Nadie se aprovecha de mí… ¡Nadie!
El rey de Vegeta no esperó a Gokú. Al salir del edifico central de los Droids voló casi disparado hacia el desierto de Beagle. Su rostro se había transformado, sus ojos casi despedían fuego por la ira que lo consumía desde dentro, su expresión se tronó tosca, sus puños cerrados con fuerza, los brazos extendidos, casi partía los negros cielos.
Iba en busca de aquel que aprovechándose de su situación lo había utilizado vilmente, se había burlado de él sin importarle su estatus ni la fama que el rey de Vegeta cargaba a cuestas desde su juventud, casi ya inscrita en la frente.
En Base se escucho un potente estruendo, lastimaba los oídos y hacia zumbar la cabeza, al alzar la mirada varios niños vieron venir a un rey furioso; pero aun así majestuoso, que a pesar no ser de gran estatura su colérica expresión y su traje negro infundían terror a los infantes que se alejaban como si presintieran lo que estaba a punto de ocurrir.
Vegeta entró a la mansión casi en ruinas llamada Base, N. 17 se hallaba detrás de varios soldados, entre ellos el joven Rookie, quien por accidente fuera su anfitrión, esperaba la llegada de los alienígenas con buenas noticias, de todos era el más sonriente, al fin viviría de una manera digna, ya no viviría a escondidas, ya no viviría con temor, lo que Rookie no sabía era que en efecto ya no viviría. Vegeta entró sin saludar, así como era su manera, su expresión iracunda no se había inmutado, N. 17 le sonrió cínicamente como si buscara provocarlo ¿ya sabría que Vegeta ya sabía? ¿Lo estaría retando? N. 17 lo pagaría con su vida y de ser necesario con el planeta que tanto deseaba.
El rey se detuvo, la cínica sonrisa de la creación de los droids lo irritaba cada vez más y más. Ya era suficiente, lo iba a destruir, sería la pruebe a de que nadie debía de burlarse del rey Vegeta, esta sería la primera vez y la ultima; en ese momento era en lo único en lo que pensaba.
Avanzó hacia 17 y se detuvo a unos cuantos metros de él, el androide retrocedió unos pasos sin que los soldados con los cuales se custodiaba se dieran cuenta, solo se escucho un ligero crujido del piso de madera.
-¿Creíste que te sería tan fácil?- la voz de Vegeta dejaba salir la rabia que tenía acumulada, pero no era suficiente
-¿burlarme de ti?- preguntó N. 17 fingiendo su extrañeza
-Si sabandija, burlarte…ya se todo sobre ti…proyecto N. 17
-No creo que sepas todo sobre mi como dices…si fuera de esa manera, no estarías aquí hablándome tan altaneramente- los jóvenes que estaban en el intermedio de la conversación no podían entender absolutamente nada de lo que se decían, se explicaban que los droids le habían hecho algo a los alienígenas y ahora estaban en su contra
-Al utilizarme cavaste tu tumba
-Estos soldados están delante de mí
-No me interesa a quines tengas en frente, esa gente a mi no me importa, es más disfrutó deshaciéndome de gente sin importancia- Vegeta extendió la mano derecha dejando salir de ella una esfera de energía, lo ultimo que esos 7 soldados vieron fue la energía que los cubrió por completo hasta el de matarlos, el androide salió sin un rasguño, para él fue claro que esa alarde de poder fue para demostrarle que al rey no le interesaban en lo más mínimo las vidas que tuvieran que sacrificarse para eliminarlo
-Corrían los rumores- dijo el androide- de que tu esposa terrícola te había cambiado
-¡Mentiras, yo sigo siendo el mismo!...ahora voy a matarte
-Veo que estas decidido a eliminarme…tu poder es devastador, pero aun no conoces el mío- y el androide se quito la larga chaqueta negra
-¡Tú no me amenazas, solo eres un muñeco de metal!
-¿Tú crees?- en pose de pelea ambos se miraban, el rey con odio, el androide con mirada burlona y cínica, fue el primero en abalanzarse sus manos se movían con gran velocidad lazando puñetazos contra el cuerpo del rey que los evadía con la misma velocidad de tal manera que al ojo no entrenado le pasarían desapercibidos Vegeta solo podía defenderse N. 17 era un excelente guerrero. Era una patada tras un golpe tras movimientos inesperados Vegeta aun se defendía y avanzaba hacia atrás evadiendo golpe tras golpe el rey ya se estaba hartando tomó al androide del brazo y lo arrojo fuertemente destruyendo la frágil pared de la mansión N. 17 se recuperó con rapidez y se levó mirando a su enemigo mientras que Vegeta hacia lo mismo por unos instantes quedaron estáticos el rey alzó los brazos toda su fuerza se encontraba ahí el androide se preparó para recibir el golpe pero el rey lo sorprendió cambiando aquel ataque por una patada de la cual N. 17 se defendió acertadamente el furioso rey no se quedo atrás le lanzó un certero golpe mandándolo al piso el androide ojos azules se levantó como si no hubiera recibido ningún daño inadvertidamente 2 soldados que ignoraban lo que pasaba se acercaron a N. 17 Vegeta extendió la mano izquierda y sin miramientos lanzó una potente ráfaga de energía que llegó a sacudirle el cabello y la ropa por la magnitud, N. 17 saltó y se salvó, los 2 soldados murieron al instante, calcinándose hasta los huesos, N. 17 reapareció tras el rey quien volteó para mirarlo
-Eres veloz- le dijo el rey
-Y tu solo estas jugando…pensé que venías a matarme-
-A pesar de todo quiero divertirme
-Bueno yo no he peleado como se debe
-¿Qué demonios esperas?
-Será como tú quieras- el androide se lanzó contra el rey golpeando su cabeza contra la de él con tal fuerza como si intentara arrancársela con el golpe Vegeta se tambaleó y sintió un liquido tibio correr por su frente y luego su ojo izquierdo se cubrió de sangre el rey ya había tenido suficiente mientras tanto N. 17 con toda su fuerza lo golpeó en el estomago le hizo escupir algo parecido a la sangre pero nada más Vegeta le tomo de la cabeza y aprovechando que el androide aun tenía el puño en su estomago le devolvió el golpe con la rodilla también en el estomago N. 17 se inclino llevando ambas manos ahí donde había recibido el golpe aunque su cara no reflejaba ningún dolor Vegeta le tiro un puñetazo contra su rostro y volvió a mandar a N. 17 contra una pared destruyéndola por completo Base aun seguía en pie únicamente por las columnas y los cimientos N. 17 se levantó herido más no adolorido
-Vaya que eres un fastidio- dijo el androide mientras caminaba entre los escombros- así que el rey Vegeta el gran guerrero- y comenzó a aplaudir- mereces un reconocimiento
-No me interesa… ¡vamos pelea!
-Ah entonces quieres continuar
-No vine aquí para conversar
-Si ya recuerdo, viniste a lavar tu honor- Vegeta se abalanzó contra N. 17 le golpeo directo en la cara parecía que lo mandaría al suelo más súbitamente el androide se detuvo en el aire para lanzarle lo que parecía una patada segura y luego cambio juntó ambas manos y le pegó a su contrincante mandándolo contra el piso Vegeta se levantó y nuevamente fue azotado contra el piso por una patada de N. 17 desde el suelo el rey le envió una ráfaga de energía que cubrió al androide ahí en el aire después de todo el destello solo vio a un N. 17 herido mirándolo con odio las cosas se le salían de las manos y bajo hasta donde se encontraba el rey quedando frente a frente
-Me estoy cansando de ti
-Entonces te eliminare de una vez para evitarte la molestia- respondió el orgulloso rey era un golpe tras golpe patada tras patada N. 17 se defendía del furioso soberano escudándose con los brazos cruzados frente a la cara este ya quería terminar con una patada le rompió la rotula dejando inútil la pierna derecha pero eso no fue suficiente N. 17 arremetió contra su contrincante enfocando su fuerza en el puño el cual Vegeta tomó entre sus manos y tras dos vueltas lo aporreó contra el piso dejando una grieta y el brazo roto del androide que cayo boca abajo quiso incorporarse pero Vegeta le golpeó en la nuca con su puño izquierdo desvaneciéndolo y con una esfera brillante de energía lo desintegro por completo
-¿Lo viste todo…Kakarotto?- preguntó Vegeta con una sonrisa de satisfacción
-Si Vegeta
-¿Sorprendido?- tenía una mirada llena de orgullo por su triunfo, alardeando de su poder ante el descendiente de campesinos de aquel planeta, demostrándole de lo que era capaz
-Si, pero más por lo que le hiciste a esos muchachos- Vegeta estaba visiblemente molesto, Gokú al parecer no había tomado en cuenta sus poderes si no que le interesaba una trivialidad
-¿Qué importancia tienen? Son pobres diablos nada más
-Solo eran chicos no tenias porque matarlos
-¡Tú no me dices que hacer!- vociferó el rey de Vegeta escupió y empujándolo con su cuerpo el rey de Kakarotto vio como Vegeta se marchaba al desierto. Gokú lo miraba con cierto enojo, era un asesino solo una asesino.