En eso el balón va con una velocidad impresionante, el portero se lanza para impedir que el balón entre a la portería logra tocarlo con las yemas de los dedos.

Todo el público queda en silencio y solo en una cosa prestan atención, al balón que pasa lentamente, Naruto y el resto del equipo también se paran a ver la trayectoria y esperando que sea lo suficiente para que alcance a entrar a la portería. Esos segundos se volvían eternos para todas las personas que estaban en el módulo deportivo de aquella escuela.

El tiempo agregado había terminado esa es la última jugada, en ese momento todo el público estaba tenso, ¡el partido era entre los 2 mejores del torneo y de pronto el pequeño grupo de aficionados gritan gooool! ¡Así es! el balón había entrado de puro milagro chocando con el poste y alcanzado a entrar, Naruto sale corriendo a festejar con sus amigos haciendo una seña con las manos figurando un corazón, exclusivamente para una persona, le estaba cumpliendo la promesa de volver por eso estaba festejando en frente de ellos agradeciendo todo el apoyo que le estaban dando en ese momento. El partido se acabó con ese 3-4 los chicos festejaban como si hubieran ganado el campeonato, pero lo curioso es que todos estaban felices por volver con sus amigos. Después de 20 minutos de espera sale Naruto y Kiba de los vestidores ya listos para volver, sin embargo, lo que no esperaban en la salida es que sus amigos estuvieran esperando a fuera por ellos, simplemente iban a volver todos juntos, Hinata en cuanto ve a Naruto salir con su maleta sale corriendo para abrazarlo.

- ¿Cómo se te hizo el juego? - Naruto de la felicidad le pregunta mientras le da vueltas en el aire.

- ¡Estuviste increíble! No sé de dónde sacabas tantas fuerzas para seguir corriendo a pesar de lo cansado que andabas -

- De ti, te dije que tú eres mi motivación para seguir, todo fue gracias a ti. Y aparte tienes puesta mi playera favorita es una motivación extra, por cierto, te queda bien -

- Tu madre me la presto, dijo que sería bueno que la usara - Se lo dice mientras agarra el escudo y lo voltea a ver con un leve rubor en sus mejillas.

- ¡Hey! tortolos hay niños presentes. Felicidades amigo al parecer vas a volver con nosotros - Sasuke llega y abraza a su mejor amigo, aunque no sea muy expresivo siempre ha visto a Naruto como su hermano y lo ha apoyado en todo

- ¡Hijo! Estoy tan orgullosa de ti felicidades - Kushina abraza a Naruto, mientras los demás van llegando a ellos y felicitándolos por el resultado.

Después de varios minutos felicitando y comentando como les había parecido el juego empiezan a caminar rumbo a los autos para dirigirse a sus casas, Naruto toma de la mano a Hinata y la empieza a jalar para poderse apartar un poco del grupo, Sasuke se da cuenta de eso y le ayuda a su mejor amigo quitándole su maleta y cargándola para darles un poco de privacidad.

- Hinata quiero decirte algo, estos últimos meses me has hecho la persona más feliz del mundo y aunque me da miedo no ser lo mejor para ti, aun así, no quiero perder la oportunidad, ¿Te gustaría ser mi novia? - Naruto saca de la bolsa del pantalón la cajita con la cadena y el dije del zorrito.

- ¡Si! ¡Me encantaría ser tu novia! - Hinata se lanza a los brazos del rubio, mientras todos los demás logran ver de lejos la escena deduciendo lo que puede estar pasando.

- Sera algo complicado para ti ¿verdad? - Shino se acerca a Kiba.

- ¿De qué me hablas? -

- ¡Vamos amigos! De lo que algún momento sentiste por ella -

- Shino eso fue hace mucho, eso ya lo dejé de sentir -

- Desde que te enteraste que ella estaba perdidamente enamorada de Naruto ¿no? -

- Así es, desde ese momento supe que jamás tuve alguna oportunidad con ella. Y cuando me enteré que el también sentía algo por ella, solo decidí apoyarlos -

- ¿Cómo supiste? -

- Pues el año pasado que fuimos a competir en las nacionales, estábamos hospedados en un hotel donde estaban todos los equipos, estábamos jugando y uno de los juegos era verdad o reto en el hotel donde nos hospedamos, empezamos a jugar y todos en el equipo creían que Naruto y Sasuke estaban peleando a muerte por Sakura. Naruto lo negó todo y cuando empezaron a decirme cosas a mi sobre Hinata, Naruto se molestó por los comentarios. Después de eso note que él estaba más al pendiente de ella. Solo lo deduje - Kiba sigue contando viendo como Naruto y Hinata vienen caminando hacia ellos agarrados de la mano.

- ¿Naruto sabe sobre lo que sientes? -

- Si lo sabe, tuvimos una charla sobre eso. Prácticamente me dijo que no quería perder nuestra amistad, que lo que siente por ella si es real y la verdad le creo, así que me hice a un lado -

- Eso es algo valiente y formidable ya vendrá alguien para ti Kiba -

- Si como sea Shino, realmente me siento feliz por los dos lo de Hinata fue hace mucho. Así que realmente no duele - Kiba le sonríe a Shino y va con Naruto y Hinata para felicitarlos.

Al día siguiente Hinata va entrando a su aula de clases llegando justo a tiempo, no pudo ver si su novio ya había llegado su aula esta primero que la del rubio y solo podrá verlo hasta el descanso. Esta como siempre distraída viendo por la venta, en tal caso solo podía pensar en una cosa, si el rubio ya había llegado a la escuela estaba muy emocionada por que el volvería a las clases y al fin podría caminar por la escuela ya como una pareja oficial, de una vez por todas ella iba a quitarle a Naruto todas las chicas que estaban tas él. Estaba tan metida en sus pensamientos que no ponía atención alrededor, hasta que lo vio como era costumbre Naruto llegando tarde a clases, pero por fin había vuelto Naruto por costumbre volteo hacia el aula donde esta Hinata y al verla esos ojos azules brillaron de una manera muy fuerte e inconscientemente sonrió y le mando un saludo con la mano. Con esa simple acción basto para que ella estuviera de buen humor toda la mañana al verlo volver la había puesto muy feliz.