CAPÍTULO 10. Clases peculiares

Comentarios de los reviews:

SaraRTR: Bueno, es lo que hay. He empezado esta historia en el punto en el que más o menos estaba la relación de estos dos en el manga. Así que hay que ir forjando esa amistad/amor poco a poco *o*

Maria Violet: ¿Azúcar? Aún no me habéis visto en modo «almíbar». Pero llegará, no os creáis. Éste es mi primer intento de una historia de temática juvenil, así que me toca compensar la falta de temas más adultos con más toneladas de azúcar. Los romances juveniles suelen tratar amores desde una perspectiva más inocente o platónica así que este fic tiene algunos capítulos que tela ^o^. Y la verdad, aunque puedo escribir muy meloso, no estoy acostumbrada a sólo escribir en base a esto (y supongo que por eso me ha traicionado mi subconsciente esta semana T_T). Pero en general, estoy consiguiendo que me salga bastante tiernecito (y añado el «bastante» porque desde hace unos días hay por ahí un capítulo con un pelín de picante cuando no debería haber nada T_T. Pero bueno, es sólo un poquitín así que puedo dormir con la conciencia tranquila), y eso para mí ya es un triunfo.
Sobre el «para mí también» de Todoroki, creo que Yaoyorozu lo ha apreciado como es debido, no por nada la emocionó al punto de agravarle el ataque que le había dado XD (qué ricura *o*). Y en cuanto a que él sea algo torpe... pues me está saliendo más torpe ella que él (hablando en sentido romántico). Se nota a lo largo de la historia que ambos son muy nuevos en todo esto ^_^º

Kim Ishida: No, de verdad, vosotras no sabéis lo que es que me ponga en plan «necesito una dosis de insulina». Pero tiempo al tiempo ^o^

TamaoTomate: Me alegra que te guste que la relación fluya poco a poco. Por lo general, no escribo relatos. Yo soy de novela: me gusta escribir historias de amor más desarrolladas ^_^º. Así que eso es lo que vais a ver aquí XD

Nyxdark13: Bueno, ya dije que si se me ocurría algo para continuarla, lo haría XD. Cuando la inicié en su día, pretendía hacer una historia de amor para ellos. Así que estoy contenta de haberla podido continuar. Sobre lo que dices de seguirla en paralelo con el manga... buff, sería complicado. Este fic termina con ellos juntos cuando en el manga no lo están... aún ^o^. Una cosa es basarme en el manga y bifurcarme al final para crear una conclusión y otra, seguir una historia en la que se podrían generar conflictos con las nuevas publicaciones del original. Así que lo acabaré donde lo tengo pensado :-S
Sobre las muestras de cariño... déjalas para más adelante XD. Son dos personas que no parecen muy acostumbrados a los tratos afectivos, así que poco a poco XD. Y en cuanto a lo de meter cosas de CD Dramas y Novelas ligeras, precisamente lo hago para que se entienda mejor la relación y reacciones de los personajes. Gracias a ellos se entiende más la admiración que sienten el uno por el otro. Piensa que en el manga no se entra tanto en escenas cotidianas entre los personajes. Es en estos materiales extras donde ves otro tipo de interracción entre ellos. De ahí que los utilice para este fic, porque me da más recursos para ellos.
Y de subirlo a Wattpad, sé que mucha gente la usa, pero a mí esa plataforma jamás me ha llamado para subir nada :-S

Gracias a todos por vuestros reviews :-D Os dejo con el siguiente capítulo. Os aviso que, para este momento, se ha finalizado el arco de Eri, pues aunque no os hayáis dado cuenta, empezó a desarrollarse a lo largo de los últimos capítulos (finales de septiembre), pero al no estar estos dos inmiscuidos, se enteraron cuando todo salió a la luz. Los tres primeros párrafos, sobre todo, spoilean un poco puesto que son los que nos ubican cronológicamente y vemos a Todoroki reflexionar sobre ello. Así que eso, avisados quedáis.

Espero que os guste el capítulo ;-D

CAPÍTULO 10. Clases peculiares

Para cuando terminó la semana, se había montado un follón bastante grande en la comunidad de héroes. Pero, por suerte, consiguieron desarticular una nueva banda de villanos que podría haber puesto en jaque a la sociedad tal y como la conocían. Dicha banda tenía en su poder a una niña cuya singularidad era capaz de eliminar de forma permanente la de otra persona. Y esa habilidad la habían encapsulado y convertido en un arma.

Sin ir muy lejos, uno de los grandes de la UA había perdido su habilidad a causa de dicha arma. Además, varios de sus compañeros de clase estuvieron implicados en ello. Lo habían mantenido en secreto hasta que todo había explotado en las noticias.

Por fortuna, la niña ya estaba bajo la protección de la policía, por lo que el peligro de distintos villanos eliminando las singularidades de la sociedad se había controlado.

«Perder un poder…», pensó Shoto mientras observaba en la tele una tertulia que hablaba sobre el incidente. No quería ni imaginarse cómo podía ser eso. La gente convivía toda la vida con su particularidad; era innegable que el carácter de una persona estaba influenciado también por la habilidad que tuviera. De modo que perderla era como perder una parte de sí mismo.

A él le habría afectado. Incluso habiéndose pasado toda su vida renegando de la habilidad de su padre, no estaba seguro de haber querido perderla. Aunque no la quisiera para convertirse en héroe, era útil en otras circunstancias. Y desde luego, ahora que había hecho las paces con su lado izquierdo, no querría perderlo.

—¿Ya habéis vuelto? —le preguntó Yaoyorozu al tiempo que se sentaba en el sofá de enfrente.

—Sí, justo acabo de poner la televisión.

—¿Dan algo interesante? Hace rato que terminé los deberes, y como me aburría en mi habitación, bajaba a ver si echaban algo decente.

«Cómo no…», pensó divertido Todoroki. Siempre era la primera en acabar y con diferencia. A pesar de ser un estudiante que no tenía motivos para quejarse de sus notas, no podía dejar de considerar que era un don terminar tan rápido las tareas de clase. Eso dejaba mucho tiempo libre.

—Yo subiré en un rato a hacerlos. Ahora mismo sólo quiero descansar un poco.

—¿Qué tal ha ido hoy?

—Ha sido… peculiar —concluyó sin saber definirlo mucho mejor—. Nos han dejado encargados de unos críos.

—¿En serio? —Era un entrenamiento extraño, en su opinión.

—Me ha llamado la atención que los niños de ahora no tengan ningún miramiento en utilizar sus habilidades contra otra persona.

—¿Os atacaron? —cuestionó perpleja.

—Y con toda su fuerza, porque pretendían ganarnos. Nos dejó bastante sorprendidos. Si hubieran sido otras personas, podrían haber herido seriamente a alguien.

—Vaya… ¿Y qué hicisteis?

—Un campo de juegos —contestó sin más.

—¿Qué?

—Les hicimos ver que nuestra fuerza era superior, pero lo hicimos montando un parque de juegos en vez de pasarlos por encima.

—¿Y cómo pudisteis hacerlo?

—Estaba Yoarashi, el alumno de Shiketsu que manipula el viento —detalló, pues dudaba que le recordara por su nombre—. Él elevó por el aire un montón de juguetes de los críos y los utilicé como estructura para hacer toboganes.

—Aquello parecía un maldito parque de atracciones —se quejó Bakugo, quien se acercó hasta ellos desde la cocina con algo de comer y lo puso sobre la mesilla según llegó—. Y los muy desgraciados me relegaron al equipo de limpieza.

—Ah, Bakugo, ¿qué tal estás?

No sabía que estaba allí. En verdad acababan de llegar si ambos estaban aún en el piso común. Por norma general, cada uno se iba a su habitación según llegaban. Era raro verlos a los dos juntos.

Se sentó con semblante muy cansado y resopló.

—Si hubiéramos participado en la batalla de Gang Orca, no habría acabado tan cansado —protestó mientras se llevaba una de las galletas que había cogido a la boca.

Todoroki también cogió una y al final apagó la tele.

—Bueno, hemos aprendido otra forma de manejarnos.

—Lo que he aprendido es que habríamos terminado antes si hubiéramos lapidado al jefe.

—¿Lapidar? —preguntó confusa Yaoyorozu. Todoroki le hizo un gesto negativo de que no hiciera caso.

—Ha sido más divertido así, reconócelo.

Bakugo refunfuñó y se repantingó en el sofá.

—No sabía que eras capaz de hacer algo así —comentó dando un mordisco a la otra galleta que tenía en la mano.

—Mientras haya una estructura, puedo extender mi hielo por donde quiera.

Yaoyorozu sonrió cuando lo dijo, pues aquello era algo que no podía hacer varias semanas atrás. Pero había trabajado ese aspecto y había obtenido su fruto. Ahora tenía más flexibilidad a la hora de manejar su hielo en la distancia.

—Me pones de mala leche —recriminó Bakugo enfadado—. Pero me da igual lo que hagas, voy a ser el número uno cueste lo que cueste. —Se levantó del sitio, como revitalizado, y cogió otra galleta del cuenco—. Y será un primer puesto indiscutible.

Se marchó con pisadas bastante fuertes hasta el ascensor y allí desapareció.

—Aún le duele lo del festival deportivo, ¿eh?

—Eso parece… —contestó Todoroki, tan imperturbable como siempre.

Yaoyorozu cogió una galleta del cuenco y se lo quedó mirando. Era impresionante, si lo pensaba. Hacer toboganes implicaba un control del hielo muy específico.

—¿Así que has podido hacer unos toboganes para los niños? —Aún estaba atónita con el tema.

—Una vez que se coge la mecánica de cómo dirigir el hielo a través de algo, es siempre lo mismo aunque las construcciones sean más grandes.

Momo no podía entender cómo hacer cuatro giros sobre un columpio podía ser «igual» que hacer un tobogán, pero se lo calló.

—¿No tendrás alguna foto? Me gustaría ver lo que hiciste.

—No nos dejan tener el móvil en las clases, pero me han mandado alguna.

Momo se acercó y se sentó a su lado mientras Todoroki buscaba en el móvil. Después se lo dejó y pudo ver, con incredulidad, lo que había hecho.

—Dios… Empiezo a entender a Bakugo —murmuró asombrada.

—¿Te pongo de mala leche? —preguntó confundido.

—¡¿Lo he dicho en alto?! —gimió mortificada, y bajó la cabeza para que no la viera—. No era eso lo que quería decir —explicó muy inquieta—. Es sólo que no paras de superarte una y otra vez, y tiene que ser desquiciante para aquellos que te consideran su rival… como Bakugo.

—Ya… —dijo incómodo. La sinceridad de Yaoyorozu a veces le ponía nervioso. No tenía ni un reparo en decirle lo asombrada que estaba con lo que hacía.

Momo amplió la imagen ya que hacer otra cosa implicaba tener que mirarle y en esos momentos se encontraba lo suficientemente avergonzada como para no poder hacerlo. Pero al ampliar la imagen, vio los detalles de los toboganes y casi fue peor.

—Y encima, la parte por donde pasan los niños está pulida… —Era un nivel de detalle asombroso—. En serio, ¿hay algo que no puedas hacer? —cuestionó con cierto tono molesto que a Todoroki le hizo gracia.

—Muchas cosas.

—No estoy de acuerdo.

Shoto la observó mientras seguía deslizando con el dedo la foto. Incluso llegó a pensar que intentaba buscar algún fallo, tan absorta como estaba. Y por supuesto que los encontraría. No hacía las cosas tan perfectas como ella daba a entender. Tenía sus fallos, pero Yaoyorozu parecía tener la habilidad especial de pasarlos por alto.

Reconocía que eso le regocijaba. Él nunca actuaba con intención de sorprender a la gente. Cuando hacía un ataque no buscaba que el resto se asombrara por él. Lo hacía porque consideraba que en ese momento era lo mejor, no para «lucirse». Y lo mismo pensaba de un ataque que de una construcción de toboganes.

Pero reconocía que le gustaba asombrarla. Yaoyorozu era muy sincera en sus valoraciones; era algo que le gustaba de ella. Y era una persona muy competente. Siempre se lo había parecido. Que se mostrara tan entusiasmada con lo que podía hacer con su singularidad, siempre le dejaba una sensación agradable por el cuerpo.

Pasó sus ojos del móvil a ella. Tenía un semblante más relajado que momentos antes. Había empezado a ampliar las caras de los niños que bajaban divertidos y Yaoyorozu soltó varias risas con algunos de ellos. Estaba feliz, con esa sonrisa que la transformaba por completo y conseguía un efecto impactante en los demás.

Yaoyorozu era una chica que gustaba contemplar; era absurdo negarlo. Entendía a la perfección a todos esos chicos que se giraban a verla cuando pasaba por delante de ellos. No podía culparlos porque atraía la atención. Pero a diferencia de esos necios, él sabía que bajo ese envoltorio había una persona brillante. Podía dar gracias de poder conocerla como lo estaba haciendo en las últimas semanas.

—Pobre… Qué cara de susto tiene éste —rio en alto, y Shoto inspiró profundo.

Le gustaba que sonriera y se mostrara más cercana. Era algo que cada vez hacía más a menudo con él. Cuando inició el curso, no habría esperado llevarse así con ella. No sólo porque le había parecido bastante seria también, sino porque él mismo estaba obcecado con una meta fija que le apartaba de todo cuanto le rodeaba. Pero según iba cogiendo confianza con las personas a su alrededor, Yaoyorozu se mostraba cada vez más amigable.

Y era reconfortante el hecho de que cada vez lo fuese más con él.

—Oye, esta foto… —empezó a decir ella, aunque se detuvo en cuanto le miró, y un instante después se irguió extrañada—. ¿Po-por qué sonríes? —Era muy raro que lo hiciera y de ahí que la dejara tan desconcertada.

—Porque parece que eres tú la que quisiera estar ahí —improvisó.

—¿Y-Yo? ¡No, qué va! —negó muy incómoda—. No pensaba en eso.

—¿Te gustan esas atracciones? —le preguntó con curiosidad. Había muchas cosas de ella que no sabía y le gustaría conocer.

—Mmm… No sabría decirte. Mi madre nunca me ha dejado ir a ese tipo de sitios.

Shoto suspiró cuando confirmó, una vez más, su infancia solitaria. Le sorprendía que fuesen similares en ese tipo de aspectos, pues él había sido recluido por los entrenamientos exhaustivos de su padre, mientras que no le quedaba claro si el caso de Yaoyorozu era por sobreprotección o desidia por los entretenimientos. Pero le asombraba que Yaoyorozu fuese una chica socialmente apartada.

—Yo tampoco. Mi padre entendía la diversión como una pérdida de tiempo.

—Algo similar piensa la mía —musitó resignada, y de pronto se enderezó—. Hablando de tu padre, esta foto te la ha mandado él.

Shoto miró su móvil y vio que había reducido la imagen, por lo que aparecía la miniatura dentro del chat de mensajería con su padre.

—Sí, las hizo él.

—¿Ha estado en vuestras clases?

—Se ha pasado hoy de visita —contestó incómodo.

—Parece que tu padre se preocupa mucho por ti. También fue a verte en el festival deportivo.

—Las motivaciones de mi viejo no son tan altruistas. —Aunque reconocía que la visita de ese día había sido bastante extraña.

Momo hizo el intento de decir algo, pero se retractó. Como Todoroki era un chico más bien cerrado, no sabía en realidad cuáles eran las circunstancias de su familia. Intuía que pasaba algo con su padre porque al principio del curso renegaba de utilizar su habilidad de fuego. Además, acababa de ver que tenía identificado a su padre como «Endeavor» en el móvil, en vez de «papá», «padre» o incluso su nombre de pila.

Pero tampoco los había visto interactuar a los dos juntos como para saber si se llevaban mal. Lo único que sabía era que Endeavor había visitado a su hijo en dos ocasiones y él había realizado la pasantía en su agencia tras el festival. Visto desde fuera, no parecía una mala relación.

—Lo siento. Supongo que, entonces, te habrá incomodado que fuese.

Todoroki inspiró profundo y soltó el aire de forma audible mientras se recostaba contra el sofá.

—No sabría decirte —contestó con cansancio—. Al principio me molestó mucho, pero luego… No sé… Creo que le ha afectado más de lo que creía convertirse en el número uno de esta forma.

—¿En qué sentido?

—Hoy se sentó al lado de All Might. Y mi padre le ha odiado siempre. —Sin ir más lejos, él era fruto de ese odio insano.

—Entonces, parece que para bien, ¿no?

—Ya se verá…

Lo mismo se había levantado con el pie izquierdo, por lo que tampoco quería darle más vueltas de las necesarias al asunto. Pero reconocía que la conversación que habían tenido al final le había resultado surrealista como mínimo. Nunca se había comportado así con él; como si le debiera algo.

—Todoroki —le llamó, y le sacó de sus reflexiones—, ¿vas a ir luego a practicar? Porque te veo bastante cansado.

—Es probable que descanse por hoy. Esos niños nos han agotado física y mentalmente.

—Ya me he dado cuenta con Bakugo —dijo divertida.

—Ser profesor de infancia tiene un mérito poco reconocido.

—Tienes razón —rio Yaoyorozu.

—Además, hoy he hecho algo durante las prácticas que no puedo hacer en el patio al que vamos —explicó levantándose del sofá—. Así que lo puedo tomar como el entrenamiento de hoy.

—No me lo restriegues —suspiró ella. Le devolvió su móvil y él lo guardó en el bolsillo.

—Me voy a hacer los deberes. Nos vemos luego.

Momo asintió y le vio marchar camino hacia al ascensor. Suspiró mientras pensaba si Todoroki siempre le generaría esa especie de envidia sana. Era muy diestro y resolutivo, algo de lo que ella a veces carecía. Y por eso le gustaría ser más como él ante los retos.

Debía ser genial ser tan capaz en todo.

— * —

Fin del Capítulo 10

11 Noviembre 2018

Notas finales:

Lo comento por si acaso. Tengo el siguiente capítulo a medias. Iba a ser una especie de capítulo enlace entre este punto y el arco siguiente (el festival cultural, que es donde viene todo, muajaja ^o^). Ya comenté que entre el montón de capítulos escritos, tenía un parón a esta altura que no sabía muy bien cómo arreglar. Pero bueno, esta semana empecé a escribirlo con mi buena intención, pero me bloqueé un poco al no saber muy bien por dónde tirar con él. El tema es que tengo bastante escrito ya de lo que viene, y al ver cómo quedaban en este capítulo y cómo están en el siguiente que tenía escrito, me daba una sensación de «me he perdido algo entre estos dos» que me bloqueaba. Hasta el momento, ambos sienten una gran afinidad entre los dos, pero en el capítulo siguiente que ya había escrito eran algo más conscientes de que podría ser otra cosa. Así que me encontré con un salto que no correspondía y no sabía cómo atajarlo con ese capítulo enlace.

Pero entonces, se me fue la pinza XD. En fin... La conclusión es que he ideado algo para enlazar con el siguiente arco y quedará en unos cuatro capítulos, pero «oh, sorpresa», terminé dos de ellos y ninguno es el siguiente que tengo que publicar T_T. Espero terminarlo durante esta semana para subirlo a tiempo. Lo bueno es que, en cuanto lo haga, se conectarán un porrón de capítulos que ya tengo terminados y a la espera de ser subidos XD. Pero por si el domingo que viene no veis actualización, ya sabéis por qué T_T

¡Saludos!