1.- Tras las rejas

1.1- Craso error

Hanamichi Sakuragi tiene veinte años, el pelo teñido de rojo y un extraño idilio con todo tipo de problemas, un frío que le cala hasta el último de los huesos, derecho a dos llamadas y a un abogado de la administración pública. Sentado sobre el férreo banco de la lúgubre celda, pasa las páginas de un periódico local, pasando por alto las noticias para él irrelevantes: un huracán devastador, un canario que toca el piano, la subida de la inflación y de cuantas siglas cuyo significado desconoce… A él sólo le interesa ese breve articulo en el apartado de sociedad que le menciona, y que se presenta mediante un título atrayente, mediocre y recurrente, pero escueto y conciso. Con las manos en la masa. Tal vez desconcertante, pero completamente entendible una vez se echa un vistazo al subtítulo, demasiadas florituras de un periodista novato y pedante para acabar diciendo que le pillaron mientras intentaba deshacerse del cuerpo de la chica, de la manera más absurda y lógica posible, tirándolo al mar, y que las olas se llevaran lo que se tuviera que llevar, y que para cuando fuera descubierto él ya estuviera lejos de allí, en cualquier isla paradisíaca, refugiado de los crímenes de la juventud. Pero le había salido el tiro por la culata. Ni para eso servía. Al fin y al cabo, era tan torpe como él le solía decir… Aquel cabrón… ¡Que tiempos aquellos!

Tras las rejas puede ver como el mandado de turno revisa desganado su expedienta, al tiempo que da un segundo sorbo a su café – solo y sin azúcar- y tararea esa melodía que se a puesto de moda a lo largo del país. Ningún antecedente penal es tal vez un punto a su favor, pero los más veteranos le recuerdan fijo, que años atrás fue más de una noche las que pasó en comisaría.

La reja se corre con fuerza, dejando pasara un chico probablemente más joven que él, de rasgos poco nipones y aspecto poco formal. A l parecer no le van a dejar siempre aislado, en un ínfimo habitáculo, y le han traído un poco de compañía.

.- Las demás están ocupadas, chaval… - Aclara el agente al ver su inquisitiva expresión.-Parece que en estas semana, a todo el mundo le a dado por delinquir… cuídamelo, eh?- Le dice haciéndose el simpático, como si se burlara de su estado. Menudo cínico de mierda, piensa mientras ve como el nuevo inquilino toma asiento en el banco de enfrente.

.- Y tú… porque estas aquí? – Pregunta este evocando a la más tópica de las películas policíacas.

.- Y a ti que te importa, niñato? – Murmura despectivo.

.- Pss, ya ves, era por decir algo – Se excusa mientras mira al suelo – Lo vas a leer?

.- Mh?

.- El periódico, que si lo vas a leer…

Sin decir nada se lo pasa, tirándoselo a la cara con desgana. Tras haber pasado varias página sin fijarse en nada en especial, el chico silba de admiración, y aún sin darse por vencido ante la apatía de su compañero de celda, comenta la noticia.

.- Has leído esto, tío?- Un gruñido de Sakuragi le da pie a continuar.- Un tío se cargo a una pava y intentó deshacerse de ella pero un chivatazo anónimo le delató, y la policía le pilló, con el cadáver de la nena en el maletero… Flipante, no?

.- Seh… - Afirma, irónico

.- Mira, mira… Hanamichi Sakuragui, universitario de diecinueve años, asestó tres puñaladas a la víctima, Maho Rukawa, de su misma edad, interna del centro psiquiátrico de Menninger, Kansas (…) Aún se desconoce cómo logró trasladarla a Kanagawa, asesinarla e intentar deshacerse del cadáver, así como el móvil que impulsó el homicidio (…) Una llamada anónima advirtió a las autoridades del crimen, que acudieron al punto de encuentro nombrado y vieron como el joven conducía el coche con las luces apagadas…- Hizo una breve pausa – Al investigar el vehículo descubrieron el cadáver de la víctima se encontraba en el maletero, desnudo y cubierto de sangre…Joder tío, ni en una peli, eh? Seguro que era un obseso de esos, que se encoñan con tías inalcanzables… Seguro que la pava se volvió majara por su culpa… Menudo cabrón, el tío… - Seguía negando con la cabeza, incrédulo.

Es entonces cuando la puerta se abre, y el locuaz joven se voltea, esperanzado de que sean sus padres, que han venido a pagar la fianza. Sin embargo es de nuevo el agente que le ha traído hasta allí, que se dirige con dureza al pelirrojo.

.- Hanamichi Sakuragui? – Pregunta, casi retóricamente – Tienes visita.

Y el pelirrojo se levanta, contento de poder estirar las piernas y salir, ni que sea por unos segundos, de ese antro donde le retienen, y le lanza una mirada a su compañero. Este se encoge sobre el banco, aterrado, sabiendo que ha leído ese nombre instantes atrás, y que había comentado el peculiar crimen nada más y nada menos que con el propio ejecutor.

.- Flipante tío…- Se dice así mismo mientras ve como Hanamichi le dirige una sonrisa sarcástica y se despide de él al más puro estilo militar.

Tras haberse despedido del plasta del niño ese, que a estas alturas debe estar alucinado, avanza por el largo y mal iluminado pasillo de la comisaría, con las manos unidas por un par de esposas metálicas.

Una vez llega a la sala de visitas – por llamar de alguna manera a la habitación que separa a los presos de los visitantes mediante algo parecido a un cristal- logra divisar a quién l es pera. E intuye que van a ser unos veinte minutos muy largos.

Notas de la autora:

Bueno, no os podéis quejar, habéis que pronto (para ser yo) he actualizado! Un arrebato de inspiración que ha culminado con este patético resultado… en fin, amos a lo que vamos… Se que no se entiende nada, ya. Empezando por prólogo y siguiendo por este intento de primer capítulo, es todo muy confuso, pero se irá entendiendo más adelante… Como dije, es completamente anacrónico, así que esto tiene lugar unos dos años antes del prólogo… Algo más? A, si, Maho Rukawa equivaldría a la Mayo de Beyond de Ice, pero he cambiado un poquito el nombre porque me gustó más.

Um… se me ha ocurrido una nueva idea para un fic pero con mi constancia… me da a mí que sólo escribiría le primer capítulo… ya veremos.

Y respecto a mis largas notas de autora – me estoy controlando, eh?- del capítulo anterior… Lo del Rukawa sadismo de se me coló por accidente, era el principio de un fic en plan parodia – alguien cree que deberías publicarlo a parte? – que empecé y no me atreví a publicar de lo malo que era… Digamos que tengo un cierto vicio de escribirlo todo en el mismo documento de Word, y luego pasa lo que pasa… Bueno, con ello me permito iniciar un nuevo género, el fic piloto… xD, déjenme que desvarío.

Para acabar Miles de Millones de gracias a Shadir, Ran-k, Khira, Miguel y Celine.

Y no cabe decir que cualquier tipo de Review será bienvenido! xD

Manteniendo un mínimo de Constancia se despide…

Kitty.