POR ESTA NOCHE
Mientras
camino por los pasillos, pienso en los siete años, que mañana
terminan y en todo lo vivido en este tiempo.
Recuerdo la primera
vez que pise este casillo, era tan grande y yo tan pequeña,
aunque pensándolo mejor, el castillo sigue siendo grande,
aunque yo ya no sea pequeña. Recuerdo la primera vez que lo
vi, tan imponente y al mismo tiempo sombrío, al principio me
dio miedo, y con el tiempo el sentimiento no mejoro yo lo odiaba y
sobretodo cuando me llamaba "La insoportable sabelotodo", lo
detestaba.
No se muy bien cuando el sentimiento comenzó a
cambiar y yo me empecé a enamorar; pero me di cuenta que el
era algo especial para mi, aquella noche.
Lo recuerdo como ayer.
Habían pasado ya 6 meses de la muerte del profesor Dumbledore,
6 meses que yo no lo veía, pero esa noche todo iba a cambiar.
Nos encontrábamos en una casa abandonada en una de las mas
concurridas calles de Londres, Harry aseguraba que aquí tenia
que estar otros de los Hocruxes, ya que era el lugar donde Voldemor
había vivido hasta llegar a Hogwarts, y era aquí donde
pasaba sus veranos; aunque yo había averiguado que el lugar
estaba abandonado desde hace unos 40 años, no estaba
convencida pero sin embargo fuimos. Harry no estaba mas lejos de la
verdad; en esa casa no había ningún Horcrux, pero lo
que encontramos fue peor.
Yo comencé a creer que si había
algo en esta casa, ya que tenia una fuerte seguridad mágica,
pero entre los tres la logramos superarla. Cuando de la nada una
Expelliarmus le pego de lleno a Ron haciendo que este se golpease
contra una pared y quedara inconciente. Harry y yo corrimos para
protegerlo, pero estaba demasiado oscuro y no podía hacer un
Lumus que rebelara mi ubicación así que empecé a
gatear, y con mis manos tanteaba el terreno para poder llegar donde
se encontraba inconciente Ron. Las maldiciones volaban por toda la
casa iluminado un poco mi camino. Cuando llegue a donde Ron no tenia
ni idea de donde estaba Harry, intente despertar a Ron pero era
inútil, el golpe había sido demasiado fuerte y su
cabeza sangraba. Tenia algo claro, salir de ahí ahora, pero no
podía yo sola llevarme a Ron necesitaba a Harry. De un momento
a otro la casa se ilumino mas de lo normal, alguno de los ocupantes
de la casa había lanzado una Avada Kadabra, yo no sabia que
hacer, me preocupe mucho por Harry no lo veía por ningún
lado, mientras aprovechaba la luz de la maldición
imperdonable, intentaba ubicar a Harry, pero no lo veía y fue
cuando una mano tapo mi boca evitando que gritara y me susurro al
oído
" –No te preocupes, yo te me ayudare a salir de
ahí, y que no buscara mas a Potter que el ya estaba afuera-",
Esa voz que para mi era tan conocida, de repente ya no me daba
miedo, y aunque parezca extraño me sentí segura cuando
su mano tomo la mía eh hizo que el cuerpo de Ron se moviera
levitando unos cuantos centímetros del suelo. Me quise
castigar a mi misma por no pensar en eso, pero ese no era el momento;
y mientras me guiaba; a mi me atacaban millones de preguntas que
quería hacerle, pero por alguna extraña razón de
mi boca no salio nada. A cada paso que dábamos nos acercábamos
a una luz, cuando por fin llegamos estábamos en una calle
iluminada por faroles gigantescos y Harry estaba en el suelo al
parecer también inconciente. Yo estaba muy asustada cuando su
mano que no había soltado la mía me obliga a mirarlo de
frene para confirmarme que Severus Snape había salvado
nuestras viadas pero ¿Por qué?. El me mira y me
pregunta:
" -¿Estas bien?-"
Yo solo a tino a
responder que si con un movimiento de mi cabeza. Aunque cuando miro
mi ropa estaba toda manchada de sangre, sangre de Ron. Con dificultad
pongo mi cabeza en orden y pregunto lo que tanto eh deseado:
"-¿Por
qué?-"
Y el me contesta que ese no es el momento para
esto, y meda un pañuelo en el cual hay un traslador.
"-
Este traslador los llevara a San Mungo, y por favor señorita
Granger, no diga a nadie que me vio y menos que los ayude-"
Digo
que si con nuevo movimiento de cabeza pero este mas enérgico.
Tomo a Harry a Ron y cierro mis ojos cuando los abro de nuevo ya
estamos en el Hospital de San Mungo, y alrededor nuestro varios
medimagos nos miran sorprendidos, y comienzo a gritar por ayuda.
No
le dije a nadie que Snape nos había ayudado, aunque repetidas
veces Harry y Ron me pregonaba como pude salir sin ningún
rasguño y con ellos dos y lo mas sorprendente como los había
llevado a San Mungo. Aunque mis explicaciones no eran del todo
convincentes ellos decidieron no preguntarme mas y mejor seguir con
la brusquedad de los Horcruxes, de los cuales solo nos hacían
falta 3, uno era que se encontraba en el cuerpo de Voldemort, otro el
que habitaba en nagini la serpiente de este y otro que no teníamos
ni la menor idea de donde se encontraba.
Ya había pasado
una semana y media del ataque en la casa, que después me
entere que había sido utilizada como cuarte de los mortifagos.
Al día siguiente a Harry y a Ron les darían de alta así
que yo me disponía irme para el hotel donde me hospedaba, ya
era tarde cuando mire mi reloj faltaban 15 minutos para las once de
la noche, salí del hospital dispuesta a caminar al hotel
quedaba a unas dos cuadras, cuando su mano me atrapo por la cintura y
me susurro
"- No grites quiero hablar contigo-" , no se por
que, pero por una fuerza mas poderosa que yo me obligo a dejarlo
conducirme hasta una calle cercana al hospital. Me miro como
asegurándose que me encontraba bien después paro su
inspección en mis ojos
"- Gracias, por no delatarme-",
y sin pensar, raro en mi le respondí.
"- Por que lo
hubiera hecho, usted salvo mi vida y la de mis amigos, soy yo la que
esta agradecida-" y agregue " -Pero no entiendo por que lo hizo-"
El me mira por unos segundo, como si estuviera buscando la mejor
respuesta y me dice
"- No es obvio, lo hice por usted-",
No
esperaba esa respuesta, pero por la misma fuerza que me obligo a
seguirlo, acorte la distancia que había entre nosotros y lo
bese. Al principio no entendí muy bien por que lo hice si era
agradecimiento o era algo mas. El se quedo un momento estático
por mi reacción pero luego abrió mi boca para
profundizar el beso, su lengua empezó lentamente a reconocer
mi boca la mía hacia lo mismo, y el beso que comenzó
tímido cada vez era mas apasionado. Nos separamos cuando la
falta de aire nos obligo.
El tomo mi mano y me dijo
"- Que
quieres de mi quieres volverme loco?-" yo me acerco a su boca y
casi rozándola le conteste que si, para luego besarlo
nuevamente, el me tomo de la cintura aprontándome contra su
cuerpo.
Pero yo necesitaba de el algo mas que sus besos; lo
necesitaba todo.
Le digo que mi hotel que da muy cerca de aquí,
el me mira con un brillo diferente en los ojos que con un movimiento
de su cabeza dice que si. Para ese momento yo ya no quería
caminar así que lo atraje hacia mi y aparecimos en mi
habitación de hotel.
Los besos cada vez eran mas y mas
apasionados y sin darnos cuenta caímos en la cama y empecé
a desabotonar y su túnica mientras el hacia los mismo con mi
camisa, el termino primero que yo, beso mi boca y sus labios
comenzaron a bajar por mi cuello haciendo que de mi boca salieran
gemidos de placer, el siguió bajando hasta llegar a mis senos
y con una habilidad casi insospechada había abierto el broche
de mi sostén y beso a beso lo deslizaba para quitármelo
por completo. Con su mano delineo la figura de mis senos y su boca
se acerco a mi seno derecho para besarlo con total pasión
mientras su mano masajeaba el otro.
Mientras tanto yo ya había
terminado con su túnica su pecho desnudo rebelaba infinitar
cicatrices de batallas cuando bajo su cabeza yo subí mis manos
por su pecho hasta llegara su cabello para masajearlo.
El continua
bajando beso a beso hasta mi vientre y con sus dos manos bajo mi
falda y con ella mi ropa interior, comenzó a deslizarse hasta
mi parte intima que clamaba por el y la beso yo sentía un
place indescriptible, pero también quería que el
disfrutara.
Con un movimiento casi violento lo obligue a subir y
me acomode sobre el, para empezar abrir su pantalón, y
acaricie, bese, mordí su miembro viril que exigía como
yo una participar en esta noche.
El me tomo de nuevo por la
cintura y me acomodo sobre el por lo cual el quedo sentado y yo sobre
el, su miembro comenzó a penetrar mi intimidad con movimientos
lentos y extendidos, pero poco a poco los movimientos fueron
volviéndose mas rápidos, hasta que después de un
rato así los dos llegamos al clímax total, pero no nos
separamos yo quería sentirlo dentro de mi todo el tiempo que
fuera posible.
Hasta que nos separamos y el empezó a
vestirse y mientras yo estaba mas confundida que antes, el me mira yo
solo me encontraba cubierta por la sabana blanca se acerca hasta mi
"- Esta noche yo te busque para decirte que el horcrux que
buscan esa en un pueblo llamado Radlett esta como a dos kilómetros
de Londres, esta en una casa, la casa mas grande del pueblo, el señor
Tenebroso lo oculto ahí por que vivió muchos años
allí y nadie acepto Lucius y yo sabemos donde esa casa-" Se
queda viéndome como dudando pero se decide y me besa y
susurra
" -Adios mi pequeña-"
Yo lo intento detener
pero ya sea ha ido.
Harry y Ron salen del hospital y buscamos el
pueblo y como el había dicho allí se encontraba el
Horcrux.
Después de esa noche nos vimos el día en
que regresamos de Radlett con la horcrux destruida, y otras tres
veces mas hasta que llego la batalla final.
Muchos murieron, pero
doy gracias que ninguno de los conocidos aunque Harry tuvo que
quedarse en San Mungo por 2 meses todo salio bien. Se descubrió
que Snape había matado a Dumbledore por que el mismo se lo
había pedido; el Profesor Dumbledore se estaba muriendo, la
maldición del anillo de los Riddle lo estaba matando y le
quedaba solo unos meses de vida, y pensó que ganaban mas si lo
mataban; así Snape podría ayudar a la orden y así
lo hizo.
El volvió a su empleo como profesor DCAO, y
nosotros volvimos a Hogwarts. Recuerdo que el día que volvimos
me dijo que lo nuestro tenia que acabar que esto no era posible.
Que
recuerdos y mañana partimos a nuestras casas y jamás lo
volveré a ver, algo me saca de mis pensamientos eh chocado con
algo no puede ser es la señora Norris salgo corriendo sin
rumbo estoy perdida hasta que encuentro un salón abierto y
entro a esperar que Flich se valla. Me doy la vuela para descubrir
que no estoy sola, el esa ahí y tiene una cara de sorpresa que
debe ser igual a la mía
-Hermione que haces aquí?
No
se que responder lo había podido esquivar por todos estos días
solo lo tenia que ver en clase, y sin embargo dolía, y duele
verlo, ahí, ahora y yo sin poder besarlo, sin hacerlo mío.
Mis ojos comienzan a humedecerse quiero salir corriendo pero no puedo
y de mis labios sale lo que nunca pensé que saldría, lo
que me estaba ocultando, intentando no verlo.
-Te amo, no me
obligues a vivir sin ti.-
El me mira desconcertado pero igual se
acerca y me besa.
-Que puedes esperar junto a mi; yo no te puedo
dar nada, solo te puedo ofrecer mi ser-
Yo lo beso con mas pasión
saciando la sed de mis labios, por no haberlo besado por tanto tiempo
le sonrió y lo miro a los ojos
-Estas de suerte por que yo
solo te quiero a ti, nada mas.-
El me sonríe y me
besa
-Mañana va a ser un día duro pero no importa
por que te tengo a mi lado.-
Tenia razón tendríamos
que enfrenarnos a mucho por este amor pero eso seria mañana ya
que por esta noche solo quería amarlo y que me amara como hace
tanto tiempo que no lo hacíamos
Y es curioso por que
nuestro amor solo había podido conocer la noche, solo la
noche, pero mañana conocería el día, pero eso
será mañana solo por esta noche no pensare por que esta
noche lo amare.
