El señor del Vacío
Michael se elevó ignorando los alrededores, incapaz de decidir que hacer; simplemente marcho a un punto deshabitado en medio de la nada, no tenía ganas de tratar con nadie y sin importar lo que Amenadiel asegurará; él mejor que nadie entendía la gravedad de la situación, así como la peligrosidad que su presencia representaba para el resto. Con la mirada fija en el cielo nocturno, admiro las estrellas, el trabajo de su hermano. Eran algo hermoso; visto desde esa perspectiva, así como todo ese universo que tanto se esforzaron en crear.
Sería una lástima perder todo eso a manos de alguien ajeno. Porque podrían haberse encontrado y enfrentado entre hermanos, pero jamás fue la intención destruir lo que tanto esfuerzo les costó crear.
-Sabes que no necesitas ocultarte- Susurro a sabiendas de que ella le escucharía. Gabriel al oírlo salió de su escondite saludando con un movimiento sencillo de mano.
-Siempre lo sabes- Confirmo acercándose.
- No siempre- Replico el ángel de alas negras sentándose en el pasto húmedo, seguido de cerca por su hermana.
-Mentiroso- Recalco Gabriel en un tono juguetón.
-Quien mejor que tú para reconocerlo- Afirmo él relajándose levemente. El sonido del bosque se hizo presente, rodeándolo con sus melodías naturales tan únicas. Un lugar donde la mano humana aún no había llegado.
-Estoy preocupada- Exclamo ella poco después, distinguiendo las marcas en la figura de su hermano. Observando, pero sin hacer otro movimiento, entendía que la vieja espada no apreciaba los toques y menos si hacían referencia a algo que consideraba corrupto.
-Yo también- Acepto él suspirando, ocultando las alas oscuras de la vista para recostarse por completo, ignorando el rocío que recubría su figura.
-Pero no hay mucho que pueda hacer además de esperar, quise ganarles tiempo; pero vaya que resulto súper bien- Afirmo de manera sarcástica.
-Lo intentaste- replico su hermana, -Lo que sirvió para percatarnos de lo que se avecina con tiempo- prosiguió.
-Eso lo hiciste tú, yo sólo fui a meterme en líos- Confirmo el Ángel del miedo.
-No te das suficiente crédito- Resonaron las palabras de ella, -Pero supongo que no es culpa tuya, todos hemos sido muy tontos a lo largo del tiempo- Comento para si en un tono pensativo.
-No podemos cambiar el pasado, así que solo queda el futuro y debo admitir que el look no luce tan mal en ti- Río ella finalmente levantándose, cambiando el tema de golpe.
-Tal vez tu no puedas verlo, pero creo que esa partecita que pensaste perdida logro llenar sus huecos finalmente- Aseguro dejando a su hermano sin palabras.
-Pero haz algo con esa higiene personal, hermano. No podré concentrarme en la lucha con el olor a podredumbre a mi lado- Bromeo haciendo un gesto cómico apretando su nariz. Al final sólo ella se atrevía hablarle así.
-No exageres, además es una distracción para el enemigo- Afirmo el general con supuesta indignación.
-El enemigo que vive en las profundidades del espacio y no necesita respirar- Argumento Gabriel.
Michael la miro con seriedad, adoptando una postura seria. – No hay manera de ganar contigo- Gruño levemente, feliz de saber que su hermana estaba dispuesta a pelear a su lado en caso de ser necesario. La confianza que ambos se tenían parecía haber forjado un lazo más fuerte que el que tuvo alguna vez con Samael.
-Nos veremos en la batalla- Intervino ella desplegando sus alas para marcharse.
-Será un honor- Confirmo él, consciente de que, si dependía de su persona, ella no tendría que pelear. Jamás lo admitiría; pero Gabriel era hábil, sólo no era partidaria de esa clase de violencia sin sentido como lo fue él.
…
La paz momentánea sólo acrecentó la paranoia de todos, no sabían cuando acabaría esa tranquilidad etérea que parecía ser sólo permisión de la vieja deidad.
-¿Qué estaba esperando?-
Lucifer organizo su ejército, el cual no podría estar más listo. Muchos demonios extrañaban esos tiempos de conflicto y una oportunidad como esa para despejar las frustraciones era más que bienvenida a su parecer.
Chloe siempre activa le ayudo a preparar una estrategia, dividiendo los grupos en puntos clave para ataque o defensa según fuese el caso, los más activos obtuvieron un permiso especial para rondar las afueras como espías, lo mejor era no dejar nada al azar y si Amenadiel no se enteraba de algo ellos lo harían.
La nueva deidad por su parte alisto a los más experimentados, dejando como resguardo a los ángeles jóvenes; los que llegaron después de las grandes guerras y que no poseían vivencias de las batallas ancestrales. El Ángel del tiempo se dio un poco de tiempo para compartir con su familia sin revelar sus preocupaciones, no le vio caso exaltarlos con algo que tal vez ninguno de ellos entendería. La guerra no era rara para los humanos, pero el alcance de esta estaba más allá de lo imaginado. Alegre compartió tiempo con su hijo, ceno con su pareja y vivió lo que cualquier padre de familia, disfrutando de la mundanidad de la vida.
…
Michael por su parte, se resignó a lavarse lo mejor que pudo en un lago cercano; sin embargo, no pudo sentir la frialdad del agua, su textura, las sensaciones comunes, pero la temperatura le era inexistente. En algún momento se habría exaltado al verse tan afectado en su naturaleza, pero por alguna razón no se sintió mal o preocupado, solo un poco confundido.
No contaba con posesiones materiales, más que su viejo pantalón raído; pero revivir los momentos en los que uso su armadura; sólo traería consigo el recordatorio de su amarga derrota.
-Que mas da- Gruño para sí, saliendo del agua para sacudirse; las alas húmedas se alzaron lanzando el gua en todas direcciones mientras se secaba, cuando algo más llamo su atención; la sensación familiar que esperaba no volver a tener.
…
Caos no se detendría, sentía el temor en los corazones de sus rivales un arma más a su alcance, lo mejor era que él tendría el control. No había rival real en ese grupo fraccionado. Sin importar lo mucho que quisieran aparentar, su poder dependía de la unión. Ahora sólo eran fragmentos tratando de medio encajar.
Sonriente se deleito con la idea de que no sólo retomaría sus pertenencias, si no que esta vez tendría compañía.
-Deja que sepan que estoy aquí mi espada, hazles saber que estoy preparado- Comando enviando el mensaje.
…
Michael detuvo sus movimientos levantando el rostro al cielo, el poder del vació se hizo presente en su forma cual onda de hielo haciéndolo sentir esa temperatura una vez más. Los tatuajes dolieron y él en un momento de reflexión se percato de que había hecho lo adecuado al alejarse; su enemigo estaba ahí, sentía esa presencia en su ser como alguna vez lo hizo con su padre.
-¡No soy tu espada!- Exclamo a la nada.
-¿Acaso no puedes sentirlo?, Sabes bien de lo que eres capaz, ya has probado un poco de ese poder- resonó el susurro en su interior, cual gusano recorriendo sus entrañas. El Ángel del miedo revivió su llegada cuando el aura destrozo todo causando caos al sólo estar presente.
-Eres un Monstruo MICHAEL, esa es tu función. ¿Quién quiere tener a la fuente de todos los miedos a su lado?, ¿Quién desea a la oscuridad- Le cuestiono? -Se necesito la luz de la estrella más radiante para controlarlo- Confirmo airoso.
El Arcángel negó para sus adentros, pero los miedos ahora presentes comenzaron a liberarse de nuevo, la vida del valle comenzó a morir por el terror, mientras él buscaba controlarlo marchándose. No destruiría lo que deseaba proteger. Frustrado hizo saber a su hermano a través de un rezo que el señor del vacío había llegado.
…
Continuara.
