Milo se encontraba en el templo de Géminis buscando alguna pista o indicio de que Nike seguía de alguna manera en el Santuario o tal vez la manera de hacerla regresar.
Athena aún no regresaba de Star Hill y Seiya comenzaba a impacientarse, cruzó la casa de Géminis esperando encontrar a Kanon y pedirle que lo acompañara a buscar a Saori pero en su lugar solo encontró los aposentos de Kanon revueltos y un Milo desquiciado.
—¿Milo? Esta no es tu casa, si Kanon ve este desorden te mandará a la dimensión más lejana y horrible.—Pero el caballero de Escorpio solo seguia tirando y deshaciendo el lugar, Seiya estaba perdiendo la paciencia..
—Milo, necesito que te relajes y me escuches, ¿qué es todo esto?
—Seiya, tenemos poco tiempo y si las historias de Saga son ciertas necesitamos encontrar un diario, o dos o quizás más.
—¿Diario? ¿Cómo los que hacia Miho? — Pensó mientras seguía a Milo a lo largo de la habitación.— ¿Diarios de Saga?
—No, son los diarios de alguien mas que le escribieron a Saga y probablemente a Shaka…¡Shaka!
Seiya lo detuvo jalando de la camisa de Milo haciéndolo retroceder, Seiya estaba mas que confundido, solo llevaba dos minutos en Géminis y ya sentía que se le volaba la cabeza.
—No se en que enredos te haya metido Saga, pero Milo si quieres ayuda en algo puedes decirme que es lo que estas tratando de buscar o hacer. Se que últimamente no hemos dormido por hacer guardias de días enteros pero esto va más allá.— Milo le lanzó una mirada de enojo y se soltó del agarré encaminándose a Virgo y dejando un desastre.
Seiya lo siguió sin dejar de hacer preguntas, prefería una aguja escarlata a ser mandado a otra dimensión por Kanon.
—Milo enserio detente solo un minuto asi puedes responder o siquiera decirme de que trata ese… ¿diario?
—Quizás sea la respuesta a porqué Saga se volvió loco e intento matar a Athena cuando era tan solo una bebe. Saga sabe mucho mas que nosotros, y tal vez pueda ayudarnos a defender a Athena y derrotar a Hades.— Se limitó a contestar lo más rápido que s respiración agitada le permitía.
—Milo, estas sudando mucho, tu corazón debe ser vigilado. Camus nos dijo que tenias una enfermedad rara en tu corazón, tal vez por eso estas delirando, déjame llevarte al templo de Acuario así te puede ayudar.
Milo lo tomo por los hombros y empujó al pilar mas cercano, los ojos de milo irradiaban ira e impaciencia haciendo al caballero de Pegaso subir la guardia e intentar quitarse a Milo fe encima. — Escucha mocoso, te estoy pidiendo ayuda para salvar a Athena y a este mundo, no vuelvas a hablar de mí y si tanto amas a Athena como dices entonces ponte a buscar y ¡cierra la boca!
— ¡Milo! Deja ir al caballero de Pegaso en este instante.— La voz del caballero de Virgo se hizo presente y ante los otros dos caballeros apareció una luz dorada, de la cual fue tomando forma humana hasta aparecer la figura de Shaka. — Estas demasiado agitado por las ideas que te metió Saga en la cabeza. — Retiró las manos de Milo de la ropa de Seiya interponiéndose en el medio.— Milo te llevare al templo de Acuario a que Camus baje tu fiebre y recuperes los latidos de tu corazón a la normalidad.— Milo se dio la media vuelta subiendo las ultimas escaleras para entrar a Virgo.— Milo, si entras sin mi permiso te lamentarás.
—No me ire de aquí hasta encontrar esos diarios, se que ella fue tu maestra y segunda madre, así que se que están aquí.
¿Segunda madre? ¿ella? Pensó Seiya observando como la reaccion de Shaka cambio, incluso su cosmos se hizo menos amenazador, cambio a algo cómo… melancólico. La melancolía que Shaka sentía la podia Sentir Seiya y Milo también.
—Yo necesito verlos, necesito….necesito re-recordar…
Antes de que siguiera hablando, Milo se desplomo a los pies de la entrada de Virgo.
Seiya corrió a auxilio y un mas calmado Shaka lo siguió. Juntos llevaron a Milo a Acuario para pedir ayuda a Camus.
Después de asegurarse de que Milo se encontraba mejor, Shaka llevo a Seiya de regreso a Virgo, al jardín donde se encontraban los árboles de sal.
—Verás Seiya, hace algunos años Saga perdió el control, yo decidí abandonar el santuario no solo para entrenar a nuevos caballeros, lo hice con el propósito de calmar mi instinto asesino y vengar la muerte de una de las personas que mas he querido en mi existencia. Milo tiene razón, Saga sabe muchas cosas, pero yo conozco la verdad de esa historia fantasiosa que le contó a Milo.
—¿Estas hablando de la "mujer" que Milo mencionó?
—Así es, ella era una maestra, mi maestra y de muchos caballeros dorados más. Después subió al trono con el antiguo Patriarca, para cuidar de todos nosotros, eso enloqueció a Saga ya que un caballero no puede enamorarse de una doncella y Diosa… Saga es el culpable de que Athena este indefensa, al asesinar a Aioros me di cuenta que era inútil hacerlo entrar en razón. Pero al ser tan listo me manipulo y olvide por completo quien era la señorita Saori en realidad. De hecho ni Saori conoce esta verdad, de donde viene o quienes fueron sus padres.
—Shaka, ¿me estas diciendo que…?
—Seiya, esta información es muy peligrosa, ni yo ni Kanon conocemos los limites del poder de Saga, ahora mismo esta utilizando a Milo para hacer algo terrible y si no lo detenemos, perderemos ante Hades, Athena morira y nosotros no podremos hacer nada al respecto.
—Saori… Tenemos que ir con Saga y conocer su plan… tal vez solo el quería regresar como aliado.
—No Seiya, yo tengo esos libros de los que tanto murmuraba Milo, son libros antiguos heredados del mismo Chronos a sus hijos titanes, Hiperion y Ceo. En la guerra Santa donde los tres hijos lucharon para encerrar a Chronos en el tártaro estos libros fueron robados de Hiperon y Ceo por los titanes Kratos y Bia, Zeus los adoptó en su ejercito junto a Niké y Zelos, los 4 hermanos alados. La Diosa Niké fue la elegida para cuidar de ellos ya que era tan sabia como su protectora, la Diosa Athena. — Hizo una corta pausa para llegar hasta un cofre enterrado junto a uno de los árboles.— Esta es la llave que abre esos libros, es una pluma de las alas de Nike y la sangre de Athena. La he guardado por años al igual que estos libros.
—qué es lo que contienen esos libros?
—Instrucciones de como llegar al tártaro, y despertar a Chronos. Como su cuerpo fue destruido por los tres grandes Dioses, Zeus ordeno a su hermano Hades a resguardar el alma de Chronos en el tártaro.
—En lo mas profundo del infierno.— Seiya se tomo unos segundos para digerir todo lo que Shaka le estaba contando.— Pero que tiene que ver con la historia de tu maestra?
Shaka regreso los libros y la llave al cofre para ser entregado a Seiya. Seiya lo tomó con sumo cuidado como si se tratara de una pequeña y frágil vida.
—Seiya, debes entregar este cofre a Athena, tu armadura la he traído conmigo y con ayuda de Mu te teletransportaremos. Star Hill, Athena se encuentra ahí con los hermanos de Niké.
—Lo haré, entregaré este cofre.
Seiya se vistió con la armadura de Pegaso y con la compañía de Kiki fue teletransportado por Mu y Shaka, pero una fuerza casi invisible cortó los poderes de Mu y Shaka dejándolos tendidos en el piso. Kiki intentó teletransportar a solo Seiya pero fue inútil y dejo mal herido a Kiki dejándolo inconsciente al lado de su maestro. Seiya no lograba moverse, sentía que sus pulmones se quedaban sin aire y su cuerpo se oprimía cada vez mas, frente a el una imagen borrosa de un hombre tomo el cofre sin esfuerzo y se marchó.
Luego de varios minutos los caballeros y Kiki fueron despertados por Shun y Hyoga, justo en el mismo lugar afuera de Virgo.
—Seiya creímos que no despertarian, scuchamos un estruendo y corrimos para averiguar que había pasado, pero solo estaban ustedes. ¿Alguien los ataco?
—No lo se…— Aún aturdido Seiya buscaba el cofre.— Yo recuerdo que iba en camino a Star Hill con Kiki y de pronto me Senti tan mal… y fallé… Shaka el cofre lo he perdido.
— Seiya, no te preocupes… lo vamos a encontrar. — Lo reconforto ayudándolo a ponerse de pie.— Aunque sea una "magia" misteriosa no deja de ser mitológica y quien sea que la tenga tardara mucho tiempo en descifrarla.
Mientras tanto en el calabozo, Kanon se dirigía a la celda de Saga para dejar la última comida que su hermano probaría. Al no haber encontrado un tipo de expiación para limpiar sus pecados y sobre todo la traición hacia Athena, Saga sería ejecutado de acuerdo con las antiguas reglas del Santuario. Lo intentó y sobre todas las cosas seguía siendo su hermano y lo único que el estaba buscando era tener mas tiempo para ayudarlo a vivir de nuevo. Más que nadie en el mundo sabía el dolor que cargaba y seguía cargando. Y el quería seguir intentandolo, pero quizas ya era tan tarde que ni la desesperación lo dejo pensar con claridad.
—De todas las personas del Santuario, me sorprende que hayas sido tu quien trajo mis últimos alimentos.
—No estoy de humor Saga, en verdad creí que te ayudaría a salir de aquí.
—¿Athena regreso contigo? — Pregunto en seco Saga mientras Kanon abría la celda para dejarle la bandeja con comida.
—No, ella se quedará mas tiempo. — Ambos se quedaron mirando en silencio por unos minutos hasta que Saga decidió comer algo de la bandeja y querer compartirlo con su hermano, tomó una manzana y la partió con sus manos por la mitad, Kanon la aceptó con nostalgia, como si aquellos bellos momentos de su niñez pasaran frente a sus ojos. —Como en los viejos tiempos.
—¿Saga? Tengo que decir, intente regresarla… pero fue inútil pareciera que se esfumó aquí y allá.
—Las lagrimas de Saga caían lentamente, cada pequeño recuerdo con los años se iban borrando y no podía hacer nada, sabía que el momento llegaría pero ahora se sentía mas real y aunque lo había previsto Kanon también presentía que Saga llegaba a su límite.
—Mi castigo al revelarme ante los Dioses es este hermano, y agradezco que hasta mi último día hayan ido bondadosos, dejando el último recuerdo.— kanon salió de la celda dejándola abierta. Saga lo siguió con la mirada removiéndose las lagrimas de las mejillas con sus manos teñidas por la suciedad de la celda.— Kanon tengo que pedirte algo, tómalo como mi último deseo. Quiero que mi ejecución la realice Shaka, y no quiero a nadie mas. Ni a Saori, aunque ella sea Athena se que a Victoria no le hubiese gustado que ella presenciara tal cosa.
—Esta bien, pero con una condición. — Saga se negaba con la cabeza sabiendo que palabras saldrían de la boca de Kanon.— Debes decirle la verdad, que ella es tu hija y que su madre era Victoria en quien Nike reencarno para traerla a este mundo.
—Es por eso que he dicho que no la quiero presente. ¿Crees que no me duele el corazón cada vez que la veo? Ver que arruine mI vida y la de mi hija…que casi fue asesinada por mi culpa…— Saga seguía llorando, con su voz ronca y cansada imploro a Kanon una ultima vez.— No puedo verla, menos hablarle así que por favor haz que mi ejecución sea hoy, no quiero verla no quiero hablarle…estoy demasiado enojado conmigo por perder lo único que es de Victoria.
—¡ Y tuyo Saga! ¡Saori es tu hija! O debería de decir "Alisha".— El corazón de Sha se aceleró y en un impulsivo paso cayó a los pies de su hermano.— Eres tan patético...
Unos pasos interrumpieron la discusión de los gemelos haciéndolos girar en dirección al pasillo oscuro.
—Vaya, vaya…vaya y yo que creía que mi cuñado al menos era…poderoso. Creo que Zelos me debe el doble de Dracmas.
Una joven de esbelta figura, con una impotente mirada de ojos color azul se acercaba con paso lento y seguro. Saga se levanto con las pocas fuerzas y se limpio la cara. Kanon tomo su pose de lucha listo para mandarla a volar pero Saga le detuvo.
—¿Bia?— Pregunto el mayor de los gemelos intentando enfocar su vista en aquella mujer.
—Bien, tal vez mi cuerpo es diferente, ya que cuando nos conocimos era…algo masculino y de unos ¿6-7 años?
—Kanon el, ella es Bia hermana menor de Niké.
—Titán Bia, hermana menor de Niké y guardaespaldas del Dios Zeus.
—¿Qué hace un Titán trasvestido en el santuario de Athena?
De un movimiento Bia sacó sus afiladas alas y partió a la mitad los barrotes de la celda de a lado.
—Verás, normalmente ese tipo de comentarios no me afectan. Pero que un humano se crea con el derecho a insultar a un Titán…
Kanon hizo hcer su cosmos notar amenazando a Bia con atacar.
—Kanon ten mas respeto, además ella es parte de la familia desde qué …
—Desde que mi hermana decidió casarse en secreto con un humano y halla decidido cargar con el fruto de ese..— Bia tiro una arcada simulando asco. — Gracias al señor Zeus y el alma de la bondadosa Athena que no solo salió un trozo de carne común y corriente como ustedes.
—Bia ¿a que has venido? — Saga aun retenía a Kanon quien estaba a punto de lanzar un golpe directo al estómago del Titán presente.
—Si, es mejor que dejes de parlotear y vayas al grano.
—Me ha enviado Kratos a recoger un pequeño paquete y ofrecerte algo que ni siquiera tu hermano rechazarian.
Saga dejo de preocuparse por Kanon y se acerco a Bia. Esta le extendió el cofre que Shaka había entregado a Seiya hacia unos minutos. — Significa que estas de acuerdo a renunciar como Santo de Athena, bueno no es como si tuvieras otra opción.
Kanon observaba la escena sin saber que es lo que ocurría. Hasta que Saga sacó del cofre los libros y una pluma bañada en oro.
—Saga ya lo intentó una vez y no lo pudo controlar, no es buena idea que lo haga una segunda cez, su cuerpo no es el mismo y ya no…
—Kanon, escúchame . No solo es el Santuario que corre peligro es el mundo entero y talvez hasta el Olimpo. Si Hades ha resguardado su cuerpo con tan cuidado todos estos años, quiere decir que algo mas esta por suceder.
—Realmente no es lo que le preocupa a Zeus. Sino…mi hermana no regreso. Su alma no regreso. Así que di pensabas reunirte con ella en Cocytos, no será posible.
Tanto como Saga como Kanon cambiaron su expresión a preocupación.
—No sabemos en que lugar se encuentre así que Kratos tuvo la fabulosa idea de dejar de buscar y acudir aquí.
—Pero ya ha pasado mucho tiempo, ¿porqué hasta ahora la están buscando?
—No me entiendes, estuvimos 16 años buscándola el goda dimensión, hasta el fondo del inframundo. Y ahora solo nos queda despertar a Chronos y preguntar donde esta. Y Chronos siente una pequeña fascinación por mi hermana así que quien mejor que el humano que fue poseído por una fracción de Chronos para ayudar a buscarla.
Saga solo podía pensar en como reencontrarse con su amada hada, su bella amada podría regresar.
—Aunque quisieran encontrar su alma, ¿crees que ella quiera regresar?
Bia suspiró y dejo caer unas cuantas plumas antes de guardarlas de nuevo.
—No y es ahí donde les daremos un pequeño regalo, ahora mismo en la cámara del Patriarca, siendo mas especifica, en la recamara de la que alguna vez fue el recipiente de mi hermana se encuentra intacto, la hemos traído desde el jardín de Géminis. Y vaya que es un gran trabajo de conservación y hacer creer que el cuerpo desapareció, en verdad tengo que alabar esa truco.
—Me estas diciendo que en todo este tiempo el cuerpo de Victoria estaba en el jardín de la casa de géminis?— Bis soltó una ligera risa burlona dejando un enfurecido Kanon.
—En verdad que no conoces a tu hermano. Bueno ¿ quieren ver a mi hermana? Se que Saga esta impaciente. Oh si y Athena también estará allá, así que si no quieres aun decirle la verdad, que en verdad me enferma que puedas hacerte llamar su "padre", debemos apresurarnos.
Kanon se poso frente a Saga para no dejarlo moverse.
—Saga no puede salir de prisión. Mucho menos a la sala del patriarca.— Miró a su hermano y e quitó de las manos el cofre.— Pero yo si puedo acercarme, así que iré a revisar los aposentos de Victoria y después volveremos por Saga, para hacerle saber que es ella.
Bia solo sonrío y se dio media vuelta, fue encaminado por Kanon hasta salir de la prisión.
Aunque le asqueaba rodearse de humanos, esos dos aun conservaban el aroma de Victoria y le reconfortaba.
18 años antes
En una mansión no tan lejos de Tailandia, vivían los tres hermanos de Victoria. Krato y Zelos eran los mayores, después seguía Victoria y por último Bia. Victoria no logró convivir con el mas pequeño debido a su cambio al Santuario en Grecia pero recibía letras hechas a mano por su hermana. Pasaron años para poder verla en persona. Lo cual lo tomo por sorpresa.
Victoria había hablado con Shion para pedir permiso y salir del Santuario a visitar a sus hermanos. A pesar de que Shion aún repudiaba la unión del Santo de Géminis con ella, decidió dejarlo ir con ella al menos sabia que el la protegería dando su vida.
Los hermanos se preparaban para la llegada de su hermana, sobre todo un impaciente y pequeño Bia que no paraba de hablar. Estaba tan emocionado por ver a su hermana una vez mas, desde el funeral de los que fueron sus padres adoptivos no se vieron mas, solo por cartas imaginaba como era ella.
Al llegar la noche una avioneta aterrizó no muy lejos de la mansión dejando ver dos figuras una muy conocida y la otra no tanto, tal vez un ¿guardaespaldas?. Bia ignoró la segunda figura y se enfoco en la ya conocida. Era su hermana, conforme se acercaba notaba lo cambiada que estaba, su tunica era muy blanca, sin color, sus adornos en la cara ya no se encontraban ahí… ni sus manos eran adornadas con los símbolos de protección que alguna vez le enseñaron.
A pesar de ser "recipientes" de los grandes titanes alados, ellos habían nacido bajo la influencia de la religión Indu , siendo adoptados por una bella familia de la India, que echaron raíces mucho después en Tailandia.
Victoria soltó el
Brazo de su amado
Para correr a los brazos de sus hermanos quienes la recibieron con amor.
Saga marco sus distancia y espero a que terminara el bello encuentro, Bia permanecía detrás de sus hermanos aún no se sentía seguro de si en verdad ella era su hermana. Si tenia los mismo ojos y el cabello tal vez mas…largo y muy blanco pero ¿y todo lo demás?. Fue interrumpido de sus pensamientos cuando Victoria lo sacudió un poco para hacerlo reaccionar
—¿Bia? Soy yo, tu hermana, ¿acaso no me darás un abrazo?
Bia se quiso resistir pero Victoria lo rodeo mas rápido para que no se escapara.— Se que eres un niño grande, y te avergüenzas de abrazar a tu hermana, pero te extrañe tanto que no pienso soltarte.
Bia se rindió ante los brazos de la joven y pronto le correspondió el abrazo. Victoria le sonrió a Saga luego a sus hermanos, estaba muy feliz de estar con su familia.
Después de tan acalorada bienvenida, los hermanos recorrieron el campo de flores que se encontraba dentro de la mansión, Bia se separó del grupo y comenzó a recoger unas cuantas flores para poner en la mesa como era de costumbre.
Tan pronto como se separo sus hermanos mayores sonreían y se abrazaban y abrazaban al "guardaespaldas" de su hermana. No le tomo mucha importancia y se adelanto para limpiar las flores y colocarlas en un jarrón.
La cena fue muy grata, todos hablaban de cosas que para Bia eran insignificantes. Pero le gustaba ver a su familia feliz asi que solo se limitaba a apreciar el momento.
—Deberían hacer su boda un poco mas formal, es decir tenemos una mansión con un campo gigante y un jardín.— Zelos era el hermano mas escandaloso y siempre quería hacer una fiesta para el asunto más insignificante.
—Realmente no es necesario, además, nuestra unión es ilegal y no podremos tener cuál celebración. — El semblante en los hermanos se hizo seria y melancólica.
—Pero, eso no significa que yo deje de amar a Victoria. Si tengo que renunciar a ser caballero de Athena no me molestaría.
Dijo Saga tomando las manos de su amada esposa depositando un beso en cada una.
—Y eso no es todo…— Victoria suspiro y se puso de pie, tomo la mano de su esposo y la colocó en su vientre. — Estoy esperando un bebé, se que es pronto pero en verdad quería compartir esto con ustedes tanto que ni Saga lo sabía.
Los hermanos tanto como Saga se pusieron de pie y se abrazaron de Victoria.
Bia eso si entendió, ¿un bebé? El ya no sería mas el pequeño de su hermana, primero le arrebataron a su hermana al ser vendida al Santuario y ahora un humano de lo mas repugnante y ella serian padres.
Pero su hermana se veía muy feliz que decidió no decir nada malo y seguirle la corriente.
Notas del autor:
Ha pasado mucho tiempo desde el último capítulo pero aquí esta la continuación, espero que les guste y sigan apoyándome como siempre lo han hecho. ¡Gracias!
