Capítulo 2:

La Estancia del Terror

- ¡Hey, Umbridge! – Dijo Patrick – aquí tenemos un regalo para ti...

Harry palideció, bueno, todos ¿había dicho ese odioso chico "Umbridge"?

- Ven aquí, J.Lo – sonrió Lindsay.

- ¿Qué sucede?

- ¡Mira eso! – los señalaron descaradamente y el rostro de Jane Loret Umbridge, alias J.Lo, cambio.

- ¿Qué me dices? – Pregunto Eleonor – el del fondo es Draco Malfoy.

- ¡Ah! – suspiró - ¡Sí, los conozco a todos!.. ellos también conocieron a fondo, a mi tía favorita... Dolores Jane Umbridge – dijo muy despacio y los chicos hicieron gestas, muecas poco agradables.

- ¡Tu tía era...! – estuvo a punto de protestar Ron.

- ¡Ten cuidado con lo que dices! – se adelantó J.Lo – porque la pobre sigue en San Mungo, con un doloroso tratamiento...

- Se lo merecía – se adelantó George.

- Puede ser – respondió J.Lo con una mirada insinuante – pero por algo pasan las cosas – y dirigió su mirada a Potter

- ¿Qué? – espeto Harry.

- Harry Potter... dichosos los ojos... solo puedo decir que... será un placer tenerlos aquí - y se dio la vuelta alejándose de ahí, junto con Eleonor, Patrick y Lindsay.

- ¿Tu vecina, Malfoy? – pregunto Ernie con temor - ¿Acaso a este colegio acuden hijos de mortios o qué?

- No me gustara estar aquí – gruñó Padma.

- ¿Creen que es muy tarde para salir corriendo? – rugió Anthony.

- Nos comprometimos – murmuró Hermione sin ganas – creo que el único a gusto es Malfoy.

Y todos voltearon a verlo, pero Malfoy, para nada estaba a gusto.

- ¿Qué te pasa Draco? – pregunto Pansy, quien también se había dado cuenta de la situación – aquí te conocen bien.

- Esto es horrible – dijo a la chica entre dientes – la mayoría de mis vecinos están aquí, sus padres, aunque no son mortios, son magos oscuros... todos esperaran que sea mas grande que mi padre...

- ¡Tu eres grande, eres perfecto, eres...! (si...si... es la vida de Pansy, arrastrándose)

- ¡Cállate Pansy! No sabes en que lío estoy metido y luego con ellos – observo a sus compañeros, que ya le enviaban asesinas miradas.

- ¿Oyeron eso?

- A mi me preocupa mas esa chica Umbridge... su sobrina.

- Bueno Harry, si la vaca esa no pudo contigo... mucho menos la antipática guapa y buenísima de su sobrina – agregó Goerge.

- Sí... no tengas miedo...

- Oigan, desde que entre a este lugar, ya tengo ciertos temores...

- Espero que los aspirantes para prefectos y para el quiddicht no sean iguales.

- ¡Hola, hola niños, niñas! – de pronto se acercó una chica muy sonriente, con la túnica ajustada, de cabello largo, lacio y castaño, con flequillo coqueto y unos ojos azules brillantes, con frágil figura.

- ¿Y eso? – pregunto Hannah con cara de fuchi.

- Otra loca – respondió Padma.

- ¿Qué tal? ¿Ustedes son los prefectos? ¡Yo soy Mia Hilton! ¿quién va a enseñar el quiddicht?

- Nosotros – se adelantó George y jalando a Harry.

- ¡Guay, bien, yo soy la capitana del equipo recién formado! – dijo jalando del brazo a George y enseñándole aun más sus dientes perfectos. Y al chico le llegaba al hombro.

- ¿Tú... eres la capitana del equipo?

- Sí... yo, Mia, la chica mas guapa del cole... no saben, no hay mejor partido que yo...

Harry pensó que era una broma, pues para nada tenia el tipo aguerrido de una jugadora de quidditch, todo lo contrario, era tan frágil y delicada, cual muñeca de porcelana.

- ¿Y que posición juegas? – preguntó George entre divertido y asombrado, pensando que quizás era buscadora.

- Guardiana – respondió – y como saben, el equipo lo forman los mejores, o sea, yo no estaría en un equipo perdedor, y bueno, la verdad yo quería que el color del uniforme fuera rosa chillante, pero hay cuatro chicos que se opusieron rotundamente... como si el portar un uniforme rosa los hiciera menos hombres... así que lo dejamos en un verde esmeralda.

- ¿Rosa chillante? – pensaron algunos mientras la chica hablaba y hablaba sin soltar del brazo a George.

- ¡Tú eres Draco Malfoy! – exclamo al verlo, te conozco porque Eleonor tiene una foto tuya de una cena... y Nirvana Tyler tiene un póster de tu padre, Lucius, en el espejo de su celda... es toda una celebridad aquí!

George trato de safarse al oír eso ultimo sin resultado, pues ella lo tenía como una prensa.

Y a Malfoy, escuchar todo eso, no lo hacia muy feliz.

- ¿Cómo puede ser una celebridad un hombre que esta en la cárcel? – pregunto Padma muy molesta.

- Pues eso pregúntenselo a ella, a mi me da lo mismo... ¡Ah, mis golpeadoras estrellas!

Dos chicas venían siguiendo a J.Lo de mala gana, ambas de pelo y ojos negros, podrían parecer hermanas, pero una era mas morena que otra, atléticas, con facciones hermosas, una de cabello lacio con corte al hombro y la otra, con cabello largo a la cintura.

- ¿Qué es esto? – sonrió Mia - ¿reunión de chicas guapas o que?

- En vista de que no hay autoridad, y tú eres su líder... debo decirte que Letizia se encontraba hurgando la oficina de la conserje, y que Maria Mercedes tenia a dos chicos del primer año Alfa, convertidos en patos...

- ¿Cómo? ¿Mis amigas haciendo eso? ¡para nada!

- ¡Si alguna de tus amiguitas vuelve a meterse con algún Alfa, no se la acaba!

- ¡Y si algún amiguito tuyo, se mete con un Beta, tampoco te la acabas!

- ¡Ya cálmense, hay niños y niñas aquí que merecen respeto! – dijo Mia sin soltar a George.

- ¿Qué sucede aquí? – regreso la profesora que se había llevado a Dumbledore,
nada Titi, nada – dijo Mia – solo conversamos.

- ¡Ya conozco su manera de conversar... en verdad ruego a Merlín que el sistema de "Protectores" funcione adecuadamente, porque si no! – gimió la profesora Tisha Timothy, la prima de la profesora McGonagall y al que todas le llamaban Titi.

Se volvió a los alumnos, y aparto a Mia de George.

- Vamos muchachos, a la dirección, Dumbledore termino de hablar con el director y desea verlos.

Los chicos se fueron con Tit sin despedirse, dejando a las chicas en el vestíbulo.

- Uno de ellos era Potter Umbridge... ¿vengaras a tu tía? – preguntó Letizia.

- Claro que si, ahora esta en mis manos y territorio ¿cómo pudo hacer eso a mi tía favorita?

- Me faltaron amarrar a dos alfas – protesto Maria Mercedes.

- Sobre tu cadáver – gruñó J.Lo y la soltó.

- Te vi muy a gusto con el pelirrojo – murmuró J.Lo a Mia.

- Podría ser – respondió la chica y salió sonriendo de la estancia, seguida de Letizia y Maria.

- ¡No creo que sea tu tipo!

- Mmm... veremos... ¿y que me dices de ese tal potter?

- ¿Que hay con el?

- ¿Te desquitaras por lo que le hizo a tu tiita?

- ¡Claro! ¡ Voy a tener a Harry Potter!

- ¿En donde lo vas a tener Picarona? ¿En tu cama?

- En la cama, sillón, silla, mesa, escaleras o en las piedras, pero lo voy a tener...

- ¡Una venganza sexual... me encanta, me encanta!

- ¡Ay Mia, no seas tan explícita