Buenas! Aquí estoy de nuevo, con el segundo capítulo de la historia!

Quiero dar las gracias a Anzu Black por su review, me alegra mucho saber que te gusta la historia xD, quería actualizar antes pero hasta ayer por la noche no terminé de pasar el capítulo del catalán al castellano y después estaba cansada y me dolía la cabeza, pero aquí tienes.

A quienes no me han dejado reviews... espero que os haya gustado igual la historia y que esta vez sí me dejéis un review, pro favor, me gustaría muchísimo, aunque sea para decirme "tu historia es una mierda seca"

Sin más, aquí tenéis el segundo capítulo.


Disclaimer: lo de siempre, que lo que reconozcáis pertenece a Rowling y quizás a otras cosas y lo que no lo he inventado yo...


CAPÍTULO 2 Explicaciones Y Decisiones

Una vez en el tren, Harry, Ron, Hermione, Ginny, Luna y Neville buscaron un compartimiento para ellos solos, Harry les contó la conversación que había tenido con Remus un rato antes y todos se quedaron bastante sorprendidos.

- Esto es increíble¿Malfoy bueno? – Decía Ron.

- Bueno, una maldición puede ser muy poderosa según quién la haga y la influencia de una amenaza de muerte y de la muerte de tu familia también… - Razonaba Hermione.

- Pobre chico, lo debe haber pasado muy mal – Decía Luna.

- ¿Y la profecía también podía ser que hablase sobre mí? – Decía Neville incrédulo.

- Sí Neville, pero como quien tiene la cicatriz y ha sido marcado y todo esto es Harry ahora se refiere sólo a él – Le respondía Ginny.

- Bien, pero yo te ayudaré Harry – Sonreía el chico.

- Sí, todos te ayudaremos – Dijo Luna.

- Me podéis ayudar, pero no quiero que vengáis a buscar los Horcruxes conmigo y la Orden, es demasiado peligroso – Decía el chico todo serio.

- Harry, hay otra cosa – Dijo Ron de repente.

- ¿Qué?

- El número 12 de la plaza Grimmalud está desprotegido – Dijo Hermione.

- ¡El guardasecreto era Dumbledore! – exclamó Ron.

- Pues… tenéis razón, no lo había pensado.

- Se tendrá que hacer algo cuanto antes mejor – Dijo Ginny.

- ¿Por qué no escogemos a uno de nosotros para ser el nuevo guardasecreto? Al fin y al cabo los de la Orden no pueden serlo… - Propuso Luna.

- Ron, Harry o yo no podemos serlo, no creo que tarden mucho en ir a por nosotros… - Reflexionó Hermione.

- Yo tampoco podría hacerlo – Dijo Luna.

- Neville podría¿qué te parece Neville? – Dijo Ron en seguida.

- Yo… no podría, ya sabéis como soy, y también pueden ir a por mí, vosotros sabéis, el de la profecía podría haber sido yo perfectamente y seguro que Snape lo sabe i se lo contará al Innombrable… además, cuando llegue a la mayoría de edad quiero ser miembro de la Orden, aunque me dedique a la botánica quiero formar parte de ella – Dijo el chico.

- Tienes razón Neville, sólo queda Ginny – Dijo Luna.

Todos pusieron cara de circunstancia y Ron estalló.

- ¡NO, MI HERMANA NO SERÁ GUARDASECRETO! ES DEMASIADO PEQUEÑA, NO LO TOLER…

- Y por qué no? De hecho yo iba a proponerla desde un principio, ya ha sido poseída por Voldemort y sabe cómo defenderse¿verdad Ginny? – Le cortó Hermione.

- ¿Qué dices al respecto Ginny?

- Estaría orgullosa de serlo – Dijo la pelirroja seriamente y mirando a su hermano desafiadoramente.

- Muy bien, hagámoslo – Dijo Hermione mientras preparaba lo necesario para el conjuro, entonces, hizo el conjuro confiando que funcionase.

- ¿Y ahora cómo sabemos si ha funcionado? – Preguntó Ron

- Ron, dónde se encuentra el cuartel general de la Orden Del Fénix? – Le preguntó Hermione.

- Está en… en… ¡no puedo decirlo! – Dijo alegremente el chico.

- Los otros, exceptuando a Ginny¿podéis decirme dónde está? – Todos negaron con la cabeza y con una sonrisa.

- Y tú Ginny¿sabes dónde está¿Puedes ilustrarnos con esa información? – Dijo Luna entendiendo como iba todo.

- Qué ignorantes que sois jejeje, está en el número 12 de Grimmauld Place de Londres, a ver si os acordáis. – Dijo la chica haciendo un poco de broma.

- ¡Ha funcionado! – celebró Neville.

En otro vagón del Hogwarts Express, Remus Lupin contaba la misma conversación a los miembros de la Orden que se encontraban allí sentados, también con reacciones de todo tipo…

- ¡Dios mío, Bajo una maldición! – Se lamentaba Molly Weasley.

- Todavía no lo sabemos Molly, todavía no lo sabemos, se tiene que comprobar todo, hasta que no estemos seguros no podemos decir nada. – Ojo-Loco Moody todavía no se fiaba.

- Pobre chico pero el hijo, él sí que no tiene ninguna culpa. – Decía Nimphadora Tonks.

- Tienes razón, con él y su madre sí que tenemos que hacer algo. – Razonaba Arthur Weasley.

- Sí¿pero qué podemos hacer? – Decía Minerva McGonagall.

- Una cosa seguro, no nos podemos quedar así de brazos cruzados, tenemos que actuar deprisa y eficazmente. – decía Bill.

- Ya ves si…

- …lo tenemos que hacer. – (N.A.: Se nota que son los gemelos ¿verdad?)

- No sé cómo lo podríamos hacer… – Pensaba Flitwick.

- Podrgiais haser como un seggesto, que los Mogtífagos piensen que los habeis atrapado y matado. – Dijo Fleur desde un rincón.

- Buena idea, buena chica, podemos intentar localizarles con la moneda de Madame Rosmerta. – Dijo Remus.

- Por cierto, tenemos otro asunto para tratar… - Recordó Moody.

- ¿Cuál? Alastor. – Preguntó Molly.

- Nos hemos quedado sin guardasecreto para el cuartel general¿verdad que es esto Moody? – Dijo Tonks.

- Efectivamente Nimphadora

- ¡No me llames por mi nombre por favor! Ya sabes que no me gusta.

- Pues a mí llámame Alastor.

- Muy bien, muy bien, lo haré…

- Venga, no discutáis más, tenemos que pensar qué haremos, sopesar quién sería el más indicado para ocupar este lugar. – Los cortó Arthur.

- Por supuesto ninguno de nosotros, puesto que somos el foco principal de los Mortífagos y no nos podemos arriesgar. – Dijo Flitwick.

- Tendremos que hacerlo a uno de los niños, pero Ron, Harry y Hermione no pueden serlo. – Añadió Bill.

- Luna Lovegood tampoco, puede ser muy buena persona, pero no creo que sea la indicada para confiarle esto… - Reflexionaba McGonagall.

- Neville Longbottom podría hacerlo, de hecho a estas horas ya debe saber que él podría estar en el lugar de Harry – Dijo Tonks.

- No creemos que funcione, seguramente él no querrá serlo, mejor que no. – Dijeron los gemelos al unísono.

- Sólo queda Ginny. – Dijo Arthur.

- ¡No, mi hijita no será guardasecreto, ya encontraremos a alguien más! – Dijo Molly desesperada.

- Creo que lo mejor será hablar con ellos a ver qué piensan – Acabó diciendo Remus.

- Pero tenemos que darnos prisa, a cada momento que pasa Snape puede hacer guardasecreto a algún Mortífago y habremos fracasado. – Dijo Moody.

Cuando faltaba poco por llegar a King's Cross, los seis chicos se sobresaltaron al oír unos golpes en la puerta de su compartimiento, Harry la abrió y vio a Kreacher acompañado de Dobby.

- Aquel hombre lobo quiere ver al señor Harry Potter y los otros fracasados que están con él, – Dijo Kreacher con cara de asco – a ver si se los come a todos. – continuó con un cuchicheo.

- Señor Harry Potter, el señor Lupin quiere verles a usted y a todos los otros señores y señoritas. – dijo Dobby alegremente.

- Muy bien¿nos podéis acompañar? – pidió Hermione amablemente.

- Kreacher no hace caso de los Sangre Sucia.

- ¡No insultes la señorita Hermione! – Se enfadó Dobby, ya se disponía a abalanzarse sobre Kreacher cuando Harry le interrumpió.

- ¡Kreacher¡Dobby¿Nos podéis acompañar por favor?

Los dos elfos domésticos los guiaron hacia el compartimiento donde se encontraba la Orden Del Fénix y los chicos entraron tras llamar a la puerta.

- Hola¿nos habéis llamado? – Dijo Ron mirando a su familia y amigos interrogativamente.

- Sí, entrad y sentaos, poneos cómodos. – Dijo Remus.

El compartimiento había sido ampliado de forma que todos cupieran sin problema "probablemente es el mismo encantamiento que usa papá en el maletero del coche para ir a la estación cada año" pensó Ginny.

- ¿Qué queréis¿Ha pasado algo? – Preguntó Harry pensando que quizá ya habían podido hacer algo con respecto a los Malfoy o los Horcruxes.

- Bueno, lo que pasa es que la Orden se ha quedado sin guardasecreto, el cuartel general está en peligro... – Dijo Tonks.

- Ah... – Harry iba a decir una frase pero Moody le cortó.

- El caso es que ninguno de nosotros puede ser el nuevo guardasecreto y, por lo tanto, tendrá que ser alguno de vosotros, estáis aquí para participar en la decisión.

- Me podría decir, señor Weasley¿dónde se encuentra el cuartel general de la Orden Del Fénix, por favor? – Preguntó Hermione inocentemente.

- Pero Hermione, bonita, si ya lo sabes... – Contestó aquél.

- Todos lo sabemos papá, pero dilo. – Dijo Ginny.

- No entiendo por qué lo queréis, pero si insistís... El cuartel está en... está en... ¡NO LO PUEDO DECIR! – Dijo sobrecogido. – CÓMO PUEDE SE...

- ¿Cómo que no lo puedes decir? Arthur, ya sabes que está en... – La cara de Molly Weasley se puso blanca como la camisa que llevaba puesta.

Todos se quedaron sorprendidos y se empezaron a mirar los unos a los otros con nerviosismo, pensaban que Snape había hecho lo que tanto temían. Bueno, todos excepto los chicos y Fred y George Weasley que les miraron divertidos.

- ¿No os parece que ya...

- ... es suficiente de la broma?

- ¿Broma? – Dijo Bill.

- Pogg que decís que es una bgoma? – Dijo Fleur. (N.A.: Ya se nota que es Fleur jeje)

- No es una broma, no pretendíamos haceros ninguna broma. – Dijo Neville.

- Vosotros nos podéis explicar por qué motivo no somos capaces decir dónde se encuentra el cuartel... – Dijo la Tonks entendiendo por donde iban las cosas.

- ¿Ellos¿Pero cómo pueden ellos...¿A QUIÉN HABÉIS HECHO GUARDASECRETO?

- Papá tranquilo¿igualmente queríais que uno de nosotros lo fuera no? – Dijo Ron.

- Sí, sí, pero ¿a quién habéis escogido? – Preguntó Molly impacientemente.

- Tenéis que saber que hemos sopesado todos los puntos para escoger quién sería mejor para hacer de guardasecreto. – Dijo Luna.

- ¿Nos queréis decir quién es? – Dijo Flitwick.

- Ginny¿dónde se encuentra el cuartel general de la Orden Del Fénix? – Preguntaron todos a la chica, el resto se la miraron expectantes.

- Está en el número 12 de Grimmauld Place de Londres. – Dijo ella por segunda vez en aquel viaje.

- Ginny¿estás segura de querer tener esta responsabilidad? – Le preguntó McGonagall.

- Sí, profesora.

- Oh, no nos tienes que llamar profesores fuera de la escuela – Le dijo Sprout.

- El prof... Snape lo quería... – Dijo en Ron.

- Más vale que olvidemos todo lo que nos decía Snape. – Dijo el señor Weasley.

- Atención, ya hemos llegado a la estación, Harry, el día de tu cumpleaños te iremos a buscar a casa de tus tíos y al cabo de poco tendréis el examen de aparecer, a ver si para la boda ya tenéis la licencia. – Dijo en Remus mirando primero a Harry y después a Ron y a Neville.

Los tres chicos asintieron y todo el mundo fue saliendo del tren y por el andén 9 y ¾, entonces Harry se despidió de todos y se fue con sus tíos y su primo, que le esperaban en la entrada de la estación preparados para salir tan rápido como les fuera posible y alejarse de aquella gente tan rara que acababa de llegar.


Qué os ha parecido? Os ha gustado? Espero que sí y que me dejés algún review!