Hola, personas que leen mi fic! Mil gracias por leerlo y por dejarme sus reviews! Ya saben que los reviews sirven para yo mejorar como escritora, además de permitirme practicar ortografía y gramática.
Les aviso que este es un capítulo extremadamente sentimental, así que agarren su caja de pañuelos y ténganlos cerca para poder usarlos!
DISCLAIMER: Harry Potter y todos los personajes contenidos en esta historia, salvo Lea, son propiedad de J.K. Rowling. Lea fue producto de mi imaginación.
Harry Potter y el Retrato de la Puerta
Capítulo IV
"Tu pasado"
"hablando"
/pensando/
(Aclaraciones)
(N/A Notas del autor)
Después de que Malfoy se comportara raro, Draco no los había molestado más; y su amistad había mejorado (la de Lea, Harry, Ron y Hermione).
Ahora no sólo Hermione iba con Lea en sus ratos libres, sino que también Harry y Ron.
Platicaban de lo que se les ocurría. Y un día Hermione ocasionalmente:
"Oigan… ¿qué les parecería otra fiesta en Hogwarts?"
"¡Ni me lo recuerdes! La vez pasada fue terrible" dice Harry.
"Si, realmente un horror," completa Ron. "Las gemelas Patil deben de haberse enojado mucho…"
"¿Qué sucedió?" pregunta Lea curiosa.
Los chicos entonces narraron lo pasado en la última fiesta.
"¡No puedo creer que hayan sido tan desconsiderados!" dice Lea.
"Yo pensé lo mismo," completa Hermione. "Bueno, pero ¿qué pensarían si la fiesta no fuera precisamente de Halloween?"
"¿Cómo?" dicen a coro Harry y Ron.
Lea permanece callada debido a que no conoce las costumbres de Hogwarts.
"Sí, es que quiero hacer una fiesta para mi cumpleaños. Mamá y papá ya me dieron permiso, sólo falta pedirle a Dumbledore que me deje usar el Gran Comedor."
"¡Qué padre! ¿Puedo ir?" pregunta Lea a Hermione.
"Sólo que es de parejas," contesta ella.
"Oh… ya me las arreglaré."
"¿No podías hacerlo individuales?" pregunta Harry.
"Lo que pasa es que nunca había podido hacer nada y quería que fuera perfecta, que no hubiera personas solas y aburridas."
"Yo nunca pude hacer nada," comenta Lea de repente.
"¿Por qué? ¿Qué edad tienes?" pregunta Hermione.
"Cumplí quince el 22 de marzo pero no sé, nunca he podido hacer nada y ahora…"
"¿Quince?" preguntan sorprendidos los chicos.
"Sí, ¿me creían de 80 o qué?" dice Lea riendo.
"No, no sabíamos," dice rápidamente Hermione.
"Es que, como la Dama Gorda tenía más de 500…" trata de excusarse Ron.
"Pues," dice Lea, "ya ven, soy hasta más chica que ustedes."
"¿Qué no deberías ir a la escuela?" pregunta Ron.
"¡Ay, Ron!" le dice Hermione en voz baja dándole un codazo.
"Es cierto," dice Harry sin percatarse del codazo que Hermione le dio a Ron, "¿qué pasó?"
"¡Chicos!" dice Hermione desesperada. "¿No pueden ser más imprudentes?"
"No, no importa," contesta Lea, "algún día debía contarlo.
Todo esto empieza cuando Voldemort comenzó a reunir seguidores. Mis padres conocían a Tom desde pequeños en la escuela y siempre fueron buenos amigos, pero cuando él les comentó su plan, ellos se rehusaron.
No hizo nada por mucho tiempo pues creo que lograron tener una buena amistad, pero el año pasado mandó mortífagos para matar a mi familia. Yo estaba en un campamento de verano en ese entonces. Antes del final del campamento me mandaron llamar y me dijeron que debía irme lo más rápido posible.
Yo estaba muy aturdida, no sabía que podía haber pasado y mucho menos que no volvería a ver a mis padres…" En ese momento una lágrima rodó por la mejilla de Lea.
"Y pensar que lo que me importaba era que no hice una actividad que desde el principio quería…" La lágrima la secó Lea con una manga.
"Aquí llegué con miles de preguntas, que Dumbledore me contestó una por una muy pacientemente. Dumbledore me dijo que, antes de mis padres morir, le pidieron a alguien que mandara una carta a él, para que me protegiera.
La única forma de poder mantenerme con vida era convertirme en un retrato y quedarme en el castillo. Mis hermanos murieron pues estaban junto a mis padres. Voldemort me cree muerta, porque el campamento fue atacado y quemaron las cabañas. Dejaron miles de padres sin hijos y sin poder siquiera enterrarlos pues el fuego desfiguró las facciones y no se distinguía quien había muerto y quien se había salvado."
Cuando el retrato terminó, se sostuvo un silencio incomodísimo. Nadie sabía que decir o hacer para consolar a Lea. Estaban también presentes Ginny y Neville que quisieron entra a la torre y fueron callados por Harry para que los demás pudieran escuchar.
Todo era silencio, si alguien hubiera salido en ese momento y visto la escena quedaría primero con cara de 'what'? Y después se le contagiaría la tristeza.
La cara de Hermione expresaba una inmensa tristeza al imaginarse que haría sin sus padres; la de Harry furia mezclada con melancolía debido que había otra persona cercana que había perdido a sus padres por culpa de Voldemort; la de Ron entendimiento pensando en lo terrible que debe ser; Ginny expresaba un enorme sentido de comprensión que su carácter le ayudada a demostrar; y Neville estaba prácticamente paralizado con la historia tan triste de la vida del retrato.
Lea estaba sentada en su silla con la mirada perdida en el suelo. Sus ojos estaban acuosos y sus mejillas mojadas notándose la diferencia entre piel seca y por donde habían pasado las lágrimas. Al lado de sus piernas, pues no ocupaba por completo la silla, se encontraban sus manos sosteniendo su espalda que estaba inclinada hacia delante.
A veces lo único que puede hacer para confortar a una persona si no tienes palabras es darle un fuerte abrazo cariñoso, pero debido al estado de la persona era imposible.
Lea reaccionó un momento después: "Ya no pierdan su tiempo con mis tonterías y vuelvan a sus deberes." Dijo mientras se secaba los ojos y las mejillas y se paraba para abrir la puerta.
Nadie supo más que hacer que trepar por el hoyo de la puerta ya abierta.
--------------------------------------------------------------------------------------------------Gracias por los reviews!
SkuldPotter
Feri-san
B-bye!
HappyFaceQueen
