Saint Seiya n me pertenece tampoco me pertenece clover (si asi fuera yo sería muy feliz ), los anteriores le pertenecen al señor Kurumada y las Clamp respectivamente, por lo que yo solo los he tomado prestados para la realización de esta fic con el cual no lucro en lo mas minimo sin mas a leer :)
¿Final?
- Me pregunto si debí de haber venido afuera después de todo.- dice Suu una niña que aparenta no más de 10 años de edad, posee unos ojos inmensamente verdes, cabello corto gris, piel blanca, lleva puesto unos pantalones cortos negro, una blusa manga corta igualmente negra curiosamente tanto los pantalones como la blusa poseen las bastillas bordeadas por un metal dorado, lleva puestos unos guantes cortos, calza unas botas militares con calcetas cortos y algo curioso posee una especie de brazalete en su pierna izquierda la cual cubre unos 20 cm de esta.
- ¿Por que te están siguiendo?- Pregunta Feil un hombre de unos 30 años, atlético, piel un poco más obscura que la pequeña, cabello negro corto en su mayoría del cual solo se destaca una trenza delgada de su nuca, lleva puesto un pantalón y una camisa de cierre cuello mao negras ambas piezas sobre estas lleva una especie de gabardina blanca(mas parecida a una bata de laboratorio), también lleva guantes en ambas manos y posee anteojos los cuales lleva sujetos por medio de una especie de cable al cuello de su camisa.
- ¿Dime alguna vez escuchaste hablar del proyecto hoja del trébol?- dice Suu viendo hacia su guardia Feil.
- No.
La niña suspira, como tratando de tomar fuerzas para realizar la explicación cierra los ojos y comienza ha hablar, en tono neutro.
- Hace diez años el gobierno buscó a niños que podían manipular magia y crió a aquellos con poderes realmente fuertes como trévoles de tres y cuatro hojas.- espera alguna reacción.
Feil, mira hacia su protegida un tanto confuso.
- Y que los hace especiales incluso él ejercito posee hechiceros.
- Pero no magos.
- ¿Un trébol es un mago?.- pregunta Feil un tanto confundido y asombrado por la posible revelación.
- Sí.
- A mis ojos son iguales hechiceros y magos.- responde un tanto molesto.
- En un inicio habían tres tréboles de tres hojas y uno de cuatro, solo que un tres hojas murió y ahora solo hay dos. - Comienza Suu ha hablar.
- Que hay del cuatro hojas
- Solo yo.
Ante esta revelación lo único que atina a preguntar el militar es:
- ¿Y cual es tu poder?.
- Se necesitan incluso 5 magos para detener a un trébol de tres hojas... - Responde con aire ausente.
- ¿Y que hay de ti?. - vuelve a preguntar
- Es por ello que debo estar sola...- responde con cierta tristeza en su voz.
- Ellos me temen al igual que tu, dime ¿me llevaras al Parque del Hada.?
- Siempre mantengo mis promesas.
Siguen caminado hasta que son sorprendido por las fuerzas enemigas.
- Simplemente no se rinden.- replica Feil al ver que los hombres de Baruz los están alcanzando, llegan a una pequeña calleja donde revisa sus heridas.
Suu se sienta a su lado y ve que su brazo esta sangrando.
- Estas herido, si sigues conmigo puede que te lastimen más.
- Nos siguen- El guardián ve como los mercenarios están inspeccionando el lugar - Lan nos sacar de aquí en un momento.
En un laboratorio, un hombre con el uniforme militar y gafas se encuentra al lado de un chico que aparenta unos 16 o 19 años el cual esta manipulando el bus de transportación.
- ¿Cómo los enviaste sin un movimiento?- pregunta el hombre del uniforme militar llamado Gingetsu
- Ya no hay tiempo.- responde el joven de nombre Lan.
- ¿Quién nos trajo aquí?- pregunta Suu un tanto confundida por el cambio de panorama pues ya no estaba en una calleja infestada de mercenarios, ahora su vista estaba en un parque de diversiones en ruinas, pero que aun se podía apreciar en ellas un esplendor del pasado.
- Fue Lan.- responde Feil.
Ambos comienzan a caminar por las ruinas de lo que fuera un parque de atracciones, a lo lejos se puede escuchar una melodiosa voz que canta una canción melancólica.
- La primera vez que entre aquí tenía cuatro años.- dice de repente Suu mientras camina su voz parece lejana y melancólica.
- ¿Padres?. –Pregunta Feil.
Ella agacha la cabeza y contesta meneando la cabeza y en tono de recordatorio:
- No sé de mi padre. Mi madre descubrió que podía usar Magia... Primero ella tenia miedo. Pero al final era feliz, por que "mis poderes hacían dinero".- Termina con una mueca que podría pasar por una sonrisa, luego de unos minutos de silencio y caminata ella prosigue:
- Trate de despedirme de ella, le dije adiós, pero creo que no me escucho, por que seguía contando el dinero que los agentes del gobierno le habían dado.- Suspira ante esto último para terminar en tono monótono:
- Desde entonces ha sido investigación o experimentación , pero en la única cosa en la que están interesados es en mi magia.
El hombre que la acompaña solo la observa imaginandose lo que ha sido la vida de esa niña.
En un cuarto a media luz s observa a una mujer anciana la cual esta frente a una mesa presidida por varios hombres de edad adulta todos ellos parecen ser militares, la anciana habla en voz apenas perceptible:
- Solo quería darle ese deseo.
Un hombre que parece presidir la mesa da a conocer la decisión de la junta:
- El parlamento ha decidido la destrucción del parque junto con el trébol de cuatro hojas, los magos han tenido problemas para controlarle, un trébol de cuatros hojas es algo...
- Que no debe existir no en este planeta... – Termina la anciana con cierta tristeza.
Mientras las pareja sigue su camino en silencio Feil sigue sumergido en sus pensamientos los cuales son interrumpido cuando vuelve a escuchar la voz de su protegida.
- Es por ello quería venir aquí con alguien que me amara o apreciara aun sin ser un trébol. Suu se detiene frente a una estatua de un hada de la cual sale la melodía que había acompañado a la pareja desde que comenzarán a internarse en el parque, esta se encuentra al lado de un barranco.
- Pero...- el hombre no atina a decir nada cuando ve como surgen una alas metálicas de la espalda de la niña y comienza a elevarse mientras su vestimenta cambia a un vaporoso vestido claro de tirantes y toma la mano de Feil.
- Ahora podré estar con Oruha, sabes ella te amaba mas que nada en este mundo.- Dice mientras se va elevando lentamente.
- No, no lo hagas espera.- le pide desesperado pues sabe lo que esta apunto de hacer.
Ella no hace caso a sus suplicas y sigue elevándose.
- Dale a Lan las gracias por todo.- le comunica.
Ahora, ella se encuentra lo suficientemente alto, sabe que es la única manera en la que podrá renacer en otra cosa que no sea un trébol.
El hombre ve que se ha detenido la altura que posee es muy alta, es en ese momento que se percata del barranco, ella lo ha decidido, espera equivocarse, pero al ver como el cuatro hojas se precipita a toda velocidad hacia el abismo, no tarda mas que unos segundos en sentirse un impacto que hace estremecer al parque, él en un grito desesperado lanza una pregunta amarga
- Nooo, dime ¿encontraste felicidad?- grita mientras sus ojos se humedecen, sabe que nadie responderá pero aun así espera la respuesta. Pasan unos minutos y una voz clara con un tono un tonto ilusionado le responde:
- Si, por fin encontrare la felicidad.
En una soleada estepa rocosa del mediterráneo se puede ver a lo lejos unas antiguas ruinas que se alzan en lo alto y bajo de terrenos irregulares mejor conocido como "El santuario" se puede ver como un cuerpo extraño cae de los cielos e impacta en lo que parece ser una pequeño bosquesillo, ese cuerpo parece ser el d una niña de no más de 10 años, la cual tiene en su espalda unas extrañas alas metálicas las cuales desaparecen de inmediato dejando un cuerpo inmóvil sobre la hierba.
Reviews, me aran feliz muy feliz
