NINGÚN PERSONAJE ME PERTENECE SON PROPIEDAD DE MASHASHI KISHIMOTO
SASUNARU / NARUSASU
UNIVERSO ALTERNO
SONGFIC
Canción: Tiroteo/ Marc Seguí
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Capítulo I
El jardín era amplio y el color verde era el que más sobresalía en aquel espacioso lugar inevitablemente era un día perfecto, soleado, sin una sola nube cubriendo el cielo tan azul, un perfecto día de verano. Aquel amplio jardín verdoso era adornado con telas transparentes color blanco, así como las mesas distribuidas ahí, una loza fina de porcelana con algunos sutiles detalles de baño en oro y el adorno principal eran rosas blancas. Sombrillas ubicadas perfectamente para cubrir a los invitados de aquel evento de los rayos solares.
Un aplauso se escuchó de forma repentina, ya que aquella pareja de recién casados estaba entrando, a aquel jardín mientras que burbujas bailaban y pétalos de rosas blancas eran arrojadas a ellos. La pareja sonreía feliz, acababan de firmar el papel más importante de sus vidas. Al fin después de 7 años de noviazgo habían decidido casarse, formalizar completamente aquel compromiso ya establecido. Aquella boda era el sueño de cualquiera.
Los invitados poco a poco se comenzaban a acomodar en las diversas mesas en aquel jardín mientras los novios recibían abrazos y felicitaciones por su reciente unión.
-FELICIDADES QUERIDA- menciono una mujer de cabellos rojos largos, con un vestido azul eléctrico adornando su esbelta figura.
-Gracias tía Kushina, me alegra tanto que viniera- decía la novia que lucía un vestido ceñido a su delgado cuerpo y su largo cabello rojizo era recogido en un elegante chongo.
-Karin, por nada del mundo me perdería tu boda, eres como mi hija- respondía Kushina mientras su esposo se posaba detrás de ella.
-Te ves hermosa Karin- sonreía el rubio mientras le daba un fugaz abrazo a la novia
-Tío Minato, soy la mujer más feliz en estos momentos- decía Karin con los ojos un poco aguados
-Irradias felicidad…- se acercó un segundo rubio parecido al primero, solo que con unas peculiares marcas en las mejillas
-NARUTO- grito la pelirroja arrojándose al recién llegado- Pero mírate tu irradias sensualidad… vaya que irte al extranjero te cayó bien- reía la novia
-Espero que hayas invitado chicos guapos- decía coquetamente el rubio que vestía unos pantalones de vestir pulcramente blanco, y una camisa azul rey a juego con un saco del mismo color blanco que ya traía sobre uno de sus hombros.
-Te aseguro que sí- sonrió la pelirroja
-Querida, nos están buscando para las fotos- se acercó el novio en un esmoquin gris claro, tomando a su recién esposa por la cintura.
-Claro, pero antes, Suigetsu quiero presentarte a mi tía Kushina, ella cuido de mi cuando mis padres fallecieron- decía la novia mientras tomaba de la mano a la pelirroja.
-Gracias por cuidar de mi esposa de pequeña- decía Suigetsu con una sonrisa en sus labios
-Siempre quise tener una hija- respondió la pelirroja
-Auch… directo al corazón madre- dijo esta vez otro pelirrojo integrándose al círculo de personas que ya habían comenzado a conversar- Solo te recuerdo que el culpable de que todos tus hijos fueran hombres fue mi padre… genéticamente hablando, él es el que traía el XY
-NAGATO- esta vez volvió a abrazar Karin al recién llegado
-Felicidades prima- abrazaba el pelirrojo a la novia
-Él es mi primo Nagato, él es mi primo Naruto y mi tío Minato- presento una vez más Karin a su recién esposo el cual estrechaba manos con los varones
-Cuñados postizos entonces…
-Así es cuñado, bienvenido a la familia- decía Naruto sonriendo
- ¿Y Deidara? - interrogo Karin
-Viene tarde Karin, tuvo que encargarse de algunos asuntos, pero ya está en camino- explicaba Minato
-Oh, el jefe llego- interrumpía Suigetsu- Iré a recibirlo y lo traeré para presentártelo- decía el peliblanco alejándose de su esposa y familia política.
Se hizo un pequeño circulo privado entre Karin y la familia de su tía Kushina, comenzando a ver los detalles del vestido y alabando el hermoso jardín que había escogido para la recepción y la forma de ser adornado de aquel lugar.
-Querida- llamo la atención Suigetsu de su esposa- Te presento a mi jefe Uchiha Sasuke…
-Un gusto- dijo la pelirroja estrechando la mano de este que sonreía enseñando sus blancos dientes, los cuales se desvanecieron al perder aquella sonrisa al ver a los acompañantes de la novia.
-Fe… licidades- murmuro Sasuke, sintiendo todo su cuerpo temblar, al ver a aquellas personas justo de frente.
Los Namikaze-Uzumaki igual perdieron la sonrisa que tenían debido al ambiente cálido de aquel momento. Kushina solo atino a tomar la mano de su hijo menor, Naruto el cual recibió la mano de su madre de modo apresurado y la apretó con intensidad, mientras Minato y Nagato sentían sus entrañas arder y controlaban el enojo que comenzaba a surgir de sus cuerpos.
-Ella es su esposa Sakura- seguía presentando el peliblanco a la mujer de vestido verde esmeralda, que resaltaba con su piel blanca y con hombros descubiertos- Y su hija Sarada…- era una chica de aproximados 20 años de edad de piel blanca como sus padre, cabello corto negro y anteojos, una copia perfecta de su padre, la cual vestía un vestido rojo de tirantes.
-Muchísimas gracias por venir- decía la pelirroja agradeciendo a las recién presentadas con una reverencia sencilla – Quisiera presentarles a…
-Karin, las fotografías de prisa- decía una castaña acercándose a los novios- antes que comience la recepción
-Karin, ve, ve- decía Minato tomando los hombros de la novia- ya después nos presentaras y demás cosas anda apresúrate a las fotografías
-Ah, sí claro… vamos Suigetsu- la pelirroja tomo la mano de su esposo y siguió a la castaña dejando a la familia Namikaze-Uzumaki y Uchiha ahí.
Sasuke tenía su cuerpo congelado, no podía dejar de ver a aquella familia especialmente al rubio menor quien tenía la mirada baja y veía como apretaba sus labios. Kushina solo atino a pasar una de sus manos sobre los hombros de su hijo menor y alejarse a toda prisa de aquel lugar y sin más Minato y Nagato siguieron a la mujer, sin cruzar palabra con los Uchiha.
-Propio…- soltó la pelirosa al ver a la familia alejarse. Y ante aquellas palabras Sasuke salió de su estupefacción.
- ¿Qué dices? - interrogo el Uchiha
-Ni si quiera reglas de etiqueta de despedirse, aunque no nos presentaran- Reclamaba Sakura.
-Mamá, no empieces- decía Sarada dando un ruidoso suspiro- vamos a sentarnos ¿quieren?, antes que nos ganen los buenos lugares- decía la chica de anteojos alejándose de sus padres
-Cariño, ¿estás bien? - preguntaba Sakura tocando la mejilla de su esposo
-Si, vamos – decía Sasuke mientras retiraba la mano de su esposa de su rostro y caminaba tras Sarada. Sakura solo atino a observar a su esposo al no haberse quejado igual que ella por la falta de educación de los anteriores ahí reunidos. Sasuke era muy observador con ese tipo de cosas.
Los Namikaze- Uzumaki, tomaron asiento en la mesa asignada, junto con otros familiares de las Uzumaki, comenzaron a saludarse y ponerse al día de algunos temas. Mientras Kushina no soltaba para nada la mano de su hijo Naruto el cual jugaba con los cubiertos de plata. Y en su cabeza estaba un sunami de pensamientos, Naruto sentía su cuerpo tan frio, sentía todo en cámara lenta, estaba seguro que podía escuchar los latidos de su corazón. Trataba de no mirar otras mesas, no quería encontrarse con aquellos ojos ónix, no quería volver a verlo.
La recepción surgió de la forma más normal para todos los invitados, excepto para la familia Namikaze-Uzumaki y para Uchiha Sasuke el cual después de comer se fue a las orillas del jardín a fumar. Desde hace más de 5 años no fumaba… desde hace 5 años había dejado de fumar, pero no podía lidiar con todo aquello. Después de 3 años, 3 largos y agonizantes malditos años, volvió a tenerlo frente a él. Volvió a verlo, debía admitirlo que su atractivo de aquel rubio había aumentado. Sus facciones eran más maduras, su cabello ya no era rebelde ahora era corto, y quizá, solo quizá un tono de rubio más blanco y delicado, no estaba del todo seguro de aquello. Su piel aún era acanelada, ese bronceado tan perfecto que tenia de genética, gracias a Kushina. Y justo desde la parte del jardín en el que estaba tenía la vista perfecta para verlo a lo lejos, como Kushina y Nagato lo custodiaban, y procuraban hablarle, mientras este sonreía de una forma forzada, claro que sí, el mejor que nadie conocía las sonrisas genuinas de aquel rubio. Dio un tremendo suspiro y vio a lo lejos entrando a un sequito de hombres conocidos para él.
-Hemos llegado- anunciaba un rubio de melena larga- había demasiado tráfico, pero aquí estamos.
-Deidara- Minato se levantó de la mesa y miro a su hijo que iba llegando en compañía de otros chicos.
-Estamos listo para el show- decía un castaño con unas marcas rojas en su rostro- Naruto…- llamo la atención del rubio quien se levantó de la mesa y comenzó a saludar a los recién llegados.
-Gracias por venir- sonreía sin ganas el rubio
- ¿Qué sucede? – interrogo esta vez un pelirrojo de ojos aguamarina - ¿Por qué ese semblante? ¿acaso viste un fantasma?
-Pues…
-DEIDARA- se escuchó el grito de la novia acercándose al rubio recién llegado y lo abrazo
-FELICIDADES KARIN
-Me alegra verte, y veo que traes amigos…- la pelirroja vio a aquel grupo de varones- les buscare una mesa…
-No te preocupes Karin, en realidad ellos son parte de tu regalo
- ¿Regalo?... chicos la despedida de soltera ya paso- bromeo la pelirroja
-Son los integrantes de mi banda…- interrumpió Naruto- te presento a Shikamaru, Gaara, Kiba, Chouji y Shino. - fue señalando a cada uno de los varones ahí frente a la novia- Les compuse una canción
- ¿En serio?, Naruto- la pelirroja abrazo una vez más al rubio- GRACIAS, GRACIAS
-Nos podrías decir dónde están los controles de audio y demás para conectarnos- decía Shikamaru con las manos dentro de sus pantalones grises oscuros.
-Claro, claro… en un momento le digo a la planner que los guie- la pelirroja se retiró de ahí.
Unos ojos ónix miraban a lo lejos a aquel rubio, que platicaba con los recién llegados con los integrantes de su banda… vaya aun después de tres años seguían juntos, algo dentro de él se alegró, que Naruto aun siguiera con sus sueños.
Los recién llegados después de un rato comenzaron a irse junto con Naruto a acomodar instrumentos y hacer pruebas de sonido, mientras los invitados disfrutaban de las amenidades y de la buena barra de vinos. El atardecer comenzaba a presentarse en aquel bello jardín.
-Probando, probando… 1,2,3… - comenzó Gaara a hacer pruebas ultimas de audio en los micrófonos. - Probando… probando- miraba a Kiba quien controlaba los sintetizadores y le daba el visto bueno de que todo estaba en orden. - Estamos listos…- dijo mientras se colocaba la cintilla que sujetaba el bajo que él tocaba.
-Gaara- Naruto se le acercó al pelirrojo quien lo miro atentamente- él está aquí…- decía el rubio mientras se arremangaba las mangas de la camisa y se desabotonaba los primeros botones.
- ¿De quién hablas? - interrogo Gaara sin comprender aquello
-De Sasuke…- dijo Shikamaru detrás de Naruto- Lo vi en el área de fumadores hace unos momentos
- ¿Qué hace él aquí? - interrogo el pelirrojo
- ¿Estás seguro de querer tocar? Podemos irnos- dijo Shikamaru mirando los ojos aguados de Naruto
-yo… solo tocamos y nos vamos, ¿de acuerdo?
- ¿Seguro? - volvió a cuestionar Gaara mientras con cuidado escaneaba aquel jardín para ver al pelinegro, hasta que dio con el mientras este se iba a sentar en una de las mesas, la mesa justo enfrente de donde ellos iban a tocar.
-Si…- Naruto se dirigió al centro de la pista de baile que es donde estaban- PROBANDO, 1,2,3… Buenas tardes… mi nombre es…- el rubio alzo la mirada justo de frente y ahí estaban aquellos ojos negros…- Naruto Namikaze, primo casi hermano de Karin y este… este es mi regalo para ustedes- sonrió el rubio desviando la mirada a los novios quienes alzaron su copa de vino.
Cuando tu empiezas
ojalá nunca termine
porque siempre que me besas
florecen todos los jardines
La voz de Naruto comenzó a entonar de forma perfectamente junto con los acordes del teclado que Kiba estaba tocando. Naruto tenía el micrófono entre sus manos y los ojos cerrados. Tratando de contener los nervios y el torrente de emociones en su cuerpo, de tener a Sasuke justo frente de él… teniendo a Sasuke justo de frente. Naruto tomo una decisión… levanto la mirada firmemente y miro a aquellos ojos negros, cambiando la letra de aquella canción que dé inicio era para su prima y su esposo, los planes cambiaron.
Pero se fue el sol y nunca volvió
me sentí como un niño, sin luz con miedo
este cuento de hadas al final cambió
me llenó de promesas que nunca cumplió
Shikamaru ante eso miro a Gaara, el cual solo hizo una señal que indicaba seguir con la misma tonada, con el mismo ritmo acordado. Gaara conocía esa canción, Gaara sabia la historia de aquella canción. La señal no fue solo para Shikamaru sino para todos los demás integrantes de la banda quien estaban confundidos ante el cambio de letra, pero que extrañamente embonaba con los acordes.
Me dijiste que te vas
que estás en busca de algo más
yo como un tonto en tu portal
si como un perro soy leal
Los ojos azules miraban directamente a los negros que también lo miraban atentamente, Sasuke sintió sucumbir su cuerpo… era momento de hacerle frente al amor de su vida. Era momento de la verdad. De que la realidad le volviera a golpear, la realidad que lo golpeo como hace 3 años cuando Minato golpeo a Sasuke, pero esta vez seria 1000 veces más fuerte y todo sería a través de una canción.
Continuara…
