Ni Sailor Moon o sus personajes me pertenecen, todo es propiedad de Naoko Takeuchi. La historia fue hecha para mero entretenimiento del lector y escritor.


14

—Así que piensas que tienes agallas mocosa.

Me dice el matón que se hace pasar por director de esta horrible escuela, mis ojos se mueven frenéticamente de un lado a otro para poder darle sentido a lo que está ocurriendo.

—¿Tú eres Haruka Tenoh? —el aura que lo rodea es negra, sus ojos me quieren dar un tiro entre las cejas. Honestamente no creería que es el director de la preparatoria si no tuviera la placa que presume su puesto en ella —. Seguramente te crees muy genial con esa pinta de estudiante desfachatada y rebelde.

Lo miro directamente a los ojos, trago saliva porque mi boca está seca, estoy parada con las manos en la espalda. Mientras que el director espera por mi respuesta.

—¿Usted también lo cree? Claro que soy la persona más genial de la escuela, después de todo soy la protagonista de la historia.

—¡Miserable animal! —se ofusca— con qué tranquilidad te atreves a dar ese tipo de respuestas. ¡Punk de mierda! Lo peor de todo es que te atreves a admitirlo, niña tarada.

Grita y comienza a señalarme, yo muevo un poco mi rostro a la derecha porque este sujeto tiene aliento a papas con aderezo de cebolla. Y si eso no fuese tan desagradable, me parece bastante corriente que me apunte con su dedo tantas veces.

—Será el director de la escuela, pero es demasiado corriente ¿acaso no tiene modales?

—Ah, pero Meioh me había advertido que eres un mico descerebrado.

—Sabe, no tengo tiempo que perder con usted. Mejor me retiro.

—¿Qué dices?

—Me largo de esta oficina, ya no puedo con el olor desagradable del aderezo de cebolla.

«Este engendro es peor de lo que me esperaba» musita, mientras yo me doy la media vuelta para salir de ese lugar.

—Alto niña del demonio —grita y regreso mi atención al director— ¡estás aquí porque te metiste en serios problemas!

Yo me rasco la nuca, porque no recuerdo haber cometido algún delito… oh, puede que sí, pero no esta semana y sin cuerpo no hay delito. Así que no es justo que me quieran disciplinar por algo que ya no tiene importancia «criiii» rechinan algo.

—Pero… lo más importante de todo esto es…

—¿Qué? —respondo de forma retadora.

—¡Qué demonio haces en mi oficina Michiru!

—Buen día señor director —dice alegre.

—Ah Michiru —mi tono no es de felicidad, me asombra que tenga habilidades ninja porque no noté que entrase en el lugar— ¿viniste detrás de mí?

—Claro, no podía dejar a mi bebé fiu fiu sola.

—¡Michiru, tú deberías de estar en clase! —le grita el gánster.

—Y eso es lo que planeo hacer… —su mirada se torna fría de repente— tan pronto sepa lo que necesita de Haruka.

La frente de ese hombre comienza a hincharse, puedo ver como las venas de su frente se llenan de sangre y la mirada de autoridad que vuelca sobre Kaioh es muy intimidante. Vaya ni mi padre me mira de esa forma… yo me balanceo de un lado a otro para alejarme, es más parezco un pingüino que comienza a caminar. Pingüinos, son tan estúpidos ¿sabían que los emperadores hacen reverencias para cortejarse entre ellos? Aves presumidas y elegantes «puff» me llevo las manos a la boca, no pienso reírme de los pingüinos.

—¿De qué te ríes escoria?

—No tiene derecho de hablarle así a sus alumnos, esa es una ofensa muy grande y un abuso de autoridad.

—¡Michiru! Ya empezaste a hacer lo que se te viene en gana, solamente porque eres una alumna modelo y de primer nivel en esta sagrada institución. Te estás volviendo insolente y arrogante.

¿Recuerdan la cara del director llena de molestia? ¿Esa que le brindaba a Michiru? Bueno… en este momento, el rostro de mi amiga con cabellos color aquamarinos se torna similar. Solamente que Michi se ve más linda.

Amiga date cuenta.

¡Qué dejes de molestar escritos de mierda! Es mi monólogo y yo decido cómo describo a estos personajes. Con una chingada, parece que te gusta molestar y… no desviemos el tema. Regresemos a Michiru, su aura también se torna negra. Supongo que lo mejor es hacer lo mismo que hace un rato y caminar como pingüino, este par parece querer matarse.

—Creo que la boca le sangra respetable señor director. Ya le dije que lo que usted hace con Haruka "increíble" Tenoh es un abuso de poder y no dejaré que se pase de la raya con ella.

—¡Michiru Kaioh, es la última vez que permito que me respondas de esa forma! —golpea su escritorio y se levanta de la silla.

—¿Me está desafiando director? —lo imita… aunque ella ya estaba de pie.

—Puff qué fuerte pana —digo para intentar salir de esta rara aura en la que estamos. Hay una tensión bastante extraña entre este par y siento una gota de sudor recorrer mi rostro— Puedo retirarme si es lo que…

—¡Tú no te mueves de esta oficina! —me gritan al mismo tiempo.

—Vale, yo solamente decía —levanto mis manos para que disculpen mi atrevimiento. Vaya par de locos.

—La alumna Tenoh está en esta oficina porque me han llegado rumores de que te hacía bullying. Por esa razón llorabas por los pasillos de esta preparatoria y te obligaba a hacerle su almuerzo o podías recibir una paliza de esta troglodita.

—¿Yo soy troglodita? —me señalo.

—¡Cállate Tenoh!

—Bueno, es que se me hace algo demasiado brusco para referirse a…

—¡Qué cierres la boca! —vuelve a gritar.

—Haruka, deja que me haga cargo del asunto —me sonríe de una forma linda y sincera. Yo simplemente me limito a asentir a la indicación y siento mi rostro caliente.

—¿Te importaría explicarme la razón por la que no me reportaste las cosas inmediatamente? Tuve que enterarme por otras personas. Algunas de ellas eran un tanto raras… llevan una foto tuya en una camiseta y eso me dio mucho miedo.

—No lo reporté porque eran un montón de mentiras. Además, si me vieron llorar por los pasillos de la escuela se debía a las peleas que tuve con Haruka, pero debo aclarar que no fueron físicas. Es normal en las relaciones de amistad tener malentendidos de vez en cuando.

—¿Amigas?

—Haruka y yo somos grandes amigas ¿no es así bebé fiu fiu?

—Eh… pues… claro, por supuesto —paso mi mano detrás de su hombro y la abrazo, la acerco a mí porque ese director me sigue mirando de una manera asesina. Lo mejor es hacerle creer que somos muy cercanas—. Las mejores amigas del mundo.

Pero al parecer la información que acabo de ofrecer no es la mejor que escuchó el director, porque si ya su cara estaba llena de venas, ahora parecen querer explotar por la furia que tiene dentro.

—Haruka… —Michiru se pone roja y luego lleva su mano izquierda a su boca para ocultarla— haces que mi corazón quiera salir de mi pecho. Todo con el simple hecho de que me tocas y me acercas a ti, ¿quieres tocar mi pecho? Necesitas comprobar que lo que digo es real.

—¡No hagas eso Michiru! Deja de intentar llevar mi mano a tus senos, se ve mal y muy raro.

—¡Maldita indecente, eres una pervertida! ¿Cómo te atreves a querer manosear a Michiru?

—¿Qué mierda le pasa? ¿No ve que la loca es ella? Yo no quiero tocar nada de Kaioh.

El tipo bufa y muestra su puño, creo que quiere controlarse para no molerme a golpes. Pero les juro que yo no… no quería tocarla, Michiru está loca.

—De acuerdo, digamos que la punk Tenoh no te acosaba o molestaba Michiru… ¿qué pasa con las otras estudiantes a las que golpeaste hace unos días? Estaban en el hospital y por eso no podían reportarte. Además de que vandalizas la escuela pintando en el suelo, corres por los pasillos haciendo escándalo y ni hablemos de tus malos modales…

—Mire quien lo dice.

—¿Qué dijiste mocosa?

—Usted me señaló al inicio del capítulo, así que muy educado no es.

—¡Maldita revoltosa! —explota de nueva cuenta— Crees que no sé que hiciste que hubiera una guerra de comida, artículos escolares y otras cosas en los pasillos de la preparatoria Juban.

Michiru y yo nos ponemos pálidas, creo que la muy idiota se siente culpable porque fue su culpa. Esa vez que intentaba "seducirme" con la mirada, yo pensé que me estaba retando y esa fue la razón por la que comencé ese desafortunado incidente. Idiota Michiru ¿qué no ve que este sujeto me odia? Y eso que no me conoce.

—Si no fuera porque tienes calificaciones promedio, no entendería la razón por la que permaneces en la preparatoria Juban. Pero eres una catástrofe en lo demás mocosa del demonio, ¿qué es lo que piensas?

—Pues… sabe… soy la protagonista de la historia y debo sobresalir. Así que es normal que tenga actitudes destacadas y una personalidad única.

—¡Única mis polainas!

—¡Oiga, se está pasando de listo! —desafía Michiru.

—Bueno… además llevas el uniforme de la escuela como se te da la gana, no usas la corbata de marinero escoria. Es una gran falta al código de vestimenta de la escuela Juban. Te la pasas manchando el buen nombre de esta institución y todo porque se te antoja ser una salvaje y una punk… ni hablar de la forma en la que te peinas, si a eso le puedo llamar de esa manera. Tu aspecto es descuidado, como de indigente.

—¿Descuidado? —le respondo confundida.

—No es cierto —interrumpe Michiru—… mi Haruka se ve genial de esa manera y es demasiado hermosa. Si usted dice lo contrario es porque está ciego o de plano está loco.

—¿Tú Haruka? —el director parece no haber escuchado más que eso.

—Ese es su estilo y no puede sancionarla por eso, es libertad de expresión.

—¡Michiru tú eres miembro del consejo estudiantil! No puedes dejar pasar este tipo de conductas o los otros alumnos harán lo que se les dé la gana.

—Igual se ve genial.

—Demonio… eso no me importa… Mira Tenoh, puedes estar en esta escuela por tus calificaciones, pero tu suerte de continuar por los pasillos de esta escuela está comenzando a agotarse. Como dije, no solamente es el tema de como luces… golpeaste a otras estudiantes y todas las acciones malas tienen consecuencias. He decidido que quedas expulsada de la escuela.

—Genial, entonces yo también dejaré este lugar —responde Michiru.

—Tú no te mandas sola Michiru —se molesta el director.

—El mundo sin Haruka, no vale la pena ser vivido.

—¡Esto es una escuela! —le grita.

—Me vale, me voy… acaba de perder dos estudiantes.

—Pero yo no hice nada malo.

—Ya te dije que esas alumnas vivieron a reportarte y contra esa paliza tienen pruebas.

—Haruka no golpea gente… —eso no lo dice de forma confiada, pobre Michiru.

—Lo siento, dije que ya lo decidimos y Tenoh se va de esta escuela.

—¡Alto! —la puerta de la oficina se azota.

—Seiya —suspiro.

—¿Por qué los estudiantes destacados piensan que pueden entrar a mi oficina como si de su hogar se tratase? —se molesta.

—Porque el mundo es el hogar de todo ser vivo —responde el guapísimo Seiya.

—No es guapo —Michiru me habla al oído.

—¿Puedes dejar de revisar mi monólogo? Intimidad Michiru, a eso se le conoce como intimidad.

—Cómo sea, no es guapo.

—¿Qué demonio quieres Kou?

—Me parece que hay cierta información errónea, estimado director.

—¿Cuál es el error?

—Hanna no hizo nada malo —me mira.

—Se llama Haruka —responde muy molesta Michiru.

—¿No?

—Hay unas estudiantes que no actuaron de forma honesta con usted y desean disculparse. Entienden que en la preparatoria Juban las personas mentirosas no son queridas, pero sobre todo… deberían ser destruidas —eso lo dice de manera intimidante.

—¿Qué?

—Lo sentimos señor director…

—Nosotras queríamos disculparnos con usted y Tenoh…

—Es que…

—Malditas bitches five —las miro con rencor.

—Nos pusimos celosas de que le habla muy bien a Seiya y a…

—Kaioh —responde otra.

El director las mira molesto, se sienta y recarga sus codos en el escritorio… de nuevo esa aura negra aparece.

—Ya hablaré con ustedes… debido a esta nueva información la expulsión de Tenoh se cancela.

—¡Genial! —grito.

—Yo no estaría tan feliz vaga inmunda —responde—. Deberás hacer servicio comunitario en la escuela, eso por rayar estas instalaciones. Así que limpiarás la basura de la escuela, además… deberás venir a dar clases de regularización para tus compañeros que no tienen buenas notas en matemáticas. Cosa que significa que vendrás el fin de semana.

—Usted solamente quiere mano de obra gratis, que tacaño es señor director —dice Michiru.

—¡Deja de responderme de esa forma Michiru! Esto no es trabajo gratis o mano de obra barata, es enseñarle a esta amenaza disciplina. Solamente será hasta que esta infeliz aprenda a ser educada y respetar la escuela… cosa que dudo mucho que ocurra.

—Mmm… —no digo más.

—Al parecer Kou y Michiru te estiman, no entiendo la razón… pero es mi deber notificar del castigo a tus tutores legales… ¿entendiste demonio?

—Sí —respondo molesta.

—Está decidido, ahora regresen todos a sus clases.

Las tontas de Mimet y sus amigas salen antes, luego Seiya lo hace, yo lo sigo porque deseo agradecerle que viniera a ayudarme. Digo, hizo que esas locas dijeran la verdad sobre lo que pasó, que toso se lo habían inventado…

—Michiru —escucho que la llama el director, me alejo, no quiero ver que se maten…

—¿Qué quiere?

—Si fuera tú, no me acercaría tanto a esa niña. Te conviene alejarte de ella o arruinará tu reputación, te puede arrastrar al caos… sabes, los amigos dicen mucho de nosotros.

—¿No recuerdo haber pedido un consejo? Y que le quede claro… —le sonríe al hombre— no quiero alejarme de Haruka.

«Blam» se cierra la puerta con mucha fuerza…

—Esa niña… —el director se concentra en un punto fijo en su escritorio— se está volviendo rebelde. Recuerdo cuando era más sensata y obedecía todo lo que decía sin chistar… no cabe duda que la adolescencia es una etapa difícil. Pero yo no fui así con mis padres… ¿estará enojada porque no fui a su recital de violín?

Tu madre dijo que tocaste divinamente, me grabó el recital… sabes, lamento mucho no haber llegado, pero he tenido mucho trabajo —dice esperando la respuesta de la chica de cabellos aqua—. Si quieres te puedo llevar a tomar un helado e ir al zoológico o comer pizza a ese lugar donde tienen robots que bailan en un espectáculo. Es tu lugar favorito ¿no Michi?

Vete — y luego azotó la puerta de su habitación.

—Desde ese día me ignora y reta… seguramente se junta con esa mocosa para hacerme sufrir… no deberías ser tan resentida hija mía. Además ¿por qué dice que esa punk es suya?

Continuará…


Queridos lectores, lamento mucho el retraso que he tenido con esta historia. Como se darán cuenta he estado ocupado… con cosas del trabajo y la escuela. Sí, he regresado a la universidad para estudiar una segunda carrera y este fin de cuatrimestre estuve ocupado.

Además de que la historia de las canciones de Benito me tenía loco, pero prometo no escribir nada más que esta historia y hasta terminarla me alejaré de la inspiración ja ja ja.

Sin más que decir…

RoshellBrief: no te preocupes que yo he tardado una eternidad en actualizar. Ja ja ja, es que Michiru es una cosa del demonio, la amo como no tienes idea. Ah, no recuerdo tu respuesta, ¿me la recuerdas?

Kyoky: han pasado 1500 años desde que pasé a responder uno de tus mensajes. Todo porque ALGUIEN no escribía.

Claro que todas amamos que mico y Michiru tuvieran ese momento juntas porque se quieren, se aman y la única que no se da cuenta es la terca Haruka jejejeje. Ha sido un placer responderte de nuevo y recemos para que alguien no se tarde de nuevo.

Chicos, gracias por su espera y seguir leyendo. Lamento que el capítulo sea corto, pero vienen más cosas. Por cierto, el título de hoy nos los trae Magic, Haruka ya conoció al suegro ja ja ja.

—No olviden activar el follow o fav para que su mail haga TOLÓN, TOLÓN cuando actualicemos las historias y…

Les enviamos un fuerte abrazo a los lectores que comenta y a los ninjas. Nosotros dónde nos leemos Tori…

—En fanfic, またね!