Aviso. Los personajes de Alta no me pertenecen.

Bueno, aquí estaba, la carta para Aang, su mejor amigo, pronta para ser entregada. Se sintió mucho mejor al escribirla, fue algo catártico, ella venía arrastrando estos pensamientos hace mucho tiempo y ahora todos estaban en un papel. Sintió que se quitó un peso de encima. El problema ahora era atreverse a dar el siguiente paso, sabía que debía hacerlo, no podía dejar a su amigo colgado en la incertidumbre. Pero los nervios de qué pensaría él la estaban haciendo retroceder. Solo debía tomar coraje, dársela y salir corriendo, para no poder arrepentirse.

- bien, eso haré- pensó Katara.

Y así fue hasta la casa de Aang, la ansiedad la consumía mientras esperaba en la puerta. Le había enviado un mensaje al celular, ya que esperaba que fuera su amigo quien le abriera. No quería tener que mirar a Gyatso a los ojos con semejante peso en sus manos. Aang bajó corriendo las escaleras para recibir a su amiga con una enorme sonrisa, como siempre.

- Hola Kat, ¿cómo estás?

- Aang, no puedo hablar ahora , toma...- y se fue corriendo, dejando al pobre Aang con una mirada de confusión en su cara y un sobre un poco arrugado en sus manos. Entendió en ese momento que allí estaba lo que la tenía tan nerviosa el día anterior, que ahora podría saber qué era lo que quería pedirle. Así que suavemente y con un suspiro volvió a su habitación, se sentó en su cama y comenzó a leer.

Querido Aang:

Primero debo agradecer infinitamente todo lo que haces por mi. Eres una de las mejores personas del mundo. Estás siempre para mí y me salvaste de una experiencia terrible. Espero ser para ti aunque sea una parte de lo que tú eres para mí, porque yo te amo y amo tenerte como amigo y creo que realmente es un privilegio tenerte en mi vida. Quizás te estés preguntando porque te escribo todo esto, bueno lo que te estoy por pedir es algo muy difícil, creo que quizás no debería hacerlo. Pero necesito que sepas que no es porque no te valore o aprecié, sino que al contrario, eres una de las personas más importantes en mi vida y por eso te voy a confiar algo sumamente íntimo que me ha estado consumiendo por un tiempo.

Cuando pasó lo de la fiesta de Toph, primero sufrí de pesadillas y de insomnio. Tuve ataques de llanto y me sentía muy mal conmigo misma, culpable por no saber cómo sucedió todo y con mucho miedo porque si no fuera por ti, no sé cómo habría terminado la situación. Pero después que poco a poco me fui calmando y sobre todo al comenzar con los planes para la universidad, comencé a tener ataques de ansiedad nuevamente.

No entendía porqué, ya que creía que estaba mejorando. Pero al buscar información sobre la experiencia universitaria leí algo terrible, que me hizo caer en la cuenta de que mi mala experiencia se podría repetir. Por supuesto que en lo único que pienso es en ser muy cuidadosa y estar más atenta al peligro, pero en mi mente comenzó a plantearse una idea terrible.

Aquí viene la parte más íntima de mi que voy a contarte, aunque nunca pensé hacerlo a pesar de nuestra gran amistad, porque, bueno, creo que no es algo que uno vaya contando por ahí. Me di cuenta de que si tú no hubieras aparecido cuando lo hiciste, esa hubiera sido mi primera vez.

Quizás suene patético pero este pensamiento comenzó a tener un peso arrollador en mi mente. Desde hacía años me había imaginado hacer el amor con mi esposo, por lo menos cuando era más joven, luego pensé que sería con mi novio, alguien a quien amaba y con quién seguramente me casaría, o si las cosas no resultaban por lo menos la experiencia hubiera sido con amor y respeto, y me imagino, con gentileza.

Todo esto estuvo a punto de romperse ese terrible día. Y aquí otra cosa que no sabes y que nunca querría recordar, pero todo esto es para que entiendas mi razonamiento. Cuando Yao y yo cumplimos seis meses comenzamos a hablar de llevar nuestra relación al siguiente nivel, mi idea, ya sabes que me encanta planificar, era explorarnos de a poco y quizás para cuando cumplieramos el año podríamos hacer el amor por primera vez. Bueno tú sabes cómo terminó eso, él nunca pudo esperar y le agradezco a todos los espíritus que nunca llegamos a ninguna exploración siquiera. Por cierto espero que notes lo vergonzoso que es todo lo que te estoy contando.

Volvamos al punto, la idea de que mi primera vez fuera forzada comenzó a hacer estragos en mí cuando creí que me estaba recuperando, y comencé a temer ir a la universidad e incluso a salir de casa, por supuesto que he tratado de ocultarlo, pero he estado luchando contra eso. Así que, sé que las mujeres pueden ser forzadas en cualquier momento de su vida, lamentablemente, y me imagino que siempre es un hecho traumático, pero a mí me persigue esta idea desde hace meses.

Te preguntarás en dónde encajas tú en todo esto!? Bueno, me di cuenta de que siempre pensé en mi primera vez con alguien a quien amara y que me amara. En qué sería con respeto y gentileza y principalmente con consentimiento. Y ya sabes que mi primer noviazgo fue un gran fracaso. Pero luego me di cuenta, de que tú y yo nos amamos y nos conocemos y nos respetamos. Y comencé a preguntarme si sería demasiado loco tener mi primera vez contigo y asumo quizás equivocadamente, que sería tu primera vez también.

Así sabríamos que lo estamos haciendo con amor y que lo planificamos, esto para mí hoy tiene un significado más importante que antes. Así que aquí está mi idea Aang, tú y yo hemos estado el uno para el otro en muchas situaciones, buenas y malas. ¿Querrías estar conmigo en esto? Yo sí sé que quiero estar contigo. Ahora solo debes pensarlo y responder, pero por favor, no tengas miedo de decir que no. No quiero presionarte de ninguna manera. Y no quiero que afecte nuestra hermosa amistad.

Con amor,

Katara