Gracias a Alega Sumino-Sham, Nizah, Haruko FLCL (respecto a las relaciones homosexuales en este universo... se ven normales, incluso están permitidas las bodas homosexuales, aunque esto ultimo no es que quiera decir mucho)

Aviso: un poco tarde, quizás, pero esto es Slash, olvide avisar antes.

Disclaimer: es de J.K.Rowling, o de quien sea, sino puedo asegurar que Harry tendría una serpiente como mascota, o dos, o quizás tres.

MOMENTOS DE PERSECUCION

Pansy comenzó ocultándose cerca de la casa de Potter. O lo que se suponía que era su casa, porque ella sólo podía ver un magnifico jardín, lleno de diferentes árboles en flor. Odio a Potter por poder vivir en un lugar tan hermoso, mientras que ella vivía en medio de la pobreza.

Momentos después Potter salio de su casa con una pequeña serpiente negra enrollada en su cuello, era la que siempre le acompañaba, detrás de él iba su padre (o eso sospecho Pansy, que nunca lo había visto, pero físicamente era idéntico a Potter)

- ¡Quiero que te las lleves! - dijo James Potter, y Pansy no supo a que se refería hasta que vio que salían dos diminutas cabezitas de serpiente de entre los arbustos - ¡No quiero serpientes en mi casa!

- ¡Pero ellas no harán nada! Adham ha estado durmiendo durante los últimos meses en mi habitación y no ha hecho nada malo, ni os disteis cuenta.

- Sabes que te prohibimos tener serpientes en casa

- Pero… - intento protestar Potter hijo - Laora tiene un animal…

- Deberías dejar de tener celos de tu hermana.

- ¡Yo no tengo celos de Laora!

- Y la niña tiene un gato, un inofensivo gato.

- ¿Inofensivo¡Ese monstruo me muerde cada vez que me ve!

- ¡Basta! Vete a dar una vuelta, a ver si te tranquilizas, y de paso, deshazte de esas serpientes. No quiero que los elfos domésticos me vuelvan a decir que tienes serpientes escondidas - y James Potter entró en la mansión.

Entonces las otras dos serpientes salieron de su escondite, y Harry se arrodillo y hablo con ellas. Pansy no entendía lo que les decía, pero mientras le espiaba allí escondida, sintió una extraña empatía con el chico. Pero todo y eso tenía que cumplir las órdenes de Draco.

El chico abrió un poco la mochila que llevaba colgada de la espalda, y dos de las serpientes se deslizaron dentro, pero iban a estar un poco apretadas allí dentro, así que hizo salir a la verde, que era de un tamaño similar a la que Harry llevaba enrollada al cuello, pequeña, para que se quedara también sobre su cuello, y la otra, que era una serpiente bastante más grande, se quedara en la mochila, y aun así, su cabeza asomaba por la obertura de la cremallera, esta era de un verde marronoso y tenia rombos dibujados en su lomo.

Una vez la mochila estuvo sobre la espalda Harry, este hecho a caminar, y como iba tan enfadado y metido en sus pensamientos, no noto que una niña le seguía de forma bastante torpe, todo hay que decirlo, por suerte Pansy había utilizado su Don, ella podía variar su edad, hoy tenía el aspecto de una niña de cinco años.

Llevaban caminando cerca de media hora, Pansy muy cansada porque sus piernas eran mucho más cortas ahora, cuando Potter entro en una mansión, Pansy se rezago un poco, preocupada por si sería algún lugar en el que ella no podría entrar, pero encontró un letrero donde explicaba que aquello era una biblioteca, así que entro rápidamente, y al estar dentro busco con la mirada a Potter, pero no lo encontró.

Se fijo en que una bibliotecaria la estaba mirando por encima de sus gafas, extrañada de que una niña tan pequeña estuviera allí sola, pero Pansy la ignoro completamente, y se puso a observar el hall de entrada. Era un sitio de pequeñas dimensiones, pero con un techo muy alto, a su lado derecho se encontraba una mesa muy larga donde se podían pedir los libros y devolverlos. Y enfrente de ella habían dos escaleras, y detrás de ellas muchos, muchos libros.

Decidió tomar la escalera de la derecha, porque en un cartel ponía que estaba la sección de Defensa Contra las Artes Oscuras, pero una vez allí no lo encontró. Recordó que tenia deberes de Transformaciones, así que volvió a bajar hasta el hall, pero esta vez tomo las escaleras de la izquierda, y pasando por las secciones literatura y filosofía encontró un pasillo con tenia a su lado un hermoso jardín, pero no hizo caso de él, y vio que la escalera que ascendía llevaba a Transformaciones.

Estaba apunto de subir cuando vio que alguien ascendía por una pequeña escalera que Pansy no había visto.

- ¡Profesor Snape! - y Pansy cometió un error: miro a su profesor a los ojos, y durante unos instantes Pansy no pudo apartar sus ojos de los de su profesor y jefe de casa - Ya debe saberlo - dijo Pansy refiriéndose a que ya le había leído la mente.

- Si señorita Parkinson- y una sonrisa tenebrosa fue apareciendo en la boca de Snape - ¿Quieres lo mejor para Draco, verdad?

- Claro, profesor - dijo Pansy insegura.

- Bien, entonces vas a dejar de obedecer a Draco, y sólo me harás caso a mí.

- Yo sólo… - dijo Pansy revelándose contra el profesor, pero no pudo acabar.

- A no ser que quieras suspender mi asignatura - y Pansy frunció los labios molesta - Te expongo mi plan, y tu decides.

- Vale - dijo Pansy sabiendo que no tenía más opción.

- Entonces, lo primero que has de hacer es decirle a Draco que Potter esta enamorado de él.

Viktor se subió la capucha de la túnica para intentar pasar desapercibido, aunque eso un poco más difícil para alguien de su altura y complexión. La gente le miraba algo extrañada no era normal ver a alguien encapuchado, pero llamaría todavía más la atención si la gente comenzaba a gritar "¡Es Viktor Krum!"

Entro en una cafetería del centro donde momentos antes había entrado el chico al que iba siguiendo, se sentó de espaldas a él y a su acompañante y pidió a la camarera que le pusiera un café de manzana.

Su estado era tenso, sólo había querido saber algo más de aquel chico, y ahora se encontraba con que se había reunido con otro chico algo más mayor, de unos 20 años, y que no se hablaban entre ellos.

- Ron… - y Viktor agudizo el oído para oír la conversación que comenzaba.

- No estuvo bien lo que hiciste, y lo sabes. Deberías intentar arreglarlo.

- ¿Y cómo quieres que lo haga? Dime lo que harías tu.

- Yo no lo se - dijo Ron en tono inseguro.

- Yo tampoco, nos parecemos demasiado - dijo el chico mayor con voz dulce, algo que no le gusto demasiado al chico que espiaba.

- Lo se… los dos aguantamos hasta que finalmente explotamos.

- Si, es…

Pero Viktor no pudo escuchar toda la frase porque la camarera le trajo lo que había pedido.

- Eres el pequeño, tu por lo menos sólo has tenido que soportar las burlas de los gemelos. Yo, que siempre fui algo retraído, tuve que aguantar a Bill y Charlie,y también a Fred y George, que aunque sean mis hermanos pequeños siempre se metieron conmigo.

Viktor comenzaba a no entender la conversación, al principio le había parecido que era una cita entre novios peleados, pero ahora…

- Ves a casa y dile a mama que lo sientes - dijo Ron no muy seguro.

- Mama será la única que me perdonara, Papa quizás lo haga ver, pero ninguno de nuestros hermanos lo hará, me odian y siempre me pregunte el porque.

- ¡No te odian! - exclamo Ron - sólo...

Viktor se bebió el café de manzana de golpe y pago su cuenta. Cuando estuvo en el exterior se dio la vuelta para observar a través del vidrio a los dos chicos. Se recrimino mentalmente por no haber notado que eran hermanos, y también por haber espiado una conversación tan personal. Era algo que nunca había hecho, y que definitivamente, desde ese día no volvió a hacer.

Harry caminaba por los solitarios pasillos de Hogwarts. Era bastante tarde, pero había querido quedarse hasta esa hora porque habría menos gente, y nadie le veía dejar a sus tres serpientes en el bosque prohibido, no había podido encontrar un escondite mejor para ellas. Le costaba separarse de Adham, que hacia seis meses que vivían juntos, pero también le costaba dejar a las otras dos, aunque las había conocido recientemente.

Entonces, sintió que alguien lo seguía, así que al doblar un recodo se quedo quieto esperando que su perseguidor doblase también. Cuando giro lo cogió del brazo y lo aplasto contra la pared.

Era Draco Malfoy.

- ¿Me seguías Malfoy? - le pregunto separándose enseguida, pero Draco no iba a darse por vencido tan fácilmente, así que empujo a Harry hasta que dio con la otra pared y lo acorralo allí.

- Me gustas Harry - dijo con voz dulce.

Y entonces lo beso.

Draco estaba dispuesto a cualquier cosa con tal de vengarse de los dos Gryffindors, así que cuando Pansy le había dicho que Potter esta enamorado de él, no se lo pensó mucho y puso en marcha su plan. Pero la realidad era otra, nunca había besado a un chico, y el beso le daba asco.