Capitulo 8:

Las gemelas potter.

Aquel día los rayos del sol pegaban en la ventana de la clase, a través de ella llegaban a una chica que estaba sentada leyendo su libro de pociones.

- no puedo hacer esto, nunca eh sido buena en pociones mmm…- dijo Catherine mirando su caldero que contenía una poción que parecida a agua roja.

- 10 puntos menos para griffindor, como se atreve, acaso es ciega señorita potter que no ve que el agua no es roja sino verde.- dijo snape tomando el caldero de Catherine y tirando su contenido por la ventana.

- ¡ey! Eso no es justo la podría haber arreglado.- dijo Rupert defendiendo a Catherine.

- 42 puntos menos a griffindor, que se cree que puede faltarme el respeto en todo caso dudo que la mezcla de la señorita potter se pueda haber arreglado, en todo caso veo que le gusta hacerse presente parece que le falto después de lo que hizo en el comedor ¡pare de hacer el ridículo señoriíto Weasley!- dijo Snape botando también la poción de Rupert que estaba en perfecto estado.

- ¡pero mi poción!- dijo Rupert gritando soltando su rabia.

- ¡déjalo así, no vale la pena!- dijo Catherine tomándolo por sus brazos.

- hágale caso a su compañera señor Weasley, y los demás sigan con su mezcla.

Mientras en la casa de harry, 2 personas conversaban en la terraza, tomando desayuno, se podía notar que el día estaba precioso.

- ¿y como fue que tu y harry se vieron después de Hogwarts?- le decía Ron a Luna quien le servia té.

- de hecho no fue afuera de Hogwarts.-dijo luna- lo que paso fue que…

Flash back:

-¡Niños súbanse al tren ya!- dijo Mcgonagall.

-profesora no puedo encontrar mi peineta verde y mi scrimni, es mi mascota , por favor dejeme ir a buscarla.- dijo Luna con su mirada soñadora.

- ¿que es un scrimni? Lo lamento no puedes.

-!pero¡ igual iré- dijo Luna y volvió a entrar al castillo.

Cuando entró ya todo estaba cerrado, llego a la puerta de la sala principal de Reveclaw y dijo la contraseña: "Camelot" pero no causo efecto.

-¡vamos soy yo lunática, plis abre se me quedo mi scrimni!- dijo golpeando la puerta con toda su fuerza mientras le caían delgadas lagrimas.

En la oficina de Dumbuldore:

- bueno Harry ya no podrás tomar el tren, se debe haber ido, pero no te preocupes te llevare en un carruaje, espérame afuera.

- gracias profesor, tomare en cuenta lo que me dijo.- dijo Harry saliendo de la oficina de Dumbuldore.

En el pasillo vio a alguien, alguien a la orilla del lago, pensó que era Hagrid, pero en medida que se iba acercando vio que era una mujer que lloraba, tenía el pelo rubio, largo y enredado, llevaba una túnica verde, era Lunática.

- Luna que haces aquí, el tren se fue hace horas.- dijo dándole la mano para que se levantara.- ¿Qué te pasa?

- gracias Harry, es que se me perdieron algunas cosas y no las podía encontrar.-dijo ella con su voz soñadora.

- pero eso no es para llorar a muchos nos pasa, deberías olvidarte de ello y no llorar por tonterías.- Harry se dio cuenta que indirectamente eso le había dolido a Luna.

- ¡tonterías, QUE TU NO LLORES POR TU PADRINO O TUS PADRES NO SIGNIFICA QUE LOS DEMAS NO LLOREMOS POR OTRAS COSAS, CREES QUE ES MUY DIVERTIDO QUE TODA TU VIDA TE MIREN RARO Y TE DIGAN LUNATICA, QUE NO TE CREAN Y QUE SE RIAN DE TI!- parecía que la que gritaba no era Luna, esta sacaba toda su ira hacia Harry, aquello que quería hacer desde hace mucho tiempo.

- perdón yo no quería lastimarte, créeme yo te creo más que todos, lo que me dijiste este año en el baile cuando Parvati me tiro al agua por mirar más a Cho que a ella, era cierto.- dijo Harry abrazándola y dándole un calido beso.

- Harry esto, mmm, gracias.-dijo Luna sintiéndose acogida por el pecho de Harry.

-Ejem…ejem, Harry, señorita lovegood, nos vamos.- dijo Dumbuldore con una sonrisa.

Fin del flash back…

- bueno desde ese entonces, después no lo vi. Hasta que salí de howarts ya que ahí lo invite ósea más bien mi padre a nueva york a pasar las vacaciones y bueno después de eso…-en ese momento llego Harry.

- bueno desde de ese momento no me separe mas de Luna.- dijo sentándose a su lado.

- como supiste que hablábamos de eso.- dijo Ron.

- bueno pues los escuche desde la cocina.-dijo Harry.

- ojala mi historia hubiera sido tan romántica.- Ron.

A miles de kilómetros en Hogwarts estaba Zeca hablado con Emma.

- ¡hola!¿Cómo estas, creo que no funciono la broma para Catherine.- dijo Emma.- pero igual nos reímos un buen rato.

- Emma tengo que hablar contigo.- dijo Zeca tomándola de la mano y llevándola a un rincón.

-¿si? ¡Cuidado!-dijo Emma.- ¿Qué pasa?

- no puedes acercarte a mi…- Zeca le contó todo a Emma.

-¡¿Qué, como y tu piensas hacerme eso!- dijo alejándose de él.

- ¡no! Claro que no, estas loca, pero no quiero hacerte daño.- dijo y la tomo las manos.

- gracias.- dijo y lo abrazo.- pero como nos desharemos de tu padre.

- hay que mentir.-dijo Zeca.- miente todo lo que le tengas que decir.

En ese momento llegó Rupert y Catherine que estaban escondidos.

- mish! Quien habría creído que tú y Malfoid tenían algo.- dijo Catherine con una sonrisa sarcástica.- creo que a papá le gustara saber eso de tu padre, Malfoid.

- ¿escucharon todo?- dijo Emma.

- lo suficiente para saber lo que tiene que saber el señor potter y para saber que tú estas en peligro con Malfoid.

- mentira, yo no le haré nada, no escucharon que vamos a mentir.- dijo Zeca.

- esta bien yo te creo, pero como lograremos el señor Malfoid nos crea.- dijo Catherine.

- ósea nos crea a mi y a Zeca, tú y Weasley no van a ser parte de esto.- dijo Emma.

Continuara...