Cáp. 4.

Por la noche antes de que se fueran todos a dormir, Tottles dijo:

-Por favor, Kati cuéntanos un cuento en que salga ese monstruo que dices que atacó a Peter

-Ni hablar. Tendríais pesadillas.

-Porfa- Todos, incluso Peter, que había mejorado bastante, pusieron ojos de cachorro implorante.

Kati suspiró e improviso un cuento:

-" Bien, pues había una vez una chica que se llamaba Nancy y esta tenía una amiga llamada Helen. Un día Helen cayó gravemente enferma, y aunque llamaron a muchos médicos, estos no podían hacer nada y Helen empeoraba cada día más…

-¿Y qué paso?- pregunto Peter

-Peter no te levantes- dijo Kati muy seria

"Nancy sospecho que le pasaba a su amiga, cuando un día haciéndole compañía vio dos marcas en el cuello de esta. Un día se quedó a dormir con su amiga, cerró bien y puso ajo en la ventana de la habitación de su amiga. Al día siguiente, su amiga estaba mucho mejor. Los padres creyeron que la presencia de Nancy ayudaba a su hija a recuperarse más rápido y la invitaron unos días a su casa. En efecto, así fue, su amiga se restableció"

-¿Y qué paso luego?- pregunto otro niño

-"Un día Nancy encontró al responsable de la enfermedad de su amiga. Era un adulto muy grande y feo, con colmillos largos y ojos rojos.

Los niños suspiraron y aguantaron la respiración, Kati sabía contar muy bien las historias de miedo.

-"Este le dijo: "Hola, preciosa, ven conmigo "dijo mirándole fijamente. Nancy casi cayo en su peligroso embrujo, pero su amuleto la salvo"

-¿Un amuleto igual al tuyo?- pregunto Peter señalando el crucifijo

-Sí.

"Nancy no solo se salvó esa noche, sino todas las noches a ella misma y a su a amiga. Un día se atrevió a seguir al monstruo a su guarida. Y allí cuando se hizo de día y el monstruo no pudo moverse…"

-¿Porque no se pudo mover el monstruo? dijo Tottles

-Porque esos monstruos llamados vampiros, no soportan el sol, si lo ven mueren- Kati prosiguió- ella cogió una estaca de madera y se la clavó en el corazón y así el vampiro murió.

-Qué historia tan buena- dijo Peter- ¿Tú también eres como Nancy?

-Bueno, parecida- dijo tímidamente- Ahora a dormir todos.