Julio – Agosto 1812
Hacia fines de julio de 1812, Mary tuvo su primera y única hija, años más tarde tendría un varon. La niña nació muy saludable y por suerte Mary se recuperó en poco tiempo. Elizabeth pudo estar con ella los últimos días antes que naciera la niña y se quedó casi una semana después que nació. Tuvo que volver a Londres porque en la segunda semana de agosto era su boda.
A la hora estipulada, Elizabeth entró a la iglesia del brazo de su tío. Lord Sebastian la miraba caminar por el pasillo totalmente embelesado. Llevaba un vestido muy bonito de color marfil bordado con hilos de plata, encajes, y perlas entrelazadas. Tenía además una bonita corona con perlas y brillantes en su cabello y un ramo de flores de estación en la mano.
A la hora de decir los votos, Elizabeth no pudo evitar derramar algunas lágrimas, y a Lord Sebastian por la emoción se le quebró la voz en más de una ocasión. Las aproximadamente cien personas que asistieron a la iglesia y posteriormente al suculento desayuno de bodas en casa de Lord Frederick, notaron claramente que la pareja estaba muy enamorada.
Pasaron la noche de bodas en Londres, y tres días más tarde salieron a la Región de los Lagos y posteriormente a Escocia.
Un mes más tarde, Darcy se casó con Lady Jane y se fueron enseguida a vivir a Pemberley.
1813
En de setiembre de 1813, los Darcy recibieron una invitación para la boda de Bingley con la Srta. Goldwin, pero como Lady Jane no quería asociarse con los Bingley por su asociación con el comercio no asistieron. Caroline al principio no estaba muy contenta porque la Srta. Goldwin tenía una dote de 7000 libras, pero como era una joven tan dulce y era hija de un caballero, al final se conformó. Se quedó a vivir con ellos unos años, hasta que cuando cumplió veintisiete años un caballero que tenía una estancia de solo 2000 libras al año - que estaba más interesado en su dote que en ella – le propuso matrimonio.
Hacia fines de 1813, Elizabeth – ahora era Lady Elizabeth – tuvo su primer hijo y heredero. Lord Sebastian estaba encantado con su hijo y sobretodo con su querida esposa, que afortunadamente se recuperó muy rápido del parto.
1814
A principio de 1814 Marianne Campbell comenzó a ser cortejada por un primo de Lord Sebastian y seis meses más tarde se casaron.
Hacia fines de 1814, Georgiana hizo su entrada en sociedad y fue todo un éxito. Dado que la esposa de Darcy estaba avanzada en su embarazo, tuvo que volver a Pemberley al poco tiempo. Georgiana quiso quedarse en casa de Lord Sebastian, y paso una temporada muy entretenida y feliz con ellos. Notaba claramente que era muy distinto el matrimonio de Lord Sebastian y Elizabeth que el de su hermano y Lady Jane. No tenía mala relación con su cuñada, pero tampoco eran muy cercanas. Prefería estar en casa de Lord Sebastian, o incluso en la casa de Marianne. Ambos matrimonios la invitaban seguido, y pasaba pocos meses en Pemberley.
Marzo 1815
En marzo de 1815, Mary Reight – antes King - leyó en el diario la noticia que Lord Sebastian acababa de tener otro hijo. La noticia la alegró ya que Lord Sebastian hacia más de dos años había arreglado un matrimonio con el Sr. Reight que era un hombre mayor, que estaba enfermo de cáncer, y tenía una gran deuda de gratitud con Lord Frederick. La convenció de los beneficios de ser viuda, por si algún día quería volverse a casarse no tenía que dar ninguna explicación por su pérdida de virtud. Después que enviudó se mudó a vivir a Kent, y un abogado la estaba cortejando.
Setiembre 1815
Kitty Bennet no volvió a vivir a Hertfordshire, iba de vez en cuando a visitar a su madre y a su hermano, pero sentía que Purvis Lodge no era su casa. También visitaba cada tanto a Mary que estaban viviendo en Los Tilos ya que el Sr. Barton, en parte por insistencia de Lord Sebastian, había comprado la hacienda. El Sr. Barton aún seguía siendo clérigo, pero ahora tenían un ingreso superior a las 1000 libras al año y estaba juntando dinero para la dote de su hija.
Lydia prácticamente no le escribía, y las pocas veces que lo hacía no parecía muy contenta en su matrimonio. Se quejaba que se aburría porque Denny estaba poco tiempo con ella y las esposas de los otros oficiales no le prestaban mucha atención. Además, tenía un hijo de un año al que tenía que alimentar ella misma porque no tenía dinero para pagar una nodriza. A principios de 1815, Jane le presentó a un conocido de su marido que era un joven abogado, el Sr. Alton, y a los seis meses se casaron.
1820
Unos días después que Georgiana acababa de rechazar a otro pretendiente, mientras jugaba con sus tres 'sobrinos' – dos varones y una niña – Elizabeth por curiosidad le preguntó los motivos de su reticencia al matrimonio…
"Georgiana, si bien entiendo que no estás interesada en el pobre Sr. Morrison ni en mi primo, a veces me pregunto si existe en el mundo algún caballero que pueda llegar a interesarte. Este es la séptima, o capaz que la octava propuesta de matrimonio que rechazas"
Georgiana se rio, "No exageres Lizzy, es solo la sexta, ya que el Sr. Morrison no cuenta. Tu primo que fue el único caballero que seriamente consideré, pero me di cuenta que lo que sentíamos era simplemente una bonita amistad, y él está ahora muy feliz comprometido con la Srta. Evian." Después de una pausa con seriedad agregó, "En los primeros años que entré en sociedad, tenía miedo de interesarme por un caballero y que él me rechazara si se enteraba de mi pasado. Pero después no he conocido a ningún caballero que me interese lo suficiente para casarme. Soy muy feliz viajando, visitándote a ti y a Marianne. Mis estándares son muy elevados, no quiero un matrimonio típico de la alta sociedad como tiene mi hermano. Para eso, prefiero ser soltera. Tendría que conocer un caballero alto, apuesto, rico, honorable, inteligente, y que además que este perdidamente enamorado de mí..."
Recién cuando Georgiana cumplió 27 años, efectivamente conoció a su caballero 'perfecto', que resultó ser un héroe de guerra amigo de su primo Richard que años atrás se había vuelto a casar con la hija de un caballero de menor rango que vivía en una pequeña estancia a solo 10 millas de Rosings. El cortejo fue muy intenso, y al caballero le importó muy poco el incidente de más de 10 años atrás de Georgiana.
Londres 1832
Como todas las noches desde que se habían casado, después de hacer el amor, Lizzy estaba recostada sobre el pecho de su marido, mientras Sebastian le acariciaba el cabello que estaba empezando a tener canas.
"¿En qué piensas mi amor?", Lizzy curiosa le pregunto a su marido.
Sebastian sonrió y le respondió, "En ti, y lo afortunado que he sido estos últimos 20 años. Sabes, nunca pensé que podía ser tan feliz y tener cuatro hijos tan maravillosos."
"Ya hace tanto tiempo que nos casamos, la mitad de mi vida. A su vez, parece que fuera ayer. Dios ha sido muy bueno con todos nosotros."
Con una sonrisa, Sebastian juguetonamente le preguntó, "¿Hoy te he dicho lo mucho que te amo?"
Lizzy negó con la cabeza, y Sebastian sonrió, "Estoy seguro que si viviera mil vidas, en todas ellas te buscaría hasta encontrarte, ya que estoy convencido que no podría jamás ser feliz sin ti. Tu eres mi Elizabeth, mi Reina."
Fin
