Saga de Sango y Miroku
Segunda Parte: Un nuevo amanecer
Pasando varios meses una feliz pareja paseaba por la aldea de exterminadores con un bebe en brazos, estaban realmente alegres de al fin ser padres, Miroku estaba aun más feliz por recordar que podría tener un hijo al cual no tendría que heredarle su maldición así como que tampoco él moriría dejando a un bebe y una esposa solas. Por su parte Sango estaba satisfecha con los cambios de Miroku, dejo de ser un pervertido o al menos con las demás mujeres, con ella en publico se limitaba a abrazarla y darle besos tiernos, pero estando a solas, ya era otro cuento.
- Recuerdas cuanto tiempo me hiciste esperar Miroku
- Lo lamento, pero francamente me sentía un poco inseguro sin el Kazana
- Si lo se, pero no era necesario que estuvieras tanto tiempo solo para entrenar
- Si estaba cerca de ti mi querida Sango, no habría podido concentrarme para nada jejejeje
- Miroku, no cambias verdad, aun así te extrañe muchísimo esa temporada
Miroku recuerda el día que se fue, francamente no le hacía gracia dejarla, mucho menos tras la partida de sus amigos, pero si algo era cierto, sus ganas de protegerla, por lo que debía subir su nivel de espiritualidad para llevar a cabo su trabajo como monje, al tiempo de ir quitándose la inseguridad de no portar su Kazana. Muchas noches pensó en ella y sorprendentemente de una manera pura, pues su entrenamiento no le permitía pensar de modo diferente, estaba cambiando tanto por ella, pero no se dio por vencido hasta alcanzar la meta que se había propuesto, ni por lo mucho que la extrañara, ni por sus manías que terminara abandonando.
- Pero después de todo ese tiempo, te vengaste haciéndote del rogar unos meses más, yo deseaba casarme de inmediato
- Lo se, pero estaba demasiado enojada por el tiempo que te fuiste sin recibir noticias tuyas, realmente pensé que estabas haciendo otr……
- Jajajaja vaya, vaya, la dulce Sango estaba celosa
- No es gracioso Miroku, tu tienes la culpa….. - Un dulce beso robado callan las palabras de la chica, eso no evita que siga preguntando, pero eso si, sin estar más celosa.
- Te dije que cambiaria, durante ese tiempo mate 2 pájaros de un tiro
- Se más claro
- El tiempo que estuve entrenando, me dedique meramente a eso, mis ratos de descanso los enfocaba sólo en ti, no prestaba atención a ninguna otra mujer, aunque debo confesarte que al principio si me costo trabajo
- No se si tomarlo como un halago, al menos me reconforta que tus sentimientos por ti, fueron muchísimo más fuertes
- Eso no cambiara amada mía, así pasen el tiempo, te juro que ya no me separare de ti, ni mis sentimientos ni nada, si es posible, te amare por la eternidad
- Me… me… - sonrojada - A veces eres tan sorprendente
- Siempre lo soy amada mía
- Si es cierta tu promesa, desearía que si Dios nos vuelve a poner en este mundo, nos deje encontrarnos y volver a estar juntos por este sentimiento
- Eso es lo que más deseo preciosa
- Estoy feliz de estar contigo Miroku
Así se quedaron contemplando el atardecer, junto a su pequeño que tanto los llenaba de felicidad, aunque por dentro no estaba del toda completa, pues les hacían falta sus amigos. Ya por la noche, sentados para cenar estaban Shipoo y Kohaku entreteniendo al pequeño Zentaro. Así su vida se fue en cariño, luchas contra los demonios y alguna que otra discusión, pero su vida fue feliz a lado de sus seres queridos. En cuanto a Shipoo se la vivió como el hermano mayor de los hijos de Sango y Miroku, dándole menos tiempo a entristecerse y Kohaku al fin se convirtió en el mejor exterminador además de un buen esposo de una linda chica llamada Rin.
500 Años en el futuro:
Llevaba ya un buen rato hablando por teléfono con aquel chico que tanto la había pretendido, pero aun tenía sus dudas, no deseaba entablar una relación con él pues tenía ciertas mañas y ella desde niña ya estaba acostumbrada a ser su mejor amiga, aunque de un tiempo en adelante él comenzara también a decirle cosas bonitas y tratar de conquistarla, ella siempre manteniendo su distancia, aplicándole castigos cada vez que intentaba de agarrarla de algún lugar muy intimo.
- Miroku no seas necio, sólo es un cambio de escuela, que más da
- Pero siempre hemos estado juntos, la verdad no deseo que te cambien de escuela
- Lo se pero mis padres han visto que en esta otra escuela tienen materias extracurriculares que me ayudaran más para la carrera que deseo estudiar
- Si te entiendo, pero me niego rotundamente a separarme así de ti
- Jajajaja y que piensas hacer, convencer a mis padres que no me cambien de escuela
- No, dudo mucho que acepten mi propuesta, será mejor cambiarme contigo
- Pero que dices, no seas loco
- No creas que eres la única con buenas notas que pueden ser aceptadas en otra escuela
- Estas encaprichado
- Claro que no, sólo quiero estar junto a ti y…
- No empieces Miroku que yo…
- Papá! Dile a mi hermana que ya deje el teléfono, lo quiero ocupar y nada más esta peleando con su novio Miroku
- Qué dices Kohaku, ven para acá… nos vemos Miroku, tengo que ajusticiarme a alguien aquí
- Dile que gracias por el apoyo de mi parte, nos vemos querida Sangito
- No le sigas la corriente, nos vemos…
Después de un mes terminaron los papeleos de ambos chicos y por petición del muchacho quedaron en el mismo salón, esa tarde se presentaron con sus nuevos compañeros, curiosamente no eran los únicos nuevos, pues otra pareja acababa de entrar. Por ser nuevos les costaba entrar en los círculos de amistades ya formados, por lo que decidieron hacer primero amistad con los también recién llegados a la hora del almuerzo.
- Hola, veo que también entraron hoy, yo soy Sango y él es Miroku
- Mucho gusto, mi nombre es Ayame y recién acabo de conocer a Kouga
- Nos tropezamos en la mañana al entrar al salón, es curioso
- Yo conozco a Sango desde hace mucho, así que no puede dejar que viniera sola a esta escuela
- Entonces son novios
- No Ayame, él es un amigo de la infancia
- Eso porque ella no quiere
- Miroku basta…
Así comienzan una nueva discusión frente a sus nuevos compañeros, en las primeras semanas que se tratan, llegan a hacer una buena amistad, más Ayame comienza a fijarse mucho en Kouga, que hasta siempre fue muy atento con ella, eso hasta que vio a otra compañera del salón, Kagome Higurashi una chica algo tímida, por lo menos en esa temporada, pues habían rumores que un chico la abandono y su actual estado era por eso.
Finalmente Ayame y Sango se hicieron excelentes amigas y confidentes, Ayame le pudo sacar la verdad a Sango de sus sentimientos por Miroku, el chico le pidió de favor que la ayudara a que aceptara ser su novia, por otro lado Sango también sabía los secretos de Ayame, la cual le termino confesando un amor no correspondido de parte de Kouga, que sin saber como, se vio perdidamente enamorada.
- No deseo estar en el festival Sango
- Por qué Ayame, acaso pasa algo que no sepa
- Hoy es 14 de Febrero, Kouga esta necio en declarársele a Kagome y seguramente al final del día me quedare sola
- No te preocupes, por lo que me he enterado Kagome parece que esta interesada en alguien más y Miroku y yo te estaremos acompañando, no te quedaras sola
- Eso crees, me he enterado que tal vez hoy alguien se te declare
- No empieces
- Ok, esta bien, pero dime, de donde sacas que Kagome esta interesada en alguien más
- Ayumi me lo dijo, esta preocupada por ti y me comento que vio a Kagome platicando con un chico y sobre todo, que se veía muy interesada en él
- No deseo decir que eso me hace feliz, porque se que lastimara a Kouga, pero es que… no entiendo ni como llegue a enamorarme tanto de él
- Así es el amor Ayame, al principio estaba tan pegado a ti que seguro en algún momento tiene que darse cuenta de lo que sientes y tal vez te corresponda
- Me encantaría hacerme ilusiones pero… prefiero no… mira, viene Miroku
- Hola chicas, el festival parece que estará divertido
Pasaron un rato agradable platicando, tratando de ignorar a Kouga que a cada rato espiaba a Kagome, más tarde Miroku le pide a Ayame que lo deje hablar con Sango, pues ellos habían preparado un plan para hacer caer a su amiga, dado que ya era más que obvio que los dos deseaban ser novios.
- Qué tanto platicaban ustedes Miroku
- Es un secreto, pero la verdad es que quería estar a solas contigo mi querida Sango
- Se puede saber para qué
- Veras, no encuentro mejor momento para pedirte que me tomes en serio, me gustaría que fueras mi novia
- Pero Miroku, es que yo…
- Vamos, acéptame, tu haz visto que he cambiado y lo he hecho por ti
- Bueno yo… Miroku yo te… - escuchan un grito que los interrumpe y ambos voltean.
- Ayame, que sucede
- Miroku, Sango, ayúdenme, Kouga quiere golpear a un chico que esta con Kagome…
