XXV
-¿Qué raro planeta?- Tenia este un cielo azul profundo y en el centro 3 bandas que giraban alrededor de un circulo de nubes, su paso era sumamente lento y espectral. La tierra era cubierta por un manto de pequeñas flores, todas ellas de colores, más allá una pequeña cascada, hacia un lado de ella una más aun más grande, y del otro lado de ella, una todavía mas grande y majestuosa, cuyas agua corrían revueltas a precipitarse contra el pequeño lago que se formaba al caer. Un río que provenía de la dirección de las cascadas surcaba la tierra con fuerte golpeteo, casi embravecido, a los alrededores le circulaban árboles frondosos, con lianas que colgaban de sus ramas, que se unían a otros árboles como si estuvieran conectados. Los príncipes se habían maravillado ante tal escena, hasta el mismo Cell lo había hecho, se detuvieron a presenciar aquel extraordinario y singular paisaje, era algo que sin duda no verían en otro lugar. En cuestión de segundos, arcoiris consecutivos se formaron por encima de la última cascada, aquello fue un espectáculo sublime para los cuatro. Ni en Ingolstad, ni en Vegeta y ni siquiera en Kakarotto habían visto algo semejante. Caminaron los 4 tratando de encontrar a alguien que los guiara por el planeta, Trunks saco el radar y al accionarlo, vio entusiasmado, que la esfera estaba muy cerca de ellos y no solo eso, se encontraba estática, no habría contratiempos, era cuestión de seguirla y eso era todo, se lo dijo a los otros y tras aquello, cambiaron su rumbo hacia la derecha para buscar la esfera del dragón.
Se internaron entre los árboles, a cada paso sentían como si entraran a un mundo extraño, escuchaban un bajo murmullo que parecía provenir desde los árboles. Goten no reparó en ello, Gohan se lo atribuyó a algún tipo de ave o animal, ya que la lógica y la razón dictan que los árboles no hablan, pero Trunks y Cell si se tomaron en cuenta aquel murmullo como de gentío, aunque bien sabían que los árboles no podían hablar, solo a aquellos se lo atribuían, ya que no buscaban más razón para el creciente cuchicheo. A cada paso en aquel verde pasto, se incrementaba el murmullo, lo hacían de tal forma, que hasta Gohan ya no le parecía que aquello proviniera de animales, poniendo más atención en su oído, comenzaba a jurar que los sonidos los hacían los mismos árboles ¿Qué era aquello¿Qué pasaba? No sabían nada, no escuchaban nada más que un cuchicheo creciente, algo estaba a punto de suceder era más que evidente. Goten comenzó a sudar frió.
Repentinamente, como si fueran sacudidas por una fuerte ventisca, las ramas comenzaron a moverse, luego más rápido y luego aun más agitadas. Los cuatro se detuvieron inmediatamente, ya era evidente que algo estaba pasando, las ramas se seguían moviendo hasta tocar el suelo. A Trunks le pareció ver unas hendiduras en el tronco de los árboles, las mismas que notó Cell y que juraba que lo miraban, Otra hendidura que vio Gohan y que Goten estaba seguro que se movía, las ramas parecían haberse vuelto locas.
-¿Quiénes…?- ya la misma pregunta se repitió por cerca de 40 veces o más en corto tiempo-ustedes- eran aquellas voces espectrales, de ultratumba, graves y con mala dicción.
-¿Qué es lo que pasa?- preguntó Goten estremecido
-Son ustedes- de nuevo resonaron las voces al unísono
-¿Nosotros¿Qué quieren con nosotros¿Por qué no salen? Cobardes- Vocifero Cell de mala manera más guiado por su nerviosismo que por cualquier otra cosa
-¿Quiénes son ustedes?- preguntaron de nuevo las voces al unísono, y en ese momento Gohan se dio cuenta que las hendiduras, de hecho, se movían, que dos de ellas se abrían y dejaban ver unos ojos pardos y la tercera grieta se habría como una boca.
-Somos- contesto Trunks- personas de otros mundos, venimos aquí a buscar una esfera del dragón que esta por estos lados
-Una esfera- dijo repentinamente una voz, menos tétrica y más tranquila que las otras, que hizo que los otros árboles calmaran las ramas y cesaran la voz- yo se de la esfera que buscan- Un árbol caminaba hacia ellos, moviendo sus raíces poco a poco hasta que finalmente llego hasta los viajantes- Boo la tiene- se había parado justo frente a Goten, quien lo miraba boquiabierto
-Niño- le dijo Cell al príncipe de Kakarotto- ya cierra la boca, se te puede meter una mosca
-Boo la tiene- reafirmo el árbol
-¿y quién o qué es Boo?- interrogó Gohan a este inusual informante
-Pues Boo- contestó aquél- es el hermano de su ilustrísima Majin Boo- Trunks de nuevo miro el radar y no dio crédito a lo que vio, la esfera se había dado a la fuga, desapareciendo por completo, el príncipe de Vegeta tuvo que ampliar el área de búsqueda en el radar para encontrarla- vaya, Boo se ha marchado de aquí
-No importa- dijo Cell- Vamos a seguirlo volando y acabaremos con ese miserable
-Es mejor- sugirió el fuerte y viejo árbol- que vayan a ver a su ilustrísima, Boo es muy peligroso
-Tal vez para ustedes, pero yo seguramente puedo acabarlo con un solo golpe, no ha de ser la gran cosa- Reafirmo Cell su confianza en si mismo, también en ese momento se percató que el príncipe Goten estaba más callado de lo normal
-No, no, no- dijo el árbol agitando violentamente las ramas, vayan por su ilustrísima, nadie lo conoce como él
-Yo creo que debemos hacerle caso y ver a ese sujeto-dijo Gohan
-Es su ilustrísima- corrigió el árbol- su ilustrísima
-Si, a su ilustrísima- prosiguió el heredero de Kakarotto- es mejor saber que tan fuerte es ese sujeto
-Otra vez el líder- protesto el guerrero de Ingolstad, miraba a Gohan con desprecio, preguntándose si valía la pena seguir al lado de los principitos estúpidos ¿Quiénes se creían para darle ordenes?- si solo es un principito, que no sabe nada- Trunks también miro con recelo a Cell y acercándose a su oído le dijo "ya basta", aquello enfureció aun más al guerrero, pero no hizo nada contra ninguno de ellos, sentía que no debía hacerlo
-¿En donde se puede ver a su ilustrísima?- Preguntó el príncipe de Vegeta
-Por ese camino ¿Lo ven?- Señalo el árbol con su frondosa rama, un caminito desierto de vegetación
-Si- respondieron todos al unísono, a excepción de Goten que aun estaba pasmado y seguía mirando al árbol
-Pues por ahí no es
-……
-¡Ah¡Qué bonito Chiste!- Fueron estas las primeras palabras del príncipe Goten después de unos largos minutos, unas palabras sarcásticas que le valieron la mirada fría del árbol
-¡Ya cálmate Goten!- le regaño su hermano mayor, desesperado
-Como decía- prosiguió el árbol disgustado- ese camino no es, es el otro- dijo al mismo tiempo que señalaba un camino rodeado de pasto custodiado por árboles cuyas hojas y ramas se entrelazaban para formar un pasadizo que dejaba pasar unos tenues rayos de sol.
-¿Y esos también se mueven?- preguntó Goten olvidándose de su primera impresión del árbol parlante
-No- contestó el árbol- en lo absoluto, solo nosotros nos movemos, somos guardianes del bosque Esras que conduce a la ciudad de Boo donde habita su ilustrísima.
Tierra .:791:.
El terrícola, el único de esta raza que viajaba en aquel Cadillac, estaba demasiado nervioso, llevando a cabo todo aquello que le fue encargado. Casi por reflejo, a pesar de que manejaba, saco de la bolsa de su saco un cigarro y lo predio con el encendedor del auto, al aspirar aquel humo del tabaco y la nicotina se sintió un poco más tranquilo. Pero aquella acción no le había agradado al rey de Vegeta, esa era una prueba más de que los terrícolas eran viciosos, cada uno a su propio estilo, pero siempre resguardándose en algo para no sentir temor, cobardes, siempre tratando huir de sus miedos. Gokú al sentir aquel humo exhalado de la boca de Rayerknight, comenzó a toser estrepitosamente, le lastimaba la garganta, sentía como si por ella pasaran cientos de pequeños vidrios, miro de reojo al terrícola para ver si daba señas de apagarlo, pero este no se inmuto ante la repentina tos de su acompañante, aun más, seguia exhalando más humo.
-¡Apaga esa maldita cosa de una vez!- Le ordeno el rey Vegeta
-¿Qué dijo?
-Me escuchaste bien terrícola…apaga esa cosa ahora
-Usted no es nadie para ordenarme, no tengo obligación de obedecerle, es mi auto, puedo hacer en él lo que yo quiera y usted no olvide que no es más que un invitado de este planeta
-¿Quién te crees tu para hablarme así?
-Comienza a cansarme- contestó Rayerknight quitándose sus lentes oscuros
-Estas buscando que te mate y yo no tengo remordimientos para hacerlo
-Ya lo creo que no- replicó el terrestre de manera seria
-No sigas con esto insecto, porque te juro que te vas a arrepentir, te daré una muerta lenta y dolorosa- y en ese momento se fijo que el terrestre lo venia mirando por el espejo retrovisor del auto, el Creador sabía desde hacia cuanto tiempo-¿Qué Demonios me estas viendo!
-Pensaba…-la mirada de Rayerknight reflejaba odio y desprecio hacia el soberano, fue de lo que se dieron cuenta Ten Shin Han y Gokú, pero no dijeron nada, solo querían ver en que culminaba aquel dialogo que se había entablado entre ambos- ya me estoy cansado de tratar con usted
-¡Sabandija¡Ganas no me faltan de matarte, si fuera por mí lo haría ahora mismo!
-¿Qué lo detiene?- preguntó de manera altanera el terrícola, aun mirando desde el retrovisor- ¡Míreme!- Aquello ya había demasiado lejos, un ser inferior gritándole de esa manera…no… aquel merecía morir ahí mismo, tenía el radar para buscar la esfera, tenía que enseñarle a aquel inepto con quien estaba tratando
-Te lo has…has…- Vegeta comenzó a ver las cosas borrosas, sentía que el cansancio repentinamente se había apoderado de él, trató de al zar su mano para sacudir el hombro del terrícola, sabía que de algún modo, él estaba detrás de eso
-¡Míreme!- escucho de nuevo, era la voz del terrícola, enfoco los ojos grisáceos de este en el retrovisor, ni siquiera sabia el porque lo hacía y en ese instante perdió la conciencia ante la sorpresa de Ten Shin Han y Gokú.
