Los personajes de Atla no me pertenecen.

Katara levantó una ceja en confusión, sabía que Aang quería hablar con ella sobre el tema que tenían pendiente, pero no entendía que la podía molestar, acaso había decidido finalmente que no quería hacerlo? Eso no la molestaría, ella lo comprendería totalmente. Ugh! A veces lamentaba haberlo puesto en este predicamento, si lo estaba haciendo sentir incómodo o presionado sería por sus tonterías.

- bien, me cambio y hablamos- con esto se fue al baño a cambiarse. Mientras Aang comenzó a aprontar su propio pijama para cambiarse cuando ella volviera. Una vez que los dos estaban prontos, ella abrió el chocolate y le ofreció un trozo a él.

- así que, de qué querías hablar hoy- dijo sentándose a su lado en la cama de él. Esto lo puso un poco nervioso. Había planeado que Katara estuviera en la otra cama y lejos de su vista para hacer su confesión.

- bien, cuando leí tu carta pensé en que si fuéramos a seguir con esto solo podría hacerlo si supieras ciertas cosas de mi. Si no sentiría que te estoy engañando de alguna manera, ¿entiendes?

- claro- respondió, su mente pensando que rayos le iba a decir, ¿qué debía saber de él que no supiera ya?

- como en tu carta tu pusiste algunas cosas íntimas sobre ti, creo que yo debería decirte algo también sobre mi. Es algo que cargo hace mucho, y que te he querido contar desde hace tiempo, pero no me atrevía.

Acaso es lo que yo pensaba, ¿me va a decir que es gay? Pero ¿por qué dijo que quería hacer esto entonces? Pensó Katara. Le hizo un gesto para que continuara.

- por favor no te enojes demasiado, y entiende que me avergüenza mucho. Por eso no te lo he dicho.

Ok, va a salir del closet, no puedo creer que esté avergonzado de eso y que no confíe lo suficiente en mí para decirme- volvió a pensar Katara.

- Aang, solo dilo, estoy segura de que piensas que es peor de lo que en realidad es, no me voy a enojar. Vamos dilo, confía en mí.

- ok, haceuntiemposalideunafiestaconMengycasituvimossexo

Dijo rápidamente y sin respirar. Katara no estaba esperando eso, oh para nada. Y ella pensó que no se iba a enojar.

- ¿qué tú qué?- Aang suspiró, todavía no la miraba.

- Meng y yo, casi lo hicimos una vez. Perdón por no decirte. Sé que todos creen que soy muy inocente y que no he hecho nada con una chica, pero no podía contar eso. Me avergüenzo mucho de lo que hice. Me arrepiento totalmente. Y lamento no decirte hasta ahora

Katara largo un resoplido,¡vaya! eso no era para nada lo que pensaba que él le iba a confesar. Sabía que Meng tenía un enamoramiento con Aang, pero nunca pensó que había pasado algo entre ellos

y menos algo tan importante. Ahora se daba cuenta de que Meng pasó de casi perseguirlo a prácticamente no hablarle y mirarlo de mal modo, ya sabía el por qué de esto.

- ok, no entiendo, ¿cómo pasó eso? Nunca supe que ella te gustará, ni que salieran- Aang suspiró largamente, aquí iba a tener que explicarse, no le quedaba otra opción.

- paso en una fiesta, tu no fuiste porque ibas a sal... Harías otra cosa- iba a decir que saldría con quién era su novio pero se lo pensó mejor y decidió no traer eso a colación- Estábamos jugando a verdad o reto, y retaron a Meng a besarse con alguien en el armario, ella me eligió a mi. Cuando me negué todos empezaron a burlarse, incluso Sokka... Me decían que me hiciera hombre y bueno, terminé accediendo. Fue lo más estúpido que hice, ella no me gustaba y me parecía muy pegajosa.

- ¿¡casi tuviste sexo con ella en el armario en una fiesta!? Casi gritó Katara sin poder creerlo.

- shhh, quieres que Gyatso se entere!? No, no fue ahí. Después de que nos besamos me dijo que estaba sola en su casa y que podría darme un buen rato y que nadie diría nada más de mi. Fui un estúpido y accedí a irme con ella de la fiesta- lo que Aang no dijo es que se sentía miserable porque Katara estaba celebrando sus seis meses con su novio, y sabía que quería hacer algo especial, el pensó que tendrían sexo. Quería sentirse bien y en su mente nublada por la tristeza creyó que encontraría algo de consuelo con Meng.

- ok, no voy a negar que me molesta un poco, pero entiendo que no me lo hayas dicho, quiero decir no tuviste una relación, fue cosa de una vez, eso es algo un poco privado.

- exacto, pero ahora siento que deberías saber que no estoy tan en blanco como tú quizás creas, quizás eso implique que no quieras nada con tu idea, pero si no te lo digo sería como un engaño.

- vaya, gracias por contarme, sé que no debe ser fácil. Puedo preguntar ¿qué tanto llegaste a hacer?- Aang la miró sorprendido, él no había pensado ser tan específico.

- si no quieres no lo hagas, pero me gustaría saber qué tanto más que yo has hecho.

-oh, claro. Lo entiendo.- Aang se sonrojó ante lo que estaba por decir.

- bueno, creo que no fue demasiado, hubo unos besos intensos y le toque …..ya sabes, sus pechos, cuando iba tocar más, me di cuenta de la tontería que estaba haciendo y me detuve.- dijo totalmente sonrojado

- llegaron a verse desnudos?- Katara no sabía porque quería saber todo esto, pero sentía una punzada de celos y quería saber que tanto había hecho con alguien más.

- mmm, yo si, casi toda, ella se quitó la ropa rápidamente, solo se dejó su bikini. Yo estuve sin camiseta por un momento.

- ¿qué te detuvo?

Aang la miró de nuevo

- ya te lo dije, me di cuenta lo que estaba haciendo, ella ni siquiera me gustaba.

- lo sé, pero casi ningún chico se hubiera detenido en ese momento, y accediste en primer lugar, así que algo debió cambiar para que te detuvieras.

-bueno, yo le dije que no me gustaba como yo a ella, y dijo que no le importaba, que esto sería algo casual y ya te conté de la presión y los insultos, así que como un tonto accedí. Pero después cuando nos besábamos, dijo que después de esto seguro la iba a amar como ella me amaba a mí, eso me sacó de allí rápidamente.

- ya veo, puedo preguntar por qué te afectaron tanto los insultos?

- bueno llega un momento en que todo te termina afectando aunque sea un poco, y siempre soy el punto de las bromas por no haber tenido novia. Supongo que ese día todo eso se juntó.

- lo entiendo, debe ser difícil. Es que tú siempre pareces de buen humor. Parece que esas cosas no te afectan.

- bueno, trato de que no lo hagan, pero a veces si me afecta.

- ok, tengo una última pregunta y si no quieres responder no lo hagas- Aang asintió- porque nunca has tenido novia o no te han interesado las chicas?- él la miró un tanto asombrado, esto no podría contestarlo con sinceridad, así que decidió eludir el tema un poco.

- has escuchado los rumores, ¿no?

- ¿qué rumores?- preguntó genuinamente sorprendida

- de que soy gay-

- no, en realidad no. Solo me lo pregunté por lo que estábamos hablando, pero si lo fueras no tendría nada de malo, lo sabes ¿no?- ante esto Aang se rió un poco.

- Katara, si fuera gay no estaría tan entusiasmado con tu idea. Y por supuesto que te lo hubiera contado

- ok, entonces ¿por qué no has tenido novia?

- bueno, creo que no me han interesado muchas chicas, pero recuerdo una que me interesó y tenía novio, así que tuve que olvidarla. Oh y recuerdo otra a la que no me animé a preguntarle para salir y luego me enteré que le gustaba. Creo que he sido un poco tímido para esto. -Se rió él.

- Bien, lo entiendo. Pero entonces ¿si te gustan las chicas? Porque no quiero que te sientas presionado por mi pedido y solo te han gustado dos chicas, eso quizás es poco para definirte.

Aang se volvió a reír, no podía explicarle porque no le habían gustado más chicas, no quería arruinar las cosas.

- mira, quizás tiene que ver con cómo fui criado. En los templos nos preparan para despegarnos del mundo. Fue cuando vine a vivir aquí que conocí otras cosas, pero aún mantengo mucho de mi cultura y por eso no me atrae cualquiera, supongo.

- Bien, entonces ¿no te estoy presionando?

- para nada, o sea que ¿sigues pensando en tu idea a pesar de mi confesión?

- si, si estás seguro de que no te presiono y que estaremos bien, aun lo estoy pensando.

- ok, te haré una confesión más, que jamás en la vida pensé que te diría, pero quizás por un lado te deje más tranquila, aunque puede que termines dándome un latigazo de agua. Por favor no te enojes, ten en cuenta que era muy joven y. ...

- de qué estás hablando!?

- recuerdas cuando fuimos a la playa con Sokka y Suki por primera vez, que tu padre nos dejó y nos fue a buscar al atardecer?

- si

- recuerdas que jugamos al manchado y te atrapé y sin querer tire de tu traje de baño?

- ¡oye! Dijiste que no se vio nada!!

- no ví nada, pero un poco se movió y vi la curva de tu pecho y eso fue todo lo que necesite para tener mi primera erección. Por suerte estábamos en el agua. Me sentí tan avergonzado, me aleje de ti y traté de quedarme solo hasta calmarme.

- lo recuerdo, por eso pensé que viste algo, ¡estabas muy rojo!

- lo sé- dijo riéndose- cuando volví a casa le conté a Gyatso muerto de la vergüenza, el me dijo que era algo normal de la edad y que no debía preocuparme. Le dije que tú eras mi amiga, que no debería haberme pasado esto, pero él me tranquilizó y me dijo que eran las hormonas de mi cuerpo adolescente.

- así que provoque tu primera erección, y me lo cuentas para corroborar que no estás en desacuerdo con mi idea.

- sip, y si necesitas más información, de hecho después de leer tu carta tuve un sueño no muy amistoso sobre ti que me hizo despertar bastante avergonzado.

Katara se rió.

- bueno, debo confesar que he tenido algunos sueños sobre ti también, desde que comencé a pensar en esto.

-¿ de verdad?- preguntó Aang totalmente asombrado.

- mhm, las chicas también tenemos necesidades, ¿sabes?.

- bueno, creo que deberíamos lavarnos e ir a dormir, está conversación se está poniendo un poco subida de tono,¿ no crees?

- tienes razón.

Ambos se cepillaron los dientes y cuando se fueron a acostar Aang se sorprendió al encontrar a Katara pidiéndole acurrucarse con él.

- estás segura?

- por favor Aang, estamos hablando de que quizás tengamos sexo, acurrucarse no será nada. Antes lo hacíamos siempre

- si, pero éramos niños, pero si quieres ven aquí- dijo mientras levantaba las mantas para que se metiera con él a la cama. Ella se metió rápidamente y lo abrazó, quedando de frente a él, él se puso mirando al techo y ella pasó una pierna por encima de las suyas. Él pasó uno de sus brazos por debajo de ella acercándola más hacia él.

- ¿estás cómoda?

- muy.

- que descanses- le dijo dándole un beso en la frente

- hasta mañana - respondió, apoyándose en su hombro y suspirando satisfecha. Aang no podía creer que esto estuviera pasando, si cuando eran más chicos lo hacían seguido, pero llegó un momento en que ya no era apropiado, cuando él tenía cerca de 12 y ella casi 14. Ahí comenzaron a armar la cama que decían era de Katara, después cuando tuvo su novio dejó de quedarse allí, hasta la noche de la fiesta de Toph. Después de eso volvió a quedarse ya que la casa de Aang era la única que visitaba. Katara sé durmió primero, Aang demoró un poco más pensando en todo lo que había pasado desde la visita a la universidad. Después poco a poco se fue quedando dormido.

Se despertó con una situación muy incómoda, estaban en posición de cucharita y él tenía una parte de su cuerpo presionando duramente el trasero de Katara, rápidamente se dió vuelta esperando que ella no lo hubiera notado. Pero ella comenzó a reírse suavemente. Aang se puso colorado.

- En mi defensa eso pasa en las mañanas!!!

- está bien Aang, me desperté con una sensación extraña pero pensé que quizás podría necesitar adaptarme- dijo ella todavía riendo.

Aang la miró levantando una ceja

- ya tomé mi decisión, después de toda nuestra charla, quiero hacerlo, si estás de acuerdo por supuesto.

Aang la miró un momento.

- estás segura

- totalmente, te aseguro que lo pensé bien e incluso lo hablé con alguien más, y con la charla de anoche terminé de decidirme.

- ok, ¿te puedo pedir algo?

- claro, después de mi pedido hay pocas cosas que te negaría, aunque no lo tomes como un permiso para pedir cosas perversas!

Aang se rió ante esto.

- no, no es eso. El día que decidamos hacerlo puedo llevarte a una cita?