¡Perdón! Lo siento por no actualizar antes, es que no he tenido nada de tiempo, de veras lo siento mucho, pero ya verán que este capítulo lo compensará. Ya sé que el último capítulo estaba demasiado cursi, por lo que este será más realista e interesante. Lo dejo a su juicio y espero que les guste.
Teen Titans no me pertenece
Sentimientos Confundidos: Capítulo 7
Confusión y Encrucijada
Al día siguiente, todo comenzó con un intenso entrenamiento. Solo que esta vez los cinco titanes se encontraban luchando juntos como equipo contra los obstáculos.
No había objetivo alguno, simplemente tenían que derrotar a todos los que pudieran sin equivocación alguna.
-¡Star cuidado atrás!- gritó el líder petirrojo
Starfire dio media vuelta y le lanzó rayos a su oponente sorpresa. Luego tomó vuelo y ayudó a Chico Bestia, quien estaba transformado en terodáctilo a derrotar a los objetivos aéreos.
Mientras tanto Cyborg avanzaba rápidamente alrededor de la pista y lanzaba rayos supersónicos.
-¡Vamos equipo!- gritó alentándolos- Ya nos queda muy poco- comprobó al ver sus análisis en su brazo derecho
Pero su sonrisa se fue al ver un robot con el doble de su tamaño enfrente de él. Iba a ser fácil, después de todo él lo había construido, pero no le agradaba tener que romper su propia creación.
-Déjamelo a mí- dijo Robin quien se acercaba a toda velocidad- Yo no sé a lo que me enfrento- añadió mientras daba un gran salto y le tiraba explosivos
Cyborg asintió y fue a destruir las armas lásers, quienes se encontraban escondidas a lo largo de la pista y resultaban una verdadera molestia.
A Robin no le iba muy bien que digamos, los explosivos no le habían causado daño alguno al robot. Por lo tanto sacó su vara metálica y comenzó a golpearlo fuertemente en la cabeza. Había logrado hacerle varios agujeros, cuando el robot gigante logró atraparlo de un pie y lo puso de cabeza.
En ese momento apareció Raven, quien golpeó al Robot con sus poderes, causando que retrocediera y soltara a Robin. Este dio una vuelta y calló sin problemas junto a la joven titán.
-Gracias- dijo con una sonrisa
-No agradezcas aún- fue su respuesta
El robot se acercó a toda velocidad y comenzó a disparar rayos muy parecidos a los de Cyborg.
-Genial, un clon mecánico- argumentó Raven
Pero Robin no le respondió, corrió el robot y saltó hasta su cabeza con ayuda de una roca cercana. Una vez allí le clavó la vara metálica con todas sus fuerzas y la incrustó en sus circuitos.
La cabeza del robot explotó, pero para la sorpresa de ambos titanes, el cuerpo continuaba moviéndose.
-Querrás decir un zombie mecánico- la corrigió Robin
Ella lo miró, sabía que esta era otra de esas charlas para ver quien tenía la última palabra. Y como ustedes sabrán, era su forma de comunicarse, pero el robot estaba muy cerca de ellos, así que no replicó.
Ambos se miraron y comprendieron lo que el otro pensaba. Ninguno supo decir si era por su vínculo o porque simplemente sabían que debían hacer. Pero lo que siguió fue un contraataque completamente perfecto.
Raven tomó a Robin por los brazos y voló muy alto. Luego dio una vuelta hacia atrás y lanzó lo más fuerte que pudo a su compañero.
Robin sacó nuevamente su vara metálica y la incrustó en el cuerpo del robot. Quien con una de sus manos intentó quitárselo a la fuerza.
Lamentablemente para él, Raven no se había quedado atrás, atacó todas las extremidades del robot con sus poderes y con mucho cuidado de no herir a su líder.
El cuerpo se tambaleó y Robin sacó su vara rápidamente mientras dejaba en el mismo agujero varios explosivos.
Cuando estos explotaron, Robin dio un impulso y saltó lejos. Pero no se dio cuenta de que uno de los brazos del robot le iba a caer encima.
Raven no lo dudó un segundo y voló a toda velocidad hacia él. Lo empujó fuerte y por culpa de la explosión ambos cayeron lejos y adoloridos. Robin abrió sus ojos y no pudo evitar un leve sonrojo; había caído encima de su compañera y sus rostros estaban tan solo a pocos centímetros. Raven abrió los ojos y ambos se alejaron rápidamente.
Él iba a disculparse, pero los demás titanes se acercaron a ellos rápidamente. Afortunadamente ninguno parecía haberse dado cuenta del incidente, solo se acercaban porque ya había terminado el entrenamiento.
-¡Viejo, si peleamos así contra Slade de seguro ganaremos!- exclamó contento Chico Bestia
-No celebres tanto Chico Bestia- dijo Robin retomando su rol de líder- Las fuerzas de Slade son superiores a estas-
-Aún así- dijo Cyborg- Estamos en mejor forma que nunca¿Qué les parece si preparo un gran estofado de carne con mucha salsa?- exclamó mientras caminaba a la torre
-¡Olvídalo!- interrumpió el titán verde- ¡Lo que necesitamos es una gigantesca porción de Tofu!-
-Carne-
-Tofu-
-Carne-
-Tofu-
-Car... -
-¡Suficiente!- exclamó Raven sin perder el control- Chico Bestia comerá tofu y el resto carne- dijo mientras caminaba hacia la torre con la mayor tranquilidad
Su humor estaba mejor que nunca, y no había nada que la pudiera hacer perder el control.
Cyborg y Chico Bestia no siguieron peleando y alcanzaron a su compañera. Mientras que Robin y Starfire los seguían desde lejos a paso lento.
-¿Estás bien?- preguntó Starfire mientras se aferraba al brazo de su novio
-Si Star, no te preocupes- respondió simplemente Robin
Ella iba a decir algo más pero cayó al darse cuenta que no sabía que más decir. Su mente se encontraba confusa, ya que al contrario de lo que Robin creía, ella sí había visto la posición en que habían terminado su novio y su mejor amiga.
Al principio un extraño sentimiento apareció mientras ella observaba desde lejos. Era algo como ira o tristeza juntos. Pero pronto desapareció, sabía que Robin la quería a ella, y también sabía que a Raven le gustaba Aqualad.
No había razón para molestarse, simplemente había sido una caída y nada más. Convencida de esto Starfire entró en la torre y compartió alegremente la comida con sus compañeros.
Luego de eso cada titán se fue a lo suyo, y Raven se dirigió directamente a su habitación.
Un escalofrío le corrió el cuerpo, pero era tan solo por una brisa que entró por la ventana.
Pero si yo no dejé la ventana abiertaRaven se acercó y la cerró. Y tras mirar la pequeña mesa al lado de su cama, se dio cuenta de todo. Ya que encima de la mesita, había una bella conchita de mar, y la joven titán sabía bien quién la había dejado ahí.
La tomó en sus manos y la observó con una sonrisa.
Mientras tanto en la torre este, los titanes también habían tenido un fuerte entrenamiento, pero solo dos de ellos aún continuaban luchando el uno contra el otro. Y no eran otros que el arquero enmascarado y el joven de ojos negros.
-¿Dónde estuviste ayer Romeo?- preguntó Speedy mientras le daba una patada alta a su amigo
-Te lo diré si tú me lo dices- dijo Aqualad mientras esquivaba la patada y golpeaba en la cara a su compañero
-Como quieras- respondió al tiempo que se levantaba del suelo y se tocaba la cara- Salí con la hija del embajador-
-Vaya, has roto tu propio record de conquista- se burló Aqualad sin parar de atacar- Una noche y la tienes a tus pies-
-No te burles- dijo el enmascarado al tiempo que tomaba el brazo del otro titán y le hacía una llave
- Alguien se está enojando- dijo aún con tono burlón mientras lograba salir del ataque y daba puñetazos en todas direcciones
-Como si no supiera que fuiste a ver a Raven- dijo Speedy esquivando los ataques y atacando con palabras- ¿Y bien que tal te fue?-
-Simplemente digamos que nos entendemos- dijo Aqualad luego de varios minutos y retomando el ataque
-¡Aqualad tiene novia!- comenzó a burlarse Speedy mientras reía sin parar - ¡Aqualad tiene novia!-
-¿De qué te burlas?- dijo medio molesto el joven de cabello negro
-Jaja, de que el llanero solitario tenga alguien que lo entienda- dijo Speedy aún riéndose, aunque no por mucho, ya que Aqualad lo golpeó fuerte en la cara y quedó nuevamente en el suelo
-Si te vas a poner así, mejor no te digo nada-
-Tranquilo viejo, solo bromeaba- dijo más calmado poniéndose de pie
Pero no duraría mucho, ya que un temblor comenzó de repente. Poco a poco se fue haciendo más intenso, y llegó al punto sacar de equilibrio a ambos titanes y dejarlos en el suelo. Pocos minutos después, el terremoto terminó.
-¿Dos terremotos en dos días?- argumentó Speedy
-Esto es muy sospechoso- dijo Aqualad mientras se levantaba- No creo que sea natural-
Al mismo tiempo, pero en la otra torre. El líder petirrojo pensaba exactamente lo mismo.
-Cyborg quiero los análisis de ese y el otro terremoto- dijo mientras se juntaba con los demás titanes en la sala
-Enseguida- respondió el titán mitad máquina mientras proyectaba los resultados en la pantalla
Un montón de gráficos y análisis aparecieron uno tras otro en la tele gigante, y las caras de cuatro de los titanes se llenaron de preocupación.
-¿Porqué soy siempre el único que no entiende nada?- preguntó alarmado Chico Bestia
-No hay nada que entender- dijo Starfire, quien tenía a sedita en sus brazos
-¿Ah?-exclamó el titán verde sin entender nada aún
-Los terremotos son completamente naturales- añadió Raven
-No lo creo- dijo Robin
-Pero los análisis lo muestran así- dijo Cyborg seguro- Los terremotos son causados por el movimiento de las placas tectónicas, y estas se mueven cada tanto tiempo unas contra otras golpeándose de tal forma que el suelo entero se mueva, no hay nada anormal según esta información-
-Sí, pero ¿Dos terremotos en una semana?- Raven no estaba convencida, y al parecer Robin tampoco
Pero la investigación tendría que continuar luego, ya que la alarma comenzó a sonar, y el análisis de la pantalla fue reemplazado con una imagen de Plasmus en el centro comercial.
-¡Titanes, andando!- señaló Robin mientras todos se dirigían al elevador
Media hora después, el auto-T se detenía frente al centro comercial y los cinco titanes se bajaban a toda velocidad.
Plasmus se encontraba justo en la entrada, al parecer era hora de su retirada, pero como bien sabemos, los titanes no se lo iban a permitir.
-¡Titanes ataquen!- No se dijo más, los cinco entraron en combate y a los pocos minutos se veía una gran batalla
Cyborg lanzaba rayos supersónicos, Starfire atacaba desde el aire, Chico Bestia se transformó en triceratops, Robin lanzaba explosivos y Raven lanzaba lo que tenía a su alrededor.
Minutos después, todo el alrededor se encontraba cubierto de una masa asquerosa color bordó. Los titanes también estaban cubiertos de esa extraña cosa, y no se encontraban muy a gusto que digamos.
-Esto es completamente desagradable- dijo Starfire
-Vamos equipo, terminemos con él de una vez por todas- dijo Cyborg
-Tal y como en el entrenamiento- señaló Robin
Todos asintieron y tomaron posiciones. Esta vez no era un robot metálico, sino una masa viviente, y lo más difícil era no herir al muchacho que se encontraba dentro de la horripilante criatura.
Chico Bestia lo embistió con todas sus fuerzas, pero quedó atrapado en uno de los ojos verdes de plasmus. Cyborg reaccionó enseguida y lanzó un rayo hacia él, causando que se rompiera y liberando al titán verde.
Luego Starfire concentró sus rayos en el centro de plasmus, lo cual era difícil, ya que no paraba de moverse, y lo único que logró fue hacerle un agujero sin importancia.
Pero antes de que se regenerara, Raven tomó a Robin por los brazos y lo lanzó por ahí. Este cruzó por el agujero que tenía plasmus y salió con una sonrisa en el rostro. Ya que había logrado colocar explosivos en él, y tal como lo había predicho, la masa salió esparcida hacia todos lados.
Raven por su lado, había cubierto con su energía al joven inconsciente, quien ahora dormía tranquilamente, pero para eso había tenido que acercarse mucho, y había terminado más sucia que el resto de los titanes.
Una vez de regreso en la torre todos se fueron a dar una larga y reconfortante ducha.
Una vez que Robin hubo terminado de ducharse, se tiró en su cama a descansar un rato. Repasó las imágenes de la batalla en su cabeza y comenzó a imaginar nuevas estrategias para el entrenamiento, pero en ese momento recordó lo sucedido con Raven por la mañana y un leve sonrojo lo volvió a invadir.
¿Por qué me sonrojo? Se supone que a mí me gusta Starfire, bueno no se supone...
Realmente me gusta Star, entonces ¿Por qué me pasa esto?
Es una tontería, además Raven parece estar interesada en Aqualad, y él en ella, aunque la verdad no puedo evitar sentir algo raro cuando los veo juntos...
No será que... que... estoy celo...
Sus pensamientos fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta. Lentamente caminó hasta ella y se encontró con Chico Bestia.
-Te necesitamos en la sala, Raven encontró algo extraño acerca de los terremotos-
Ambos titanes se dirigieron a la sala, y una vez que entraron se acomodaron en el largo sillón negro.
-Dinos amiga Raven¿Qué fue lo que encontraste?- preguntó Starfire
-La verdad no es de los terremotos- dijo la chica gótica poniendo caras de duda en sus compañeros- sino de las placas tectónicas-
-¿A qué te refieres?- preguntó Cyborg, los análisis mostraban todo como algo natural-
-Si, es cierto, pero tan solo el movimiento y las consecuencias, pero nunca dijo qué lo provocó- explicó Raven- Las placas solo se mueven cada cierto tiempo, jamás dos días continuos- unas imágenes aparecieron en la pantalla- Estos son los planos de debajo de la ciudad, los de la tierra. Las placas que ocasionan estos terremotos están entre el océano y la mitad de la ciudad de forma perpendicular-
-¿Tienes alguna idea de qué es lo que las mueve?- preguntó Robin
-No- respondió la joven titán- Pero tendría que ser algo realmente poderoso y fuerte-
-En ese caso será mejor bajar hasta allí a investigar- dijo el líder mientras inspeccionaba el área
-¿Quieres que bajamos millones de metros bajo tierra donde la tierra se mueve y podríamos quedar atrapados de por vida!- gritó Chico Bestia agitando sus brazos en todas direcciones
-A menos que tengas una mejor idea-
Chico Bestia no replicó, pero todos entendieron o creyeron comprender la molestia de su amigo. Ya que a pesar de que nadie lo dijo, todos sintieron un pequeño escalofrío al recordar lo sucedido la última vez que estuvieron bajo tierra.
-Partiremos mañana temprano¿Cyborg crees poder tener la nave lista para entonces?-
-Si te refieres a añadirle un taladro gigante junto con una alta potencia en los propulsores, dalo por hecho- respondió el joven mitad máquina con una sonrisa
-Perfecto, entonces... -
Robin fue interrumpido por la voz de una joven que titán que apareció en la pantalla, al parecer no de muy buen humor.
-¡Amiga Abeja¿Qué te trae por aquí?- preguntó alegremente Star
-Raven- Bee no presto atención al saludo y nombró a la joven gótica con un tono lleno de culpabilidad- Escucha, sé que tú y tu novio quieren estar juntos y todo eso, pero ya es la quinta vez que tenemos una emergencia en este lado de la ciudad y Aqualad no aparece. Así que si no es mucha molestia, díganle que salga de su escondite ahora mismo y hable como hombre-
La sala quedó en completo silencio y todas las miradas se concentraron en Raven, la cual estaba completamente roja.
Bumble Bee había pronunciado nada más y nada menos que la palabra novio.
A Starfire se le iluminó la cara de felicidad, Cyborg le envió una mirada pícara, Robin la miraba perplejo y Chico Bestia tenía la boca semiabierta mientras dejaba ver una mirada de desilusión.
-No sé de qué me estás hablando- dijo por fin Raven
-Oh vamos no te hagas la tímida ahora- argumentó Bee- Además después me tienes que contar todos los detalles-
-Me refiero a que Aqualad no se encuentra aquí- La joven gótica hablaba sin levantar la mirada y aún estaba sonrojada
No puedo creerlo, recién aclaramos nuestros sentimientos ayer y ya se lo contó a todo el mundo
Ya va a ver cuando lo encuentre
-¿Cómo que no está ahí? Las coordenadas de su transmisor están alrededor de su torre, y han estado ahí durante todo el día-
-No lo he visto en todo el día- mintió Raven mientras recordaba que había encontrado una conchita de mar en su habitación.
¿Pero era posible que se hubiera quedado ahí durante todo el día?
-En… - La voz de la titán abeja se detuvo, ya que de su lado de la transmisión una alarma comenzó a sonar estrepitosamente- Genial otra emergencia-
-No te preocupes Bee- dijo Robin- Encárguense de eso y nosotros rastrearemos a Aqualad-
La pantalla se apagó y Starfire no pudo contener más su emoción.
-¡Querida amiga Raven¡Te doy la más grande felicitación de mi parte por haber encontrado a tu platflorg!- gritó al tiempo que estrujaba con todas sus fuerzas a la otra titán
-Gr... rac...cia...ss-
-Tranquila Star, no queremos que Julieta se desinfle antes de encontrar a Romeo- Suspiró Cyborg sin poder contenerse, aunque el chiste no le duró mucho, ya que una energía negra rodeó el sillón donde estaba sentado y lo dio vuelta haciéndolo caer de cabeza – Tranquila Raven solo era una broma-
Pero ella no prestaba atención, apenas Starfire la había soltado, había tomado control de la computadora y había comenzado a rastrear señales de Aqualad alrededor de la torre.
Pero sus esfuerzos no dieron buenos resultados, ya que el transmisor de Aqualad estaba en efecto a tan solo metros de la torre en el océano, pero sus señales cardíacas no lo estaban.
Los titanes dejaron enseguida los chistes y se pusieron serios. No había rastros de su amigo y tenían que encontrarlo.
-Starfire tu harás un rastreo aéreo- señaló Robin- Cyborg inspeccionará la ciudad y Chico Bestia, Raven y yo iremos al océano. ¡Titanes sepárense!-
Minutos después Starfire sobrevolaba la ciudad, no le gustaba la idea de estar sola, pero la idea de que Raven estuviera saliendo con Aqualad la había puesto tan feliz, que apenas pensaba en ello.
No solo se había puesto feliz por su amiga, sino que eso dejaba totalmente fuera su confusión con Robin.
Mientras tanto Cyborg recorría las calles de la ciudad junto con sus radares. Por lo que además de conducir no tenía mucho que hacer. Por lo que se puso a reflexionar sobre lo recién ocurrido.
Robin y Starfire estaban saliendo, ahora Raven también, Chico Bestia… bueno era un caso excepcional, pero esto le indicaba que ya era hora que él también aclarara sus sentimientos, los cuales hace tiempo tenían ganas de salir a flote.
Al mismo tiempo, pero en el océano, Raven y Robin inspeccionaban las cercanías de la torre en la nave-T junto con Chico Bestia, quien iba en forma de pez espada.
Pasó media hora antes de que encontraran el transmisor de Aqualad, aunque no fue lo único que encontraron.
-¿Qué pasó aquí?- preguntó Robin sorprendido
Toda la superficie marina se encontraba distorsionada, habían grietas por todas partes, derrumbamientos marinos, peces muertos y todo un caos submarino.
-Parece como si hubiera habido una gigantesca pelea- dijo Raven tratando de no pensar en la clase de peligro en el Aqualad debió haber estado
-¿Chico Bestia crees poder rastrear a Aqualad?- preguntó Robin al pez espada que los miraba a través de la ventana
Este enseguida tomó forma de pez rastrero y analizó el terreno. Luego de un momento a otro se transformó en delfín y nadó a toda velocidad en dirección norte. Robin y Raven lo siguieron con la nave mientras miraban horrorizados el desastre que reinaba en el fondo submarino.
-Starfire a Robin cambio-
-¿Cómo te fue con la búsqueda Star?-
-Lamento decir que no obtuve resultados positivos- dijo la tamaraneana con voz desilusionada
-¿Qué tal tu Cyborg?- preguntó el líder petirrojo
-Negativo- respondió el joven mitad máquina
-La verdad no creía que estuviera en la superficie, será mejor que ambos regresen a la torre y preparen la enfermería, al parecer aquí hubo una gran pelea- dijo Robin intentando no alarmar a Raven, pero era obvio que no encontrarían a su amigo en muy buenas condiciones si él había sido parte de la lucha – Robin fuera-
Pasaron alrededor de dos horas y aún no había rastros de Aqualad.
-Tranquila lo encontraremos- dijo Robin para alentar a la joven titán
Pero Raven no le respondió, estaba muy preocupada y lo único que quería era que esto terminara rápido. Hizo por séptima vez un scanner a sus alrededores y nuevamente obtuvo resultados negativos.
Dio un gran suspiro y miró a través del vidrio a Chico Bestia, quien había tomado la forma de salmón y estaba pidiendo indicaciones a una tortuga.
De pronto Chico Bestia se transformó nuevamente en delfín y nadó rápidamente seguido de la nave-T. Luego de unos minutos subieron a la superficie y el titán verde retomó su forma humana.
-¿Qué sucede?- preguntó Robin
-Verán hablé con la tortuga que me dijo que había hablado con una foca que había hablado con un lobo marino que había…-
-Sí ya entendimos Chico Bestia- dijo Raven perdiendo la paciencia
-El punto es que unos delfines encontraron esta mañana a un chico en el fondo del océano, y como reconocieron que era Aqualad lo trajeron aquí- dijo finalmente mientras apuntaba a una pequeña isla que estaba detrás de ellos
Rápidamente conducieron la nave-T a la isla, y tan pronto estuvieron en la orilla Raven se bajó a toda velocidad y comenzó a buscar a su alrededor.
No tuvo que buscar mucho, ya que Aqualad se encontraba tendido a orillas del mar a tan solo metros de ella.
Sin pensarlo dos veces corrió hacia él mientras sus dos amigos la observaban desde lejos.
Chico Bestia estaba feliz de haber encontrado a su amigo, pero un vacío comenzó a crecer en su corazón. Tal vez estaba equivoca y él no era el indicado para Raven, y pensándolo bien no eran el uno para el otro. Pero no es tan fácil olvidar a una persona, y menos cuando esta ha significado mucho para ti.
Más no era momento de pensar en ello, primero tenía que preocuparse por la salud de su amigo, luego aclararía sus sentimientos.
Robin por su parte caía en la confusión. Ver como Raven corría hacia Aqualad llena de preocupación por el lo llenaba de un sentimiento de ira y tristeza. Es cierto que ya eran novios, y era lógico que se preocupara por él, pero ninguna de las dos ideas le agradaban mucho.
Raven se arrodilló junto a Aqualad, quien al parecer estaba desmayado, y le tomó el pulso. Todo parecía normal, su cara mostraba algo de cansancio y no tenía ninguna herida exterior.
Tan pronto sus amigos se acercaron la ayudaron a llevarlo a la nave-T. Nadie habló en el camino de regreso, Robin conducía sumido en sus pensamientos sin poder salir de esa extraña confusión. Chico Bestia se debatía si debía dejar o pelear por Raven hasta el final. Raven no dejaba de mirar a Aqualad, quien estaba en el asiento que normalmente ocupaba Starfire, y se retaba así misma por haberse mostrado tan sentimental ante sus amigos. Es cierto que ahora podía dejarse sentir sin mayores problemas, pero aún así, no era costumbre suya mostrarlo tanto.
Rato después llegaron a la torre-T, donde la enfermería ya estaba lista y Cyborg se encargó de atender al joven titán.
-Es extraño- dijo una vez que salió para anunciar su estado
-¿Se encuentra bien?- preguntó preocupada Starfire
-Solo se lo nota un poco cansado, pero físicamente está perfecto, no tiene ni un rasguño, pero no entiendo por qué no despierta- dijo extrañado
-¿Qué le habrá ocurrido?- preguntó Chico Bestia
-Lo sabremos cuando despierte- dijo Robin
-¿Dónde está Raven?- preguntó Cyborg al darse cuenta que su amiga no estaba en la sala de espera
-Fue a avisarle sobre nuestro victorioso hallazgo a los titanes este y a pedirles que vengan mientras nosotros vamos mañana a investigar los extraños sucesos de los terremotos- le respondió Starfire- Aunque ya lleva mucho tiempo ahí, tal vez fue a su habitación-
-¿Está bien?- Cyborg sonaba preocupado
-Solo necesita meditar- dijo Robin rápido, aunque en verdad no estaba seguro de saber donde estaba, pero la conocía bien y sabía que si no estaba con ellos era porque deseaba estar sola
-En ese caso voy a preparar la nave-T, creo que voy a necesitar algo de ayuda Bestita- dijo el joven mitad máquina mientras salía de la sala de espera y era seguido por Chico Bestia
-¡Genial¿Puedo conducir?-
-Yo voy a preparar un delicioso plato para nuestros amigos, después de todo ya es hora de cenar y no hemos comido nada en todo el día- dijo Star- ¿Me acompañas?-
-Si, seguro- dijo Robin mientras pensaba en como convencería a su novia de que no cocinara, en especial si ahora iban a tener visitas
Mientras tanto, Raven se encontraba meditando en su habitación. Tal y como lo había predicho Robin.
Tenía muchas ganas de bajar a ver a Aqualad, pero no quería que la vieran como alguien demasiado sentimental. Así que luego de avisarles a los titanes este de que habían encontrado a su amigo, había subido directamente a su habitación. Aunque Bee no la había dejado irse tan fácilmente, primero tuvo que contarle con detalles toda la noche anterior. Lo cual había pasado a ser el momento más vergonzoso de su vida, ya que mientras ella se ponía roja al hablar, Bumble Bee gritaba emocionada desde su lado de la pantalla.
Hubiera sido más sencillo apagar la pantalla o simplemente ignorarla, pero Raven estaba comenzando a darse cuenta que a veces era mejor hablar con alguien en vez de guardarse todo para ella misma.
Además sabía que tarde o temprano Bee sabría todo lo sucedido, y prefería contárselo ella misma antes que le llegaran extraños rumores.
Pasado un rato, Raven decidió que ya era hora de bajar. Salió de su habitación, recorrió los pasillos y escuchó las voces de sus compañeros en la sala común.
Feliz de que nadie más estuviera en la enfermería apresuró el paso, y una vez que llegó abrió lentamente la puerta de la enfermería.
Aqualad aún seguía dormido, así que entró sin hacer ruido y se acercó. Apenas estuvo a unos centímetros de la cama alguien le tomó la mano.
-Parece que estoy en el cielo, porque tengo un ángel a mi lado-
Raven sonrió llena de felicidad y se sentó al pie de la cama.
-Lamento haberte despertado-
-Hace algunos minutos que desperté- dijo Aqualad sin soltar su mano- Pero no puedo recordar que me pasó-
-Parece que tuviste una pelea, una muy grande si me lo preguntas- dijo Raven al tiempo que retiraba su mano
-No estoy seguro, creo que aún estoy algo mareado-
-No es necesario que te esfuerces mucho, lo mejor es que descanses- Raven se levantó con la intención de retirarse, pero Aqualad acercó su rostro hasta el de él para poder besarla, pero ella le colocó un dedo en los labios y se alejó nuevamente- No creas que te e perdonado por haberle contado a toda Jump city que eras mi novio-
-¿Qué? Speedy…- susurró un poco molesto
-¿Llamaste?- dijo el arquero enmascarado mientras entraba seguido de los titanes este
Aqualad miró de nuevo a Raven, pero para su sorpresa ella ya no se encontraba ahí. Seguramente había utilizado sus poderes para salir antes de que sus amigos la vieran. Él no entendía porque no le gustaba estar con él y sus amigos al mismo tiempo, pero supuso que solo sería tiempo para que ella se acostumbrara. Aunque a él tampoco le gustaba mucho la idea de que lo comenzaran a molestar ahora que no sentía bien, y además tenía que arreglar cuentas con Speedy.
La noche pasó rápida, los titanes oeste prepararon sus cosas para el día siguiente y luego cenaron junto a los titanes este unas grandes porciones de pizza. Ya que extrañamente el platillo de Star había desaparecido. Aqualad no tenía ganas de comer y siguió durmiendo hasta la mañana siguiente.
Por la mañana todos; excepto Aqualad que aún estaba muy débil para salir de la enfermería; despidieron a los titanes oeste.
-Bien titanes abrochen sus cinturones- dijo Cyborg mientras encendía la nave y sus nuevos taladros gigantes-
Primero se sumergieron en el océano y luego comenzaron a taladrar. Al principio el proceso de taladrar la tierra fue bastante lento, pero luego la tierra comenzó a ceder y rápidamente llegaron a lo que parecían túneles subterráneos.
-Vaya, no sabía que tuviéramos túneles debajo de la ciudad- dijo Chico Bestia mientras miraba los planos- De hecho ni siquiera están en el mapa-
-Eso es porque alguien los construyó a propósito- dijo Robin
-Estamos llegando al punto de encuentro entre las placas tectónicas- dijo Raven
Lo que encontraron fue una enorme base oculta a un lado de las placas y unas enormes esferas colocadas en distintos puntos del lugar.
-¿Amigo Cyborg, qué son esas cosas?- preguntó Starfire
-No es nada bueno, según mis análisis son bombas de tiempo- respondió el joven mitad máquina- aunque aún no han comenzado el conteo-
-Aún así no hay tiempo que perder ¡Titanes al ataque!- gritó el líder petirrojo
Todos entraron en la base sin mayor problema y recorrieron unos cuantos pasillos para poder llegar al centro de control.
-Vaya, vaya, pero si son mis queridos amigos los jóvenes titanes, me alegra que hayan llegado, estábamos esperándolos-
-Sabes bien que no somos tus amigos Slade- dijo enfadado Robin
-Tal vez tengas razón, pero antes de entrar en una conversación déjenme darles una cálida bienvenida- dijo Slade con un tono tranquilo y retador que desesperaba al líder petirrojo
De un momento a otro los cinco jóvenes titanes se vieron rodeados de enormes robots armados hasta los dientes que los atacaron sin piedad.
-Marcus, los dejo a tus servicios- dijo Slade a un extraño sujeto que Raven reconoció enseguida, ya que era el mismo sujeto raro de la fiesta y el barco
-Como usted diga mi señor- respondió su fiel secuaz
Sin perder más tiempo los titanes comenzaron una intensa lucha. Uno a uno los robots eran derrotados fácilmente, al parecer los intensos entrenamientos de Robin estaban dando sus frutos.
-Esto es pan comido- dijo Chico Bestia mientras derrotaba de un golpe a tres robots
-No puedo ver a Slade con tantos robots- dijo Cyborg desesperado
-Starfire has un rastreo- le pidió el líder
Ella voló lo más alto que pudo, y sin dejar de disparar a sus enemigos alcanzó a ver a Slade saliendo por una puerta del fondo.
-Se está escapando por la parte de atrás- comunicó enseguida a sus compañeros
-Cyborg y Chico Bestia, ustedes se quedarán a derrotar a los robots, Raven, Starfire y yo iremos por Slade y su secuaz- Robin dijo rápidamente
-Ningún problema- dijo el joven mitad máquina
-¡Sí¡Vamos a hacer paté de tofu a estos robots!- gritó entusiasta Chico Bestia
Los otros tres titanes corrieron hasta la parte de atrás de la base y salieron por la misma puerta que Slade y su secuaz habían usado. Pero no salieron al exterior, sino que llegaron a otra habitación de gran tamaño donde Marcus los esperaba.
-Me parece que ya nos habíamos visto ¿Verdad preciosa?- dijo Marcus
-No me importa si ya la habías visto o no¡Dinos donde está Slade y no te haremos daño!- Robin sabía que esta era una de las oportunidades únicas para poder atrapar a Slade, y no iba a permitir que un tonto sujeto raro lo impidiera
-Slade me había contado sobre su usual impaciencia, pero antes que nada me voy a presentar, mi nombre es Marcus, y no voy a permitir que avancen un paso más- en ese momento sacó un arma que lanzaba rayos eléctricos y les apunto a los titanes
Marcus comenzó a disparar con una increíble puntería a cada uno de los titanes, pero no pudo darle a ninguno y pronto se le acabaron las municiones.
-Ahora es nuestro turno- susurró Robin mientras sacaba su vara metálica y atacaba al secuaz de Slade
Pero este no se quedó atrás, sacó una espada y comenzaron una ardua lucha. Desafortunadamente se movían muy rápido y con mucha agilidad, por lo que ninguna de las chicas pudo usar sus poderes por temor a herir a Robin.
-Será mejor que continuemos nosotras solas- dijo Raven mientras volaba hacia la salida
-No crean que las dejaré irse tan fácilmente- dijo Marcus que con un golpe bajo dejó al líder petirrojo en el suelo y luego hacía sonar un silbato
Segundos después una extraña criatura que parecía un lobo con alas de unos diez metros de altura apareció ante las titanes.
-Les presento a mi mascota- dijo Marcus mientras su mascota gruñía- Parece que le agradan- y sin decir más retomó su lucha contra Robin
-¡Azarath, Metrion, Zinthos! - Raven atacó a la criatura directamente con su poder y esta retrocedió un poco
Luego fue el turno de Starfire, y al momento del impacto la criatura dio un fuerte alarido de dolor.
-Al parecer yo le hago más daño- dijo Star- Será mejor que yo continúe y tu vayas por Slade-
-¿Estás segura Star?- Es cierto que no sería de mucha ayuda en esta pelea, pero no estaba segura de si ir sola tras Slade era una buena idea, hubiera preferido preguntarle a Robin, pero él tenía sus propios problemas
-Sí, yo estaré bien, no te preocupes y apresúrate-
Raven no respondió y voló hasta la puerta del fondo y la atravesó. Una vez del otro lado, se encontró dentro de otra habitación llena de pantallas y artefactos de gran tecnología. Rápidamente buscó con la mirada a Slade, pero no parecía encontrarse a su alrededor.
-¿Me buscabas?- dijo una voz conocida tras ella
Raven reaccionó rápido con una patada alta, pero Slade la atrapó del pie y le dio un puñetazo en la cara con su otra mano.
-Sabes, eres muy valiente por venir a buscarme tu sola, o más bien muy tonta- dijo con tono malévolo mientras se disponía a atacar.
-¡Azarath, Metrion, Zinthos!- gritó Raven al tiempo que tomaba unas mesas con su energía y las golpeaba contra Slade
Este cayó al suelo y se volvió a levantar sin mayor problema. Luego corrió hasta la joven titán y atacó con varias patadas, golpes y puñetazos. Raven esquivó la mayoría, pero Slade era bastante buen luchador, por lo que le había ocasionado varias heridas.
Más en uno de sus intentos la chica gótica logró encestarle un buen golpe en la cara causando un gran enojo en su adversario.
-Se ve que has mejorado¡Pero no lo suficiente!- exclamó Slade mientras le daba una fuerte patada en el estómago dejándola sin aire-Desperdicias tu poder de una forma realmente impresionante Raven-
-¿De qué estás hablando?- preguntó Raven casi sin aliento
-No es muy difícil de entender, como habrás notado tengo mala suerte con los aprendices, por lo que decidí trabajar por mi propia cuenta por toda la eternidad. Pero para eso necesito de un poder impresionante, uno que derrote a todos los demás y ese es el tuyo Raven- Slade se le acercó esperando una respuesta, pero la joven titán aprovechó para continuar la pelea
Pero luego de varios minutos, Slade la dejó en el suelo nuevamente sin energía.
-¿Ves como desperdicias tu talento? Tienes el poder para destruir el mundo con un simplemente pensamiento y lo malgastas intentando ser la niña buena- Slade se le acercó nuevamente y la levantó a la fuerza de uno de sus brazos- Piénsalo Raven, ambos saldríamos victoriosos-
-Mis poderes jamás serán tuyos- dijo la joven titán intentando safarse
-Te estoy dando la posibilidad de ser alguien normal, alguien que pueda sentir sin destruir lo que hay a su alrededor, alguien que pueda amar sin salir herido por guardarse lo que siente-
-Yo ya puedo sentir- susurró Raven-¡Y no necesito tu ayuda!- sus ojos se tornaron blancos y su cabello creció unos cuantos centímetros
Slade realmente la había sacado de quicio. Ella sabía perfectamente que todos esos beneficios no eran otra cosas más que engaños para salir él victorioso y apoderarse de todo.
Así que apenas hubo recobrado el aliento lo golpeó fuertemente con sus poderes contra la pared y le lanzó todo lo que tenía alrededor.
-Si crees que me vas a ganar con un montón de palabras estás equivocado- dijo enfadada mientras volvía a la normalidad
-Si no me haces caso con palabras- dijo Slade mientras se volvía a levantar- Entonces será a la fuerza-
Las pantallas se encendieron y mostraron planos de donde estaban e imágenes de la ciudad.
-Si aprieto este botón- dijo señalando uno de su control remoto- las bombas que están colocadas afuera comenzarán un conteo regresivo, una vez detonadas las placas tectónicas chocarán con tanta fuerza unas contra otras que provocarán el terremoto más grande que se haya visto en siglos-
-Te felicito- dijo Raven- Pero un simple terremoto no tirará abajo a toda la ciudad-
-No solo se ocasionará un terremoto, te lo puedo asegurar, así que o me cedes tus poderes o te despides de tu ciudad, tu decides Raven- Slade tenía su dedo a medio centímetro del botón
-Esto no te servirá de nada, aunque me niegue los titanes este tendrán todo bajo control- dijo Raven calmada
-Supuse que dirías eso, así que te traje una sorpresita- las puertas se abrieron y entraron varios robots con gente desmayada en sus brazos- Haremos un cambio de planes-
Raven dio un grito ahogado al ver como uno de los robots se acercaba a Slade trayendo con él nada más y nada menos que a Aqualad.
-Tu me das tus poderes y yo no tocaré un solo cabello de tu novio-
¿Qué tal? Si ya sé, van a odiarme por dejarlos en suspenso, pero tranquilos, prometo actualizar y finalizar este fic esta semana. Es que ahora tengo vacaciones y tengo todo el tiempo del mundo. Ojalá les haya gustado, porque el capítulo que sigue está ultra interesante y responderá todas sus dudas.
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Ishii Sen Ling