.

.

.

.

.

.

.

.

.

Capitulo IX

-¡SAKURA!- gritaba el pelinegro tras la mujer que comenzó a adentrarse a un área rodeada de arbustos. Las zapatillas que llevaba puesta no ayudaron a que pudiera seguir corriendo. El fino tacón se rompió e hizo que Sakura perdiera el equilibrio cayendo tratando de amortiguar lo mejor que podía la caída colocando sus manos por delante- Sakura… - al fin alcanzo Sasuke tratando de auxiliarla.

-Es él, es él, es él- repetía Sakura con la mirada baja mientras luchaba con sus manos para que Sasuke no le ayudara. - déjame, déjame

-SAKURA, ESCUCHA- grito el pelinegro tratando de tranquilizar a la peli rosa mientras tomaba ambas muñecas delegadas de la mujer- Primero…- dijo Sasuke una vez que Sakura se dejó de resistir a tocarla- ¿te lastimaste?... ¿te duele algo?

-Me duele el corazón, el respirar … la vida- decía Sakura con lágrimas en sus ojos- Me duele la vida desde hace 23 años Sasuke…

-Te ayudo a levantarte- decía Sasuke ayudando a su esposa a reincorporarse del suelo. Sasuke vio una pequeña banca y la cargo entre sus brazos, tomando por sorpresa a la mujer y la llevo hasta aquella banca donde la coloco con sumo cuidado- Tu tacón se rompió… ¿te has torcido el pie?

-Si…- decía la peli rosa mientras movía su pie lastimado- pero solo eso, ya pasara no creo que haya fractura o esguince…

-Tu eres la doctora- decía Sasuke mientras se quitaba el saco negro y lo ponía sobre los hombros desnudos de la mujer, para después tomar asiento a su lado.

-Es él, ¿verdad? - dijo quedito la peli rosa cobijándose más con el saco que desprendía la colonia varonil de Sasuke.

- ¿Quién? - se hizo el desentendido el pelinegro mientras miraba el césped bajo sus pies.

-A quien amas - decía ya más tranquila la peli rosa- es muy guapo…- la peli rosa solo obtenía silencio de su esposo. - él… es muy joven Sasuke, ¿Qué edad tiene?

-Veintiséis…- soltó por inercia el pelinegro

-Podría ser tu hijo- contesto alarmada Sakura- Le lleva tres años a Sarada

-Maldita sea, Sakura- Sasuke frunció el ceño y se levantó de aquel asiento y volteo a ver la mujer- que disparates dices- decía Sasuke con voz ronca- te recuerdo que yo no decidí tener un hijo a los 15 años

-Y me culpas por ello

-No, no te culpo, me culpo yo y me responsabilizo de ello

-Aun te arrepientes, ¿verdad?

-De tener un hijo a los 15, claro que si Sakura, no me arrepiento de la existencia de Sarada de eso nunca… de lo que me arrepiento es de ser tan joven cuando nació, tu mejor que nadie sabes todo lo que pasamos, todo a lo que tuvimos que renunciar…

-Incluyendo el amor…- concluyo Sakura mirando al pelinegro quien solo comenzó a masajear su frente.

-Es mejor que nos vayamos- dijo Sasuke acercándose a Sakura para ayudarla a ponerse de pie

- ¿Dónde lo conociste? - pregunto Sakura ignorando que Sakura le tendía la mano

-Es lo de menos, ahora vámonos, ¿quieres?

- No, no quiero, Sasuke, no quiero irme de esta fiesta con una persona que sigue estando conmigo a la fuerza- expresaba Sakura elevando su tono de voz. -Vi cómo te miraba y como lo mirabas tu… y estoy segura que esa canción…

- ¿QUÉ ES LO QUE QUIERES SAKURA? - interrogo gritando con fastidio el pelinegro, estaba llegando a su límite, volver a ver a Naruto después de tres años, ser ignorado por toda aquella familia de la que llego a sentirse parte, escuchar aquella canción y ahora Sakura cuestionándolo. Estaba siendo demasiado para Sasuke- ¿Que te diga que lo amo? si, lo amo… lo conocí en Tokio, es el hijo de mi asesor de tesis, nos hicimos novios, estuvimos juntos un año y medio, el mejor año y medio de mi maldita vida, su familia se enteró que era casado y que tenía una hija, hicieron todo para llevárselo y no los culpo, porque convertí al amor de mi vida en mi amante… lastime hasta mas no poder a la persona que más he amado en este mundo…. Y ahora tres malditos años después vengo y me lo encuentro aquí y comienza a cantarme esa maldita canción que cuenta todo lo que vivimos… TODO…

-Sasuke…- Sakura se levantó de la banca y camino cojeando hasta el pelinegro. Tomo entre sus pequeñas manos el rostro de su esposo- Debemos dejarlo

-Así es, vámonos – respondió el pelinegro

-Ya no debemos de estar juntos…-soltó la peli rosa para darse a entender mejor

- ¿Qué? - respondió sorprendido el Uchiha

-Sasuke… quiero el divorcio, como te dije me duele la vida…- Sakura dio un suspiro mientras sus ojos comenzaban a cristalizarse- Te ame en mi adolescencia después vino lo de Sarada y pensé que con mi amor sería suficiente, pero no fue así… hemos atravesado muchas cosas juntos, pero eso no significa que nos amemos, que tengamos que estar juntos… y hoy que escuche esa canción, que vi a ese hombre, escucharte diciéndome esto… no podemos seguir, ya no más Sasuke…

-Pero tu familia, mi familia… Sarada- Sasuke tenía un torbellino en su cabeza, claro que le gustaba aquella propuesta, pero su ser solo sentía miedo.

-Escucha, Sarada es nuestra hija y es la mujer más inteligente en este mundo, hicimos un buen trabajo, Sasuke. Criamos bien a Sarada, pero ella ya no nos necesita… al menos ya no juntos- Sakura sonrió y quito las manos del pelinegro y comenzó a sonreír. - Sasuke… estoy enamorada…

- ¿Qué?

-Quiero que seamos felices en esta única vida que tenemos… y vi como lo mirabas porque es la misma forma en la que yo lo veo a él… ya no quiero seguir renunciado a cosas solo por nuestro error de adolescencia, ya nos responsabilizamos lo suficiente…

-Yo llevo esto- decía Naruto tomando un amplificador portátil con su mano y comenzando a caminar en dirección al estacionamiento.

Vio la camioneta negra de su hermano Deidara, que fue donde se tuvieron que transportar ese día ya que la vieja van donde regularmente se trasladan con su equipo se descompuso, es por eso que Deidara se había ofrecido a ir por ellos. Camino hasta ella donde vio a Shikamaru acomodando en la parte trasera de la camioneta algunos estuches de instrumentos.

- ¿Cómo estás? - interrogo Shikamaru

-Destrozado, ¿qué esperabas? - rio tristemente Naruto colocando el amplificador dentro- Luce más guapo…- Naruto se recargo en un costado de la camioneta- Pensé que ya no sentía nada por él, que todo se había borrado

-Si sabes que eso es imposible ¿no?, el ser humano no olvida y menos algo tan…

-Lo sé, lo sé… - Naruto dio un suspiro- No sabes cómo lo he extrañado tanto y el verlo hoy…- Naruto dio un enorme suspiro- aun lo amo, lo amo como no tienes puta idea

-No tuvieron oportunidad de despedirse- soltó Shikamaru- tu simplemente te fuiste de un día para otro a Inglaterra y él bueno, en cuanto concluyo la maestría se largó de Tokio.

-Y ¿cómo es que vino a dar aquí? - interrogo un pelirrojo que se acercaba a los amigos

-Es el jefe de Suigetsu, el esposo de mi prima…- explicaba Naruto a su poco entender

- ¿Y que no sabía que Karin era tu prima? - interrogo con el ceño frunció Gaara

-Sasuke…- Naruto guardo silencio unos segundos, hace tanto que no mencionaba ese nombre- él, solo conoció a mis abuelos paternos, además Karin es familia de mi madre, se apellida Uzumaki, así que él que iba a saber que los Namikaze y los Uzumaki eran familia…

-Ya veo…- susurro Gaara mirando al rubio- Naruto, será mejor que te vayas, él debe seguir aquí, por favor vete…

-Gaara tiene razón, nosotros nos encargamos de lo demás- secundo Shikamaru- Puedo pedirte un taxi

-No, no te preocupes- Naruto se incorporó de la camioneta y dio un enorme suspiro. - Nagato y yo llegamos en motocicleta, el imbécil de mi hermano se le hizo tarde para ir a despedir a su novia al aeropuerto, entonces lo lleve y de ahí llegamos acá, así que no llegamos con mis… papás… tengo que ir con ellos…- Naruto sabia también que ellos estarías desconcertados después de esa canción

-Nosotros nos encargamos de ellos- explicaba Gaara- estoy seguro que entenderán y estarán más que de acuerdo que te vayas…

-Mierda, ni siquiera me he disculpado con Karin por arruinarle su regalo- decía riendo nervioso el rubio

-Naruto, eso es lo de menos- Shikamaru tomo de los hombros al rubio- Solo estas buscando cualquier pretexto para regresar ahí y verlo y creer que van a regresar, pero no es así, él tiene esposa e hija y están ahí dentro, no las dejó hace tres años, ¿Qué diferencia hay ahora?, acaso quieres morir de nuevo…

-Tienes razón- Naruto bajo la mirada. - Despídanme de todos, cualquier cosa estoy en el celular, me voy…- Naruto comenzó a caminar por el estacionamiento, para dirigirse donde estaba su motocicleta.

Avanzo a otra sección del estacionamiento, ya que la motocicleta se había quedado casi a la entrada de aquel lugar, el cual a su parecer era demasiado grade, Naruto aun pensaba y tenía tan presente aquella mirada ónix sobre él.

Debía admitir que Sasuke lucia más atractivo que antes, el verlo en traje, con esa mirada penetrante, aun le hacía estremecer. Y como no lo haría si fue la primera persona con la que experimento lo que era amor con todas sus letras y formas.

Ubico su motocicleta Harley color naranja con negro, mientras se acercaba se acomodaba las mangas de su camisa y se abotonaba. Una vez cerca de la motocicleta saco una de las alforjas laterales su chamara de cuero negra y unos guantes. Se estaba colocando aquella prenda de cuero cuando una voz lo sobresalto.

-Así que tú eres Naruto Namikaze- dijo una tenue voz a espaldas del rubio el cual volteo y su corazón se aceleró, había una mujer de cabellos negros y anteojos, la mujer que horas antes la habían presentado como…

-Sarada- susurro el rubio sintiendo su cuerpo temblar.

- ¿Conoces mi nombre? - interrogo la mujer acomodando sus anteojos- Vaya, pensé que no sabias de mi existencia…

- ¿Cómo? - Naruto se sentía confundido y mareado

-Vaya, que mi padre tiene buen gusto- dijo la mujer escaneando al rubio de pies a cabeza- Eres tremendamente sexy y más con esa pinta de motociclista que te has puesto

- ¿Disculpa? - Naruto se sentía tremendamente confundido…- ¿tu padre?

-Si, mi padre… Sasuke Uchiha, tu antiguo enamorado. - Soltó la pelinegra sonriendo- él hombre que dejaste hace tres años

-Yo no lo deje- soltó de inmediato el rubio

-Así que es cierto- sonrío triunfante Sarada- si tuvieron algo ver, solo avente una hipótesis al aire, ahora confirmo que si hubo algo entre ustedes y que no fuiste tu quien dejo a mi papá, como creía …

-Yo, me tengo que ir…

-Espera- Sarada tomo del brazo al rubio- Dios, que brazo- apretó un poco Sarada el brazo sujeto- Justo ahora odio un poco a mi padre y que ya te haya apartado para él

-Oye, dices cosas raras- decía Naruto nervioso mientras quitaba su brazo que sujetaba la mujer.

-Lo lamento- río un poco la pelinegra- Escucha, no sé exactamente qué fue lo que paso entre tu y mi padre, pero sé que algo hubo y la canción que acaba de interpretar, déjame te digo, guapo que también lo confirmó, el cómo te lo comías con la mirada y ni que hablar de mi padre a ti…

-Sabes me tengo que ir- Naruto comenzó a desatar uno de los cascos de la cadena de seguridad que estaba en el respaldo de la motocicleta.

-Vale, Vale- Sarada se volvió a colocar a un costado del rubio y detuvo sus brazos de ponerse el casco- te tienes que ir, solo déjame decirte algo, por favor- Sarada coloco ojos grandes y suplicantes

-Que sea rápido- cedió el rubio dando un suspiro

-Él aun te ama…- el corazón de Naruto se congelo

-Tú no sabes nada- decía Naruto frunciendo el ceño

-Lo que te digo es verdad…

-Si el me amara no me hubiera dejado ir hace tres putos años, no me busco, no me llamo… no hizo nada, simplemente dejo todo a la deriva, tu hipótesis es falsa- el rubio sentía un calor adueñarse de su cuerpo al recordar que aún había un enojo con Sasuke

-No es una hipótesis, es una afirmación- rebatió Sarada tornando su rostro serio- Él no te olvido, sé que mi padre es un tanto torpe con eso de demostrar emociones o sentimientos, pero lo que te digo es verdad…

-Pues yo ya no lo amo

-Mientes, esa canción dijo todo lo contrario- rebatió Sarada- supe de ti por primera vez, cuando encontré en la computadora de mi padre una foto de ustedes- Sarada saco su teléfono celular y comenzó a buscar algo en este, hasta que llego a su galería y encontró lo que buscaba- Este eres tú y mi padre en aquel entonces- Sarada mostro una foto selfie donde Naruto y Sasuke se estaban besando. Naruto sintió un vacío en el estómago hace años él se había encargado de borrar cada fotografía, cada recuerdo- Tengo la teoría que mi estúpido padre te dejo ir por nosotras… por mamá y por mí, por el que va a decir la familia Uchiha, particularmente mi abuelo… pero…

-Pero…- Naruto estaba intrigado y solo quería que aquella mujer siguiera hablando

-El murió hace dos meses, así que ahora mi padre tiene carta libre de hacer con su vida lo que quiere, fue un cobarde en no hacerlo antes y créeme sé que él se arrepiente cada día de ello- Sarada solo relajo su rostro y se quitó los anteojos.

-Pues es demasiado tarde

- ¿En serio? - cuestiono la pelinegra- ¿Ya no hay ni una minúscula pizca de esperanza? Escucha, sé que fui un error, Naruto, sé que mis padres se casaron por mí, he hicieron lo mejor que pudieron pero si algo estoy segura es que jamás se amaron… veía a mi mamá triste por el rechazo de mi padre que nunca comprendí… hasta que… él se fue a vivir a Tokio, su voz cambio, su humor… los mensajes que me enviaba, sus ausencias en vacaciones, su maldito mal humor aquellas vacaciones de navidad… sabía que algo había… así que bueno espié y me tope con esta fotografía y todo tuvo sentido, mi papá es gay… gay hasta los hueso, por eso no pudo llegar a amar a mamá a pesar de que es una excelente mujer. Mis padres solo son muy, muy buenos amigos…

Naruto escuchaba aquella narrativa que en su momento la escucho del pelinegro que tanto amo. Su corazón le creía sin dudar a aquella mujer, pero su razón solo le decía que corriera, que huyera, que tomara el consejo de Shikamaru y Gaara y se largara de ahí.

-Se que mis padres me aman mucho, y que ellos renunciaron tanto por mi- Sara comenzó a llorar- No sabes cómo me sentí durante mi adolescencia, me sentía tan culpable por que por mi ellos estaban juntos y no pudieron vivir cosas, conocer personas… pero después de mucha terapia comprendí que ellos lo eligieron y que eso a mí no me corresponde más que ser la mejor para mí y hacer que todo ese sacrificio valiera la pena- Sarada se limpió sus lágrimas- Es por eso que estoy aquí frente a ti Naruto Namikaze, quiero devolverles algo a mis padres, un poco de lo que tuvieron que renunciar por mi

-Sasuke, no se arrepiente absolutamente de haberte tenido - decía Naruto también comenzando a aguarse sus ojos – él me lo decía, eres lo mejor de su vida…- Naruto vio como los ojos de Sarada se iluminaban- Pero ya es muy tarde para tu padre y para mí, ¿sabes?

- ¿Por qué Naruto?, si es claro que tú lo amas aun- Sarada tomo al rubio por los hombros y vio como el rubio le sacaba varios centímetros de alto

-No fue suficiente la primera vez… él se fue de mi

-Ahora todo es diferente, mi papá es libre en todo sentido, de los estúpidos prejuicios de la familia Uchiha y de mi madre…- respondía desesperada Sarada.

- ¿De tu madre? – Naruto sentía un vértigo apoderarse de él

- Mi mamá también tuvo su historia, ¿sabes? - Sarada se volvió a colocar los anteojos- Mi mamá era la loca mejor amiga enamorada de mi padre, supongo que lo sabes, tal parece que mi padre fue transparente contigo, en fin- Sarada suspiro- Pero justo semanas antes de aquella maldita fiesta… mi madre conoció a alguien, que la comenzó a conquistar, a enamorar… y ella estaba poco a poco dejando de fijar su atención y amor en mi padre, pero por desgracia bueno… llegue yo y ella tuvo que renunciar a él.

-A… él…- Naruto se estaba comenzando a sentir mareado, si no fuera porque Sarada lo sostenía de ambos brazos, el rubio juraría que se caería al suelo.

-Lo volvió a encontrar hace ocho años- Sarada sonrió- Se llama Rock Lee y es el hombre más divertido y peculiar que conozcas, digamos que quien fue primero infiel en el matrimonio Uchiha- Haruno, fue mi madre. - Naruto abrió los ojos ante la información recibida- Iban y venían porque obvio mi mamá se sentía la más culpable por estar con alguien que no era su esposo, por esos estúpidos yugos familiares que amarraban a mis padres, pero sin mis abuelos vivos ellos ahora son tan libres… Rock Lee le ha pedido a mi mamá que se escapen.

Naruto sentía el mareo aumentar y como su estómago comenzaba a revolverse. No pudo aguantar más y se deshizo del agarre de Sarada y tiro el casco el cual reboto en el suelo y corrió a la jardinera más cercana y comenzó a vomitar. Sentía todo el alimento y el poco alcohol que había consumido pasar por su garganta y salir de su boca.

-Sarada…- llamo una voz gruesa haciendo a la pelinegra voltear y se topara con su padre.

Continuara…