Harry siempre ha estado enamorado de la misma persona, desde que entro a la escuela vio esa cabellera platinada y ojos grises quedo completamente flechado. Nunca se atrevió a hablarle no destacaba dentro de su grupo, aunque compartieran casa. Cuando empezaron a cursar 6 año decidió dejarle regalos anónimos en su cuarto pensando que así tendría una oportunidad para poder estar juntos él sabía que no tenía toda la vida, pero no tomo el rumbo que queria, él se enamoró de Pansy pensado que todos los regalos que hizo para expresar su profundo amor fueron hechos por ella.

Al salir de la escuela no tenía donde ir sus tíos lo echaron de casa nisiquera una mísera moneda para poder pagar un lugar donde quedarse, la única opción que tenía era trabajar en el callejón diagon. Así estuvo por casi dos años, hasta que pudo pagarse un celular, busco por todas las redes hasta que lo encontró en Instagram, Draco se seguía viendo tan bien como lo recordaba con sus hermosos cabellos y esa sonrisa sarcástica que tanto lo caracterizaba, pero a el seguía gustándole.

En muchas ocasiones lo vio caminar por callejón mientras hacia su turno de limpieza y seguí maravillándose con solo verlo, para Harry Draco era lo único que lo retenía en este mundo hace mucho había dejado de luchar con sus demonios, estaba cansado solo queria llegar a un lugar el cual llamar hogar, estar entre mantas calientes y comer su ultimo buen plato de comida por si él no había dicho estaba peleando con el cáncer desde hace mucho y al no tener dinero para tratamiento cada vez era peor no sabía cuánto tiempo más podría estar de pie, el único deseo que tenía era poder darle unas camelias a Draco y ver sus ojos de cerca una última vez.

Time skip un año

Un azabache se encontraba recostado en una camilla de un hospital público con una intravenosa unida a su brazo, desde hace cuatro meses se encontraba acostado su cuerpo ya no resistía el cáncer en su cuerpo.

Se había propuesto dejarle un mensaje de buenos días, tardes y noches en Instagram a Draco, con la pequeña esperanza que, aunque cada vez era menos seguía ahí esperando la respuesta de su amado.

Le habían comunicado que le quedaba una semana, con todo el esfuerzo del mundo citaba a la misma hora a Draco a la cafetería del hospital esperaba por horas y cada vez su sonrisa se iba resignado más. La enfermera Poppy que lo cuidaba fiel mente desde que lo encontró en ese callejón deplorable, lo miraba con unos ojos tristes por como ese chico luchaba con mantenerse en pie por ese amor no correspondido, había guardado todas esas cartas que sabía que Harry nunca mandaría, lo alimentaba mientras esperaba a que Draco llegara y lo que más la destruía era ver como Harry se iba apagando cada vez más.

Era momento de su partida, le habían desconectado esa intravenosa que fue su compañera por meses no queria ponerse triste sabía que este momento llegaría, no se arrepentía de nada en su vida porque se había resignado a eso, lo único que lamentaba era no a ver declarado sus sentimientos, pero mientras cerraba sus ojos y las pulsaciones se iban haciendo más lentas, veía esas camelias que habían sido cambiadas en la mañana con la ilusión de ser recogidas, todos esos recuerdos de la escuela cuando apreciaba la sonrisa más brillante desde la distancia, sus encuentros de miradas en la biblioteca por muy cortas que fueran aceleraban su corazón pero el que lo dejo con una sonrisa media triste antes de irse por completo fue una vez saliendo de la sala común choco con él porque Draco no lo vio tuvieron un pequeño rose de manos hasta que vio su rostro y se alejó como si él fuera la peste.

Al fin podía descansar los días de espera se acabaron, el dolor del alma por fin se apaciguo, el dolor de los huesos y espalda se calmó, pero su amor por Draco seguía intacto como la primera vez que se vieron en el jardín de la mansión Malfoy a los tres años.

Horas antes

Draco desde su casa recibe una llamada telefónica de un hospital que con urgencia tenía que ir a buscar algo que habían dejado para él, lo dejo pasar llegando casi en la noche porque su trabajo era más importante lo que no sabía era que se iba arrepentir de no haber ido temprano.

Vio a Poppy la enfermera de su escuela parada con una cara cansada y triste, se acercó a ella para preguntarle si se encontraba bien, lo único que le dijo fue – joven Draco llego un poco tarde, lo único que puedo darle son estas cartas y el ramo de camelias que él me pidió entregarle – bastante extrañado por lo que dijo pensó quién era y porque decía que era tarde, lo único que se atrevió a consultar fue de quien venía esto y lo que respondió le paro el corazón eran de Harry Potter, se quedó mudo y con voz apretada por el nudo en su garganta dijo un muy seco gracias y se fue.

Con solo terminar de leer la primera carta quedo destruido, lloro, rompió y grito todo lo que pudo, pero lo que en verdad quemaba su corazón era que no podría traer de vuelta a su gran amor.

"Hasta la otra vida, mon amour"

Camelia: es conocida como la rosa del Japón, ya que en este país tiene el mismo significado que en Europa se da a la rosa roja: el amor eterno. En el significado de la flor, también influye su color.