Hola aquí estoy de nuevo con otra nueva historia. En verdad es una idea que se me ocurrió hace mucho tiempo, pero no me atreví a publicar lo que escribí por inseguridad. Pero he decidido probar, dicen que él que no arriesga no gana, he revisado el capitulo que tenia escrito, y aquí está, espero que esta historia sea de vuestro agrado. Está basado en 'Memorias de una Geisha' de Arthur Golden, pero evidentemente tiene parte de creación propia, que proviene conocimiento (aunque escaso) que poseo sobre el tema.

Que disfrutéis.


Terminología:

Ane: Hemana mayor (propia)

Danna: amante y benefactor de una Geisha

Futon: Cama japonesa (Aunque yo diría saco de dormir)

Geisha/Geiko: Son consideras Artistas y Artesanas, dominan el arte en múltiples campos.

Geta: Sandalias japonesas

Gion: En este lugar se concentraban un gran número de okiyas. Digamos que es algo así como el barrio de las Geishas

Kimono: Traje típico japonés.

Maiko: Un geisha del aprendiz

Mizuage: Ceremonia en la cual una Meiko deja de ser virgen. El Mizuague es necesario para convertirse en una Geiko. (El tema del mizuage no es como Arthur lo relata en su libro, o como lo tratan en la película. Tiene que ver más con el Danna que con la venta)

Obi: Se trata de esa 'faja' que ata el Kimono.

Okiya: Casa de Geishas.

Okāchan: Mamá

Oneesan: Hermana mayor y Geisha que instruye y se encarga de una Meiko

Otōto: hermano pequeño

Otōchan: Papá

Sake: Bebida alcoholica de arroz fermentado.

Shamisen: instrumento japonés de cuerda

Tabi : Calcetines

Yakuta: son los Kimonos de estar por casa, están hechos de algodón mientras los Kimonos son de seda.


Cuando hablamos del Imperio del sol naciente, es decir Japón se nos vienen muchas cosas a la cabeza. Anime, mangas, Sushi, tecnología, Samuráis y Geishas.

Con respecto a estas ultimas, se tiene un concepto muy equivocado de ellas. Cuando decimos la palabra Geisha a todos nos viene a la cabeza 'Así las prostitutas de la cara blanca', se tiene el pensamiento de que son prostitutas de alto estandin cuando en realidad no es así. Las prostitutas venden su cuerpo a varios hombres por dinero, mientras que las Geishas solo se acuestan con su Danna, aunque si es verdad que la mantienen. Pero eso es algo que también pasa hoy en día en occidente. El mundo de las Geishas es un misterio debido al secretismo que ellas mismas crean, pero algunas geishas nos han permitido gracias a sus relatos que nosotros los de occidente, conozcamos un poco mejor ese fabuloso mundo de las artistas en kimono. Una de ellas es Usagi Tsukino, mejor dicho Usagi Chiba, una de las Geishas más importantes y famosas de Japón. Su historia comienza el día que sus padres la vendieron a una Okiya.


La familia Tsukino se trataba de una familia de clase baja. Kenji era el cabeza de familia, se dedicaba a la pesca. Pasaba el día en el mar intentado conseguir el mayor numero de peces para así poder dar de comer a su familia. Ikuko, era una flamante y leal esposa, ella se encargaba de la casa y de sus dos hijos Usagi y Shingo, de 10 y 5 años de edad. Kenji e Ikuko amaban mucho a sus hijos, eran lo más importante para ellos, y solo querían que tuvieran lo mejor. Pero por desgracia no era así, los Tsukinos tenían grandes problemas económicos, algunas veces apenas tenían que comer. Una noche cuando sus dos hijos se habían ido a dormir, Kenji e Ikuko tomaron la decisión más difíciles de sus vidas. Venderían a su hija a una Okiya para que se convirtiera en Geisha y de ese modo no le faltara la comida. Y con el dinero que les dieran por ella podrían solucionar parte de su deuda.

Una mañana el señor Tsukino no fue a trabajar decidió quedarse en casa, algo que sorprendió a los niños. Pero su sorpresa fue aun mayor cuando este les contó que no iban a ir al colegio, sino que iban a ir a comer al campo, y disfrutar de un día en familia. La verdadera razón es que hoy Usagi dejaría de formar parte de la familia para convertirse en una Meiko. Y querían que por lo menos sus últimos momentos en familia fueran inolvidables. Ambos niños se lo pasaron de lo lindo y sus padres gozaban de verlos disfrutar, aunque no podían dejar de sentirse un poco tristes por la partida de su pequeña.

Al llegar a casa, la señora Tsukino fue a preparar las cosas para el viaje. No quisieron decir nada, hasta que no fuera el momento de partir. Cuando ya estuvo todo listo, Kenji metió las cosas en el carro. Y llegó el momento de despedirse.

"Usagi hija, tengo que hacer un viaje y quiero que me acompañes" dijó el hombre "Tú madre ya ha preparado todo lo que necesitas. Así que despídete de tu madre y de tu hermano"

"Okachan, obachan me ha dicho que me despida" dijo la niña a su madre

"Oh Usagi-chan te quiero mucho, recuérdalo por favor" sollozaba Ikuko a su hija mientras la abrazaba.

"Está bien Okachan" dijó la niña no entendiendo porque lloraba su madre.

"Shingo dile adiós a Usagi"dijo la madre

"Adiós oneesan" gimoteo Shingo.

"Usagi-chan tenemos que irnos, es tarde" dijo Kenji

"Adiós" Usagi se despidió y subió al carro con su padre.

El señor Tsukino tomó rumbo a la estación donde un miembro de la Okiya recogería a la niña y la llevaría a Gion y se convertiría en una fantástica Geisha. Aunque había que reconocer que tenía Kyoto. Allí se encontraba una mujer mayor, con la cual el señor Tsukino ya había conversado.

"¿Esta es la niña?" pregunto la mujer

"Así es"

"Su pelo es rubio, y sus ojos azules. ¿Son naturales?"

"Sí señora es por parte de la familia de mi mujer"

"Aquí tiene su dinero" Le dio el dinero al hombre y cogió a la niña por el brazo llevándola dentro del tren. E impidiendo que la niña se despidiera de su padre. Ella no entendía nada, porque esa señora le dio dinero a su padre y luego se la llevo. La niña no pudo hacer otra cosa que llorar. No sabía que iba a ser de ella, pero lo que si sabia era que no volvería a ver a su familia.


Dos horas más adelante, llegaron a Gion, tomaron un 'Taxi' (Carro tirado por un hombre) y llegaron a la okiya.

"Entra. Okasan quiere verte. No hables a no ser que te pregunte" dijo la mujer mientras la conducía a una de las salas de la casa.

"Okasan, siento interrumpir pero la niña está aquí"

"Hazla pasar"

"Por fin carne fresca"

"Beryl, tendrías que ser mucho más cauta con tus comentarios recuerda que eres una Geisha." Le recrimino la okasan.

Usagi entro a la salita y se quedo de pie como si de una estatua se tratase.

"Es rubia"

"Su padre dijo que es de familia okasan"

"Veo¿Cuántos años tienes?"

"10" contesto insegura la niña.

"Tenemos a un conejito asustado" bromeo Beryl.

"¿Cómo te llamas?"

"Usagi"

"Vaya, mira tu por donde hacerte"

"Beryl haz el favor de callarte" este comentario de Okachan hizo enfadar mucho a la Geisha. "Acércate niña"

Ella hizo lo que habían pedido, estaba completamente asustada y no quería hacer nada que pudiera enfadar a la mujer. Al acercarse lo suficiente la mujer le levanto la barbilla para mirarle los ojos.

"Son azules como el cielo. Pero puedo ver mucho agua en ellos"

"Pero Okasan el agua es buena, sobre todo para calmar el fuego" este comentario iba por la Geisha que se encontraba en la sala.

"Es posible. Más vale que valgas lo que he pagado por ti."

Beryl se aproximo a la niña, y la examino con detenimiento "Huele a pecado"

"Lávala y dale ropa nueva. En una casa de Geishas no podemos permitir tener a gente con estas pintas"

Tras quitarle la mugre, y ponerle un yukata Usagi dejo de ser Usagi para ser una candidata a Meiko. Pero mientras tanto se tenía que encargar de mantener la Okiya limpia. La llevaron a su nueva habitación. Allí se encontraba otra niña, más o menos de su edad.

"Hola tu debes de ser la nueva. Yo soy Narumi (Molly). ¿Cómo te llamas?"

"Usagi" Sollozo la niña.

"Podes llorar, yo lo hice el primer día que llegue." Confeso la muchacha. Y Usagi no pudo reprimir las lágrimas. "No es tan malo como parece, créeme. Es mejor ser Geisha que una prostituta"

"No veo la diferencia, ninguna de las dos cosas es lo que yo quiero. Yo quiero estar con mi familia"

"Lo sé, y yo, pero eso ya no es una opción. Ahora nosotras somos tu familia, podemos ser amigas"

"Me gustaría" dijo Usagi con una sonrisa

"Okasan me dijo que era madera. ¿Qué es lo que te ha dicho a ti?"

"Agua, dice que hay mucho agua en mis ojos"

"Son azules, me gustan tus ojo y tu pelo. Vas a ser la Geisha más exótica y famosa de todo Japón." La rubia no pudo hacer otra cosa que sonreír por la excitación de su nueva amiga.

"No creo que todos estén de acuerdo contigo"

"Sí lo dices por Beryl, pasa de ella, es una bruja."


A la mañana siguiente, Narumi le enseño como tenía que hacer las tareas, le explico como funcionaban las cosas, donde ir a comprar, en definitiva todo lo que era útil para su nuevo trabajo.