Disclaimer: Desgraciadamente nada de esto es mió y nunca lo será
Capitulo 1: Un encuentro policial
La noche caía en Privet Drive pero el habitante mas importante aun no había llegado. Eran las 9 de la noche y Harry recorría tranquilamente las calles de Surrey. Sus pensamientos estaban concentrados en una sola cosa: venganza. La dulce venganza que había hecho caer desde al mendigo mas pobre hasta al rey mas rico en la locura pero no a Harry. No. Por lo menos eso pensaba mientras vagaba por los callejones de Surrey.
Desde hace mucho conocía estos caminos y a sus habitantes. Todos lo conocían y lo dejaban puesto que no molestaba a nadie. Pero los pensamientos de Harry volvían con Sirius y su muerte y eso solo lo confundía más. No sabía que era lo que sentía., si se culpaba el o si culpaba a Voldemort o tal vez a Dumbledore, no lo sabía pero le importaba poco pero la vieja profecía lo confundió totalmente. El no se consideraba poderoso en ningún sentido pero tampoco débil y no dejaría que lo pisoteasen ni Dumbledore ni Voldemort ni nadie. Continúo por los callejones hasta llegar detrás de la fábrica abandonada. Escucho un ruido detrás de la reja de la fábrica. Se acerco pero se detuvo al escuchar las sirenas de un patrullero. Vio una sombra meterse a la fabrica y el fue detrás pero ocultándose entre las columnas. El lugar constaba de cientos de cajas llenas de telarañas por los años y sostenido por enormes columnas de acero al igual que el suelo.
Camino despacio hasta una columna para no ser oído por la figura.
Repentinamente las puertas se abrieron mostrando a unos policías que portaban linternas.
-ALTO AHÍ- gritaron al entrar y ver al ladrón correr hacia la puerta de atrás. Sacaron sus armas y dispararon pero la oscuridad les jugaba en contra y fallaron. Harry los vio imposibilitados de atrapar al ladrón. "Al demonio" pensó y se mando a perseguir al ladrón que pudo ver que era enorme y alto. Lo persiguió sin que este se diera cuenta por detrás hasta que vio su chance.
Las cajas forman un camino en zigzag hasta la puerta así que si iban por encima de las cajas podría emboscarlo. Salto en una caja y trepo hasta llegar encima de las cajas mientras el maleante creaba diferencia entre los dos pero si todo funcionaba el debería atrapar al ladrón antes de que escape. Lo siguió y lo igualo pero quedaba poco camino ya que se acercaban a la puerta y las cajas se terminaban 15 metros mas adelante.
"Calcule mal, maldito sea" el que hizo esta fabrica pero como si fuera un rayo, una idea llego a su mente. El estaba 4 metros encima del suelo así que era peligroso así que se decidió.
-!!!!!!!!!!!!!!!!!!BANZAI¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡- Salto desde las cajas y agarro por los hombros al ladrón justo cuando terminaban las cajas. Pero la caída fue unos 4 metros encima de una persona. Harry escucho su pierna izquierda y el dolor lo mordió. Pero para su placer también escucho como el ladrón gritaba pero la voz era conocida. Oyó como la policía se acercaba pero el no se dio cuenta. Lentamente le quito la mascara al ladrón. Tenía el cabello rubio y los ojos azules y al reconocerlo Harry no podía creerlo.
Era Dudley. Si, increíble pero era la verdad. Sabía que Dudley tiraba piedras a los autos pero esos eran todos sus crímenes o tal vez no. Algo empezó a sentir Harry por dentro. Una emoción que nunca la había sentido tan fuerte en su vida. Venganza. Si la dulce venganza de ver a Dudley en grandes problemas llenaba la mente de Harry y una maniática sonrisa apareció en su moreno rostro. La policía apareció detrás de Harry mientras las luces se encendían. Un policía se acerco a Harry, o mas bien una policía. Era alta y delgada, con el cabello rubio y muy bien formada. Parecía tener poco más de 25 años. Se acerco y freno con la boca abierta a ver a Harry y a Dudley inconsciente en el suelo.
-¿Tu lo atrapaste?- Pregunto sorprendida
- ¿Quien mas va a ser si no fui yo?- Respondió Harry confiado. No sabia por que estaba confiado pero no le importaba mucho. La mujer parecía sorprendida por la respuesta pero cuando iba a responder...
-¿Quién eres?- Pregunto una nueva voz. Era el otro policía. Harry lo reconoció como el policía que cuidaba del parque que Harry frecuentaba.
-Alguien- Respondió Harry. Este policía era amigo de Dudley ya que este le solía dar cigarrillos al policía y este lo dejaba tirar piedras a los autos.
Este miro enojado a Harry y saco su revolver. El metal del revolver brillaba intensamente.
-Jonas detente- Protesto la mujer pero la queja no tuvo respuesta.
-Eres el chico Potter. Ahora entiendo por que te mandan a San Bruto. Eres un maldito ladrón ahora. Eh?- Acuso Jonas. Harry sintió la ira creciendo en su cuerpo.
-Tu eres el policía que hace trato con vagos por cigarrillos- Respondió enfurecido el Niño que vivió. Jonas se enojo y se acerco a Harry con el arma levantada.
-Estas bajo arresto intento de robo y hurto- Harry quedo momentáneamente paralizado por la estupidez del "hombre de azul" y observo como Jonas se acercaba pero recobro control sobre si mismo.
-Johansson. ¿Qué demonios estas haciendo?- Pregunto su compañera enojada.
-Haciendo mi trabajo-Fue la única respuesta mientras sacaba sus esposas.
-Yo vi. Como detenía al ladrón, así que suéltalo- espeto la mujer.
-Pero yo vi. Como se resistía a tu arresto y eso es un delito- Y con ese ultimo argumento le puso las esposas a un Harry paralizado por la idiotez del oficial y a Dudley.
-¡Maldición ¡ Te juro que no te saldrás con la tuya en esta Johansson- Grito con rabia la policía. Se dio vuelta y se fue. Harry escucho algo parecido a "mujeres idiotas" provenir de la boca de Johansson. Este empujo a Harry en dirección a la puerta de la fábrica.
-CAMINA- Bramo Jonas. Harry obedeció hasta que llego a la puerta y freno. Jonas se enfureció.
-¿QUE TE PASA AHORA MALDITO HIJO DE P...- Pero no pudo terminar ya que Harry giro sobre sus talones y le pego un cabezazo en la nariz y el oficial cayo de espaldas al suelo agarrándose la ahora fracturada nariz y empapándose las manos de sangre. A Harry le estaba hirviendo la sangre en las venas y con todo el control que tuvo no empezó a patearlo hasta matarlo.
- Primero que todo nunca insultes a mi madre, segundo ten seguro que me voy a vengar- Advirtió Harry con una voz fría que le hizo sentir escalofríos en la columna al corrupto oficial. Harry estaba sorprendido por lo que hizo pero le gusto. Le gusto mucho y dejo escapar una risa amarga mientras subía al patrullero. ¿Estaba siendo rebelde? Tal vez pero no le importaba mucho ir a la cárcel. No se dejaría pasar por nadie y mucho menos un estupido oficial de policía. Se sentó al lado de un Dudley todavía inconsciente. Y miro y vio por el espejo retrovisor a la otra oficial. Esta lo miro y los ojos verdes chocaron con esos grises.
-Te agradezco lo que hiciste en el almacén- Dijo en un tono agradable.
-¿El atrapar al ladrón o golpear a tu compañero?- Pregunto sonriendo. No sabía por que pero la situación de ir a la cárcel todavía no le entraba en la cabeza.
-Ambas- Y Harry dejo escapar una risa que parecía un ladrido como si fuera la de Sirius.
-¿Quién eres?- cuestiono la oficial volviéndose seria aunque con una sonrisa en el rostro
-Te lo dije antes- fue toda la respuesta de Potter
-No lo hiciste- Acuso la oficial seria
-Si lo hice, yo soy alguien o a veces me dicen nadie- Respondió enigmáticamente y la oficial se rió
-Eres raro- Comento como si fuera un hecho.
-Gracias por el cumplido- Y eso mando a la oficial en una sonora risa. Pero se callo al ver que Johansson se acercaba con la nariz empapada en sangre. Johansson se subió al auto irritado y la oficial arranco el auto rumbo a la calle Magnolia.
-¿Quién eres?- Pregunto Johansson pregunto furioso mirando por el espejo a Harry.
-Alguien normalmente anormal- Contesto Harry simplemente y la oficial estallo en carcajadas y Johansson dejo escapar un bufido de irritación al ser superado verbalmente por un chico de alrededor de 16 años. Lentamente llegaron a la comisaría de Surrey. Era un gran edificio blanco y azul de cuatro pisos con una puerta giratoria en el frente. Bajaron y Harry fue directamente a la puerta y vio desde el pórtico como Johansson trataba de levantar a Dudley sin éxito y se decidió por arrastrarlo mientras su compañera reía al verlo. Harry se dio vuelta y miro la comisaría por primera vez. Era un gran cuarto con un escritorio al frente con varias recepcionistas tratando gente y policías sentados en escritorios detrás de las recepcionistas tomando café. Los oficiales levantaron la cabeza y miraron fijamente a Harry y a Johansson entrando por la puerta con Dudley y seguidos por la oficial... Eran un raro grupo pero Harry noto que Dudley estaba despierto y fingía estar dormido por que abría los ojos cada varios segundos. Johansson fue al mostrador y empezó hablar con la recepcionista mientras Harry fue rumbo a la oficial.
-¿Quien eres?- Pero esta vez la pregunta salio de la boca de Harry. La oficial pareció sorprendida por lo directo de la pregunta.
- Alice Esmeralda Guerrero, para servirte- Hizo una reverencia burlona
- ¿Ahora que hacemos? Digo estas esposas son cómodas y todo y este lugar es agradable pero preferiría irme- Pregunto con sarcasmo haciendo reír a Alice. Harry se sentía cómodo con esta mujer. Era agradable y Harry no había bromeado así desde hace mucho tiempo.
Johansson abrió la puerta de barrotes de una celda y en el momento que le quito las esposas a Dudley este golpeo a Jonas en el rostro y empezó a correr en dirección a la puerta en la que se encontraban Harry y Alice.
Dudley se acercaba a la puerta mientras otros oficiales intentaban alcanzarlo pero el entrenamiento intensivo de boxeo le había dado una stamina increíble. Iba a pasar la puerta cuando…
-¡Pum!-
Harry le había cruzado la pierna y Dudley salio disparado y su cabeza choco contra el vidrio astillándolo y Dudley quedo inconsciente por segunda vez en el día y por la misma persona. Alice abrió los ojos en sorpresa al ver a Harry atrapar al ladrón por segunda ocasión pero su rostro le dio miedo. Si, a ella que se jactaba de haber sido torturada en un secuestro y no haber tenido ni la más mínima preocupación quedo paralizada por la falta de expresión en el rostro de su acompañante. Era como ver roca pero al llegar a sus ojos vio un brillo maniaco que le hizo correr un escalofrió en la espalda. Pero ese brillo se extinguió.
Johansson se acerco a Harry y lo miro y dejo escapar un gemido de irritación.
-¿Que ocurrió oficial? Se supone que los policías deben tener un estado físico alto- Comento burlonamente señalando hacia su cuerpo que pedía un descanso a gritos. Esto hizo enojar aun más a Jonás que se acerco y tomó a Harry y lo empujo contra la pared mientras este dejo escapar una risotada.
-¿Acaso lo ofendí? Disculpe si lo hice oficial pero usted me parece muy idiota- Y cuando dijo la ultima palabra le pego un violento cabezazo con la nuca en la, todavía sangrante, nariz de Johansson haciéndolo caer.
Harry observo a Alice a los ojos esperando su reacción y esta llego. Alice dejo escapar una carcajada.
-Agradezco ese gesto, hace mucho que quería hacerlo- dijo sinceramente.
-Es un placer- Respondí haciendo reír mas a Alice.
-¿Y ahora que?- Pregunto como quien no quiere la cosa.
-Temo que debo arrestarte por una noche por golpear a un estupido que ni dios sabe como se convirtió en oficial- Explico como temerosa de su reacción. Este sonrió mientras jugaba con las esposas.
-Excelente- fue toda su respuesta.
Le quito las esposas a el pero no a Dudley y Harry lo acostó contra la pared mientras el se acostaba en la cama. Alice estaba a punto de irse cuando Harry hablo.
-Buenas noches-
-Adiós- Respondió sorprendida. Fue hasta su oficina y se dejo caer pesadamente en un sillón. Una loca idea recorrió su mente. Una propuesta que se le ocurrió en el instante que golpeo a su compañero. Pero era imposible saber si el chico aceptaría. Era un trabajo complicado pero el chico parecía ideal. Tendría que preguntárselo en la mañana.
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Harry despertó sorprendido de donde estaba y una energía vigorizante se extendió a través de el. "Me pregunto si la Orden sabrá de esto" Pero no les diría nada, solo por venganza de haberlo tratado como si fuera algo de cristal y les haría pagar uno por uno. La Profecía era otro eje del porque de su venganza pero se había determinado a que haría todo en su poder, que era bastante, para hacer sufrir a Voldemort lo que le hizo sufrir a el. Nada de matarlo "Por el bien del mundo mágico", no lo mataría por venganza.
Escucho como se abría la puerta de barrotes y vio la sonriente cara de Alice del otro lado. Esta le hizo señas de que la acompañara a su oficina. Y al entrar se recostó como una pared. Ella se sentó y Harry noto por primera vez su cara seria.
-Tengo una propuesta para hacerte, no se si la aceptaras o no pero serias útil si aceptaras- empezó Alice.
-¿Cuál es esa propuesta?- Pregunto Harry impaciente.
-¿Quieres convertirte en policía?- Y con eso los ojos de Harry se abrieron en total sorpresa.
Fin del Capitulo 1
