CAPÍTULO 29: LOS SLYTHERIN

Lily miró por una de las ventanas del pasillo, y descubrió que era completamente de noche. Corrió por las escaleras, esperando que James y el resto no hubieran regresado aún a la Sala Común, cambiarse y olvidar que todo aquello había ocurrido. ¿Porqué le habría dicho todo aquello a Tom? Era como si estuviera bajo un embrujo cada vez que le hablaba, nunca se reconocía a sí misma. Estaba a punto de llegar a la torre este de Gryffindor cuando oyó unos pasos correr y se topó de frente con Sirius.
-¡Lily!-dijo él, acercándose-¡Te estábamos buscando! ¡James, está aquí!
De pronto, aparecieron Kirsten y James por la esquina.
-¿Dónde demonios estabas?-dijo James con cara de enfado-¡Llevamos esperándote todo el entrenamiento!
-Yo, bueno...
-¿Qué te ha pasado?-preguntó Kirsten mirando su ropa arañada.
Lily contorsionó la cara, no le agradó recordar que Snape le había atacado.James se acercó preocupado a ella, y la abrazó mirándole a la cara.
-Snape y algunos Slytherin...-dijo rompiendo a llorar-Me han atacado y si no llegar a ser por...
-¡¡SNAPE!-gritó James con furia, soltándole-¡¡SE LO ADVERTÍ!
-Espera, James, espera-intentó calmarle Lily-No vayas a hacer nada...
-Quédate ahí y no te muevas.-dijo James mirándola firmemente.
-Kirsten, vé con ella-dijo callándo a la chica-Ahora.
James se habia dado media vuelta furioso, y Sirius le siguió con la misma rapidez.
-¡Eh, Sirius!-gritó Kirsten desde las escaleras-¡Esperadme, puedo serviros de ayuda!
Kirsten corrió tras ellos y Lily se apresuró a seguirles con afán. James y Sirius iban en cabeza, y se dirigieron a las mazmorras.
-¿Saben dónde está la Sala Común de Slytherin?-preguntó Lily cogiendo aire.
-El mapadice las contraseñas y dónde están las salas...
Cuando James y Sirius se pusieron delante de una de las mazmorras, Lily encontró la respuesta.
-¡SNAAAAAAAAAAAAAPE!-gritó con fuerza-¡SAL DE AHÍ,SNAAAAAPE!
-¡Vamos, Snivellus, sal ahora!-empezó Sirius.
-¡Venga!-dijo Kirsten,emocionada.
Sirius la miró extrañado.
-¡Te he dicho que no vinieras!-le reprochó enfadado.
-¿Y pensabas que iba hacerte caso?-dijo empuñado la varita.
-¡Snape, sal ya!-gritó James de nuevo.

-Esto será así más fácil.-dijo Kirsten-¡Accio pergamino de las merodeadoras!
Tras medio minuto, oyeron un silbido y el pergamino apareció volando y posándose sobre la mano de Kirsten. La chica lo abrió con rapidez .
-Aquí pone que la contraseña es...
-¿Me llamabas, Potter?-dijo Snape, saliendo de la Sala Común junto con un grupo de alumnos.
-¡Bombarda!-exclamó James sin pensárselo dos veces
Una llamarada explotó frente a la mazmorra, y Snape salió volando por los aires.James se acercó rápidamente a él, pero se ñevantó con facilidad e hizo estallar una de las paredes del castillo. Los ladrillos sobrevolaron el techo del subsuelo, y Lily se cubriño la cabeza para que no le golpeara ninguno. Cuando la polvareda desapareció, vio como Sirius estaba atrapado por dos de los ladrillos,posados en su pierna, sin distinguir a James y Kirsten.
-¡James, Kirste, Sirius está atrapado!-gritó con fuerza.
Lily pudo ver como una figura se acercaba a Sirius con la varita alzada.
-Potter, Black...-dijo mofándose Snape fmientras Sirius le miraba amenazadoramente-¿Qué mas dará? Los dos sois escoria.
Lily chilló agudamente, y Sirius se hechó hacia atrás cubriendose.
-¡Voluntos!
De pronto, una masa verde chocó contra la cabeza de Snape, tan grande que le tumbó al suelo y no pudo moverse. Detrás de su figura, apareció Kirsten con la varita levantada y sonriendo triunfal.
-¿Ves, Sirius?-dijo ayudándo a que se levantara-Te dije que podría servir de ayuda.
-Ese hechizo es mío-dijo Sirius sacudiéndose el polvo-Aprendes demasiado rápido.
-A diferencia de Snape-dijo James, apareciendo entre la nube de polvo-Que parece que no aprende nunca. ¿Ves, Quejicus?-dijo acercándose a él-Si vuelves a acercarte, saldrás volando de nuevo, como el correo lechucil.
-Vámonos-irrumpió Lily-Si nos ven aquí nos van a explusar por todo este alboroto...
Y corriendo, (excepto Sirius, que cojeaba cómicamente) salieron a toda prisa de las mazmorras.

A la mañana siguiente, todos bajaron con mucho cuidado a desayunar. No querían llamar la atención, así que intentaban pasar desapercibidos.
De entrada al Gran Comedor, la mesa de Slytherin se giró de pronto y los alumnos les miraron detenidamente, pero con mucho más odio del que estaban acostumbrados.
-¿Porqué nos miran así?-preguntó Anne a Kirsten mientras se sentaban en la mesa.
-Creo que es por el detrozo de ayer-contestó Lily llenándose la boca de gachas-Seguramente no les haría mucha gracia.
El resto de la mañana transcurrió con total normalidad hasta que se presentó la hora de Pociones. Cuando los chicos entraron tuvieron que reprimir una risa al ver a Severus Snape. Tenía una venda mugrieta rodeandole la cabeza y arrugando bajo ella los mechones de pelo grasiento. Además, un color verdecino teñía su cara, y el gesto de desgana le hacía parecer mucho más cómico.
-Severus, te veo muy desmejorado,¿Te encuentras bien?Te veo un poco...verde-se mofó James sentándose detrás de Snape.
-¿¡No me digas que aún no has descubierto cómo quitarte el moco volador?-carcajeó Sirius.-Kirsten cada día mejora más...
-La estúpida de tu novia va a pagar con cada parte de su cuerpo lo que me ha hecho, yo de ti-contestó Snape sonriendo maliciosamente-La vigilaría allí donde fuera...¿Tiene una cara muy bonita, verdad?¡Lástima que vaya a disfrutar de ella por poco tiempo!
-Si te acercas a ella lo más mínimo-le dijo amenazadoramente Sirius mientras cogía a Snape del cuello de la túnica-Te juro que...
-¿Ocurre algo Black?¿Snape?-irrumpió la voz del profesor Pollack.
-Black me estaba recordando cómo hacer una poción de recuperación facial...dice que va a hacerle falta.
Sirius le miró con odio contenido, no entendía cómo Snape se estaba arriesgando a ironizar con aquello.
-Vamos, Sirius, déjalo-suplicó Remus empujándolo hacia atrás-No tiene importancia...
Sirius se dio por vencido y se retiró con brusquedad, sin dejar de mirar a Snape, que se había girado y volteaba su varita con simplicidad.El timbre sonó tras la doble clase para alivio de Remus, que temía que su amigo le diera un puñetazo a Snape en cualquier momento como hizo con Peter.Aquello le hizo recordar que tenía que hablar con él, así que intentó de nuevo convencer a susamigos.

-Tenemos que hablar con Peter-dijo mientras se dirigían al invernadero-Está solo, y sabéis que comete estupideces...
-Yo ni pienso ir a hablar con él-dijo Sirius-Ya dije que fuera él el que pidiera perdón.
Remus dio con la afirmación de Sirius el intento por no válido y esperó a que Peter volviera a aparecer cerca de ellos para retomar el tema. Como por arte de magia, apareció Peter frente a ellos…pero no como Remus hubiera deseado .La verdad es que en ese momento a James le apetecía darle tal patada en el culo que no pudiera sentarse en tres semanas.
-¡Será desagradecido y mal amigo y mala persona…!-empezó a murmurar James quieto, mirando a las escaleras.
-¿Quién?-dijo Sirius, levantando la vista.
-¡¡ÉL!-gritó Sirius levantando el brazo y señalando a un grupo con el dedo.
Efectivamente, delante, entre aquel grupo de chicos estaba Peter. Su pequeña cabeza pelirroja sobresaltaba a pesar de su bajo tamaño entre el resto, y parecía animado y soberanamente divertido. Su cara se contraía en sonrisas y en carcajadas. Remus apretó fuertemente los puños para controlar su ira: no le enfadaba que Peter se relacionara con otros chicos (de hecho, en otras circunstancias se hubiera alegrado por él, ya que le contaba hacer amigos y relacionarse) pero la situación era otra. Remus se había pasado días enteros pensando en como hacer que sus amigos perdonaran a Peter, aún sabiendo que su actitud había sido repugnante, y había hablado con un "arrepentido" Peter durante las horas de recreo para que no estuviera solo y consolarle. Sin embargo, a Peter parecían darle exactamente igual sus esfuerzos y sus sacrificios, porque ahora estaba entreteniéndose de lo lindo…con unos Slytherins. Justamente, los mismos que acompañan a "el" Snape que pone zancadillas, insulta a las chicas y la tiene especialmente ensañada con los merodeadores. Además, parecía haber olvidado todas las malas pasadas que esos chicos le habían gastado. Todas y cada una de ellas, y cada vez que Remus, él y Sirius tuvieron que salvarle de cada lío en los que se metía.

-¿Qué demonios hace?-dijo en voz alta, de manera que Remus y Sirius pudieran oírle.
-Pues, es obvio-contestó Sirius.-Se hace amigos de quienes siempre debieron serlo.
-¡Después de todo lo que Remus hace por él, de que intenta que le perdonemos se va con ellos!
-Bah, no tiene importancia, creo que no volveré a intentar que le perdone nadie…
-¡Remus, pareces idiota!-exclamó Sirius-¡No podemos dejar que te utilice para lo que él quiera!
James tomó aquello como una propuesta pro parte de Sirius, y con sólo mirarlo avanzó rápidamente hacia las escaleras. Oyó como Remus se sobresaltaba y les seguían, pero ahora mismo le importaba bien poco la opinión de Remus. Se abrió paso entre los Slytherins y se colocó frente a Peter.
-Hola Peter-dijo relajado-Veo que estás bien acompañado.
-Ho-ho-la James-dijo sorprendido-¿Qué tal todo? Re-re-mus, Sirius, amigos…
-Bastante bien-contestó Remus con una indiferencia fingida-Pero a ti mejor, por lo que veo.
Los Slytherin miraron de reojo y desviaron sus ojos hacia Peter. Escuchaban con curiosidad y sobretodo, morbo.
-¿Qué mas dará, James?-dijo Remus de pronto.
-¡No le sigas defendiendo!-saltó Sirius colocándose al lado de James-¡No puedes seguir creyendo que Remus es idiota, Peter, aquí el único idiota que hay eres tú!
Los Slytherins ahora parecían mucho más interesados, y Peter más asustado. "Quizás esté empezando a darse cuenta de que realmente no van a defenderle", pensó James. "La verdad, me da igual"
-¡Esto es absurdo!-dijo de pronto Peter con algo de valor-¡Si voy con vosotros, os enfadáis porque no os digo lo que pienso, cuando os lo digo, os enfadáis, cuando no voy con vosotros, me miráis mal, y ahora que voy con ellos, os volvéis a enfadar!

-¡Miserable!-gritó Sirius de nuevo, y Peter se echó hacia atrás. El círculo de Slytherins se amplió y quedó mas hueco libre. -¡No es porque no des tu opinión, sino porque siempre hay que ir buscándola! ¡Y si para ti faltarle el respeto a alguien que es tu amigo es opinar, menos mal que nadie opinamos así, que si no, ahora cada vez que nos metiéramos con alguien le mataríamos a palabras!
Peter se protegió con los brazos la cara y susurró algo como "no me hagas nada".Algunos Slytherin carcajearon por lo bajo. Sirius se giró furioso, dispuesto a enfrentarse a todos los que estaban allí. Pero bajó al guardia al ver que se reían de Peter, no de ellos. Por primera vez los tenían de lado, y ¡Cómo no! Aquello había que aprovecharlo.
-¿Miedo, Peter?-dijo susurrando al oído.
-¿Miedo a nosotros y no a tus nuevos amigos? ¡Míralos como se ríen de ti!
Peter alzó la mirada y los vio como carcajeaban. Decepcionado, volvió a agachar la cabeza.
-Exacto, Peter, estás solo-dijo Remus- Muy solo.
-Dejadle inmediatamente-dijo una fría voz frente a ellos.

-¿Y si no piensas hacernos algo?-dijo Sirius imaginando que sería un Slytherin más sin dejar de ver a Peter con fijeza.
-¿Prefieres comprobarlo?-repitió la gélida voz.
Sirius estaba apunto de contestar algo muy típico de él cuando notó un codazo de Remus en las costillas. Lo interpretó como una señal de advertencia, y miró hacia quién le hablaba. La figura de Tom Riddle estaba mirándole con una mezcla de asco y desaprensión y Sirius tragó saliva.
-Bueno-"Ahora no puedo echarme atrás" pensó para sí mismo- Quizás el que tenga que comprobarlo seas tú por meterte en medio.
Tom bajó las escaleras firmemente, con paso lento y sonoro, mientras todo el vestíbulo callaba y reinaba el silencio. Notó que James se ponía tenso cuanto más se acercaba, y no sabía si de miedo o con ánimos de retarle. Entre aquel silencio, sonó el timbre y los Slytherins comenzaron a subir las escaleras en dirección sus clases, pero Tom no tenía intenciones de ir a clase, y si alguno de ellos se movía para ir a clase, Riddle tomaría represalias por el desplante. Peter huyó corriendo causando un gran alboroto, a lo que James se removió.
-Genial- dijo entre dientes-Peter se larga y otra vez nos toca defenderle…
-Oh, vaya, si se trata de Lupin, el chico enfermizo-dijo Tom mofándose y situándose a medio metro de distancia- ¿A quién tenemos aquí? ¡Si es Sirius Black!-dijo entre carcajadas-¡El Slytherin traidor de la sangre! Tu prima Bella me habló el año pasado de ti en alguna ocasión, te recuerdo… Narcisa aún lamenta que seas su primo. Y aquí-dijo haciendo una pausa-Aquí tenemos a Potter.
Mientras Remus estaba preocupado por la situación y Sirius estaba rojo de ira por la humillación que acababa de sufrir. James, por el contrario, estaba tranquilo y relajado. No faltaba a clase, era popular, el mejorbuscador, salía con la mejor chica de Hogwarts y tenía un expediente académico muy bueno. Además, era de sangre limpia y nadie podía echarle en cara nada. Por todo ellos los Slytherins le tenían envidia y odiaban, así que tenía la conciencia tranquila. Pero Tom no jugaba igual que el resto: él iba por delante, y sabía cómo herir sin necesidad de restregar.
-El famoso Potter, buscador, estudiante, el revuelo del colegio…sí-dijo con mala saña-Severus me habla mucho de ti, pero no tanto como Evans.. A pesar de haber vivido una vida entre muggles tan odiosa, su hermana…y sus estudios, todo lo que a ella pertañe, es una chica encantadora.

A James se le desencajó la cara y tembló hasta el último recoveco de su cuerpo. Lily era juiciosa y tenía dos dedos de frente… ¿cómo podía Riddle hablar de ella con tal conocimiento?
-¿Qué hacéis aquí?-dijo una voz femenina-¡Remus, te estás saltando la clase!
Anne apareció corriendo por las escaleras y se plantó junto a ellos. Al ver a Tom pareció entenderlo todo de pronto.
-Hola Adams-saludó Tom a Anne- Voy a marcharme ya, o llegaré tarde a clase.
Tom se giró con soberbia sobre sí mismo y empezó a subir las escaleras mientras el resto le miraban.
-Se me olvidaba, Potter-dijo sin girarse y subiendo los peldaños-Saluda a Lily de mi parte.
James miró como Tom subía dividido entre la sorpresa, la decepción y la furia.