Disclaimer: es de J.K.Rowling, o de quien sea, sino puedo asegurar que habría slash, habría más slash, y todavía más slash.
SLASH! HP/DM
MOMENTOS
MOMENTOS DE DESESPERACION
Pansy subía furiosa las escaleras del barrio de Wood. El profesor Snape le había dicho que sólo fuera ahí si había una urgencia, y Pansy consideraba lo ocurrido como tal. Había salido de su casa corriendo nada más leer la carta que Nott le había enviado.
Nunca había estado en ese barrio, y lo estaba llegando a aborrecer realmente, estaba cansada de subir escaleras que nunca terminaban, y de apartar plantas y flores que caían desde los jardines a su cabeza.
Media hora después llego al final de las escaleras, y al principio del bosque prohibido, y allí, protegida por las ramas de un enorme árbol había una de esas casitas de madera que Pansy había acabado odiando. No le acabo de gustar la situación de la casa, estaba demasiado cerca del bosque prohibido, con todos sus peligros: acromántulas, runespoor y licántropos entre muchos otros bichos. Nadie en su sano juicio viviría allí, exponiéndose a los monstruos que habitaban en el bosque.
Se acerco a pasos agigantados, y picó fuertemente la puerta con los nudillos. La furia la dominaba y no pensaba más que en decirle cuatro cosas al profesor Snape, ninguna de ellas muy agradables, así que cuando se abrió la puerta, simplemente gritó.
- ¡No se quien se cree usted que es, pero… - Pansy calló inmediatamente y tragó saliva como quien se sabe que ha metido la pata de la manera más vergonzosa.
- Vaya - exclamó la persona que había abierto la puerta - Nunca creí que al abrir la puerta me echarían bronca.
- Lo siento - dijo Pansy totalmente ruborizada - estaba buscando al profesor Severus Snape.
- Severus esta dentro, pasa, me pregunto que ha hecho ahora - dijo el hombre con una sonrisa en la boca.
Pansy entro tímidamente, ella nunca era tímida, nunca, pero la vergüenza que acababa de pasar hizo que su furia se diluyera y se sintió pequeña e insignificante al lado de aquel hombre que sólo hacia que sonreír.
- Severus - dijo aquel hombre abriendo una puerta pequeña - una alumna te busca.
- Yo no le he dicho que fuera su alumna. ¿Cómo lo ha sabido?
- Un presentimiento - y aquel hombre le sonrió dulcemente - No estés tan segura de que todo haya salido mal, aunque sigo preguntándome que es lo que ha hecho mi marido.
- ¿Su marido!
- ¿Tan extraño parece que este casado señorita Parkinson? - pregunto el profesor al entrar, ella sorprendida le miro - Ya veo que si - dijo después mirar en la mente de su alumna.
- Estaré en la cocina - dijo Remus mientras desaparecía por una puerta blanca.
- Así que Draco se ha enamorado de Potter, pero cree que le ha estado engañando. Mi ahijado teniendo remordimientos es algo que nunca creí ver.
- ¡Odio que me lea la mente! - exclamó Pansy mientras notaba que la furia volvía.
- Draco esta sufriendo, y eso hará que madure, las personas solo maduran cuando se sienten mal.
- ¿Ha hecho que Draco se enamore de Potter sólo para que sufra y madure? Con lo mono que es el Draco malcriado que sólo tiene en la mente como vengarse de Potter y hacerlo sufrir.
- Yo no he hecho que Draco se enamore de Potter¿Cree que es normal que Draco sólo piense en como vengarse de Potter? Sólo he hecho que Draco se de cuenta de que estaba enamorado de ese Gryffindor.
- Theodore solía bromear que la obsesión de Draco con Potter no era normal… Creo que él sospechaba de cómo acabaría todo esto, y por ello se negó a participar en el plan. ¿Qué pasará ahora?
- No lo se, pero si Remus ha tenido un buen presentimiento…
- ¿Su marido es vidente?
- Más o menos - dijo Severus de forma vaga, por nada del mundo iba a decir que su Remus era un licántropo, para que luego la chica le mirara mal, como hacían todos luego de que se enteraran del secreto.
Harry entró en su casa y se dejo caer en el sofá agotado. Entonces, las lágrimas que había estado reteniendo surgieron rápidamente, y ahogo su cara contra un cojín que no tardo en estar mojado.
Sentía que había pasado algo malo, volvía a ver la cara llena de lágrimas de Draco, pero todas las suposiciones que hacia eran demasiado horribles para poderlas aceptar.
- ¡Harry! - alguien le cogió por los brazos y le obligo a mirarle. Era Sirius - ¿Qué ha pasado?
- ¡Odio a los Slytherins!
- No eres el único ¿Qué te han hecho?
- No estoy seguro - y el llanto se doblo en volumen al no saber con certeza que era lo que pasaba.
Podía ser que Lucius Malfoy se había enterado de su relación y había obligado a Draco a cortar con él, pero este, en el momento de decírselo no habría podido y había huido; también podía ser que Draco se sintiera atraído por otra persona, o que ya no sintiera lo mismo por Harry; podía ser también que Draco nunca lo hubiera…
Era demasiado horrible incluso para pensarlo.
- ¿Estas mejor? - le pregunto Sirius cuando vio que el llanto se calmaba - Es bueno llorar cuando uno lo necesita.
- Si…
- Anda, dile a tu padrino que te han hecho los Slytherins.
- No puedo entender que es lo que pasa por su mente, parece una cosa, y luego… ¡es otra!
- Son serpientes traicioneras, todas las serpientes son así, astutas, y cuando pueden se retuercen y te clavan los colmillos.
- Generalizas con las serpientes, no todas son así, olvidas que soy un Parselmouth.
- Si, suelo olvidar eso - dijo haciendo una mueca de disgusto.
- ¿Crees que los Slytherins son capaces de amar?
Y esa pregunta hizo que Sirius se tensara de manera alarmante.
- ¿Por qué lo preguntas?
- Yo... me he enamorado de un...a Slytherin, y todo parecía ir bien, pero de repente, se hecho a llorar y huyo...
- Los Slytherins son complicados, nunca sabes lo que pasa con ellos, nunca sabes lo que piensan, son capaces de fingir cualquier sentimiento - y aquí Harry se sobresalto - pero... cuando aman son capaces de hacer que la persona amada sea la más feliz, la sobreprotegen, cuidan extremadamente de ella...
- No dices eso como si estuvieras muy contento.
- ¿Nunca te has preguntado porque estoy soltero a mi edad? - Harry le miro sorprendido y asintió con la cabeza - Supe que amaba a alguien demasiado tarde... justo después de que se casarse... con un Slytherin
- ¿Hablas de Remus?
- ¿Le conoces? - y Harry asintió con la cabeza - por eso te encontré en la biblioteca... si, hablo de Remus... cuando nos enteramos de que Remus salía con Snape nos lo tomamos a broma, no podían ir en serio, cortarían antes o después, pero seguían saliendo, las discusiones entre James, Remus y yo comenzaron a ser constantes... decidí que era hora de hacer algo, le gaste una "bromita" a Snape... y entonces él descubrió que Remus era un licántropo... Remus dejo de hablarnos a James y a mi, y meses después nos envió las invitaciones de la boda...
- ¿No fuisteis?
- No. Y sigo pensando que es lo mejor, Remus es feliz... Snape es capaz de hacerle más feliz de lo que yo hubiera podido hacerle. A veces voy a la biblioteca y lo veo de lejos... pero nunca me acerco, si Remus, yo y James volviéramos a ser amigos, Snape y James y yo sólo nos pelearíamos, y eso haría infeliz a Remus...
- Vaya...
- Con el tiempo las heridas se curan, nunca dejare de amar a Remus, tampoco dejare de irlo a ver a escondidas, pero el tiempo hace que conozcas a nuevas personas... que, aunque no sea la relación ideal, te pelees, lo notas a faltar cuando no está.
- Eso quiere decir que estas enamorado de alguien más.
- Podría decirse así, Remus siempre será mi gran amor, pero eso no quiere decir que no ame a la persona con la que estoy. Por eso, si esa Slytherin es capaz de hacerte feliz, James y yo lo aceptaremos.
- En realidad, es un chico.
- Esta bien.
- Lo que me gustaría saber, es si realmente me quiere...
- Bien - dijo Pansy sentándose en la mesa de Slytherin del Gran Comedor - ¿Sabéis que sólo queda una semana para el baile? Me hace tanta ilusión... Yo ya tengo mi túnica¿Ya os la habéis comprado vosotros?
- Si - respondió Theodore mientras miraba con disgusto la comida que tenía delante, no había nada que le gustase.
- ¿Y tu Draco¿Draco? - pero el chico seguía sin contestar mirando distraídamente a algún lugar que parecía ser la mesa de Gryffindor - ¿Sabes que Potter va a ir con Granger al baile?
- ¿Qué! - dijo levantándose de golpe, todos en el Gran comedor se le quedaron mirando, pero él se limito a sentarse como si no hubiera pasado nada, un Malfoy nunca monta ningún escándalo, son los demás que le miran porque es muy hermoso.
- ¡Era una broma! - dijo Pansy riéndose, pero de pronto se puso sería - Si piensas comportarte como un Hufflepuff...
- ¡Yo no me comporto como un Hufflepuff!
- Si que lo haces - intervino Theodore - si te comportases como un verdadero Slytherin no estarías aquí sentado mirándolo como un bobo.
- ¡No lo estoy mirando como un bobo! - exclamo Draco ofendido.
- No sólo llevas mirándolo desde que hemos entrado, y suspirando. Si fueras un autentico Slytherin te levantarías y le dejarías claros los limites a Granger, porque yo diría que se lo esta intentando ligar.
En efecto, en la otra punta del gran comedor Hermione intentaba animar a Harry, pero este sólo tenía fija la mirada en la mesa, sin atreverse a levantarla, porque temía ver a Draco.
- ¡Esa arpía¡Tiene su brazo por encima del hombro de mi Harry!
- Deberías ser más discreto Draco - le dijo Theodore con toda la tranquilidad del mundo - todos los Slytherins te están escuchando - y varias personas intentaron disimular lo que habían estado haciendo momentos antes.
- ¡Harry le ha sonreído!
- Es amiga de Potter, no querrás que le pegue.
- No estaría mal. ¿Con quien creéis que ira al baile?
- Supongo que con Granger, están los dos solos.
- Weasley también esta sólo, quizás vaya con él.
- ¿Con el pobretón! Ni hablar - Draco dejo sus cubiertos encima de la mesa y se limpio con la servilleta - Si mi Padrino pudo conseguirlo, yo también lo haré. - y entonces se levanto.
- ¿Qué tiene que ver el profesor Snape en esto? - le pregunto Theodore a Pansy.
- Esta casado con un Gryffindor.
Y mientras Draco se encaminaba a la mesa de Gryffindor, se escucho un ¿QUÉ! provinente de la mesa de Slytherin, y, es que los Slytherins habían seguido escuchando la conversación, y nadie habría podido pensar que el profesor Snape estuviera casado, y menos con un Gryffindor, con lo que él los odiaba.
- Buenos días - dijo Draco cuando estuvo justo detrás de Harry, este sólo pudo temblar, pero no se atrevió a darse la vuelta. Los Gryffindors que lo vieron creyeron que Malfoy había hecho alguna cosa a Harry, pero sólo Hermione y Ron se metieron en la conversación, los otros chicos tenían algo de miedo a Harry por ser un parselmouth.
- ¿Quieres alguna cosa del consejo, Malfoy? - dijo Hermione de forma nada amable.
- Nada que tenga que ver contigo. Quiero hablar con Harry, a solas - y como los Gryffindors no eran tan despiertos como los Slytherins, no notaran nada extraño en que Malfoy llamara a Harry por su nombre.
- No te lo vas a llevar para que puedas encerrarlo en alguna mazmorra y encadenarlo y... - le espetó Ron furioso.
- Bien, yo no había pensado en eso, pero me lo apuntare para probarlo algún día.
- Esta bien, será mejor que nos vayamos - dijo Harry levantándose, pero en ningún momento miro a Draco a los ojos.
- No Harry - le detuvo Hermione - si volvéis a pelearos os castigaran, y a ti Malfoy te quitarán el puesto de vicepresidente ¿Quieres eso?
- Lo que yo quiero lo tengo delante mío - y Harry se sonrojo de golpe, pero como hemos dicho, los Gryffindors no son muy despiertos, así que creyeron que se había puesto rojo de furia.
- ¿Mi puesto de presidenta del consejo de estudiantes¡Lo llevas claro Malfoy!
- No - dijo Draco con mucho esfuerzo, Granger había dado en el clavo si quería humillarle - batallaremos el próximo curso por eso. Y no voy a perder más el tiempo, sólo quiero hacerle unas preguntas, Harry, me da igual hacerlas delante de todos... ¿Quieres ser mi novio¿Quieres venir al baile conmigo¿Quieres...
Pero Draco no pudo continuar porque Harry se había abalanzado sobre suyo y lo besaba con alivio. No pudo evitar llorar por la tensión que había pasado pensando en que Draco le había engañado.
Pero ahora todo estaba bien para ellos dos.
Bueno, sólo queda el epilogo.
