Lector: Señor Mirio ¿Qué lo alienta a escribir pornografía con personajes ficticios valorados por millones de personas por las grandes marcas que han dejado en mundo como uno de las mejores series del mundo?
Mirio: la virginidad
Lector: …
Mirio: ¿Qué? Quieres que mienta y diga que si, puedo ser muchas cosas, pero no un mentiroso, y eso que a cinco cuadras esta la esquina donde se juntan las minas que por 50 pesos te chupan la pija.
Lector: ¿y por qué no pegas y dejar de ser virgen?
Mirio: Porque espero esa chica especial, esa que me haga sentir como el hombre más afortunado del mundo, que hagamos el amor, no solo follar, es eso lo que Mirio quiere.
(Es eso, y que esas minas pueden tener más sida que la corrupción que hay en el gobierno argentino, además cobran caro, ¿500 pesos por una cogida rápida? Joder me hago la paja y me compro una caja de cerveza)
Y bueno volviendo con la historia, me han dicho que hay otros personajes en Avatar, la verdad ni me acordaba de algunas que deje de lado así que tuvo que buscar los que ustedes dejaron en los comentarios.
(Mirio usa su computadora del gobierno que supuestamente le dieron para uso exclusivo de tareas y cosas útiles, pero ahora va por el lado oscuro del internet)
*Imagines de Jun, Jine y Ursa regla 34 OP*
Oh joder hermano, oficialmente si, serán parte de esto.
En fin, gracias por el apoyo, casi 85 seguidores y solo 36 comentarios, gente se que es difícil escribir con una sola mano, para hagan el intento, por mi, por Mirio.
Psd: Gracias Zero por colaborar con este capítulo para que sea más largo y coherente.
Disculpen los errores ortográficos.
"hablar" personaje hablando.
"Hablar" personaje pensando.
"Hablar" nombres de las técnicas.
(Hablar)palabras del autor o aclaraciones.
############ Cambio de escenario o lugar.
Capitulo 2: celos en llamas…
"Mmmmm~"
Mientras los miembros de la tribu del sur estaban haciendo sus tareas rutinarias, había dos personas que se escabulleron para tomarse un descanso, aunque eso de descanso era solo una escusa.
Katara tenía al chico contra la pared, besándolo de forma bastante apasionada, sus lenguas bailaban dentro de la boca del uno y luego del otro, con sus manos que viajaban alrededor de sus cuerpos.
Y sin duda la parte favorita de Naruto, era el culo de la chica, sus dos manos pasaban por debajo de sus pantalones y lo tomo directamente, al parecer alguien se olvidó de usar ropa interior, amasando las dos suaves nalgas de la maestra agua, podía sentir como sus dedos se hundían en la suave carne.
"¿No estamos muy expuestos?" separándose del intenso beso, ambos se miraron a los ojos, siendo el rubio que estaba preocupado que alguien los viera en su posición actual, que sin duda las iba a traer muchos problemas, especialmente a el.
Con una sonrisa divertida, la chica se acercó para darle un suave beso en la frente, mientras que su mano derecha se deslizaban debajo de los pantalones de un adolescente, y tomaba directamente se dura polla, sacando un fuerte gemido de este último.
"No te preocupes, hicimos todas nuestras tareas, ahora tenemos tiempo libre y si alguien pregunta, diremos que solo estábamos dando una vuelta" sus dedos se movió alrededor de la gorda hombría, no pudo evitar que su entrepierna se humedeciera por la ansiedad que sentía, lo quería adentro ahora.
Antes que pudiera bajarle los pantalones, ambos pararon en seco cuando escucharon el fuerte ruido de una campana,
"¡Nación del fuego! ¡Un barco de la nación del fuego!"
~~~~~~~~~~~~~~~ • ~~~~~~~~~~~~~~~
Todos los habitantes de la tribu se habían reunido para ver, el inmenso barco acorazado que se acercaba más y más, que no tuvo problemas en romper la pared de hielo que rodeaba la aldea, los aldeanos se reunieron temerosos de lo que pudiera llegar a suceder.
Otros en cambio.
"¡Aquí estoy nación del fuego!"
Bueno, al menos Sokka tenía las suficientes bolas o lo bastante estúpido para estar ante el inmenso barco con su traje de guerra y su confiable Boomerang. La gran compuerta del barco se abrió dejando ver a cientos de soldados que bajaron marchando uno junto al otro.
Nadie culparía a Sokka de huir, o cargarse en sus pantalones al ver tal ejército.
"Que lugar más deplorable" por último bajaron del barco las tres chicas que manejan todo el barco, Mai. Ty Lee y Azula, con toda la calma del mundo, las tres adolescentes bajaron para quedar encabezando su ejército.
"Es pequeño" comentó decepcionada la chica del circo al ver una tribu bastante pequeña a comparación de su hermana del norte.
"¿…?" los ojos dorados de la princesa, escanearon toda la zona y levantó una ceja cuando un Boomerang vino a su cara, que ella atrapó en el aire sin problemas.
"¡Oye eso es mío!"
Azula le arrojó esa cosa y golpeo duro la cabeza de Sokka que quedó inconsciente en la nieve, una vez las alimañas fuera del camino, la chica se acercó hasta los habitantes de la pequeña tribu.
"¡Se que estás aquí!" grito de manera inesperada, mientras miraba fijamente a la anciana de la tribu, que tuvo el atrevimiento de devolverse la mirada, "¡Y si no sales ahora! ¡Dejaremos está tribu hecha cenizas! ¿Eso es lo que quieres?"
"¡Naruto! ¡No!"
Azula volteo y de inmediato su mirada se oscureció al ver a una sucia campesina tener sus manos sobre su objetivo intentando detenerlo, pero el camino hasta quedar frente a la gente de la tribu, mirando fijamente a la maestra fuego.
"Hola Azula" con una sonrisa el chico saludo a la princesa, que le dio una mirada penetrante y oscura.
"Tu vas a subir tu trasero a mi barco, o te prometo que la nieve a tus pies se va a teñir de rojo" ella no estaba jugando, sus manos se iluminaron con fuego azulado y los demás soldados siguieron su ejemplo.
"Ya tienes un nuevo tripulante capitana"
De inmediato el rubio levantó las manos y siguió a la maestra fuego, no lo pensó por un segundo y se entregó para que dejaran a estás buenas personas en paz.
Pero antes que pudiera dar un paso, una mano lo tomo de su chaqueta, "No vayas Naruto…" la tensión se fue por los cielos cuando Azula vio que la sucia plebeya de la tribu agua tomo con fuerza la chaqueta del shinobi para que no diera un paso más.
Su reacción fue acordé a su mentalidad.
Disparo una corriente de fuego directo a su cara, el rostro de Katara fue iluminado por las llamas de la maestra fuego, pero antes que alguna pudiera tocarla, el fuego termino perdiéndose en el cielo.
El silencio fue sepulcral.
"Si la tocas… lo lamentaras"
Azula se quedó callada, con su muñeca apretada bajo un agarre de hierro por parte del chico, que tenía una mirada que…
"…" la princesa tuvo que luchar para no sonreír, aunque pudo controlar la expresión de su rostro, sentía sus pezones endurecerse debajo de su armadura y la humedad acumularse en su zona íntima.
Cómo le gustaba la reacción tan temperamental y oscura del Uzumaki.
"Wow… que caliente" Al parecer Azula no fue la única excitada, Ty Lee no oculto su sonrisa.
Sin decir nada, Naruto dejo que los soldados lo esposaron con gruesas cadenas. Sin más fueron a bordo del barco.
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"¿Así que dónde dormiré yo?"
Él no iba a mentir, se sentía bastante intimidado al estar rodeado de decenas de soldados, y tres de las chicas más peligrosas de la nación del fuego, no era la situación más favorecedora que pudo tener entre manos.
"En el calabazo"
"Se ve cómodo" murmuro entre dientes al entrar en una caja metálica de diez x diez metros cuadrados, dónde en una esquina bajaba agua helada de mar que seguro iba al motor del barco para refrigerarlo.
"Todos largo" Los soldados se miraron entre ellos breves segundos, para después hacer caso a la orden de la princesa, "Dije todos"
"¿Nosotras también?"
Mai no dudo en irse, sabía que la princesa Azula era alguien que solo decía las cosas una vez, no queras estar ahí para escuchar la segunda. Tomando del brazo a Ty Lee la saco del calabozo, dejando solo a los dos.
Naruto se sintió penetrado por la mirada que la chica tenía, que de una patada cerró la puerta detrás de ella y se acercó a él para de forma brusca quitarle las esposas.
"Quiero la revancha" gruño con furia contenida mientras tiraba las cadenas a un lado y quedó cara a cara con el chico, teniendo que mirar hacia abajo a pocos centímetros de su rostro.
"…" Naruto tuvo que mirar a arriba lo más que pudo, en momentos como estos estaba en conflicto. Al ser bajo no podía imponer respeto al devolverle la mirada a los ojos a su enemigo.
El lado bueno, que su nariz casi rozaban los senos de la chica, ser un poco enano no era tan malo después de todo.
Ambos se miraron breves segundos, hasta que Azula lanzo el primer golpe.
10 minutos después
Sus cuerpos colapsaron contra el frio suelo metálico del calabozo, siendo Naruto el que termino contra el suelo con quemaduras y moretones en varias partes de su cuerpo, una pelea en un lugar tan pequeño le dio una ventaja absurda a la maestra fuego.
Azula se levantó lentamente, tomando los bordes de su armadura aboyada y arruinada se las arrancó y lo arrojó a un lado, dejándola solo con una delgada camisa roja y pantalones sueltos.
Sonriendo de manera oscura la chica se levantó del suelo con un salto y corrió a toda velocidad contra el mocoso.
Naruto apenas pudo levantarse para bloquear un rodillazo a su rostro, lo que no anticipo fue ser tomado de su chaqueta y sea desgarrada dejándolo con su torso expuesto.
"¡Pelea pequeña basura!" gritó con furia la princesa que extendió sus puños y disparo una gran ola de fuego, que el rubio apenas pudo anticipar la saltar y adherirse la techo.
La maestra fuego no pudo evitar que el bajara y le diera una patada, qué le dio de lleno en la caja torácica, qué fue lo suficientemente fuerte para dejarla sin aire y derribarla, dejando escapar un grito de dolor ella se levantó.
Naruto se dio la vuelta y lanzó una fuerte patada a la mandíbula de la chica, lanzándola unos a pocos pies de distancia.
Maldiciendo haber sido golpeada de nuevo, ella se detuvo y lo miró con odio en los ojos, limpiando la sangre de su mandíbula con una mano, sus manos fueron cubiertas de fuego y se lanzo de nuevo al ataque, preparándose para quitarle la vida y acabar con todo.
Al mirarlo fijamente, no pudo evitar mirar su pecho musculoso y agitado que estaba cubierto por una capa de sudor, sus abdominales y pectorales relucientes que incitaban a sus ojos a mirarlos demasiado.
¿Era posible que un chico de 12 tuviera ese tipo de físico?
Las venas de su cuello eran como fideos, desde la base de su clavícula hasta esa molesta cabeza rubia que tanto odiaba, era una maravilla para sus ojos, tuvo que sacar esos pensamientos de su cabeza.
Con sus puños envueltos en fuego, le dio una lluvia de golpes y combos al chico que ni siquiera pudo levantar sus brazos para protegerse, recibiendo todos los golpes, recibió una última y dura patada en su estómago que lo termino arrojando al otro lado de la habitación, aterrizando contra la toma de agua.
El levantó la vista del charco de agua, y vio desde su vista periférica como ella entraba en la cascada del tuvo del drenaje, el agua caía en cascada por su cuerpo, enjuagando la suciedad y la mugre de su cuerpo mientras ella lo miraba mortalmente, con el fuego aún ardiendo en sus manos
"No tienes idea de cuánto quise hacer esto…" la chica le dio un duro derechazo en la mandíbula, derribándolo contra el suelo, el agua siguió corriendo sobre ambos, mientras Azula se alzaba victoriosa sobre el shinobi.
"Ir tan lejos por solo patear mi trasero" murmuró Naruto que lentamente se dio la vuelta para adolorido sentarse en el suelo.
Esas palabras hicieron que la chica se enfureciera, "¿Tan lejos? ¡Fuiste tú quien se atrevió a desafiarme y ganar! ¡Y cuando yo te ofrecí todo y tu me escupiste en la cara!"
"¡Ahg!" el chico se retorcía de dolor cuando ella le dio una dura patada.
"¡Eres un maldito mal agradecido!" Ella replicó enojada, corriendo con fuerza y pateando su pecho contra la pared, cayendo sobre el, iba a seguir golpeándolo, el intento cubrirse el rostro con sus manos para evitar que le golpeara la cabeza.
Ella no tuvo piedad, apartó sus manos y comenzó a golpearlo con solo fuerza bruta, golpe tras golpe, solo parando para hablar más y luego golpearlo de nuevo.
"¡¿Te creíste especial?!"
*Golpe*
"¡No lo eres!"
*Golpe*
"¡No eres mejor que yo!"
*Golpe*
"¡No eres nada sin mi!"
*Golpe*
"¡No…
*Golpe*
… eres …
*Golpe*
Nada!"
*Golpe*
Ella levantó el puño de su rostro ensangrentado, su sangre cubriendo sus nudillos como cera de una vela, el había dejado de respirar por la nariz después del tercer golpe.
Ahora yacía allí jadeando, demasiado débil para moverse.
Azula se inclinó sobre su cuerpo, sus pechos rebotaban por su respiración agitaba por el cansancio.
"¿Es todo?"
Esa pregunta hizo que la furia de la chica rebasara sus límites.
El aún sonreía, tenía una maldita sonrisa dibujada en sus labios cubiertos de sangre, su voz sonó más como un gorgoteo ahogado con toda la sangre en su garganta.
El levantó la mano débilmente y trató de empujarla por sus hombros. La maestra fuego se burló por un intento tan patético.
"¡Quítate de encima, loca de mierda!" El grito del rubio tomo por sorpresa a la chica, que no esperaba que el tuviera la fuerza para retorcerse con tanta fuerza.
El arqueando sus caderas hacia su trasero, obligándola a romper su concentración, el empuje de sus caderas la empujó casi derribándola, sus pechos apenas contenidos se agitaron por el movimiento tan brusco.
Molesta ella agarró sus muñecas, sujetándolas por encima de su cabeza.
"¡Detente imbécil!" gritó con un rubor en su rostro mientras el idiota seguía agitándose, sus caderas golpeando su trasero, enviando un escalofrió a su trasero, ella se movió un poco, tratando de dejar de pensar en esa rara sensación, pero solo empeoró las cosas cuando su coño comenzó a calentarse y volverse más sensible.
"¡Eres una maldita loca! ¡Solo te patee el trasero por qué tú me atacaste primero! ¡Apenas se tu nombre!" se quejo agitándose queriendo que ella se bajara de encima de el, "¡No me importa lo que una perra como tú diga de mi! ¡Nunca quisiera tener nada que ver contigo!"
"¿Cómo te atreves?"
Naruto podía sentir que la mirada de la chica ya no era como antes, era mucho más oscura e intimidante que antes, una sensación de miedo hizo que se quedara quitó cuando ella, en un estallido de furia.
Empujó las muñecas del Uzumaki, contra el duro y frio suelo de metal, inmovilizando al chico bajo sus manos y caderas.
El shinobi miró hacia arriba, sorprendido cuando el cambio tan radical que tuvo la maestra fuego.
"¿No te importa quien soy? ¡Está bien por mí!" Ella hervía tan amenazadoramente que el susurro en el que lo dijo parecía como si una gran bestia estuviera hablando en lugar de ella. "Te mostraré quien soy… y are que me recuerdes hasta el último día de tu patética vida" escupió con rabia, agarrando al rubio inocentemente confundido por su cabello, poniéndose de pie y arrastrándolo por el calabozo hasta la toma de agua.
Naruto se contorsionó de dolor cuando su cuero cabelludo se partió en algunos lugares mientras su cuerpo era jalado por sus sucios mechones dorados, trato de hacer que ella parará y agarró la mano de Azula, tratando de evitar que ella lo arrastrara, pero ella continuó, con una expresión que él nunca había visto antes en su rostro.
Puro odio y furia.
La princesa se detuvo cerca del canal de agua para mirar al mocoso que luchaba, era la primera vez que el la miraba con verdadero enojo y desaprobación.
Ella nunca podría tomarse en serio sus miradas de intimidación, simplemente se veía demasiado tonto para eso en este momento. "No sabes cuánto te odió… te contuviste" escupió esas palabras con pura frustración, que eran más verdaderas que cualquier cosa que este mundo le haya dicho, "¡Pudiste haberme ganado y no lo hiciste! ¡Tu… ¿Acaso no me tomas enserio?"
El chico dio un gruñido cuando fue tomado de sus hombros y estrellado contra la pared, para estar cara a cara con la maestra fuego que la miro de pie, erguida y con una mirada ensombrecida.
"Puedes vencerme ahora, pero no servirá de nada porque no tienes las pelotas para matarme y ¿sabes que será lo primero que haga cuando te hayas ido? Ir a esa pequeña aldea y reducirla a nada, apilar los cuerpos de esas basuras e incinerarlas…y me asegurare de tomerme mi tiempo con esa pequeña perra que al parecer te tiene cariño"
"…"
"O puedes solo quedarte en el suelo como la basura débil que eres"
El ceño de Naruto se profundizó, sabía que ninguno de los dos caminos sería agradable, pero tampoco sabía nada de lo que ella tenía reservado para él.
Al final, tuvo que bajar la mirada y dejar que ella hiciera lo que quisiera.
Esto dibujo una sonrisa oscura en la chica, que levantó su pierna y lo pateó en el rostro.
Naruto aterrizó con un ruido sordo y cerró la boca mientras el agua caía en cascada por su cuerpo, limpiando la suciedad y la mugre de la lucha de su cuerpo.
Vio cómo el agua sucia y helada que corría de su cuerpo se volvía clara, la sangre y la suciedad ya no eran visibles, el agua continuó limpiándolo mientras yacía allí, volteándose sobre su estómago para ponerse de pie.
Ya no llevaba sus pantalones, fueron carbonizadas junto con su ropa interior, y la cascada los había hecho jirones, mientras se ponía de pie, miró hacia la otra mitad de la cascada de la tubería,
Ella solo estaba de pie, pasándole lo mismo que a el, la presión del agua fue lo suficientemente grande como para romper la banda que sujetaba su cola de caballo, su cabello ahora suelto y adherido a su piel clara por la humedad.
Ni siquiera pestaño cuando tomo su ropa y al desgarro con sus afiladas uñas, el agua caía en cascada por el valle de sus pechos que estaban ahora expuestos ante la mirada incrédula del shinobi.
Cuando volvió la cabeza hacia ella lo suficiente como para mirarla a los ojos de nuevo, sintió unas manos rodear sus caderas, tirando de él de modo que un par de sedosos senos suaves y pezones duros lo pincharan directamente en la espalda.
Antes de que pudiera siquiera formar una expresión de sorpresa en su rostro, una mano se deslizó entre sus piernas y agarró su suave polla, apretándola con suficiente fuerza para endurecerla en un minuto.
"¡¿Qué mierda te sucede?!" Gritó sorprendido por la acción tan repentina de la maestra fuego, quiso extender ambas manos hacia abajo para evitar que toque su zona privada.
Ella obviamente gruñó ante su interferencia, agarrando sus bolas lo suficientemente fuerte como para hacerlo gemir de dolor y mover sus manos.
"Ya no tienes privacidad" escupió con dureza. "Tu… ya no eres nada más que un cuerpo, un recipiente que voy a usar…" cada palabra hacía que le brillo siniestro de sus ojos arda con emociones malignas.
"¡Ahg!" el chico se estremeció por el agarre tan brusco que hizo que sus bolas dolieran y no pudo mover un solo musculo, por temor a que sus bolas sean arrancadas.
"Tu cuerpo será un recipiente para mi rabia y frustración, nada más que eso, tu elegiste salvarlos a ellos, sucios campesinos de una miserable aldea del agua a costa de tu propia libertad, ¿verdad? Entonces no tienes nada que decir sobre lo que está por suceder, y ahora estás a punto de ayudarme a lidiar con años de mierda y frustraciones… Naruto"
"Tu… perra…"
Gruño Naruto cuando ella se sentó con fuerza en su regazo y presionó su trasero contra él, mientras su mano acariciaba su miembro con fuerza, y su frente descansando contra la parte posterior de su cabeza, su aliento cálido rozaba su cuello.
"Luego de esto… ya no vas a sonreír como antes, esa estúpida inocencia tuya será rota por mi… ya nada será igual" su cuerpo desnudo se separó del de él mientras lo giraba, su euforia era tal que su aliento era casi vapor, "Y yo lo voy a disfrutar… como no lo vas a imaginar"
El era hermoso, eso era algo que Azula no lo diría en voz alta, para ella el chico tenía una belleza casi angelical, y su cuerpo tan desarrollado solo era un bono extra.
Sus abdominales y pecho musculoso, bíceps fuertes y hombros grandes adornados por una cara linda e inocente que actualmente tenía el ceño fruncido, si a sus 12 años ya era tan atractivo y fuerte, Azula sentía casi euforia al imaginarse como sería al crecer.
Pero su mirada se centro en lo que tenía entre las piernas, un bonito pene de unas cinco pulgadas, que estaba suave debido a sus emociones conflictivas.
El fue perfecto, disfrutaría del cuerpo de este mocoso incluso si tuviera que tenerlo atado toda su vida con cadenas, todo sea por el único hombre que la superó en su primera pelea.
"De rodillas…"
Esa fue una orden muy clara, y Naruto lucía como si quisiera desobedecer, pero se arrodilló, cauteloso en cuanto a si ella le daría un rodillazo en la cara o no.
Ella se acercó a él, su mano en su cabeza. "Quítame mis pantalones"
"¿Qué –"
Naruto se sobresaltó por un pedido como ese y no pudo evitar mirarla con sorpresa e ira.
"¡Hazlo! ¿O quieres pelear de nuevo?" Ella gritó de nuevo, sabiendo que él se doblaría ante la respuesta, y estuvo en lo cierto.
"…" dando un suspiró de resignación, el rubio desvió la mirada mientras se acercaba para agarrar sus delgados pantalones y desatar el nudo.
Si solo hubiera mantenido sus ojos en ella, habría visto el puñetazo que venía hacia él, golpeando su mandíbula y tirándolo de nuevo contra el suelo, antes que pudiera decir algo ella lo silencio.
"Con los dientes, sin manos".
"Maldita perra…"
Tragándose su enojo, el Uzumaki se inclinó hacia adelante, llevando lentamente sus labios a la base de los pantalones, su maravilloso aroma inundándole la nariz.
Azula lo tomó suavemente de su barbilla y llevó su cabeza hacia la parte superior donde estaban sus botones, queriendo poner los ojos en blanco ante la tardanza del chico que parecía tardar una eternidad, al encontrar la manera adecuada de deshacerse de la ropa.
"…" Naruto miro hacia arriba para ver sus maravillosos pechos, los pezones rosados tan duros que podía jurar que le sacarían los ojos si se acercaba sin cuidado. Luego arrastró sus ojos inocentes hacia los de ella, mordiendo suavemente la tela alrededor del botón de su pantalón, su labio superior raspó el suave estomago de la chica, justo debajo de su ombligo.
"Ahhhh~" ella gimió suavemente ante el contacto, el verlo esforzarse para soltar el nudo de sus pantalones le dio ganas se bajarlos ella misma y rebotar sobre su pene hasta que ambos se perdieran en la nube de lujuria.
Pero no, algo solo es bueno cuando se toma su tiempo, así que sólo se mantuvo como espectadora, se mordía el labio inferior mientras el mocoso desabrochaba los dos botones de sus pantalones, ambas veces besando inadvertidamente su piel antes de que sus dientes mordieran la cremallera, arrastrando lentamente la cabeza hacia abajo mientras abría la cremallera.
Azula sintió la brisa familiar de sus pantalones caer alrededor de sus tobillos, y pasó sobre la tela ligeramente antes de patearla lejos de ella, este fue sólo el primer paso.
Pero cuando miró hacia abajo, incluso ella en su mente retorcida y oscura, no pudo evitar tener un leve sonrojo en sus mejillas, al ver cómo el chico estaba mirando su ropa interior roja, que estaban mojadas con sus jugos.
Mirando fijamente con la boca abierta, probablemente sabiendo exactamente de dónde provenía esa humedad, su dulce olor innegablemente era muy atrayente.
Ella estaba mojada.
Y mucho.
Estaba mojada por verlo así de rodillas como su sumiso juguete, fue una vista que la hizo mojarse aún más de ser posible.
Azula amaba el poder.
¿Y que era una mejor sensación de poder que tener bajo su control a la única persona que la avía desafiado y vencido en su vida?
La maestra fuego tomo la última pieza de ropa que le quedaba, sus húmedas bragas se las bajó por las piernas, pateándolas a un lado.
Ya no podía soportar el suspenso, necesitaba hacer esto, solo los espíritus sabían cuántas noches el pensamiento de él la llevó al orgasmo, cuántas duchas frías trató de tomar para deshacerse de su lujuria, pero aún así terminó haciendo un desastre con sus dedos temblorosos y húmedos.
Su coño vibró violentamente con el calor y sus jugos, la inminente follada por la que estaba a punto de pasar agudizó sus sentidos, sus jugos se arrastraron por sus piernas mientras apretó sus muslos juntos, el olor de su coño flotando a través de su afilada nariz, fue estremecedor para el Uzumaki.
Ella estaba lista.
Y él no tendría nada que decir sobre si lo era o no.
Ella fue rápida, antes de que el lo supiera fue tomado del brazo y arrastrado fuera de la toma de agua, para ser dejado sobre una de las esquinas del calabozo.
El apenas se había recuperado de la caída antes de que un par de labios sellaran los suyos, y un par de ojos dorados miraron fijamente a los suyos, su dueña actualmente deslizando y metiendo su lengua en su boca.
No tenía experiencia en besar en absoluto, lo poco aprendido fue su momento de calor y pasión con Katara, y tampoco quería devolver el beso a una mujer como ella.
No era como si a Azula le importara que el le devolviera el beso, ella violó su boca con su lengua, queriendo saborear su sabor, esto hizo que su coño se tensara y la humedad se deslizó por sus piernas, y sus manos se aferraron con fuerza de los hombros del chico.
Este luchó con su lengua, tratando de evitar que ella lo amordazara metiéndose en su garganta, no fue fácil, pero ella no estaba apuntando a eso para empezar. Sus manos empujaron con fuerza sus hombros hacia abajo, obligándolo a arrodillarse en el frío suelo metálico.
Desconectando sus labios, ella agarró su cabello con rudeza para separarlo de ella, su mirada de furia y el rastro de su saliva que goteaba desde su boca hasta su barbilla era una imagen perfecta que la excitaba.
Lo suficiente para hacerla romper la compostura de la maestra fuego y besarlo de nuevo. Pero no lo hizo, tenía que mantener el control para saber cómo romperlo y hacerlo suya.
"Sucio mocoso…" insulto inclinándose para lamer la saliva que goteaba de su barbilla. "¿Cuántas chicas has besado desde de nuestra pelea? ¿Cuántas chicas has follado?" Preguntó con una voz grave mientras lanzaba su pierna izquierda sobre su hombro derecho, su coño rosado y su clítoris a centímetros de su boca.
"Yo… no" Él la miró, confundido por sus acusaciones, odiaba ser acusado de esta manera.
"¿En cuántas chicas engañaste con tu cara de niño bueno? ¿Toda tu actuación de héroe solo es para tener a tantas chicas como quieras verdad? ¿Cuántos coños ha arruinado esa polla para otros hombres?" Continuó enojada por la sola mención de que si había chicas con quién el había interactuado.
"No he tocado a nadie-" Ella lo abofeteó con su mano derecha, su izquierda todavía agarrando su cabello.
"Cállate, pequeño tonto, si las mentiras son lo único que puede hacer con esa boquita, entonces es mejor que no hables…" Dijo ella, su ira hacia él creciendo. "Me pregunto en quién te hundiste tu maldito pene primero, ¿Una aldeana al azar? ¿Una dobladora? Tal vez alguna puta sumisa."
Ella usó su dedo para deslizarse contra sus húmedos labios inferiores, reuniendo sus jugos húmedos que salpicaban contra el rostro del chico.
"¿Fue esa sucia aldeana que casi mato?" la sonrisa de la maestra fuego se fuego se volvió más oscura cuando vio la mirada tímida del Uzumaki, "Oh… ¿así que ella reclamo lo que por derecho era mío?"
"Nunca fue tu-"
Por segunda vez el fue abofeteado por Azula.
"Atrévete a decirlo… pruébame..." El brillo eléctrico de la punta de sus dedos, fue una advertencia más que clara, sonriendo ella paso sus dedos alrededor de los labios del chico, haciendo que el probara sus jugos "¿Tengo mejor sabor que esa campesina? ¿O quieres mentir y decir que no?" cuestionó, acercando su coño a solo un centímetro de sus labios.
"…" el no tenía nada que decir.
"Cómeme…" ordeno está vez con amenaza, el se inclinó levemente, listo para hacer la que ella pidió, pasando su lengua por debajo de su clítoris y sobre sus labios húmedos, tomó una lenta pero fuerte lamida de la zona íntima, forzando un jadeo de sorpresa y un gemido agudo de Azula, "Ohhhhh" ella dio un jadeo con los ojos muy abiertos por la repentina sensación de placer.
Sintiendo esa sensación de hormigueo por primera vez desde que se tocó ella misma, solo que esto era infinitamente mejor.
Naruto no se detuvo con una sola lamida, le estaba dando el servicio completo, prestándole más atención de la que ella le había prestado jamás, haciendo que sus labios inferiores goteen humedad como rocío sobre la hierba.
Ella agarró su cabeza con ambas manos, empujando sus caderas contra su rostro mientras él hundía su lengua en su pequeño y sensible coño, su nariz le daba a su clítoris una deliciosa sensación de fricción húmeda. "¡Mocoso de mierda!" Ella gimió en voz alta, mirándolo a los ojos mientras él le devoraba el coño con la lengua, el metió su lengua en su coño, curvándolo y moviéndolo contra su clítoris mientras usaba simultáneamente sus dedos para invadir su coño resbaladizo.
"¡Sigue así bastardo inútil!" Sus gritos retumbaban en el calabozo, empujando sus caderas contra su boca cuando él golpeó su cálido interior dentro de ella, curvando su lengua moviéndose aún con más entusiasmo.
"¡Mmmmmm!" el Uzumaki solo pudo dar gemidos ahogados, por como el coño de la chica lo apretó como nunca antes, como si le quisiera arrancarle la lengua
El sacó su lengua de su interior, para después continuar lamiendo su coño, se acercó y agarró su otra pierna y la puso sobre su hombro también, aprovechando de la posición más cómoda, hundió su lengua dentro de la empapada vagina, mientras le daba a su coño el mejor sexo oral que pudo dar.
Algo que hizo tango gozar como enfurecer a la princesa, "¡Hijo de puta! ¡Oh por los espíritus! ¡Has hecho esto antes!" Ella lo notó, tratando de contener su orgasmo, pero fracasando miserablemente, Naruto separó su boca de su coño cuando sintió que ella estaba por arrancarle el cabello de la cabeza.
Pero Azula se vino, y muy duro.
El Uzumaki fue tomado por sorpresa, cuando fue puesto devuelta contra el coño de la maestra fuego, el se atragantó con su orgasmo cuando ella dio un largo gemidos quedando con la boca abierta.
El no tuvo más opción que beber de los juegos de ella, por casi treinta segundos hasta que ella por fin se calmara.
Su coño ahora estaba de un rojo claro por todo el asalto oral que le había administrado, lo apartó a un lado y sintió sus rodillas fallar.
Azula no se pudo mantener de pie, cayo de rodillas, sudando y jadeando después de su experiencia tan placentera, puso una mano en el suelo frío para no caer, su orgasmo enviaba temblores por todo su cuerpo mientras miraba a Naruto por parte con placer y también amenaza.
"Tú... pequeño mentiroso!" Gritó con fuerza aún temblando por su orgasmo mientras luchaba para que el rubor en su rostros y temblor en sus muslos disminuyeran, "¡Has hecho esto antes!" Ella pensó que esa mierda de que la campesina de la tribu agua tuvo algo con el era falso, pero ahora estaba segura que era cierto.
Y eso la enojaba, y mucho, en ese mismo instante podía levantarse e irse a buscarla, solo para tener su cabeza en una estaca decorando su barco.
Naruto levantó ambas manos a la defensiva mientras ella gateaba hacia él de rodillas, el acto de ella avanzando de una manera tan cruda provocó una sacudida en su miembro endurecido.
Ella lo alcanzó y empujó sus hombros hacia abajo, inmovilizándolo contra la superficie fría mientras se sentaba a horcajadas sobre sus caderas, la ira y el placer emergieron en su hermoso rostro.
"¡Solo pudimos hacerlo una vez!" Él respondió apresuradamente, conteniendo un gemido mientras ella rozaba su coño mojado contra su polla completamente erecta, la deliciosa fricción tentaba a empujar hacia arriba en su calor, pero se sentía como un tarado por haber dicho la verdad.
"¿Una vez? Lo dices como si quisieras aún más…" gruño pasando sus manos por su pecho rozando sus filosas uñas por su piel, ella miro la expresión que el mocoso puso y al ver cómo se sonrojada evitando mirarla los ojos.
Eso la cabreó, la punzada de celos que la recorrió se convirtió en odio de nuevo cuando colocó su mano izquierda en su cadera, su mano derecha cerrándose firmemente alrededor de su cuello. Naruto soltó un grito ahogado, lentamente colocó sus manos sobre las de ella y la miró a esos ojos peligrosos, con una mirada vacilante.
Azula lo miró, el hambre de batalla regresó por un segundo, quería golpear esa gran cabeza rubia en el suelo mientras se imaginaba como podía torturar a esa perra de la tribu agua.
La idea de que él le hiciera con esa sucia campesina, la hizo inconscientemente apretar su agarre en su cuello, estrangulándolo y solo cuando dio un grito ahogado, la sacó de sus pensamientos asesinos. En cambio, miró a los ojos al chico, que luchaba por respirar bajo su agarré, se veía tan vulnerable y sumiso debajo de sus caderas, su sueño húmedo hecho realidad.
Mirando hacia abajo su miembro duro, centrada en la humedad brillante acumulada en la punta de su polla. Se abrío paso lentamente por el eje ligeramente enrojecido, luciendo delicioso a medida que avanzaba, inconscientemente se lamió los labios cuando sus ojos dorados vieron el leve latido que hacía el pene del mocoso.
Estaba listo.
Ella podía verlo en sus ojos inocentes, sentía la lujuria por ella, era eso o estaba preocupado por el apretón de ella alrededor de su cuello.
La mirada de miedo, lujuria y anticipación mezclados en sus ojos fue una bendición para sus propios ojos. Quería agradecer a cualquier dios que hubiera por este chico maravilloso. Soltando sus manos de su cuello, descendió su cuerpo hasta que sus muslos estuvieron sobre su espinilla, sus rostros a centímetros del duro miembro de la rubia.
"¿Azula?" Él susurró nerviosamente, su respiración pesada envolviendo su dura polla en su calor, comenzó a latir con cada respiración que tomaba, trató de sentarse, pero fue empujado hacia atrás por las llamas disparadas de la mano derecha de la maestra fuego.
"Quédate quieto" dándole esa advertencia, levanto la mano y agarró su polla, sus pequeñas manos femeninas envolvieron la longitud.
Se maravilló de cómo parecía tomarle agrado, latiendo inmensamente y parecía a punto de estallar, dejo de mirar su pene para levantar la mirada y verlo a los ojos, su frente cubierta por una ligera capa de sudor y sus ojos prácticamente rogándole para que aliviara su erección.
Inclinándose hacia adelante y concentrándose en el miembro duro, Azula uso delicada lengua y la arrastró sobre la punta, causando que este latiera ansiosa por más.
La lengua se deslizó contra la glande de manera lenta, pero con fuerza, el aliento de Naruto se atascó en su garganta mientras intentaba con todas sus fuerzas no gritar.
La princesa de la nación del fuego comenzó a lamer la resbaladiza cabeza, tomando cada gota del líquido preseminal, ella se movió levemente en la abertura de la punta, sus labios se cerraron alrededor de la glande mientras descendía sobre su pene.
"¡Uffff~" el shinobi se quedó sin aliento cuando la mitad de su miembro fue metido en la boca de la chica, llevándose a su garganta mientras su mano comenzaba a sacudir la otra mitad de él mientras envolvía su polla.
Azula comenzó a mojarse mucho de nuevo mientras tomaba a su virilidad y tomaba más hasta llegar a su garganta.
Ella no se ahogaría con él, no todavía, de todos modos, tenía un grosor más increíble que su longitud, pero, aunque nunca lo hubiera intentado en su vida, dejaría en claro porque ella un prodigio en todos los sentidos.
"¡Ahhggf! ¡Cggghh!" Ella se atragantó, su polla era demasiado para manejar dentro de su boca en este momento, los muslos de Naruto temblaron de tanto placer, pero también la miró con preocupación. Bajó una mano para apartarla de él, pero instantáneamente gritó de dolor cuando ella le clavó sus dientes en la mitad de su longitud.
"Si me molestas, te arrancó el pene"
Aún si ella no dijera nada, esa advertencia se escuchó muy clara.
Ella levantó su boca de su polla con un fuerte '¡Pop!' y lo miró a los ojos, ignorando el dolor emocional que tenían sobre por qué ella haría esto.
Levantó la mano hasta su cuello y comenzó a apretarla con firmeza hasta que estuvo segura de que no podía respirar por una fracción de segundo. Luego agarró sus bolas y comenzó a acariciarlas ligeramente, acariciando su miembro ablandado.
Cada vez que lo lastimaba, su polla se ablandaba, ella no podía trabajar con esto, poniendo su boca sobre él una vez más, lentamente comenzó a mover la cabeza hacia arriba y hacia abajo sobre él, haciendo girar su lengua alrededor de la punta.
Ella aumentó su velocidad cuando comenzó a lubricar el miembro resbaladizo con la boca, esencialmente obligando a su garganta a tomar la polla, follándose a sí misma.
"¡Grlllk! ¡Grullk! ¡Graak!" Ella casi se atragantó, disfrutando tanto de los sonidos de sí misma ahogándose con su polla que comenzó a mojarse aún más, sus pezones estaban duros ahora y su coño ardía en llamas mientras se frotaba contra su pierna, su clítoris frotando deliciosamente contra su rodilla mientras seguía chupando con fuerza la longitud del shinobi.
"¡No tan fuerte!" se quejo entre gemidos el rubio que sentía que la boca de Azula le iba a arrancar el pene, todos los pensamientos de reprimirse fueron lanzados por la ventana.
Esto hizo sonreír a Azula, que le encantaba escuchar los gemidos ahogados y llamados de 'Azula' con una voz tan tensa y sumisa, la hizo volverse loca.
Era como si ella fuera su diosa y sus elogios hacia ella llegaban en gemidos y gemidos, su puño apretado de placer ya que no podía hacer nada más que dejarla disfrutar.
Ella amaba esto.
Mierda lo amaba demasiado, tener control sobre un mocoso tan bocón, hiperactivo y ruidoso, ser reducido a un chico que jadeaba, se encogía y luchaba para contener sus gemidos.
El era suyo, su juguete, su pequeño zorro al que manipularía para que hiciera sus órdenes.
El era de ella.
De nadie más.
Y se aseguraría de que él entendiera lo que eso significaba.
Naruto no pudo soportar mucho más, mirando hacia abajo y viendo como las mejillas de Azula se ondulaban en succión por su polla, sus labios carnosos y sexys envueltos alrededor de él mientras su cabeza viajaba hacia arriba y hacia abajo, su ojos dorados lo miraron fijamente con malicia, atrevimiento que apartara la mirada de ella mientras hacía que esa polla se sintiera tan bien como se sentía.
Se estremeció cuando las glándulas nerviosas de su pene de repente se volvieron más sensibles, ya estaba en su límite.
"¡Oh mierda estoy cerca! ¡Ella es muy brusca!" pensó con una extraña mezcla de incomodidad y placer, por la primera mamada que estaba recibiendo en su joven vida.
Tenía que detenerla, ya estaba a punto de…
"Vente para mí pequeño bastardo..." Esas palabras hicieron que el se quedará en shock, su mirada choca con la mirada oscura y sucia de la princesa, que abrió su boca para engullir la totalidad de su polla dentro de su cálida y apretada boca, algo que hizo que Naruto quedará con la mente en blanco y sus bolas tensas.
"¡Azula-a!" la sensación fue intensa, no pudo soportarlo.
El orgasmo para el Uzumaki fue duro, y la princesa lo tomo todo, con la longitud palpitante dentro de su boca, sus mejillas se contrajeron para chupar con más fuerza cuando el primer disparo fue directo a su garganta, su lengua se deleitó ante el sabor al que se hizo adictiva.
Azula se deleitó tomando todos los disparos del mocoso, hasta que dejarlo vacío, pasaron varios segundos hasta que el clímax acabará, y con un ruido húmedo separo sus labios de la flácida longitud del rubio, que se dejó caer contra el suelo, agotado y atontado por tan fuerte orgasmo que hizo que sus piernas se sintieran temblorosas.
"Sabe tan desagradable" la maestra fuego escupió el semen que había quedado en su boca, algo bipolar de su parte considerando que no tuvo problemas en tragarlo antes con mucha hambre.
Levantándose dejo ver su cuerpo desnudo por primera vez, dándole la espalda al shinobi fue hasta la fuente de agua para tomar un poco y enjuagarse la boca, y limpiar su rostro.
Naruto aún estaba aturdido, poco a poco recupero la conciencia y quería creer que todo había terminado, no sabía lo equivocado que estaba.
"¡Oye!" fue tomado por sorpresa cuando fue tomado repentinamente de sus tobillos, y arrastrado por el suelo, no pudo evitar que Azula lo tomara de sus tobillos y separara sus piernas.
"Aun estamos lejos de terminar pequeño trozo de mierda" con una mirada nublada la chica apretó su agarre, cualquier persona normal ya hubiera sentido que sus tobillos se rompían por el agarra tan fuerte que la maestra fuego tenía.
"¡Azula espera-a! ¡Aún no!" El dio varios quejidos cuando su sensible polla fue frotada de manera bastante brusca contra los muslos de la chica.
"Tu no tienes voz aquí" se burló ella mientras movía sus caderas contra las de el, ella jadeo con placer cuando sus sensibles labios inferiores se frotaron contra la dura longitud del mocoso.
"¡Espera!" Naruto gruño cuando ella soltó uno de sus tobillos y tomo con fuerza la punta de su hombría, para apuntar directo a su coño, el como la punta choco contra el cálido interior, para que luego de un solo movimiento de parte de ella.
Quedara todo adentro.
"¡Ohhhhh~! ¡Si!" Una gran sonrisa de formó en el rostro de la princesa cuando la dura polla del mocoso entro en ella, tomando sus dos tobillos con fuerza, movió sus caderas contra el con más fuerza.
Ella había perdido la barrera de su virginidad hace mucho tiempo, los entrenamientos que tuvo que hacer para ganar flexibilidad fueron duros pero eficientes.
Aunque sentía el pico de incomodidad y dolor por tener por primera vez el pene de su contra parte en género, no era nada comparada al placer tan intenso que la hizo mojarse a más no poder.
Respirando con pesadez, ajusto sus piernas y piso con firmeza, con su espalda ligeramente curvada, mantuvo su agarra en los tobillos del Uzumaki.
Moviendo sus caderas hizo que su longitud empezará a salir de su interior, solo para de un sentón ella hiciera que todo entrara todo de nuevo dentro de ella.
"¡Tranquila! ¡Me vas a romper el pene maldita loca!" La posición para Naruto fue muy incómoda, por no decir humillante por como estaba siendo usado por ella como si fuera su juguete, "Esta muy apretada… y caliente" pensó con un placer culposo que hizo que su pene latiera ansioso de más.
"¡Cierra la boca!" gruño la maestra fuego que se movió con la fuerza, sus caderas se estrellaban con fuerza contra las caderas del shinobi, el sonido del choque de carne venía acompañada de los húmedos sonidos de la entrada y salida del pene del mocoso entrando en la vagina apretada de Azula.
Que jadeaba y gemía con gozo por el placer tan celestial que la hizo tensar sus paredes internas que no querían dejar salir nunca más al invasor que se adentraba hasta los puntos más profundos y placenteros de su cuerpo.
"¡Dilo!"
"…" Naruto miro confundido a la chica que se puso más intensa, al levantar sus caderas y golpearlas contra las suyas, dejando sin aliento al chico que sintió su pene hundirse hasta la parte más profunda de ella.
"¡Di que soy mejor que esa sucia campesina!"
"¡Ahg!" la mente del adolescente se volvió difusa cuando el placer de volvió a cada segundo más intenso, por como ella daba sentadillas cada vez más rápidas y fuertes que lo estaban llevando a la locura.
"¡Vamos! ¡Pequeña basura! ¡Dilo!"
"¡Basta-a!"
"¡Di como te gusta como mi coño aprieta tu maldita polla! ¡El como te gustaría jugar con mis tetas!"
"Yo…"
"¡Di que soy mejor que esa patéticas puta!"
"¡No-o!"
"¡Ahhhhh!" Azula dio un grito de frustración y placer por lo dura voluntad del mocoso, pero esto solo lo hacía más divertido, "Tu boca dice una cosa… pero tú pene habla con la verdad… esto te gusta"
"Oh Kami…" Naruto quedo en shock cuando ella bajo la velocidad, pero sus caderas ahora se estrellaban con fuerza, su longitud fue abrumado por la presión y calidez del interior de la chica, que movió su culo de arriba hacia abajo.
"¡Tu eres mío!"
"¡Ahhhhh!" Naruto sintió la presión familiar en sus bolas y la presión de las paredes internar de la maestra fuego, los dos estaban la borde del precipicio y solo era cuestión de saber quién caería primero.
"¡Cuando quiera voy hacer que me chupes el coño!"
"Azula-a…"
"¡Usaré tu mierda de pene para satisfacer mi coño! ¡Y a ti te va gustar!"
"¡Azula!"
"¡Eres solo mío! ¡Eres de mi propiedad Uzumaki Naruto!" Con ese último grito la chica quedó en silencio cuando un placer celestial la hizo quedar en shock, su coño fue llenado hasta el borde por cada disparó del Uzumaki, que lleno su interior de su semilla.
"…" Naruto quedo con la mirada perdida en el suelo, cuando las cálidas paredes apretaron su polla ordeñándolo, sacando hasta la última gota de su esencia directo a ella.
Pasaron varios minutos hasta que ambos se calmaron y recuperaron sus sentidos, al final Azula no pudo mantenerse de pie y termino cayendo sobre el chico, disfrutando de tenerlo aún en su interior.
El sentía sus párpados pesados y sentía que iba a quedarse dormido, hasta que sintió que sus bolas fueron tomadas por la suave mano de Azula, que, con una sonrisa maliciosa y oscura, apretó los testículos del Uzumaki con brusquedad.
"Estamos lejos de terminar… Na-ru-to…"
2 horas después…
Sonriente y complacida, Azula se puso la bata que ordeno que uno de sus subordinados trajera, con su coño goteando la semilla blanca de su 'amado' ella se retiro del calabozo, no sin antes darle una última mirada.
"No tienes que preocuparte, cuando lleguemos a la nación del fuego tendrás un mejor lugar para dormir que un calabozo, no dejaría que mi mascota viviera entre la basura…"
"…"
"Deberías de agradecerme ¿No lo crees?"
"…"
"Dije… deberías de agradecerme"
"Gracias…"
"Eso es…" sonriendo con arrogancia y burla, se fue cerrando la puerta detrás de ella.
El silencio en el calabozo fue sepulcral, Naruto se quedó sentado en una esquina desnudo, su ropa fue desgarrada por ella, no era como si pudiera vestir algo ahora.
El pensó que todo había acabado, al menos por ahora, solo tenía que hacer tiempo para que le barco se alejara lo máximo posible de la tribu y luego podía hundir el barco, pasarían semanas antes que ellos pudieran ir a la tribu a buscar problemas.
Y el estaría ahí esperando para enfrentarlos y no ser más el tipo amable.
Siempre había creído que había algo bueno en todas las personas, hasta que conoció a Azula.
Cerrando los ojos se abrazo a si mismo, quería al menos tratar de dormir un poco.
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Que capítulo bien cargado de zukulencia para ustedes bola de degenerados, espero sus comentarios de que les parece este capítulo, y adivinen quien será la siguiente o que opciones pueden tener para la historia.
¡Dejen sus comentarios manga de pervertidos, Bey!