CAPÍTULO 50:LA NUEVA KIRSTEN

Kirsten estaba totalmente rígida, con los hombros muy altos, y sin ningún desperfecto.Miraba con expresión dejada a sus amigos, y se giraba a cada poco para ver a Tom, que seguía a su lado inmutable. Aquello debía tratarse de una broma.

-¡No es tiempo para tonterías, Kirsten!-dijo Sirius, que al parecer pensaba lo mismo que Lily-¡Tenemos que largarnos de aquí, y vamos a hacerlo inmediatamente!

Kirsten volvió a girarse a Tom, que parecía mirar divertido la escena. Kirsten continuaba con aquella expresión de desconcierto en sus ojos.

-Así que es cierto que no les has dicho nada, ¡dijiste que lo harías!

-No siempre se cumple lo que se dice- dijo Tom levantándose y caminando detrás de Kirsten-Además, es una buena oportunidad para que se lo expliques por ti misma. Sino, pensarán que está hechiada o algo semejante, y no quiero más problemas.

-¿Explicar, decir?-preguntó Sirius preplejo-¿Qué tienes que decir, qué pasa aquí?

Kirsten bufó con los ojos en blanco, con gesto aburrido. Volvió a mirar a Tom con actitud suplicante.

-¿De veras tengo que hacerlo? No quiero perder el tiempo.

-¡Hazlo!

Kirsten se giró de nuevo hacia Sirius y levantó la barbialla en actitud desafiante. De pronto, sonrió, aunque Lily notó algo extraño en aquella sonrisa.

-Te lo repetiré de nuevo, no pienso volver con vosotros a ninguna parte. Y no quiero tener que repetirlo.

Sirius permaneció callado, con la boca abierta de par en par. Al instante pareció reaccionar y montó en cólera.

-¿Pero qué dices,te has vuelto loca?-gritó como un poseso-¡Intenta ser consciente de lo que dices, porque te estás colocando alnivel de Riddle!

-¡Oh, no, todavía no!- risoteó ella con una carcajada muy fingida-Aunque espero alcanzarlo algún día.

Sirius se soltó de James, y parecía haber recuperado de pronto todo el equilibrio. Caminó sin que nadie lo evitara hacia la tarima, y se irgió hacia Tom.

-¡¿QUÉ LE HAS HECHO?-estalló-¿¡QUÉ LE HAS HECHO, PORQUÉ?

-¡Yo no le he hecho nada, imbécil!-masculló Tom entre dientes y clavándo su mirada en Sirius con un odio más que visible-Anda, díselo tú, Kirsten.Parece que no entiende nada...no sé cómo has podido estar con este estúpido.

Kirsten. para desgracia y decepción de Lily, rió con muchas ganas.

-Yo tampoco lo sé, la verdad-dijo Kirsten cuando al fin puso dejar de reírse, cosa que causaba muchísimo dolor a Lily-Verás, Sirius, te contaré cómo ocurrió: todo empezó hace tanto tiempo que me cuesta hasta recordarlo...creo que nos remontaremos a la noche que me dejaste plantada en el lago.

Sirius pareció relajarse, y se pasó una mano por el pelo, preocupado.

-No te dejé tirado, alguien me borró la memoria, Lily sabe que es cierto porque lo hablé con ella...

-No metas a Lily en esto.Vamos, no seas necio conmigo, Sirius-le cortó Kirsten sacando la varita y apuntándole-Tú nunca has recordado nada que no has querido Siempre he tenido que estar pendiente de ti, de las veces que acordábamos algo, de que estuvieras feliz y contento, mientras tú y tus amigos os apoderábais de mi entorno.

Lily,

-¿De qué estás hablando, Kirs...?

-¡HE DICHO QUE TE CALLES!-dijo levantándo la varita, y apuntando de nuevo a Sirius, haciendo que Tom riera más alto-Si no me dejas seguir, morirás sin saber el final, y a lo mejor, hasta consigo que te sientas culpable por una vez en tu vida, Black-dijo con tono glacial-Decía que te apoderaste tú y tus amiguitos de mi entorno: Anne y Lily comenzaron a irse con vosotros, y ami no me quedó más remedio que convertirme en otra novia idílica porque las cosas eran así de bonitas todos juntos. Pero empezaste a fallar, Sirius. Me dejaste tirada en aquel lago, y supe que nunca te había importado nadie más que tú mismo- prosiguió en un tono herido-Ni siquiera yo. ¡No te pedí nada más que me quisieras, ni siquiera como yo te quería a ti, sino que me quisieras un poco!- dijo esta vez con agonía, y Lily percibió angustiada que estaba a punto de llorar-Pero tú, tú y James...¡Los partidos de Quidditch, tu maldito club de fans, mis amigas de dejaban de lado!¡A ninguno de vosotros os importaba lo más mínimo!Y ahora- dijo bajando el tono hasta un susurro casi imperceptible-ahora vais a devolverme todo el tiempo que me habéis hecho perder, porque habéis acabado con el resto de mi.

Kirsten estaba con la cara contraída, las mejillas enrojecidas por la fuerza que hacía y el brazo recto, estirado hacia delante y señalando con la varita a Sirius. El chico no estaba furioso, como había temido Lily:tenía la expresión de dolor más horrible que hubiera visto jamás en la cara de nadie. Al pensar en ello, se imaginó que cara pondría ella, y fue entonces cuando se dio cuenta de que ella misma estaba llorando.James, por el contrario, estaba perplejo.

-Así que-prosiguió ella-cuando dijisteis en el Gran Comedor que estbaa susceptible quizás tuvieráis razón...pero sois vosotros los culpables. Así que, ¡Por vuestra culpa la mesa de Gryffindor saltó por los aires!-dijo riendo de nuevo-¡Jamás imaginé que tubiera poderes semejantes! Fue expléndido, como dijo Tom más tarde...Que por cierto, no me envenenó, ni me drogó: vuestro querido Dumbledore me envió a Tom a ver si estaba bien. Él hablo conmigo, me dijo todo que necesitaba oír:que tenía talento, potencial, que era una gran bruja y que ninguno de vosotros sabía apreciarme. Me abrió los ojos, y me propuso un plan. Me trajo aquí, regresó al castillo, y llevo dos días viviendo aquí. ¿Os ha gustado mi historia?

Lily no podía creerlo. Estaba demasiado conmocionada para seguir llorando, sólo podía repetir una y otra vez que aquello no era posible.¿En qué le había fallado?Pensaba que era feliz, quizás no le prestó la atención que se merecía. "Eso es absurdo", se dijo, "yo no la traté de otro modo. Ni yo ni niguno de nosotros".Pero no parecía que Tom hubiera influido en ella:era ella la que se había cambiado de bando.Y ella había sido tan ignorante de pensar que Tom iba tras ella...Tom tan sólo quería hacer daño. Con Lily, con Kirsten. Con quien fuera.

-Parece que a Lily no-dijo Tom a Kirsten y la chica por primera vez recayó en Lily-Piensa que es absurdo.

Lily despertó. Tom sabía lo que pensaba...lo había sentido en alguna ocasión, durante sus encuentros a escondidas. Ahora lo comprobaba, sabía Legeremancia.

-¡Lily, no te había visto!-dijo con hipocresía Kirsten-¡Lástima que estés herida! No puedo abrazarte como es debido...En fin, esa es la realidad. Tú prestabas más atención a ti y a tu novio que a nosotras. Y Anne puede ser lo suficientemente arrogante y estúpida como para no notarlo, quizás por eso sale con este desecho-dijo señalando a Remus, todavía inconsciente en el suelo-pero yo sí lo noté. Te convertiste en una merodeadora, exactamente otro ser corto de mente igual que ellos cuatro.

Lily sintió que le bajaba el nudo de la garganta para subirle la ira hasta abrasarle las mejillas.

-Tú también fuiste merodeadora. Todas lo somos, y recuerda que fuiste tú quién más interés tenía en ello.

-¡Vamos, Lily, eran juegos absurdos de vagar pos los pasillos haciendo cosas que estaba prohibidas, eso era divertido!-dijo moviendo la mano con impaciencia-Ahora...ahora con Tom las cosas cambiarán. Cambiarán para siempre. Y tú serás la protagonista absoluta de este cambio, Lily Evans.