Capítulo VI: una espada y un sueño

Una oscura noche, sin estrellas pero... en un castillo muy grande había velas que lo alumbraban, la primavera estaba es punto fuerte y los cerezos en flor abrían del modo que sus bellos pétalos se dejaban caer...

-Éste lugar...- dice una voz masculina al ver ese paisaje.

Sesshoumaru no entendía lo que ocurre, algo le hace encaminarse por un rumbo de ese lugar, caminaba pero nota que en el lugar que estaba, era diferente... antiguo...

-Siento que he estado aquí...

Camina un poco hasta llegar al fondo de uno de esos largos pasillos, mira el cielo y la Luna estaba en cuarto menguante... luego fija su vista al fondo, pues había una silueta.

-Na...ni?

El youkai camina hacia esa silueta pero nota como sonríe, era una sonrisa muy cálida y al mismo tiempo llena de cariño hacía él...

-Tú...

Se levanta de golpe, Sesshoumaru se levanta en ese instante... su respiración era entrecortada... su frente sudaba, parecía un poco nervioso.

Hacía tiempo que no... soñaba estas cosas- decía el youkai mientras toca su frente, la tenía un poco caliente.

Sesshoumaru en ciertos periodos soñaba cosas extrañas, cosas que en parte sentía que había vivido, las sentía tan reales pero sobretodo, esos sueños lo perturbaban mucho a causa de que siempre terminaban de la misma forma, una silueta que tenía una sonrisa muy cálida lo esperaba y éste intenta acercarse a ella...

Su larga cola lo abrigaba un poco, su pecho estaba totalmente descubierto... ya estaba acostumbrado a ello, mira por la ventana y nota que seguía oscuro. Intenta dormir de nuevo pero le era casi imposible.

Llega un nuevo día para el youkai, éste se levanta y se viste, cuando sale de su habitación Kagura pasa cerca.

Oh, no me digas que de nuevo no dormiste?

No te metas- ese fue su saludo.

Kagura se molesta y nota que se acerca a Naraku que tomaba su desayuno en el jardín y en sus manos tenía un periódico.

Buenos días Sesshoumaru- dice Naraku sin mirarlo.

...- el youkai solo lo mira fríamente.

Cuando Naraku nota su mirada gira su vista y lo mira fijamente.

De nuevo eso, ne?- dice Naraku.

... algo que no soporto es esperar... necesito encontrarla!- contesta alzando un poco la voz.

Tranquilo youkai, todo a su tiempo... además, ese es mi deber.

Eso a Sesshoumaru no le gustó mucho, por alguna extraña razón ya no quería seguir sus órdenes como antes pero escucha algo que lo deja en silencio total.

Será mejor que te prepares, quiero visitar a Kagome-san a su casa- dice Naraku mientras se levanta.

Naraku nota ligeramente por el ovillo del ojo que eso dejó callado al youkai, se aleja de ahí y Sesshoumaru hace lo que se le pidió.

En casa de Kagome, ésta había salido de tomar un baño que la dejó como nueva... se sentía más relajada.

La chica de largos azabaches desenredaba su cabello y al mismo tiempo se miraba en el espejo, el silencio reinaba en su habitación por completo a pesar de que era día. En ese instante algo la deja extrañada, logra percibir el sonido de unas aves que se posan en la rama de un árbol cercano a su ventana.

Hacía tiempo... que no veía aves aquí...- detiene su cepillado y se acerca a ellas, quería tocarlas.

Kagome estaba muy cerca de ellas, las aves notan su presencia y se van de ahí a toda velocidad, ella sonríe un poco.

Y eso que quería tocarlas...- la chica regresa a lo mismo pero... siente un ruido extraño, detiene su actividad de nuevo.

La chica deja su cepillo en el tocador y decide salir de la habitación, era un ruido un poco extraño y provenía de esa habitación. Kagome camina directamente hacia él y se detiene enfrente de la puerta.

Viene de ahí...

Sin importar algún regaño por parte de Kaede, abre la puerta y cual va siendo su sorpresa que ve claramente un aura rodear a esa extraña espada y ésta se movía... parecía que en cualquier instante saldría de esas extrañas ataduras en las que se encontraba.

Se... mueve...

De pronto, siente como la puerta se le cerraba, ella se asusta un poco a eso y fija su mirada en la espada... era grande, un poco más que el tamaño normal de una katana y parecía pesada a simple vista. Entonces siente como algo le hacía que se acercara a la espada.

Por que...- piensa la chica- mi mente se nubla...

Los ojos de Kagome se nublan, camina hasta tener a la espada enfrente, acerca su mano a ella... ésta se mueve con más fuerza, la mirada de Kagome era diferente... más seria.

Sounn...ga...

Por otro lado, Seshsoumaru se terminaba de arreglar, se queda inmóvil por unos segundos.

...Esa voz...

En la casa, Kaede había abierto la puerta y jala a Kagome, pues ésta estaba acercándose a la empuñadora de dicha espada.

KAGOME! KAGOME!- dice Kaede mientras hace regresar en si a Kagome.

Kagome sale de trance y mira a Kaede, luego hacia la espada... estaba como si nada; eso la deja helada.

Niña! Se lo he dicho! Está prohibido entrar ahí!- regañaba la anciana a la chica.

Yo... no sé que pasó...

Kagome, que no entiendes que no puedes estar aquí?- dice Kaede al mirarla fijamente.

La chica la mira, no lo entendía... no entendía la razón por la cual nunca se le dejaba entrar ahí, ella se suelta de Kaede y su mirada se torna seria.

...por que?- pregunta ella.

Porque no es bueno para su bienestar- dice ella como tratando de olvidar el tema.

Eso para Kagome no era algo convincente y Kaede lo nota, se da cuenta que la chica quería la razón, no una excusa.

Niña.. ves esa espada?- dice Kaede mientras la ayuda a levantarse.

Que tiene, es una espada un poco rara.

Esa espada ha pasado por generaciones, es una reliquia...- explica ella.

Era extraño, Kagome no lo sabía... tenía curiosidad de la espada.

Tan curiosa como siempre...- dice Kaede mientras toma las manos de Kagome- esa espada es peligrosa si no se usa como se debe, aparte... perteneció a un demonio tan poderoso que con sólo desearlo, podía destruir al mundo y o tenerlo bajo sus pies.

Y... por qué no puedo acercarme a ella?..

La voz de Kagome era más seria, Kaede se queda en silencio algo que a Kagome deja en duda... quería saber más.

En ese mismo instante, se escucha el timbre de la puerta, para la ama de llaves era un alivio y se va de ahí; Kagome sale igual y cierra la puerta, aunque para la chica... por su mente pasa algo, siente como si su nana no le dijera todo...

Kaede abre la puerta y nota que era Naraku junto con su guardaespaldas; se extraña un poco ante esa visita.

Oh, Naraku-san... hacía tiempo que no pisaba esta casa- dice ella.

Je, así parece... estoy de visita para ver a Kagome- habla caballerosamente el hombre.

Sesshoumaru estaba detrás de él, serio y sus ojos estaban ocultos tras esas gafas negras...

Ya veo, en ese caso adelante... Kagome bajará en unos momentos.

La chica de ojos cafés escucha todo desde las escaleras, pero se asombra al ver a Sesshoumaru ahí; ésta se aleja del área... el youkai con su apariencia humana la divisa, su olor la delata.

Por mientras... no desean tomar algo?- pregunta la anciana.

No nada, gracias- contesta Naraku.

El youkai hace un gesto que igual no deseaba nada, Kaede por unos instantes se siente extraña... siente una... extraña energía en el ser.

No pasó mucho cuando Kagome baja a recibir a Naraku, ésta se acerca a él y lo saluda.

Es un gusto verte Kagome-san- dice Naraku tras darle un beso en su mejilla.

El gusto es mío Naraku-san- mira a Sesshoumaru- oh, Sesshoumaru-san me alegra mucho verlo!

La chica sonríe al youkai, éste se siente ligeramente extraño, no responde a ese gesto... para Naraku era algo bastante interesante; Kaede se queda extrañada al escuchar el nombre de Sesshoumaru.

Acaso... se conocen?- pregunta Naraku curioso.

Si, no sabía que su guardaespaldas fuese muy amable- dice ella sonriendo.

Naraku sonríe ante eso, luego mira a Sesshoumaru y éste hace que no pasó nada.

Si... bueno, mejor voy a lo que voy Kagome..- se detiene Naraku- ... puedo decirte así?

O.O oh claro! Tanta formalidad es un poco angustioso... Naraku...

Bueno, estoy aquí porque quería decirle que dentro de dos días habrá una reunión muy importante de todos nosotros.

Una... reunión?

Si, el señor Presidente realizará una reunión en el Edificio Nacional para acordar con unos asuntos de suma importancia- explica Naraku.

Para Kagome era algo raro... sería la primera vez que asistiría a esa clase de reuniones tan importantes, su padre le llegó a platicar que solían ser un poco aburridas pero bastante interesantes como para pasar el rato.

Y... me gustaría que fueses mi compañera ese día- cuando dice esas palabras coloca su mano en los finos dedos de Kagome, ésta se sonroja un poco.

Sesshoumaru por su lado fija su vista a otro lado y más porque se sentía atraído por algo... por una energía.

-Siento una energía... siento que la conozco de algo, es poderosa... y mucho- piensa aunque sus pensamientos son interrumpidos por la mirada de Kaede, siente como la anciana lo miraba fijamente.

Así que... sería un honor si acepta- dice Naraku.

Kagome se queda en silencio unos segundos, por una parte se le hacía una invitación un tanto comprometedora... pero sabía que de alguna u otra forma se verían las caras siendo en esa clase de reuniones, ésta responde:

No creo que fuese mala idea, acepto tu invitación- dice la chica, pero en esa ocasión no sonríe sino.. muestra una mirada, no seria pero que decía que era una invitación.

Gracias...

En eso, se escucha el móvil de Naraku, éste lo saca de su bolsillo y sale hacia un jardín... Sesshoumaru y Kagome quedan solos.

Lo hiciste por la misma razón... no?- dice fríamente el youkai.

Era la primera vez en todo ese tiempo que decía palabra alguna, al estar con Naraku permanecía callado pero escuchaba con atención cada palabra que sus oídos detectaban.

...lo has dicho- dice ella- y... tu estarás?- pregunta la chica con un hilo de esperanza.

Para él era un poco extraño, no entendía el comportamiento de la chica y contesta quitándose sus gafas.

Lo has dicho... soy su guardaespaldas... es mi trabajo- dice él serio y frío.

No lo dice con entusiasmo...- piensa ella.

Naraku regresa a ellos y sonríe, se había dado cuenta que ambos dirigieron palabra alguna aunque no lo hace notar.

Bien pues es momento de retirarme, tengo unos asuntos por resolver- dice Naraku.

Ah, espera!

Kagome lo detiene y le da la cajita con el collar, éste se extraña.

Yo... no puedo recibir un regalo tan costoso como esto...

...No me lo devuelvas, es tuyo... –regresa la caja a las manos de Naraku- tómalo como un regalo.

Ella lo mira un poco y luego acompaña a Naraku y su acompañante a la salida; ambos seres suben al auto y se van... Kagome cierra la puerta y ve a Kaede.

Sucede algo?- pregunta ella.

Nada niña, es mejor que coma algo- contesta Kaede con una bandeja que parecía tener comida.

Hai! Ya tengo hambre.

En el coche, Sesshoumaru miraba fijamente por la ventana... no entendía los planes de Naraku.

Por que lo haces?... ahí de alguna u otra forma estará presente- dice el youkai serio.

Sesshoumaru... haces demasiadas preguntas, además todo está saliendo bien... sólo te puedo decir que pronto la encontrarás y tus poderes regresarán a la normalidad.

Cuando- su voz era más una orden que una cuestión.

Pronto... muy pronto...-contesta Naraku- mientras tenga ese collar, las cosas se facilitarán... es una joya milenaria... y tu Kagome... eres la dueña legítima de esa reliquia...

Los dos se van directo a la mansión... pero para Sesshoumaru algo no le olía bien... comienza a sentir cierta rebeldía hacia Naraku.

Cuando al menos tenga mi espada... no importa mis recuerdos... me iré de aquí, yo mismo la encontraré y así... me vengaré de ella...

Ya era de noche... Kagome se encontraba hablando por teléfono con Sango, al aparecer ella aún seguía de viaje.

Oh si... todo está bien allá?- pregunta Sango.

Claro, Miroku te extraña mucho!- dice Kagome.

Lógico... de hecho ya le llamé, oye... no te ha dicho nada de una reunión- comenta su mejor amiga.

Ah no, pero ya estoy enterada... Naraku-san me pidió que fuese su compañera- platica Kagome mientras se acerca al tocador y ve la caja con el collar.

No me digas... no sé pero siento que está interesada en ti..- dice Sango ligeramente preocupada.

No lo sé... el caso es que yo no me siento interesada por él, es raro... – dice Kagome al tener el collar en sus manos.

Bueno... no creo que llegue para ese día, pero... le diré a Miroku que esté atento, igual a mi... no me da confianza, a nadie del gobierno le da confianza ese hombre... sólo ten cuidado, si?- Sango se sentía preocupada.

Si, gracias amiga, lo tendré en cuenta... nos vemos!

Había terminado la llamada, Kagome sabía que ese hombre desde siempre, tenía una cierta... mala reputación entre los trabajadores de ese mundo de la política; hasta su padre lo evitaba.

Aun así... tendré cuidado...- la chica se queda dormida encima de la cama, la joya permanecía en sus manos.

Kagome comienza a soñar... tiene un sueño extraño...

Hermosos jardines de un bello palacio, de un castillo antiguo... agua por doquier, era un lugar impresionante.

-Esto... dónde estoy...?- Kagome se mira, tenía un kimono muy elegante y mira su alrededor- es un lugar enorme...

Nota que el castillo estaba en total silencio pero... ve al fondo a alguien que parecía que miraba el paisaje, era una silueta más alto que ella.

-Quien es?- pregunta ella.

La silueta se voltea y camina hacia ella, ésta no podía verlo a la cara... algo se lo impide...

La hija de Hiro Higurashi despierta de golpe, no entendía que ocurrió y ve que en su mano yacía la joya que le regaló Naraku.

Que fue... ese sueño...?- se sentía un poco asustada, nunca había tenido esa clase de sueños y más... que la llevaban a una época.. antigua.

Tiene frío y decide acostarse bien, deja la joya en su caja y decide dormir, conciliar el sueño... por otro lado, Kaede estaba detrás de la puerta de ella y se encamina.

Por más que lo intente... no podré por mucho tiempo... algo está haciendo que las ataduras de Sounnga se debiliten, en un descuido... ese demonio regresará.

Kaede llega a una sala que no era la prohibida... en esta había muchas cosas antiguas pero.. sobretodo antiguos pergaminos con imágenes de un ser imponente y de mirada fría...

Lo único que no fuese bueno... será que despierte ese demonio... sería fatal para el mundo, debo evitar a toda costa pero sobretodo... proteger a Kagome, amo Higurashi... concédame el permiso de romper con el sello guardián.

La anciana junta sus manos y ora un poco, de pronto, una valija extraña sale y cae en manos de Kaede, era un espejo muy viejo... ella sonríe para luego ponerlo en el suelo y juntar sus manos.

Es... momento de que aparezcas... guardián Higurashi...guardián de los cielos... Bankotsu...

Una luz se forma en la casa y sale a toda velocidad hasta una dirección, hasta un punto... para despertar a ese guardián, que regresa del mas allá...

Fin del capítulo VI

Mou! como la ven?... Naraku ha invitado a Kagome a una reunión muy importante pero... ella solo lo hizo por ser una invtación, aparte... Kagome está más curiosa que nada con respecto a esa extraña espada... qué pasará? Sesshoumaru podrá obtener lo que desea? Naraku logrará su objetivo?... y... por qué Kaede liberó a ese guardián?... esto y más en el siguente capítulo de este fic!

Jejejeje, bueno, algunas se habrán quedado sin palabras a esta sorpresa... SI! para todas las fans de Bankotsu(me incluyo yo), hará su aparición en este fic! pues será alguien importante en la vida de Kagome a partir del siguiente capítulo... pues como dice Kaede es un guardián y estará del lado de los buenos... n.nU jejejeje.

Mou... una vez más no podré contestar a sus reviews... n.nU pero se los agradezco a todos! gracias por su apoyo y nos estamos viendo en la siguiente actualización de este fic!

Se despide con cariño,

Bunny n.n