Parece que han pasado minutos, horas tal vez, pero lejos de eso, nada parece correcto en la cabeza de Marcy. Sólo sus ojos que caen en la belleza fina de una doncella, que culpable y avergonzada se muestra sin problemas a su mirada. Fuera correcto pedir una foto una captura del momento, pero eso es demasiado, por eso mismo Marcy quiere mantener memoria de cada pequeño detalle de su amada.
"Marcy..." su cuerpo tiembla anticipando los movimientos de su pareja, Anne espera curiosa por lo que esa chica hará
Marcy sale de su nube oscura, acerca suavemente sus labios y besa delicadamente la flor de la morena, el tacto húmedo y repentino, provoca un suave gemido que escapa de su boca. Anne no reconoce la sensación, pero no es desagradable, incluso mueve las caderas incitando a Marcy.
"Marcy..." repite su nombre, cual cuyos labios ocupados mantienen un contacto directo lejos de poder responderle
Pero Marcy quiere más, besarla es necesario pero su boca se siente seca aunque pareciera que babea. Abre los labios besando tan profundo como puede, el sabor de Anne le invade y a gusto le recibe, bebe de ella y su lengua sale en busca de más néctar.
Marcy siente un par de ojos sobre ella, Anne se apoyó en los codos para levantar el torso así ver mejor la labor de la chica que tenía entre las piernas. Marcy pareció aterrada por un momento antes de encontrar en el rostro de la morena una sonrisa encantadora, motivos suficientes para volver a trabajar.
"¡oh ranas!" Anne lanzó un sonoro gemido al aire, no resistió cayendo de bruces sobre la cama y levantando el trasero de la misma tratando de seguir las caricias que recibía "Marcy ah…" dijo Anne, mirando con ojos deslumbrados por estrellas al techo del sótano
"Anne eres hermosa, por favor, permíteme seguir dándote mi amor" dijo Marcy encontrando entre lamidas el punto sensible de la chica
Marcy deslizó su propia mano entre sus piernas, su falda le estorbaba pero con algo de esfuerzo logró levantarla y encontrar su propia humedad, deslizó sus dedos por encima de sus bragas sintiendo el roce electrizante sobre su clítoris, mientras presionaba su rostro entre los suaves pero fuertes muslos de Anne.
La morena sintiendo la caricia de las mejillas de la chica, aprieta suavemente con sus piernas los cachetes de Marcy, dejando escapar por culpa de ella un suspiro tembloroso y echó la cabeza hacia atrás.
"Marcy… siii sigue" pronuncia entre jadeos la morena
Mientras Marcy encuentra su propio camino hacia su intimidad, alcanzando bajo la ropa interior los labios frescos que chorean y presiona un dedo en los pliegues cerrados. Su propio jadeo es exquisito para Anne que en ella la siente pronunciar palabras que no logra entender, pero no pregunta, está demasiado ocupada pronunciando el nombre de Marcy que le es difícil siquiera pensar.
Marcy fijó sus labios alrededor del centro de Anne y comenzó a pasar la lengua a lo largo, su caliente trayendo para Anne un nuevo nivel de preciada satisfacción. La morena se estaba volviendo adicta a esa sensación, pero sentía que algo le faltaba, así pues, sus manos ociosas fueron a su propio pecho y masajeó buscando la correcta sincronía con los besos de Marcy.
Marcy tomó aliento, presionando un beso en el clítoris de la morena, antes de sumergir su lengua más allá de los labios y dentro de Anne. La sorpresa no se hizo esperar, aquella intrusa era ágil más curiosa, Anne nunca alcanzaría algo similar con sus propios dedos, pues la lengua de Marcy formaba todo tipo de patrones mientras se deleitaba desesperadamente de su lujuriosa entrada.
Anne cae agotada sobre la cama, su alma trata de escapar mientras ella a bocanadas grandes le impide la fuga. Oh que ha sido eso, se pregunta, una descarga de emociones adrenalina y gritos desconocidos fueron los que experimentó.
"Anne" aquel ángel le mira, se arrastra por su cuerpo sudoroso dejando besos por donde la piel se vea expuesta "Anne"
"Marcy" su corazón aun va acelerado, pero sus ojos buscan desesperados la mirada encantadora de su amiga "Mar-Mar" sonríe al encontrarla sobre ella, aun sin fuerzas trata de envolverla entre sus brazos y que sus labios se conecten en un apasionado beso
Marcy besa a la chica, es su necesidad más aún si el sabor de Anne está presente en su boca. A la morena no le importa, ya varias veces se había probado el sabor de sus jugos por simple mera curiosidad, aunque no ha de negar que probarlo de la boca de Marcy le da un toque especial.
Ahora Anne se pregunta ¿cómo será el sabor de Marcy?