Disclaimers: Harry Potter, los personajes, los nombres y los signos relacionados son marcas comerciales de Warner Bros. Entertainment Inc., los derechos de autor de la historia "Harry Potter", pertenecen a J.K. Rowling; por lo tanto, son usados sin intención de lucro alguno, la historia paralela, al igual que los personajes originales, me pertenece en su totalidad, y no pueden usarse sin mi autorización, cualquier tipo de adaptación de esta historia está prohibida.

Hola, ojalá les guste, gracias por todo el apoyo.

Este aporte está participando en el Drinny-Con 2022, organizado este año por la página de Facebook "Drinny All The Way".

Palabra/Tema del día:

XXIV. Concierto.


Draco dio clic sobre el botón de comprar, ni siquiera se dio cuenta cuando hizo la compra de aquellos boletos, solo sabía que era la banda favorita de Ginevra Weasley, y que estarían dando un único show en la ciudad, antes de volver al retiro, The Weird Sisters, una banda sin chiste, si le preguntaban, tan antigua como el mismo Inglaterra, pero ella los amaba.

Los boletos se acabaron a los pocos segundos de que llegara su confirmación, realmente muy poca gente era la privilegiada para ir a ese evento tan limitado como lo podrían ser 300 personas.

Sujetó su teléfono y tomó una fotografía.

"Sé que me pediste que no volviera a buscarte, pero compré esto, puedes llevar a tu nuevo novio, y al padre de tu hijo".

Como lo suponía, no hubo contestación a su mensaje, tal y como al inicio de su amistad, aquello le traía tantos recuerdos, quizás debió ser más honesto con ella desde el inicio, acercarse de cualquier otra forma.

Después de todo, como se lo había dicho, nunca estuvo en su mente enamorarse y acostarse con su escritor favorito, principalmente porque pensaba que era un hombre por arriba de los sesenta, heterosexual y con esposa, aunque lo había dicho, algunas veces, no le molestaba con tener un poco de curiosidad, sin llegar al sexo.

Solo quería ser su amigo, poder charlar con una persona con una mente tan fascinante como la de McCarter, sin ser un maldito fanboy, no contaba con que era una chica, realmente preciosa.

Aventó el celular lejos de él, ella no iba a contestar, y para su desgracia, lo odiaba tanto, que ni siquiera aprovecharía para ir al concierto con su nuevo novio, se talló la barbilla ¿quizás era peligroso para su embarazo estar en un concierto?

Era un imbécil.

Mejor la aventaba por un precipicio para que perdiera al bebé, era menos obvio que enviarla a lugares así.

Se recostó sobre su cama apesumbrado, cuando se trataba de ella, no podía evitar ser un imbécil, no había nada en el mundo que no fuera capaz de hacer por ella.

Bueno, quizás dejar de molestarla, como se lo había pedido.

Ginny saltó de su asiento cuando vio la foto, los boletos para el único concierto que The Weird Sisters daría en aquella bodega de Londres, como aniversario 50 de la primera vez que tocaron en ese sitio que solía ser un pequeño bar.

—Estás temblando, ¿qué pasa? –Preguntó Luna.

—Son boletos para TWS –dijo entusiasmada.

—Dijiste que se agotaron en segundos.

—Al parecer aún logran tener 300 fans sin artritis y rápidos –sonrió encantada.

—Oh, bien por ellos, me imagino que todos estarán en silla de ruedas compartiendo sus antiácidos –se burló la rubia –pero ¿quién fue tan rápido? –Cuestionó.

Ginny observó quién le había mandado la foto, puso mala cara al ver que era Draco, le mostró el mensaje adjunto, Luna Lovegood, la única persona en el mundo que sabía todo lo que había pasado entre ella y Draco Malfoy.

—Ve al concierto, ya gastó en ellos, digo, veinte libras, pero es un gasto –se burló.

—Sabes lo que ocurre, Luna.

—Sí, sé que cometió un error, pero para ser justos con el chico, él no mandó a Pansy a masturbar a tu novio, ni a tu novio dejar que ella lo hiciera.

—Pero...

—Oh, vamos Ginny, deja de actuar como una rencorosa, sino culpas a Harry por lo que pasó, ni siquiera a Pansy ¿por qué a él sí? Somos adultos, cada quien tiene que aceptar sus actos y responsabilidades, y hasta el momento, el único que lo ha hecho, es él, ni siquiera tú.

—Tienes razón –aceptó.

—Además, toma esto como un nuevo inicio, lleva al chico al concierto, acuéstate con él, prende en llamas a Londres como si fueses una adolescente loca escuchando un grupo de rock del geriátrico más cercano –sonrió.

Ginny no contestó, se quedó tres días contemplando la posibilidad de hacerle caso a su amiga y a todo lo que aunque no quería, Draco Malfoy seguía provocando en ella.

Gruñó por ser tan débil.

Tomó su teléfono y comenzó a contestar el mensaje.

"Me parece que es más sensato pagar a una mujer embarazada un aborto que unos boletos de un concierto, pero tengo que recordarte algo más, en realidad, eres el último tipo con quien me he acostado".