Capitulo 1 "Pensamientos"

Todo era oscuridad, a pesar de que la calma reinaba, este día especialmente era triste, ni las estrellas se querían asomar, el aire era húmedo, las lluvias pronto vendrían a llevarse lo que en días antes dejaron en la tierra numerosas batallas se dieron, la tierra tembló en distintas ocasiones, mientras en el cielo resplandecían distintos colores al tiempo del sonido del hierro estrellándose entre si.

La soledad se hundía en el cuerpo de aquella joven que se arrepentía de sus actos, tal vez si hubiese actuado diferente, tal vez....

- Ahora no sólo me siento sola, estoy devastada, ahora que eh comprendido el porque de todos mis confundidos pensamientos, mis miedos, odios, el mismo amor.... no pude ser madura cuando en realidad pude serlo, después quise culpar a otros y no asumir mi propia responsabilidad.

Pasando una mano por su rostro, salieron algunas lagrimas al querer tragarse su orgullo, su tan tonto orgullo que la cegó tanto tiempo, cosa que muy bien comprendía era causa de que su ego creciera y que se creyera mejor que mucha gente, pensó mucho en la postura que adopto para poder seguir con aquel engaño, todo con tal de complacer a su ego, sin tomar en cuenta sus propios sentimientos, haciéndose creer que el deber de proteger y purificar esa joya era todo lo que debía hacer... que error...

- Cuando renací, odie todo, lo odie sin saber la verdad, la odie por ser mi futuro, lo odie por poner en una disyuntiva sus sentimientos, la odie por amarlo, los odie por la confianza que se tenían, disfrute poder odiar, poder gritar, poder ser lo que no fui, pero en el fondo no me podía engañar, la odiaba por ser el fruto de mi verdad, porque en realidad me odiaba a mi misma.

No pudo contener sus lagrimas, apretó sus manos a su corazón aunque muerto, aun palpitante gracias a Urasue, recordando el momento en que Inuyasha la maldecía por su tan cruel acto; miro al cielo y se pregunto, si era en verdad odio el que sentía por Kagome o si acaso...

- Sí, era eso, la envidio, porque ella a pesar de no tener ningún entrenamiento, fue capaz de purificar la perla, ni siquiera tubo que sacrificar su felicidad, simplemente, era ella misma, sin limitarse a vivir la vida a su modo, aunque ella no veía el mundo con seriedad ni con repudio a la maldad, mientras esta misma maldad si la tengo yo, aun aparentando seriedad, yo era ya maliciosa, no se en que momento me corrompí, pero ella es pura, es inocente, sus sonrisas son sinceras, es capaz de dar todo por el amor y la amistad... ¡Dios!, como me fastidia eso, yo siempre hice todo por obligación, jamás me di el lujo de ser yo misma... por eso el la eligió a ella.... y yo lo arruine...

Volvió a romper en llanto, de verdad se sentía arrepentida, pues al fin comprendió, que como una vez su hermana se lo dijo, ella ya había tenido su oportunidad durante su vida, ahora era tiempo de que descansara, aunque su renacer trajo una ventaja, pues en ella sello por un tiempo el destino de la sacerdotiza y la perla, pero al reencarnar y traer de nuevo a la perla, tendría que cumplir la misión antes encomendada, entonces, paro de llorar y vio un rayo de luz en esa incertidumbre en la cabeza...

- Kaede tenía mucha razón, aunque las coincidencias no existen, yo volví porque tenía que cumplir con lo que no pude, entiendo, ahora es cuando eh podido sentir, vivir, odiar, llorar, amar, y todo aquello que me negué antes.... entonces el destino de Kagome... era el mismo que el mío, tendría que separarse de su amado Inuyasha, afortunadamente ella no esta muerta y aun tengo tiempo.... ahora yo termine mi ciclo, ella no tendrá que pasar por eso, en ti volveré a tenerlo y en mi moriría tu infelicidad y la mía.

Kikyo se levanto del pasto humendo cuando la brumosa neblina se despejaba a causa de hermosas y frescas gotas que constantes cayeron del cielo, llamo a sus serpientes caza almas y se resiguió en una cueva, afuera de ella sólo se veían resplandores, luces rosas, morados, azulados, blancos, era un espectáculo maravilloso, además se sentía una gran calidez.

Por la mañana el sol brillaba radiante, resplandeciente en el roció el cual parecía diamantes en los campos y praderas, era el primer día en tantos, que el ambienté se sentía distinto, tal vez a causa de la Miko que hizo un gran hechizo, mientras que esto parecía sacado de un cuento, la fragancia de las flores, el calorcito y la sensación de paz.

Una mujer con muy poco equilibrio caminaba entre los sembradíos, se veía muy cansada, aunque los rostros de la gente que pasaban cerca de ella, eran asustadizos, a pesar de todo, ella iba alegre, pronto llego a una aldea, donde los habitantes salían corriendo, recordando que antes ella protegió ese lugar, pero ahora era un zombi entre los vivos, aunque no por mucho tiempo más, una anciana salió corriendo de su choza después de ser avisada, se sorprendió al verla, pero no le negó el acilo de su casa.

Horas más tardes lloraba sobre un montón de huesos, aunque el dolor era grande, su corazón se sentía orgulloso por lo que su hermana había hecho, indudablemente, su corazón volvió a ser noble y puro, por fin descansaría en paz y todo el dolor que provocó a ese grupo de amigos, lo repararía, indudablemente, él la perdonaría y no habría nada de que arrepentirse ahora, por fin vivió después de la muerte, aprendió y decidió descansar sabiendo que todo tenia una solución, aun a tiempo; entonces algo paso, una luz entro por las aberturas de las maderas, parecían sus huesos volverse estrellitas y pétalos, afuera de la choza una ráfaga suave susurro por los árboles entrando a esa choza, llevándose lo que antes fuera Kikyo, la anciana Kaede sonrió al saber que también Dios la había perdonado.

Kaede: Tengo que decirle a los muchachos la noticia, Inuyasha, espero que esto te sirva de consuelo...

CONTINUARA....

NOTA 2: Para todos aquellos Anti-Kikyo no me quieran colgar pues yo estoy con ustedes, pero quería que se adaptara un poco a la serie de Tv, así que pues le di su papel aunque no le duro más (esta bien, si aparecerá una vez más pero no como imaginan) y han de suponer con quien deseo que se quede Inuyasha jejejeje, mil gracias por sus opiniones y sigan haciéndolas. Hasta luego n.n

P.D. Hoy ya había adelantado un poco de mi fic, varías cosas y las tenía escritas, la verdad no se si deba escribir esto, pero creo que como un regalo para un buen amigo lo haré, este capitulo se lo dedico a la memoria de Nelson Rubén Pinedo Valdivia quien demostró ser un buen amigo al que a veces llegue a envidiar por su inocencia, tal vez por eso mucha gente confundía su manera de ser, pero eso no evito que encontrara buenos amigos y hoy 5 de Noviembre del 2004 deseo que donde estés, seas feliz. Que Descanses en Paz Buen Niño.