Carter jamás había conducido de una manera tan imprudente, bueno, tal vez esa ocasión en la que había estado escapándose... pero ese no era el asunto. Tan pronto llegó al sótano de su departamento bajó deprisa hacia el ascensor (dicho sea de paso, su abrigo estaba en el auto) pero como se demoraba tanto subió corriendo por las escaleras hasta el séptimo piso, que era donde el vivía. Entró por la puerta falsa, pues el ascensor daba a la sala y se fue a la cocina donde tenía un teléfono y apretó un botón y luego el número 5, llamando así al celular de Deb.
-Hola Carter –dijo Deb desde su celular, estaba riendo
-Hola, estemm... ¿Dónde estas? –preguntó tratando de sonar curioso y no preocupado
-En casa de Lucy –dijo Deb mientras veía que ella hacía señas para que cortara –Te manda saludos
-Ah... y... ¿están bien? ¿Las dos? –dijo Carter más aliviado
-Sí, gracias, lo peor que puede pasar es que Lucy se ría tanto que le duela la barriga
-Ah, bueno cosa de chicas ¿No?
-La verdad sí –dijo Deb
-Okay, entonces, las dejo para que sigan hablando de mí –dijo Carter muy aliviado cuando escuchó la risa de Lucy
-No estábamos... nosotras no... no te habíamos mencionado –dijo Deb algo nerviosa porque la broma de Carter no había sido del todo una broma
-No te preocupes, sé que no estaban hablando de mí, de todos modos me tengo que ir, cuídense, adiós
-Adiós –dijo Deb y con eso colgó el teléfono y se carcajeó de la risa con Lucy
Mientras que en la casa de Carter todo había vuelto a la tranquilidad (y el corazón de Carter latía a un ritmo humano), en la casa de Lucy todo se estaba poniendo emocionante. Desde la llamada de Carter, las chicas se habían puesto en una fase que parecían, Tontas. Con cada comentario de Deb sobre la conversación, las dos se reían de una manera única, se rieron de tal manera que a las dos les terminó doliendo la barriga, en especial a Lucy que también estaba roja de la risa.
-Deja de hacerme reír o me va a doler mi pancita –dijo Lucy que intentaba acabar de reír
-¡Oh por favor! Si tu tienes "pancita" –dijo Deb señalado el plano abdomen de Lucy –Yo soy una vaca
-¿Qué quieres decir? –dijo Lucy –Sí tú eres flaquísima
-Tu más –dijo Deb
-¡No!
-¡Sí!
-¡Que no!
-¡Que sí! –dijo Deb y las dos se echaron a reír nuevamente
Al final, Deb salió victoriosa de la "peleita" que había tenido con su mejor amiga; era mucho más cercana a Carter pero Lucy era su mejor amiga mujer. Contenta por su victoria, Deb se puso a molestar a su amiga, contándole que Carter había estado preguntando por ella y cuando ya no supo qué hacer para que lo que había repetido una y otra vez sonara gracioso, se puso a hacer su mejor imitación de la voz de Carter y comenzó a hacer como que su amigo quería invitarla a salir, usando las típicas oraciones que siempre decía, algo como "Hola Lucy... ehmm... quería... quería saber si... si querías salir conmigo hoy" decía Deb pero entre pausa y pausa estallaba de la risa, igual que Lucy mientras ella pensaba que su mejor amiga estaba loca pero que imitaba muy bien a su mejor amigo. Eso era algo que tenían en común, ambas eran las mejores amigas, y tenían como mejor amigo a Carter.
El día viernes, cuando Lucy vio por su ventana, estaba nevando. Ese día las dos tenían turno, bueno, Lucy solo debía hasta las siete de la noche, así que se disponía a despertar a su amiga cuando sonó el despertador haciendo que Deb saltara hasta el techo, pero haciendo que despierte efectivamente. Estaban camino al hospital en el auto de Deb cuando recordaron que no habían hecho las compras de navidad, y tan pronto como recordaron eso quedaron en ir a comprar juntas el día domingo, porque Deb le contó que tenía una cena de "negocios" el sábado, pero no le dijo que también iría Carter.
La mañana transcurrió tranquila, en el empresa las cosas se iban calmando, y en el hospital no fueron ingresados muchos pacientes. Carter se pudo comunicar con sus amigos del hospital por medio de mails, porque la computadora de su abuelo tenía el Messenger bloqueado. Los chicos se pasaban fotos de ese mismo momento, los chicos le mandaron una foto de ellos mismos que había sido tomada ese mismo día y Carter les mandó una de él mandándoles el mail desde la oficina de su abuelo. Luego recibió un mail que decía lo siguiente:
Oye Carter, bonita oficina la que tiene tu abuelo, es mejor que la que te dio Romano definitivamente pero déjanos decirte algo, no te molestes pero te vez horrible, ¿Cuándo fue la última vez que dormiste? Bueno no importa, de todos modos vamos a vender tu foto a las chicas, jeje, según Romano podríamos recaudar buenos fondos, porque las chicas del hospital babean por ti (no es broma) En el mail anterior nos dijiste que estaban haciendo balances, dice Mark que eso apesta. Voy a ver si más tarde me doy una vueltita por ahí, soy Peter, o tendría que ir con traje? Responde ah!
¿Quién mas te va a escribir así?
Nosotros
Tal como me lo pidieron les estoy respondiendo. Mark, tienes razón, hacer balances apesta. Robert, la oficina que me diste esta bien, pero no voy a negar que la de mi abuelo esta buena y la que yo tengo tampoco esta mal, y sí, tengo 3 oficinas, que puedo decir? Soy lo máximo, jeje. Peter, no tienes que venir con traje pero no creo que sea muy bueno si vienes en scrubs, aunque una vez casi vengo así. Resultó que me quedé dormido y vine en jeans y la parte de arriba de los scrubs azules y tenía una reunión importante, bueno, que diablos, no se atrevieron a decirme nada. Lo siento pero ahora si tengo que trabajar, en un rato va a venir un "cliente de un millón de dólares" como diría mi abuelo pero seguro que es de más, ustedes sigan escribiéndome y yo les respondo tan pronto pueda.
Muchas personas me pueden escribir así
Carter
Mientras que los chicos estaban en la oficina de Romano "hablando" con Carter, las chicas estaban teniendo una reunión. No era nada formal ni de trabajo, era solo una reunión de grupito para ver cuando iban a hacer la pijamaza para el "rito de iniciación" de Deb. La fecha fue planteada para el jueves 23 y cuando les preguntaron a Lucy y Deb si tenían algún problema por lo de los turnos ellas dijeron que no pues la otra fecha habría sido en enero. Aparte de hablar de la pijamaza se pusieron a hablar de cualquier otra cosa menos de trabajo pero luego de un rato Lucy se tuvo que ir puesto que su descanso había terminado. Cuando Lucy se fue, la chicas comenzaron a interrogar a Chen acerca de cómo iba todo con Carter. Ella les dijo que no les iba a poder decir mucho porque eso era un asunto entre ella y Lucy, y no quería arriesgar su amistad, claro que después de un rato Deb tuvo que abandonar la reunión porque la estaban volviendo loca con las "indirectas" que las chicas le estaban mandando como: "Oye ¿sabes qué es de la vida de Carter? ¿Qué fue de esa Brenda?"
La tarde cayó rápido en el E.R, antes de que se dieran cuanta ya eran la un cuarto para las cinco de la tarde y Peter había ido a visitar a Carter, claro que le había avisado antes. Cuando Peter se encontraba a la puerta del edificio se quedó sorprendido de lo alto que era y él sabía que la oficina del abuelo de Carter quedaba en el piso más alto. Algo inseguro al ver que todos estaban en trajes caros y él en un pantalón de vestir y cualquier camisa, se acercó a la recepción, donde Angie estaba hablando con la secretaria del costado.
-Buenas tardes, ¿Puedo ayudarlo en algo? –dijo Angie dejando de hablar de Carter con su compañera, no tenían nada más interesante de lo cual hablar
-Sí por favor, quería saber dónde puedo encontrar al Sr. Carter –dijo Peter
-¿Cuál de los dos? –dijo Angie pensando en Carter
-John Carter, el que es doctor –dijo Peter
-No sé si él este disponible ahora pero si quiere esperar...
-¡Peter! –dijo Carter saliendo del ascensor y cortando a Angie
-Hola Carter –dijo Peter
-Un momentito, ¿Se conocen? –dijo Angie sorprendida
-Sí, él fue mi profesor –dijo Carter –Como cirujano
-Oh, lo siento mucho señor, es que muchas personas se presentan intentando hablar con el Dr. Carter sin tener cita
-No se preocupe –dijo Peter
-Angie, va a venir un mensajero de la empresa, dale por favor estos documentos y diles que las lleve a esta dirección –dijo Carter entregando un sobre sellado y un papel con la dirección y el nombre del destinatario –Es urgente
-No se preocupe –dijo Angie con los ojos clavados en Carter
-Gracias –dijo Carter con una sonrisa –¿Subimos? –le preguntó a Peter
-Claro –le respondió
Una vez en el ascensor, Peter comenzó a fastidiar a Carter con el hecho de que se le veía como todo un hombre de negocios, antes Carter se habría matado para no tener que involucrarse con la empresa pero ahora se daba cuenta que los negocios eran interesantes, no tanto como la medicina pero bueno, ese día había aumentado considerablemente su fortuna al conseguir unos inversionistas. Al llegar a la oficina de Carter, Peter se quedó sorprendido pero cuando vio la oficina del abuelo de Carter, que estaba en el piso 32 y era inimaginablemente grande se quedó con la boca abierta.
Cuando dieron las Seis, Carter se fue de la oficina y dejó a Peter en el hospital, luego llamó a la casa de su abuela para visarles que estaría algo tarde pues se había presentado un pequeño inconveniente. Lo que dijo Carter era cierto y falso al mismo tiempo, lo cierto era que iba a estar tarde y lo falso era el inconveniente, porque lo que hizo fue ver si estaba Lucy para preguntarle si le podía hacer un favor. Con la motivación de hacerle una pregunta en privado a Lucy le ofreció llevarla a su casa cuando vio que estaba firmando su tarjeta, y como estaba nevando ella aceptó. Una vez en el auto, Carter comenzó a reunir valor para hablarle.
-¿Cómo te fue en tu turno? –le preguntó Carter
-Bien, y ¿A ti como te fue en la empresa?
-Bueno, fue un día tranquilo pero...
-Déjame adivinar, tienes montones de papeles por llenar
-La verdad sí, y eso me lleva a una cosa que te iba a preguntar
-Si es que es ayudarte a llenar papeles déjame decirte que no soy muy buena para eso
-Jajaja, claro que no, mira todas las historias y cosas que llenas perfectamente
-Bueno, gracias, pero ¿Qué me ibas a decir?
-¿Vas a hacer al hoy? –preguntó Carter
-No, ¿Por qué?
-Me preguntaba si podías... ir a mi casa y... ayudarme a mantenerme despierto, tu sabes, hablarme, hacer ruido, estando acompañado no creo que me quede dormido –dijo Carter sonrojándose un poco
-Bueno, no creo que haya problema, además soy buena evitando que te duermas –dijo Lucy sonriendo
-Míralo de esta manera, ahora puedes desquitarte por todas las que te hice cuando eras estudiante
-Venganza es mi segundo nombre –dijo Lucy riendo, la verdad era que no esperaba ir a la casa de Carter, y mucho menos que la invitara a pasar la noche, pero después de todo algo era algo, además por fin vería donde vivía Carter que según Deb era bellísimo.
Carter dejó a Lucy en su casa y le explicó que él debía asistir a la cena con sus abuelos, pero que para recompensarlo él la recogería entre las 7:30 y 8:00. Lucy llamó a Deb para cancelar los planes que habían hecho de hablar toda la noche y le contó muy emocionada que Carter le había pedido que le haga el favor de ayudarlo a no quedarse dormido, Deb le contestó que no se preocupara y que si creía que su departamento era bonito debía esperar a ver del de Carter, que según como lo describió era lo máximo.
Lucy estaba poniendo en una mochila las cosas que iba a llevar a la casa de Carter, como la pijama que a Carter le gustaba, sus pantuflas, su bata, su cepillo de dientes, su peine, Cds y algunas otras cosas. Para no ir al trabajo con la misma ropa que el día anterior, Lucy aprovechó el tiempo y se baño aprovechando también para ponerse la ropa con la que iría a trabajar al otro día, así no debía estar perdiendo tiempo regresando a casa para cambiarse.
Mientras que Lucy la pasaba bien arreglando sus cosas mientras que hablaba por teléfono con Deb, Carter no la estaba pasando de una manera tan divertida. La cena con sus abuelos estuvo bien, hablaron sobre la salud de Carter senior y sin luego le preguntaron a Carter qué era de su vida en la empresa y todo eso. Luego de cenar todavía quedaba tiempo, así que fueron a la sala de música y le pidieron a Carter que tocara algo en el piano, él les dijo que no había practicado mucho pero que iba a hacer su mejor esfuerzo, luego, cuando terminó de tocar y le pidieron otra tuvo que disculparse.
-Lo siento abuela, es que tengo algo que hacer –dijo Carter
-¿A esta hora? Son las siete y cuarenta –dijo Gamma
-No es ninguna cena Scoot, sino lo sabría –dijo Carter
-No abuelo, tengo que hacer unos papeles y una amiga va a ir a mi casa –dijo Carter sin querer dar más información de la que le convenía.
-¿Qué amiga? –preguntó rápidamente su abuela, Carter era su nieto favorito y quería estar al día en todo lo que pasaba en su vida, en especial si eran mujeres –¿La Elda esa?
-No Gamma, y se llama Brenda
-¿Entonces quién? –volvió a preguntar, más aliviada, por como la había descrito Carter no le agradaba
-Deja al chico en paz –dijo Carter
-Gracias abuelo, y es Lucy ¿De acuerdo?
-¿La rubia de ojos azules? Buena elección
-¡Carter!
-¡Qué! –gritaron los dos al mismo tiempo
-Carter senior, no le enseñes eso a Scoot, y Scoot, ella me cae bien así que será mejor que no la hagas esperar, menos mal que te deshiciste de esa Elda –dijo Gamma
-¡Brenda! Y no hemos roto, ahora, discúlpenme pero me tengo que ir –dijo Carter y cuando abandonó la habitación sus abuelos siguieron hablando
-No me gusta esa tal Elda, Brenda lo que sea –dijo Gamma
-Sí, además, Lucy es más bonita –dijo Carter senior –Pero también es buena gente y tiene buen sentido del humor y... tu entiendes –completó al ver la mirada que le lanzaba su esposa
-Mejor nos vamos a dormir –dijo Gamma
-Si querida –dijo Carter senior sin querer discutir más
TBC
