CAPÍTULO 31. Confusiones


Comentarios de los reviews:

Maria Violet: Pues sí, en parte has tenido suerte al no leerlo porque no has tenido espera (y sé que fui bastante perra al dejarlo ahí ^o^). Pero deberíais pensar que no lo hago mucho, así que de vez en cuando merezco darme esa satisfacción XD. De lo que dices de darse cuenta de las salidas, ¡es que he estado cruzando dedos para que nadie me lo mencionara! XD . Yo pensando: «Como alguien me diga: "¿Y nadie se da cuenta de esas salidas?", la que no se va a dar cuenta de ese comentario voy a ser yo XD». No todo el mundo es igual de perceptivo; no tienen por qué saberlo sólo por su trato. Así que es esto lo que hace que TODOS lo sospechen por muy despistados que fuesen. Quiero decir, salen a escondidas todos los días, ¿para qué iban a hacerlo si no tienen un lío? XD . Sobre Todoroki, ya lo avisé en muchos capítulos: va a acabar con camisa de fuerza XD

Astron: Me alegra que te haya gustado. Yo me río un montón con este capítulo. Cada uno hablando de lo suyo y sin entenderse XD

Caro: Mujer, intereferir lo que es interferir... Mi fic va sobre una actividad extra inventada, así que no debería. Pero es que ha sido en plan: «¡Toma, tengo aquí un mes de vacío en la historia del manga. Voy a hacer un fic aprovechando esto!». Y luego van y me sacan una novela ligera ¬_¬º. Del otro fic, mientras no cierre fics que tengo abiertos, no subiré más. Tengo 3 en publicación y 2 de ellos tienen mi creatividad abandonada debido a los adolescentes que aquí nos ocupan, y ya bastante cargo de conciencia me crea como para añadir una cuarta historia. Por eso el resto de cosas las tengo en mi ordenador a la espera. Pero quiero sacarlo porque es deprimente la falta de material de esta pareja T_T . Aunque aún tardará... :-S De lo que dices de Hagakure... ella no puede desactivar su singularidad. Es de tipo mutante, así que nació con ella. Es igual que esos tipos que atacaron la UA y Aizawa no podía anulársela. Así que técnicamente, ella no puede controlarlo y no podemos tampoco saber cómo es. Y en cuanto a lo de Todoroki, ¡pero si él ha sido superclaro XD! La que ha tenido el problema de entendimiento es ella XD

Her Nao: A ver, es que en realidad, Todoroki le ha dicho lo que siente por ella. Quiero decir, tú no vas por ahí proponiéndole a la gente ser novios por gusto. Es porque sientes algo por esa persona, ¿no? El problema es que les han metido en medio el tema del noviazgo y, en vez de hablar de los sentimientos en sí, él ha decidido atajar por el tema de conversación que acababan de tener. Sobre una escena de «paro cardiaco» como la del entrenamiento, ésa ya fue más de lo que iba a meter en este fic... y que conste que mi «salud creativa» me está costando hacer algo tan tiernecito, no te creas. Mi cabeza se me ha ido tanto por culpa de estos dos, que sólo le falta despegárseme del cuello »_«. Así que escenas +18, para el otro fic ^_^º

Soda 570: Ya llegarán... ¡Paciencia! ;-D

Hati-chan: Es lo que digo: él fue claro. Pero la pobre estaba pensando en lo que habían dicho de haber extendido los rumores sobre ellos y se creía que la estaba interrogando/cuestionando por sus sentimientos hacia él »_«

Carola-Gigi: Oye, que lo mío me costó hacer una conversación ambigua XD . Es la segunda vez que lo hago, así que me ha quedado claro que soy masoquista XD. Porque cuesta un montón hacer una declaración coherente en la que hay preguntas y respuestas por ambas partes y, sin embargo, cada uno entienda lo que no es. Pensé que no volvería a hacerlo, pero como estos dos son algo «ineptos», me han dado pie a ello XD

Roayme: Ya veo que te has puesto al día XD. Me alegra que te guste el fic ;-D

Kim Ishida: Pobre, Momo se pensaba que la estaba cuestionando y le ha sobrepasado la situación. Por eso se ha largado. Pero en el proceso, le ha dejado a Todoroki tirado con su declaración en la boca XD. Sobre los otros fics... a ver qué acabo escribiendo al final, porque tengo un caos de historias de alucine »_«

Gabe Logan: «Shoto» y «sutileza», no van precisamente de la mano XD. Pero al menos no es hiriente como Momo (que todos se las pasan porque saben que no habla con maldad ^_^º). Pero como bien dices, ser inteligente no excluye las reacciones emocionales y a ella le ha sobrepasado todo. Del tema de Hagakure, hago un comentario al final del capítulo, así que ahí lo dejo XD. Y sobre el fandom de Fairy Tail, casi no entro desde que publiqué la última historia, así que no sé si he leído algo tuyo. Le echaré un ojo a tu perfil cuando tenga tiempo ;-D

Mr. Chef: Ya sabes que no spoileo sobre las hipótesis que me comentáis, pero te aseguro que hay más rutas que esas dos ^o^

Gracias por vuestros reviews *o*. Vamos con el siguiente capítulo. Espero que os guste ;-D


CAPÍTULO 31. Confusiones

Era una pesadilla; tenía que serlo. Eso era lo que Momo se repetía una y otra vez mientras corría por los pasillos directa al baño. Aunque quizás —pensó una vez que estuvo allí— debería haber buscado un sitio más acogedor para encerrarse el resto de su vida.

Nunca se había sentido tan avergonzada. Sentía que jamás podría mirarle a la cara. Aquella conversación acababa de subir al top del top de las «conversaciones bochornosas». Le habían caído los golpes uno detrás de otro y cada uno peor que el anterior.

No podía creerlo. Toda la clase llevaba tiempo pensando que eran novios. Y aunque a él le resbalara todo lo que dijeran los demás, a ella casi le había dado un infarto de pensarlo. Después de decirle algo así, si aún tuviera alguna duda sobre lo que sentía por él, se las acababan de despejar.

Pero eso no había sido nada comparado con lo que vino después: el golpe definitivo. Cuando habían dicho que ella había confirmado su relación ya no supo ni dónde meterse. ¿Cómo podían haberle hecho eso? Momo gimió y se golpeó la cabeza con la pared de al lado. Aunque fuese mentira, él lo había creído. Por eso le había cuestionado después si ella pretendía que fuese su novio.

Quería morirse.

Estaba segura de que no había forma de que no se diera cuenta de la respuesta reflejada en su rostro. Había tenido que salir de allí en el acto para no sentirse más abochornada de lo que ya estaba.

No podía ni empezar a pensar cómo podría arreglar aquello. No la habían creído cuando había negado su relación y ahora pendía sobre ella el hecho de haber iniciado a propósito los rumores.

Los rumores…

Abrió los ojos cuando lo recordó. Mina había dicho que Kyoka se lo había comentado. Una de las dos había mentido. O bien Ashido le había echado la culpa a Jiro de un rumor, o Jiro le había mentido a Ashido con la confirmación de su relación. ¿Por qué cualquiera de ellas haría algo así? No podía imaginarse que fuesen de esa clase de personas.

De modo que, con un nuevo propósito, salió del baño en busca de cualquiera de las dos. Recordó a Ashido mencionar que iban a la cafetería a reunirse con Asui y Jiro y allí fue donde las encontró a las cuatro. Parecían tener una conversación animada y tuvo la mala espina de que hablaban sobre Todoroki y ella.

Se acercó hasta ellas intentando armarse de valor y que no se le notara lo afectada que estaba por todo y, tras dar un profundo suspiro, habló:

—Ashido, ¿puedo saber por qué le has dicho a Todoroki que yo he confirmado mi relación con él? —preguntó directamente, sin ni siquiera saludar.

—Ella me dijo que lo hiciste —respondió al tiempo que señalaba a Jiro.

—¿Y por qué le dijiste que lo confirmé? —la interrogó a ésta.

—Porque así podíamos despejar las dudas —se defendió ella—. Además, si todos lo sabíamos para entonces…

—Pero si yo nunca he dicho nada sobre ninguna relación —protestó.

—Sí, lo hiciste —replicó, en cambio, Jiro.

—No, nunca lo he hecho —negó con vehemencia.

—¿Veis como es muy mona? —se emocionó Ashido—. Se sonroja y todo.

—Sí lo hiciste, ¿verdad, Tsuyu?

Ribbit —confirmó la chica.

—¡Eso es imposible! —se sorprendió. Que Asui lo corroborara la dejó de piedra—. ¿Cuándo ha sido eso?

—¿No lo recuerdas? —inquirió desconcertada—. Pero si fue a principios de semana… Cuando se informó sobre el baile y hablamos de la envidia que podías dar a otras chicas —matizó al ver su cara de confusión.

Momo podía vanagloriarse de su buena memoria y ella sabía que no se dijo nada parecido en esa conversación. Sólo le hablaron de su supuesta buena estrella por…

«Tienes al mejor de la clase a tu lado», le vino de pronto.

Momo abrió la boca cuando esas palabras cruzaron por su cabeza. Definitivamente, ese día se tenía que haber quedado metida en la cama.

Se sentó, casi sin darse cuenta, en una silla al lado. Era eso o caer al suelo.

—No hablaba de eso —susurró. Ella había creído que se referían a tener a Todoroki en el pupitre de al lado.

—Ya, claro… —se rio Jiro—. Mujer, no te lo tomes así. Como te decía, para entonces ya lo sabíamos todos. No es como si hubieras traicionado vuestro amor secreto o algo parecido.

Tras eso, Momo supo que arreglar aquello iba a ser complicado. Se apoyó en la mesa y se tapó con una mano los ojos.

—Siempre he querido poder decirte esto —siguió Ashido—. Me das mucha envidia. Todoroki es muy guapo.

—¿Verdad que sí? A mí me dan palpitaciones cuando sonríe —corroboró Hagakure—. Oye, Yaomomo, ¿cómo es Todoroki como novio?

—Oh, Dios… —gimió mortificada.

—Yo me lo imagino siendo tierno con ella —dijo Ashido entusiasmada—. ¿Ya sabes? En plan: «soy frío con las demás, pero cálido con ella» —terminó con tono dramático.

—Igual que el protagonista de una película romántica… —suspiró Hagakure soñadora.

—¡Eso es! —confirmó Ashido con énfasis y, recostándose contra su silla, suspiró también—. Ah… Son tan lindos en mi imaginación…

Todas rieron a excepción de Momo, que quería morirse allí mismo. Se llevó la otra mano para acompañar a la que tenía en el rostro y pensó que era un gran día para tener la singularidad de Awase. Así no tendría que hacer el esfuerzo de mantener sus manos en su cara al dejarlas pegadas ahí.

—Oye, Yaomomo… —interpeló Hagakure emocionada—. ¿Hasta dónde habéis llegado? ¿Os habéis besado ya?

—¡¿Qué?! —gritó alarmada saliendo del escondrijo de sus manos.

—¿Lo hace bien? —continuó.

—¡No nos hemos besado! —negó a ultranza.

Hagakure la analizó por varios segundos hasta que resopló y se recostó en el asiento.

—Jo, qué chasco.

—¿Qué quieres que te diga? —meditó Jiro—. Todoroki es muy serio y Yaomomo es muy refinada. Puede que les lleve tiempo.

Momo ni siquiera se planteaba decir la verdad sobre esa incorrección. Podían tener razón con él, pero ella se había desenmascarado a sí misma y descubierto a una descarada debajo de sus educados modales. No pensaba decirle a nadie que, si hubiese sido por ella, eso habría sucedido la semana anterior sin siquiera ser novios.

—Es una pena… A mí también me habría gustado saber los detalles —continuó ella con pesar.

—¿Por qué? —cuestionó Ashido melosa al tiempo que se erguía hacia ella sobre la mesa—. ¿Necesitas consejos para ponerlos en práctica con Kaminari?

—¡Por supuesto que no! —respondió en el acto ruborizada—. Es sólo curiosidad.

—Yo también quería saber los detalles —se resignó Hagakure tras dar un suspiro—. Nunca he tenido novio.

—No te desanimes, porque si te descuidas, a lo mejor también le podemos preguntar en breve a Ochaco —dijo Ashido mirando en su dirección—. ¿Acaso no la veis más contenta que de costumbre desde que se han sentado los dos ahí solos?

Todas se giraron a mirar a la pareja. No podían ver a Midoriya porque les daba la espalda, pero a Ochaco se la veía resplandeciente.

—Aunque ambos tienen un carácter tan santurrón que me cuesta imaginarlos —reconoció ella, y miró a Yaoyorozu—. No como a vosotros.

La aludida gimió ante esas palabras tan perturbadoras. No quería saber lo que se imaginaban sus compañeras que hacía con Todoroki.

—Que no somos novios —intentó hacerles entender de nuevo.

—¿Lo niegas porque te preocupa que alguna fanática se te eche encima? —sopesó.

—¿Es que tiene fanáticas? —preguntó alarmada ella.

No se lo había planteado, y por eso la idea la descolocó tanto que le hizo perder momentáneamente la vergüenza. Sin embargo, era un hecho que Todoroki tenía muchas papeletas para tenerlas tarde o temprano. Cuando empezase a ser reconocido como héroe, era indiscutible que tendría admiradoras, pero también «acosadoras». Era algo habitual entre los héroes élite. Pero no se esperaba que ya las pudiera tener, aunque tampoco podía descartarlo porque su actuación pública en el festival deportivo fue muy llamativa. No sería de extrañar que alguna alumna ya tuviera fijación por él, no sólo interés.

Momo vio a Ashido sonreír con malicia y se tensó.

—¿Preocupada? —replicó mordaz—. Y luego dice que no tienen nada… —agregó con sarcasmo.

—Si no ha pasado nada hasta ahora, no deberías preocuparte —dijo con voz neutra Tsuyu—. Lo vuestro lo sabe medio instituto.

Momo se quedó helada en el sitio.

—¿Cómo que lo sabe medio instituto?

Que lo dijese ella era algo que la aturdía. Asui era una chica muy centrada que no se andaba con bromas. Por eso, que ella razonara sobre la extensión del rumor y la situación de las acosadoras, sólo era un indicativo de lo arraigado que debía estar ya todo.

—No puedes negar que seáis una pareja interesante para los cotilleos —dijo Hagakure—. Todoroki es… bueno, Todoroki. Todos saben quién es —matizó—. Y tú eres la otra alumna que entró por recomendación de su clase. Sois algo así como los dos mejores o los dos favoritos. Así que parecéis… ¿destinados? —dudó.

Ashido asintió muy conforme con esa valoración y Hagakure rio.

—Lo sorprendente es que no supierais que todo el mundo ya estaba al tanto —terminó Ashido para desesperación de Yaoyorozu—. Habéis sido demasiado obvios.

Momo se apoyó de nuevo contra la mesa y escondió la cara entre sus manos cuando poco a poco cayó sobre ella la repercusión de todo. No era que fuese a ser complicado arreglar aquello; iba a ser imposible. No bastaría con meter la verdad —aunque fuese a empujones—, en los cerebros de sus compañeros de aula.

No quería ni pensar cómo se iba a tomar Todoroki aquello. Encima creía que los rumores los había extendido ella, gimoteó en su mente. Esperaba que la creyera cuando le explicara la bochornosa conversación en la que se dio el malentendido, pero sólo de pensarlo se le revolvía el estómago.

En esos momentos, ni siquiera se atrevía a mirarle; mucho menos a hablarle. ¿Con qué cara se presentaba ante el chico que quería, a decirle que, aunque, como bien podía imaginarse, le encantaría que los rumores fuesen ciertos, en realidad, ella no había dicho nada?

Quería meterse en un agujero y no salir nunca de él. Con ese pensamiento, Yaoyorozu se levantó de su sitio para esconderse en algún lado en el que pudiera pensar qué iba a hacer a partir de entonces.

—Tengo que irme.

—¡No, espera! —la detuvo Ashido—. Antes de que te vayas, quería comentarte algo que les estaba diciendo a las chicas. Estoy proponiendo hacer esta tarde una sesión de transformación de Hagakure.

—Otra vez eso no… —se quejó la afectada.

—¿Sesión de transformación? —preguntó confundida.

—Vamos a hacer un molde de ella para saber cómo es. ¿Te apuntas?

—¿Un molde? —Yaoyorozu se sentó de nuevo en el sitio, tan sorprendida por la propuesta, que llegó a dejar la anterior conversación por completo de lado.

—Sí, ¿acaso no te da curiosidad saber cómo es?

—Ah… —Se calló. No tenía muy claro cómo contestar a eso. Hagakure podía sentirse ofendida o dolida por hacer tan «visible» su invisibilidad—. Ella no parece muy convencida, ¿no?

—Creo que tiene miedo de qué puede encontrarse. —Y acto seguido, Ashido se puso a tocarle la cara y Hagakure se quejó—. Pero tiene una piel muy suave. Seguro que es guapa.

—Una cosa no tiene que ver con la otra… —replicó ella.

—No deberías preocuparte —la tranquilizó Jiro—. Utilizaríamos maquillaje y, con un buen maquillaje, ninguna mujer es fea.

—Yo sé maquillar —se ofreció Yaoyorozu—. Y tengo un montón de cosas en mi habitación que podemos utilizar.

—¿Lo ves? Es imposible que estés mal —siguió Ashido con su intento de convencerla—. Sólo nos falta avisar a Ochaco y, si está disponible, esta tarde haremos una quedada de chicas de la clase 1-A.

Todas volvieron a mirar en dirección de la mencionada, la cual seguía emocionada comiendo con Midoriya.

—Aunque creo que será mejor dejarlo para luego —añadió con una sonrisa—. Cuando volvamos a clases le decimos. Estoy segura de que también se apuntará.


— * —


Fin del Capítulo 31

12 Mayo 2019


Notas finales:

Evidentemente, ya lo había dejado ir cayendo, pero la historia de Hagakure (que aviso que es muy cortita) va a ir por ahí. No sé... es una sensación contradictoria la que me da este personaje. Como todos mencionan, Toru es una chica muy alegre a la que le encanta tratar con la gente y hacer cosas vistosas, así que a veces no me queda claro si el autor ha metido esa característica en ella como «coña/broma» por ser una chica invisible (y no trasciende más) o hay realmente un trasfondo a su comportamiento. Como yo soy una persona retorcida, en el fic voy a optar por darle trasfondo porque, desde luego, ella da pie a esto. Y es que muchas veces tengo la sensación de que Toru hace un esfuerzo consciente en interactuar con la gente para que «la vean». Me parece un miedo demasiado factible como para no explotarlo en una historia. Y puesto que aquí hablamos de una actividad donde todas estas singularidades son problemáticas, me da pie a exteriorizar ese miedo en ella a ser invisibilizada.

Espero que os haya gustado el capítulo, porque a mí me hace bastante gracia XD. Pero es que me encanta ver a Momo acorralada de esta manera ^o^.

¡Saludos!