Disclaimer: Todos los personajes y lugares de la serie de Libros "Harry Potter" pertenecen a J. K. Rowling, lo demás es mío.
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Capítulo 10: La oportunidad de Draco
Era una hermosa mañana, rayos de sol entraban por las ventanas de 'La Madriguera' iluminando la cocina donde se encontraba la Sra. Weasley preparando el desayuno. Sus hijos gemelos habían avisado que irían esa mañana para entregar algo muy importante, no podía ser antes puesto que tenían un experimento en proceso y si lo dejaban sin vigilancia podía volar media tienda, además cualquier excusa para disfrutar de la comida que preparaba su madre era válida. Como si estuviesen vigilando la casa, Fred y George aparecieron en la puerta en cuanto la Sra. Weasley había terminado de conjurar el desayuno.
"Madre hemos llegado" dijo Fred.
"¿Cuál es su mayor ambición en la vida?" preguntó Molly para asegurarse de que se trataba de sus pequeños, aún no perdía esa costumbre a pesar de que su esposo le había repetido hasta el cansancio que no servia de nada.
"Que nuestra tienda de bromas sea la mejor del mundo mágico" respondió George entre risas.
"Y torturar a Ron" susurro Fred en el oído de su hermano.
"Pasen" dijo la Sra. Weasley mientras abría la puerta, "llegan en el momento preciso, el desayuno está listo" añadió señalando la mesa.
"Le hemos traído la sorpresa que le prometimos" dijo Fred mientras le entregaba a su mamá el sobre que Hermione había enviado para ella y toda la familia.
"Me lo esperaba luego de que su padre me contó sobre un ataque de dementores en Hungría donde cuatro jóvenes intervinieron" dijo la mujer pelirroja mientras sacaba la carta y luego empezó a leerla en voz alta.
Querida Familia Weasley:
Seguramente ya saben sobre el ataque en Hungría donde cuatro jóvenes vencieron a un grupo de dementores. Debo confirmarles que fuimos nosotros, enfrentando un nuevo reto de nuestra travesía. No se preocupen, todo ha salido muy bien.
También estuvimos involucrados en la 'detención' de los mortífagos que atacaron el orfanato cercano a Budapest, lamentablemente no pudimos ayudar a los niños que estaban ahí, no llegamos a tiempo. Por suerte la mayoría de los pequeños estaba en Cabaña de Levski.
Los queremos mucho.
Hermione Granger.
"Al menos esta vez nuestro hermanito se ha defendido mejor" dijo George mientras se metía un panquecito en la boca.
"Respeta a tu hermano" dijo la Sra. Weasley mientras se secaba las lágrimas de los ojos, sus pequeños estaban a salvo.
"Si George, recuerda que esto no es un juego" dijo seriamente desde la puerta el Sr. Weasley.
"Querido, ellos están bien" dijo emocionada la mujer.
"¿Cómo les llegó la carta?" preguntó el recién llegado.
"Nos la entregó una joven llamada Lien" dijo Fred con una gran sonrisa, la verdad es que los gemelos no habían comentado nada sobre la visita de Ron a la tienda, no deseaban preocupar a sus padres.
"Lien?... ese es un nombre chino" dijo pensativo Arthur, "la otra carta la trajo un hombre oriental… obviamente los chicos están en Oriente, puedo aprovechar la visita del embajador Mikawa para averiguar algo" concluyó el hombre ante la sorpresa de los presentes.
"Espera Arthur, recuerda que cuando se fueron nos pidieron que no los buscáramos para no ponerlos en peligro" dijo con seriedad la Sra. Weasley, "nunca sabemos donde puede haber algún espía, podríamos darle pistas a quien-tu-sabes"
"Además papá, puede que Hermione esté intentando despistarnos" añadió George, pero él sospechaba que su padre estaba en lo correcto.
"Talvez tengan razón, pero me cuesta mucho estar aquí con los brazos cruzados" dijo tristemente el Sr. Weasley.
"Lo se mi amor" dijo la Sra. Weasley acercándose a su esposo, "ellos también son mis pequeños"
Los gemelos observaban a sus padres, sabían que estaban sufriendo por no saber donde se encontraban Ron, Hermione y Harry, que las cartas de la joven castaña los tranquilizaban un poco por tan solo unos minutos y que con cada ataque de los mortífagos temían que los chicos estuviesen involucrados. Ellos habían llegado a la misma conclusión que su padre cuando su hermano los visitó junto a la hermosa Lien pero no habían logrado que ella les diera información, además habían prometido no interferir en las decisiones del trío y apoyarlos en todo. Mientras desayunaban su padre salió rumbo al Ministerio, ahora tenía un puesto más importante y su presencia era muy necesaria; por otra parte, la Sra. Weasley había ido al cuarto de Ginny para despertarla y mostrarle la carta, la joven pelirroja estaba en casa debido a que Hogwarts no se abriría ese año, todo era tan diferente.
Los hermanos aprovecharon la visita para recorrer el jardín, todo el lugar estaba lleno de recuerdos felices, debían admitir que extrañaban a su hermanito. Casi podían verlo desgnomizando el jardín, volando en su escoba, llorando porque habían transformado su osito de peluche en una horrible araña, la inocencia con que había aceptado hacer la promesa inquebrantable, en fin recordaron toda una vida junto a Ron.
"No había tenido oportunidad de contarte algo 'particular' que ocurrió ayer" dijo Fred luego de un rato.
"Con Lien?" dijo George con una sonrisa pícara.
"Si" respondió Fred, "intenté hacerle creer que yo era George"
"Te encanta hacer esa broma" intervino George recordando la infinidad de veces que lo había hecho.
"Debo admitir que es cierto!" dijo con una gran sonrisa, "pero esta vez fue distinto, Lien no cayó en el engaño"
"A qué te refieres? Eres tan convincente con ese asunto que incluso nuestra madre ha caído en tu juego" dijo George.
"Mira, hice exactamente lo mismo que las otras veces, pero mientras yo insistía que no era Fred, ella simplemente sonreía y me respondía que no mintiera" comentó Fred mientras recordaba su encuentro con la hermosa joven china, "finalmente tuve que admitir quien soy"
"Hermano, creo que has encontrado a tu mujer ideal" dijo sonriente George mientras le daba palmadas en la espada a su gemelo.
"No se si sea la ideal" respondió el aludido, "pero debo admitir que una mujer a la que no puedo engañar me parece muy interesante" añadió guiñándole el ojo.
"Pregúntale si tiene una hermana gemela" bromeó George.
Mientras tanto en la mansión Li, las clases especiales del trío dorado con Agatha habían empezado. Lo primero que les enseñó fue un antiguo pero sencillo conjuro chino usado para derribar al adversario, el cual Harry dominó a la perfección en menos de diez minutos; claro que eso fue solo el comienzo, pasaron el resto del día practicando hechizos básicos chinos, japoneses, indues y celtas, Agatha hizó énfasis en la pronunciación pues eso sería vital para los conjuros más complejos y Ron, lamentablemente, tenía la lengua medio enredada con los vocablos chinos. Por otra parte, Hermione había logrado leer un par de textos japoneses con ayuda de Keiko, estaban llenos de hechizos sumamente interesantes y complicados pero uno en particular llamó la atención de la joven castaña: "Yume Kō", el sueño previo a la eternidad. Fue un entrenamiento agotador, parecía que la mujer china esta dispuesta a convertirlos en expertos lo más pronto posible y a cualquier costo, era tan rígida en las clases como la profesora Mc.Gonagall y más seria que Snape, una combinación que no agradaba a ninguno de los Gryffindors; pero debían admitir que daba resultados, en tan solo un día ya dominaban los encantamientos básicos de oriente.
Los días continuaron de la misma manera, con jornadas largas, agotadoras, pero sumamente fructíferas, hasta que llego el día de la entrevista entre Agatha y Draco. Esa mañana la china les enseñó un conjuro creado por ella, una mezcla de magia china y japonesa, que sirve para 'inmovilizar' al enemigo, un hechizo mucho más complejo que los que habían aprendido en los días anteriores; estuvo supervisando sus avances hasta que llego Lien para recordarle que debía partir rumbo a la antigua mansión de los Chen antes de que Snape pensase que no se le daría la tan preciada oportunidad a Malfoy.
"Debo marcharme para entrevistar al Sr. Malfoy, pero Lien los acompañará" dijo Agatha señalando a la recien llegada, "por favor continúen practicando, en caso de que alguno consiga dominar el hechizo pídanle de inmediato a Lien que utilice el 'Guan-yin' en la víctima", añadió antes de despedirse haciendo una reverencia.
"En verdad necesitaremos el 'Guan-yin' si alguno de nosotros logra dominar este hechizo?" preguntó con tono preocupado Ron.
"Me temo que si Ronald, este conjuro es muy poderoso, no solo inmoviliza a la víctima sino que también la consume por dentro" respondió Lien, "Agatha lo creo para defendernos en la 'Batalla de los mil nombres', los seguidores oscuros nos estaban matando y ella tuvo que actuar rápido" concluyó al ver los rostros de los jóvenes.
"Usted tambien estuvo en esa batalla?" preguntó ansiosa Hermione.
"Si" respondió con tristeza, "pero basta de plática, ustedes deben practicar mucho puesto que este hechizo es muy complicado" añadió seriamente.
Agatha ya había salido montada en su querido Shiru, no tardaría mucho en llegar a la antigua mansión de los Chen, justo a tiempo para que Snape no perdiera las esperanzas. Shiru conocía muy bien el camino, había llevado a Morrigan y luego a Agatha infinidad de veces a ese lugar, la casa de la antigua Sra. Mc Dowell conocida en China como Chen Mei Ling. En cuanto el dragón aterrizó en los hermosos jardines que rodean la mansión, uno de los guardias se acerca a la mujer y le avisa que sus invitados se encontraban en la sala principal esperando para verla, por lo cual Agatha ingresó de inmediato en la casa.
"Sr. Malfoy, esepro que no haya tenido que esperarme por mucho tiempo" dijo Agatha en cuanto vió a Draco sentado en uno de los muebles.
"No te preocupes Agatha, practicamente acabamos de llegar" mintió Severus acercándose a la hermosa mujer.
"Snape, usted puede estar presente durante la entrevista si así lo desea, pero debe permanecer callado" respondió la china con total seriedad sin regresar a ver a Severus.
"Como tu prefieras" dijo Severus mientras se sentaba junto a Draco.
"Sr. Malfoy por favor tome esto" dijo Agatha mirando directamente a los ojos de Draco mientras le ofrecía un pequeño frasco, "es veritaserum" añadió ante la duditativa actitud del joven.
"Esta bien" respondió Draco mientras tomaba la poción, francamente no le atraia la idea de estar a merced de alguien pero él sabía que esta era una oportunidad de oro.
"¿Porqué desea la protección del Clan Li?" preguntó Agatha viendo directamente a los ojos grises del joven.
"El Señor Oscuro desea castigarme por no haber cumplido con sus órdenes" empezó Draco, "hasta ahora el profesor Snape ha podido protegerme, pero ya no podrá hacerlo por más tiempo"
"Tiene miedo?" dijo la mujer china, sabiendo la respuesta por la expresión del rosto del joven.
"Mucho, el Señor Oscuro dictaminó que debía ir a una nueva misión, una de la cual seguramente no regresaría" dijo el joven, "mi madre rogó clemencia para mí y él la torturo con ayuda de mi propia tía" añadió llorando.
"Si usted es recibido en la mansión, esta dispuesto a acatar las reglas del Clan Li y vivir en la casa menor?" pregunto seriamente Agatha.
"Claro que estoy dispuesto" respondió Draco, "no estoy listo para morir"
"Porque deseas humillarlo haciéndolo vivir…" empezó a decir Snape pero fue interrumpido por la mujer.
"No deseo humillar al joven Malfoy, pero por el momento no lo puedo recibir en la casa principal" dijo serenamente Agatha, "además habíamos acordado que usted permanecería en silencio" añadio sin quitar la mirada de los ojos de Draco, el cual podía sentir como la mujer china escudriñaba en toda su mente pero no deseaba ni podía detenerla, siempre le había costado mucho trabajo expresar lo que realmente sentía y en este instante todo su sufrimiento sería vital para que le concedan la protección del Clan Li.
"Señorita Li, yo acepto todas sus condiciones" dijo Draco.
"No se adelante Señor Malfoy, aún faltan dos detalles muy importantes" intervino la mujer, "primero, usted no podrá salir de la mansión excepto cuando yo se lo indique y debera aceptar el entrenamiento que le brinde mi hermna Lien" concluyó.
"Entrenamiento?" preguntó casi sin darse cuenta el joven.
"Señor Malfoy, debo ser honesta con usted, si Lord Voldemort sigue aumentando su poder existe la posibilidad de que la mansión caiga y por ende usted deba pelear para salvarse, yo deseo que esté debidamente preparado en caso de que eso ocurra" respondió de inmendiato Agatha.
"Como le había dicho antes, acepto todas sus condiciones" dijo Draco.
"Esta bien, por favor traiga sus cosas" dijo Agatha mientras salía de la mente del joven, "usted y yo iremos a la mansión Li"
En el rostro de Draco se dibujo una sonrisa de pura felicidad, esas palabras le daban una esperanza. Luego de agradecer sinceramente a Agatha, salió de la sala para traer un baul con las pocas pertenencias que su padrino le había permitido llevarse.
"Snape, como justificará la huida del joven Malfoy?" pregunto Agatha en cuanto Draco se marchó.
"Estas preocupada por mi" dijo Severus con una sonrisa.
"No se ilusione Snape" respondió Agatha con tono serio, "pero deseo saber lo que ocurrirá".
"Cuando te cité en el Lago fue porque había encontrado la solución perfecta para proteger a Draco" respondió Severus, "el día anterior había encontrado a un muggle mal herido, era casi idéntico a mi ahijado, sino supiese que es imposible pensaría que era otro hijo de Lucius; en ese momento se me ocurrió todo, tu lo protegerías en la mansión y yo fingiría una emboscada de aurores en su misión"
"Dejaste morir al pobre muchacho" intervino seriamente la mujer.
"En realidad pude hacerlo, pero lo rescaté de los mortífagos, lo escondí en mi casa y lo curé para que no muriese" dijo Severus. "Se que no me crees, pero eso era lo mejor para Draco, ese chico esta como muerto en vida a pesar de todo lo que hice, perdió el ojo derecho y el izquierdo lo cambie de color con magia. El Señor Oscuro piensa que ayer lo mandé a una misión en Escocia que fue un completo desastre, gracias a un pequeño aviso que di al Ministerio, ahí encontraró al joven muggle vestido de mortífago y seguramente hoy publicaran la noticia de que atraparon a Malfoy, puse suficientes pruebas para que concluyan eso. Como está grave lo llevaran a San Mungus y el Señor Oscuro estará complacido con su venganza" concluyó el hombre del cabello grasiento.
"Es imposible que Lord Voldemort crea que usted envió en una misión suicida al joven Malfoy, él sabe que Draco es casi su hijo" dijo Agatha.
"Lo creyó porque descubrió lo que siento por ti y me ordenó que te cuidase a toda costa" respondió Severus acercándose peligrosamente a la china, "tu sabes que eso fue una amenaza, me puso a elegir entre Draco y tu"
"Usted escogió a los dos, o al menos eso parece"dijo Agatha mientras Draco ingresaba a la sala seguido por un baúl.
"Por favor, disculpe la tardanza es que me he quedado admirando al dragón que está afuera" dijo Draco.
"Que bueno que ya haya concido a Shiru" dijo Agatha acercándose a Draco, "él nos llevará a la mansión" añadió mientras le indicaba la salida al joven.
"Hasta luego profesor" dijo Draco, a pesar de haber visto como Snape asesinaba a Dumbledore aún lo apreciaba sinceramente por haberlo protegido todo este tiempo y haber buscado la forma de salvarlo de la ira de aquel-que-no-debe-ser-nombrado.
"Hasta luego Draco" dijo Severus despidiéndose del joven, "Agatha por favor cuidate mucho" añadio a la mujer en tono casi suplicante.
"Snape, yo lucharé hasta mi último aliento" respondió Agatha mientras salía, "puede quedarse hasta la tarde en la mansión" añadió desde la puerta sin regresarlo a ver.
"Lo sé y por eso me preocupo" dijo Severus.
Mientras tanto en el jardin de la antigua mansión de los Chen, el joven Malfoy y Agatha subían al dragon para marcharse. Aparentemente Draco no le tenía miedo a Shiru, pero si mucho respeto, después de todo el joven Slytherin también era un 'dragón'. No volaron por mucho tiempo cuando llegaron al supuesto bosque de bambú que el trio dorado había visto hace más de un mes, Agatha lanzó el hechizo y apareció el majestuoso claro que rodeaba la casa de los Li, en ese instante Agatha le entregó a Draco su invitación con el sello de la Familia y al abrirla apareció frente a sus ojos la famosa mansión Li. El joven Malfoy había recibido una oportunidad para sobrevivir en estos tiempos difíciles.
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Hola, disculpen la tardanza pero han pasado muchas cosas.
Agradezo a Darnox por tomarse la molestia de leer mi fic y escribirme palabras de ánimo.
Deseo dedicar este capítulo a alguien muy importante en mi vida que lamentablemente ya no está con nosotros. Gracias por enseñarme que uno debe luchar hasta el último aliento.