Disclaimer: ninguno de los personajes de Rurouni Kenshin pertenecen a esta humilde escritora de fics


Titulo: Vidas Pasadas

Autora: Aiko1504

CAPITULO 9: En La Biblioteca


Definitivamente la diosa de la suerte no la acompañaba, cualquiera tenia mejor suerte q ella. Cuando finalmente había tomado la firme decisión de terminar su relación con Enishi para encontrar su felicidad al lado de Kenshin, la llegada de aquella mujer parecía echar abajo todos sus planes. Aun no podía creer q la tenia frente a ella conversando amenamente como si nada pasara, y bueno finalmente nunca hubo una enemistad declarada entre ellas. Siempre había mantenido su amor por el pelirrojo en silencio mientras este era novia de Tomoe, y si Kenshin se había enterado de sus sentimientos fue porque Megumi se los dijo apenas la pálida muchacha partió a Alemania, aunque para ese entonces Kaoru ya había iniciado su relación con Enishi, quien tardo en asimilar q le dolía mas la partida de su novia o el hecho de perder a alguien tan valiosa como la ojiazul.

- Así q educación inicial… vaya, vaya… yo no se si podría con tantos niños pequeños

- Es solo cuestión de paciencia… además recién estoy en cuarto ciclo – respondía con modestia Kaoru

- Aun así te admiro Kaoru yo apenas si pude con ese diablillo cuando era niño – echándole un vistazo al hombre q abrazaba a la ojiazul

Sonrió educadamente sin saber q decir, la verdad no tenia ánimos para conversar, y si los tenia eran solamente para hablar con Enishi, pero con la hermana de éste ahí las cosas se complicaban.

Tanto Misao como Megumi parecían notar su incomodidad pues no dejaban de lanzarle miradas de complicidad q ella sabia perfectamente bien q significaban. Llevarse a Tomoe a cualquier lado de la casa dejándolos a ella y Enishi solos.

- Bueno… q tarde se hace, será mejor q nos vayamos hermanita – miro su reloj para luego separarse de Kaoru – amor espero q la próxima vez seas tu quien me visite – dándole un beso en los labios

- T... ¿te vas? – pregunto angustiada sin evitar q Enishi notara eso

- Si lo siento pero aun no descanso debidamente y mañana nuevamente tengo entrenamiento temprano…. Hermana –dirigiendo su vista a Tomoe quien le sonreía como si observara a su hermano realizar alguna travesura.

- Q lastima me hubiera gustado seguir conversando contigo Kaoru… pero en fin será otro día.

La retirada de los hermanos Yukishiro causo un gran alivio no solo a ella sino también a sus hermanas, Aoshi no entendía nada y Misao lo arrastro al jardín mientras le explicaba. Megumi la miro seriamente y se sentó a su lado, lugar q le había desplazado Enishi al momento de su llegada

- Estas alargando esto one-chan

- Siempre algo me lo impide… siempre – Megumi estaba a punto de replicar aquella respuesta tan vaga cuando el timbre de la puerta nuevamente sonó.

- Señoritas… es el joven Himura –anuncio una mucama acercándose a ellas con el pelirrojo tras ella.

- ¡Aja¡¡Aquí esta el traidor! – la morocha pareció olvidar el sabio consejo q tenia para su hermana pues se puso de pie y fue directo hacia Kenshin como leona divisando a su presa

- Q.. ¿q dices Megumi? – pregunto sonriéndole nerviosamente la victima

- Megumi no empieces –intervino razonablemente Kaoru viendo como Kenshin le hacia un reverencia en forma de saludo, la misma q ella respondió.

- ¿Q diablos hacías con el cabeza de pollo en el consultorio de la doctora Kashiyama! – dándole golpecitos a su pecho con el dedo. Kenshin trago saliva

- Lo siento pero no puedo decírtelo… pero tu si puedes contarme porque estabas ahí – siguió con su sonrisa amable al mismo tiempo q trataba de escapar de la delicada situación.

- Yo…- la chica detuvo su ataque y esquivo la mirada del pelirrojo – bueno yo… solo- miro por el rabillo del ojo a su hermana pensando si era conveniente o no contarlo todo a su amigo cuando una idea mejor se le cruzo – ¡Yo me voy para q conversen a gusto! SI ESO VOY A HACER… Hohoho – con su aguda risa emprendió su retirada.

Kaoru y Kenshin notoriamente avergonzados la observaron irse para luego escuchar un grito proveniente de los jardines: "NO EMPIEZES KITSUNEEE", cosa q fue suficiente como para saber q Megumi había empezado con su pasatiempo favorito: Molestar a Misao.

La gracia les duro poco pues conforme la molesta voz de Misao se apago no quedo más entre ellos q el silencio, ambos se miraron nerviosos y Kaoru fue la primera en hablar.

- Por favor toma asiento –indicándole un lugar junta a ella.

- Yo… bueno… quería – empezó a hablar sintiéndose tonto

- Tomoe regreso – pensó en voz alta para luego horrorizarse de lo q acababa de decir "Dios porque dije eso… "

- Si ya lo se – miro de reojo a la ojiazul y vio la tristeza en sus ojos.

- Ya… ¿ya se vieron? – pregunto dudosa y temerosa pero el chico negó silenciosamente -estuvo aquí hace poco con Enishi – ante esto el corazón de Kenshin se agito

- Ella… ¿ella estuvo aquí? –cuestiono incrédulo mirando preocupada a la chicaquien asintió mirando el suelo

- Justo antes q tu llegaras…

- Kaoru… eso no cambia nada – se puso de pie de pronto y Kaoru levanto la mirada – yo ya te dije lo q siento por ti, Tomoe es simplemente mi pasado…

- Pero… yo… - se sentía mal y estupida, había dudado de el, aun consciente q le había confesado amarla, pero la inseguridad al momento de enterarse de la llegada de Tomoe simplemente había sido inevitable

- Kaoru – el pelirrojo se puso de cuclillas frente a ella – Tomoe es mi pasado… pero mi presente y deseo con todo mi corazón – tomo la delicada mano de chica entre las suyas – q mi futuro seas tu – luego el joven procedió a acariciar la mejilla de la muchacha.

Kaoru notoriamente emocionada no dudo ni una vez antes de lanzarse a los brazos de el quedando así de rodillas sobre la alfombra.

- Yo también quiero estar contigo – le dijo con la voz ahogada al mismo tiempo q hundía su rostro en el hombro de el y aspirando su olor como si fuera su ultima bocanada de aire.

- Pero aun sigues con Enishi ¿no? – le respondió sin separar el abrazo entre ambos

- Tenme paciencia por favor… soy tan cobarde a veces – separando su rostro del hombro de el – no se a q le tengo miedo... lo único q tengo q hacer es decirle la verdad y terminar con esta mentira de una vez… suena tan simple pero es q yo…

Detuvo en seco su explicación, pues sin saber como el rostro de Kenshin estuvo mas cerca q nunca al suyo, abrió su boca un par de veces mas la palabras no salían, el pelirrojo se limitaba a observarla tiernamente al tiempo q acariciaba su suave mejilla, ella se sintió cohibida y decidió hablar pero algo se lo impidió… los labios de Kenshin aprisionaron los de ella, su rostro se tiño de rojo y sus ojos se cerraron. Se dejo llevar por el momento saboreando con cada movimiento los labios de su amado, iban a un ritmo lento exquisitamente agradable, sin prisas y simplemente disfrutando de cada roce entre sus bocas, poco a poco sentían q aun eso no era suficiente ambos se acercaron mas, sintiendo cada uno el calor de sus cuerpos y los latidos acelerados de sus corazones.

- Tu crees q eso te estimule a q apresures un poco las cosas – le susurro al oído, la chica sonrió complacida

- Lo voy a hacer lo antes posible…te lo prometo -dijo apoyando su cabeza sobre el hombro de el y disfrutando el exquisito aroma q emanaba del cuerpo de Kenshin.

- No quiero presionarte sino q simplemente no aguanto ni un día mas sabiendo q aun eres algo de el – el chico acariciaba su espalda en suaves movimiento

- Yo se… y tienes razón… oye no hagas eso me haces cosquilla – sintió besos suaves recorrer su cuello y no pudo evitar encogerse de hombros.

Había sido su primer beso con el y a pesar de q fue bastante inocente había sido suficiente para q ambos reafirmaran y expresaran el amor mutuo q sentían, ahora estaba segura ni la presencia de Tomoe ni las constantes evasivas de Enishi impedirían q fuera tras su verdadera felicidad.

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- ¡Wooouf! – fue lo mas similar a una bienvenida q pudo recibir

- ¡Hey grandooote! – se acerco a su mascota despeinando su ya de por si esponjado cabello

- Wuooouf! –replico el animal sin dejar de mover su cola

- Si yo se… es hora de salir a estirar el cuerpo ¿no? – se quito la mochila arrojándola a su cama. – ven Notaro – lo llamo y el perro obedientemente se acerco a el

Iba por el por el parque con su fiel compañero, aun sin poder creer todo lo q había sucedido en una sola tarde, definitivamente la cita con la psicóloga resulto mucho mas reveladora de lo q el hubiera esperado. Soltó de su correa al adorable can para q corriera y se sentó en una de las bancas observando las calles. Las luces y los sonidos de los autos transitando parecían una tonada monótona a la cual ya se había acostumbrado pues no afectaron en nada a q se concentrara de lleno en todos sus problemas. No le había gustado nada el diagnostico y luego de la aclaración de la doctora sobre su supuesta vida pasada el chico se mostró reacio a acceder a la terapia con las técnicas de regresión. Implicaba muchas cosas, aquella mujer tendría acceso a sus pensamientos y recuerdos más profundos.

FLASHBACK

- Entonces… entonces no fui mujer – preguntaba aun con rastro de lagrimas en sus ojos a una irritada doctora

- Yo nunca dije eso Sanosuke – le respondió secamente sentándose en su silla tras su escritorio

- Entonces doctora ¿q propone? – pregunto Kenshin

- No es totalmente seguro q la causa de tus sueños sean revelaciones de una vida anterior… pero seria bueno aplicar una sesión de regresión para saber con certeza el origen de tus sueños –apoyando sus codos sobre la lisa superficie – eso ya es decisión tuya jovencito… ¿accedes¿estas dispuesto a llevar estas sesiones a cabo? – pregunto mirándolo por encima de sus lentes.

Sanosuke le devolvió la mirada a la doctora para luego fijarse en Kenshin quien parecía no tenia nada q decir solo estaba expectante a la respuesta de su amigo. Suspiro derrotado y agacho la mirada, aun no muy seguro de lo q estaba aceptando pero solo tenia una idea en su mente, terminar con todas aquellas imágenes en su cabeza, o al menos comprender porque estas aparecían en su mente.

- Me pongo en sus manos doctora… usted dirá cuando empezamos.

FIN DEL FLASHBACK

Los lametazos de Notaro lo hicieron regresar de sus pensamientos, miro la hora en su reloj y apresurado partió de regreso a la pensión, aunque la velocidad del can corriendo delante de el con su correa también ayudo a q el joven acelerara el paso.

Dos días pasaron rápidamente después de su cita con la doctora Kashiyama, acordaron q la primera sesión de regresión sería después de una semana, pues la universidad se encontraba en medios de los parciales y no quería atiborrar su mente con mas cosas q no fueran formulas de Cálculo, Análisis, Probabilidades y Estadísticas o algo relacionado con Fundamentos de la Informática.

- Traigo los ojos hecho polvo de tanto leer – afirmo el castaño atizando sus ojos pretendiendo aliviarlos

- Eso te pasa por no leer desde el comienzo de ciclo Sanosuke – le respondía Aoshi mientras colocaba otro libro en su ya alta pila de tomos sobre Calculo

- Oye te piensas llevar todo eso a tu casa – pregunto horrorizado mientras el rostro de su amigo desaparecía detrás de uno de los tantos libros q cargaba

- Ehmm si… Oye me puedes decir la hora –

- Ocho y media… demonios media hora mas y nos cierran esto – luego de echar una rápida mirada a su reloj de mano y a los estantes alrededor de el

- Bueno entonces me voy… ¿tu te piensas quedar mas rato? – asomo su cabeza por un costado de la pila de libros, interrogando con la mirada a su amigo

- Ehh... pues si aun quiero sacar un par de libros – escondió su mano en los bolsillo – tu ve Aoshi no quiero retrasarte

- De acuerdo, pero no te quedes tonteando Sanosuke, sabes q debemos mantener nuestra beca – giro con dificultad para dirigirse hacia la vieja bibliotecaria q miraba impaciente a Aoshi, ellos dos era unas de las pocas almas q se encontraban en la amplia biblioteca de la universidad.

Espero q su amigo se alejara a una distancia prudencial y saco lo q tenia escondido en sus bolsillos, observo el papel y sin aun entender por completo porque había buscado aquel libro se dirigió al cuarto y ultimo piso de la biblioteca.

Al llegar ahí respiro aliviado pues apenas el entraba un chico de aspecto raro salía, no sin antes darle una mirada de arriba abajo al castaño quien no dudo en gruñir ante esto.

- Muy bien… - volvió a mirar el pequeño papel con un código y titulo apuntados – "Mirando al Misterio" –susurro en voz baja mientras se paseaba en medio de los estantes repletos de libros

Se sorprendió de la cantidad de títulos raros q veía, todos ellos sobre el mismo tema, reencarnación o vidas pasadas, no solo eso sino q nunca espero encontrar información sobre abducciones, astrología y ese tipo de cosas en la universidad ¿con q carrera se relacionaban todos aquellos títulos? pensó para sus adentros. Iba tan ensimismado en sus pensamiento q no noto q alguien venia en dirección a el

- PLOMP!

- Ayy – escucho claramente el lamento de la otra persona

- Disculpe no me fije por donde iba –dijo aun en el suelo frotando su adolorida cabeza

- No se preocupe yo también venia distraída – y levanto un libro blanco como prueba cosa q no le permitió ver el rostro de la mujer.

- Permítame – se puso de pie para ofrecerle ayuda, pero grande fue su asombro al ver q la mujer en su intento de levantarse apoyo el libro en el suelo dando así finalmente a conocer su cara – tu otra vez…. – mascullo en voz baja mientras la mujer se ponía de pie

- Eh… - ella también finalmente lo reconoció - ¿q haces aquí? – soltando inmediatamente su mano.

- Busco un libro… es una biblioteca ¿no? – y volvió a su búsqueda, grande fue su decepción al ver q el lugar donde se suponía debía estar "Mirando al misterio" solo había un lugar vació.

- Solo hay una copia - volvió su mirada hacia ella y con asombro noto q el libro q buscaba estaba en las manos de Megumi

- Entonces no tiene caso q me quede si tu ya lo tienes – dio medio vuelta dispuesto a irse cuando…

- Espera… no hay problema podemos consultarlo juntos – no podía creer lo q decía pero sentía q debía ser educada después de todo era la primera vez q se encontraban y ninguno había empezado a ofender al otro.

El joven la miro aun sorprendido ante tanta amabilidad, noto su nerviosismo pues, apenas poso sus ojos sobre ella, la pelinegra concentro su vista en cualquier otro lado menos en el, sonrió era la primera vez q ella mostraba timidez ante el y debía admitir q ese aire la hacía verse realmente hermosa.

- Bueno vamos a la sala de estudios entonces – se hizo a un lado para q ella pasara

- Si… - fue lo único q pudo responder apegando el blanco libro a su pecho

A pesar q fueron pocos los segundos q les tomo llegar a la sala de estudios del cuarto piso, un aura de incomodidad y pesadez se sintió entre ambos, Megumi sentía claramente la mirada penetrante de Sanosuke a sus espaldas cosa q no provocaba otra cosa q un nerviosismo poco común en ella

- Aquí estará bien – dijo jalando una silla, pero las manos del castaño la detuvieron

- Vamos siéntate – terminando de retirar la silla por ella y el se sentó a su lado

- Yo traigo una hoja de borrador para tomar unos apuntes… ¿quieres una?

- No te preocupes yo también tengo – dijo retirando la mochila de su espalda mientras sacaba un cuaderno

Megumi observaba ensimismada cada movimiento de el, desde como sus dedos abrían el cierre de la mochila hasta como el joven acomodo el lápiz en su boca, provocando una sensación de vació en su pecho y sequedad en sus labios.

- Te das cuenta – empezó a hablar concentrándose en el libro – q es la primera vez q no peleamos desde q nos conocemos – mientras marcaba con sus dedos la primera pagina para q no se cerrara.

- Jm… es raro escucharte hablar y no gritar… - dijo inclinándose mas hacia la mesa frente a el buscando la mirada de Megumi – supongo q tuvimos un mal comienzo… yo… - aun no estaba seguro de lo q quería decir

- Discúlpame tu a mi… esa mañana estaba de mal humor y pues… te use como mi chivo expiatorio… no debí tratarte así pero es q a veces ni yo misma puedo con mi carácter –recordando aquel día en q Kaoru casi lo arrollo con el auto.

- Y yo a veces también puedo ser un… bruto, troglodita, incivilizado, salvaje, vulgar, grosero y… - se detuvo para tomar aire y tratando de hacer memoria - ¿q mas me dijiste esa vez con la doctora? - el chico le sonrió, pero fue distinta a otras sonrisas q le hubiera regalado.

Esa sonrisa era sincera, fresca sin ninguna pretensión, además q sus ojos estaban incluidos en esta pues denotaban una verdadera alegría.

- Ehh australopitecus…- le respondió con una sonrisa tímida -Si tan solo hubiera sonreído así aquella noche tonto tori atama – pensó para sus adentros observando como Sanosuke leía ávidamente el prologo del libro

El castaño internamente estaba complacido, todas las veces q se había encontrado con ella habían sido catastróficas, siempre era lo mismo insultos, peleas y uno q otro golpe, obviamente por parte de ella, pero en esos momentos al verla tan calma y tranquila y sin ningún rastro de prepotencia o mal humor la chica se veía totalmente diferente. Megumi Takani desde ese momento dejo de ser aquella "belleza fría y arrogante" q Sanosuke conoció una mañana hace ya casi un mes y se convertía ahora en…¿una amiga?

- ¿Amiga?... estas loco viejo… pero si fuera así de agradable siempre, podría estar con ella toda mi vida… ¿pero q diablos piensas?… tu ya tienes… no mejor dicho nunca seria posible la chica rica y el becado irresponsable simplemente no van – pensó para asombro de el con tristeza y pesadez.

- Sagara… oye me escuchas – la voz de Megumi sonó distante

- Eh… ¿decías algo? – el chico salio de sus pensamientos sorpresivamente

- Te pregunte porque estas leyendo este libro… ingeniería no tiene nada q ver con esto – le pregunto arrugando ligeramente la frente

- Pues yo q sepa medicina tampoco – repuso relajado, ansioso por la respuesta de la chica

- Ah… pues no claro q no… es mas la medicina descarta este tipo de cosas – explico con aires de grandeza

- Entooonces…- alargo la palabra esperando alguna respuesta razonable de la futura doctora y con un gesto la incito a continuar hablando

- Es… mero interés… solo me dio curiosidad es todo…¡OYE YO PREGUNTE PRIMERO! Y aun no me respondes – lo miro fijamente

- Sanosuke sudo frió… miro a las cuatro paredes q lo rodeaban como si en algún lugar de ellas fuera a hallar la respuesta, evito los ojos inquisidores de Megumi, trago saliva cuando finalmente una idea ilumino su cabeza.

- Tengo un amigo…. –empezó

- ¿Amigo? – Megumi seguía extrañándose mas

- Si y este amigo tienes constantes sueños…. Sueños muy raros y recurrentes, ve imágenes de alguien q no conoce… son sueños profundos en los q incluso llora – el corazón de Megumi pareció detenerse y la boca se le seco, lo q le contaba en esos momentos Sanosuke era exactamente lo q le pasaba a ella – si! Por eso q me interesa el tema jejeje –rio nervioso rogando q ella se tragara aquel cuento. – yo… yo quiero ayudar a mi amigo

- De… ¿de verdad…? –pregunto impaciente - y… y ha tenido… una…una experiencia en la cual estando despierto haya visto imágenes similares a la de sus sueños – su voz se trababa con cada palabra y la verdad se sentía bastante insegura hablando de eso con el castaño, pero si había alguien mas con el mismo problema q ella, tenia q conocerlo.

- Ah… - la sospecha se asomo en el rostro de Sanosuke - ¿te refieres a experiencias vividas? pues… - estaba pensando su próxima respuesta cuando se percato de algo – espera… tu pareces muy enterada del tema – y la miro perspicazmente provocando q la chica se concentrara nuevamente en el libro

- Ya te dije q es mero interés… además solo te cuento uno de los tantos casos q he leído – mintió presurosamente mientras apuntaba en su hoja.

Sanosuke se encontraba a punto de refutar aquella respuesta q no lo convenció del todo cuando la oscuridad repentina, el grito de ella y la sensación de algo suave contra su mano lo hicieron callarse.

- Q.. ¿q paso con la luces? – dijo Megumi retirando su mano rápidamente de la de Sanosuke

- Q..rayos… ¿será un problema con la central?

- ¡Ahí no¿Q hora es? – no espero respuesta pues de inmediato busco su celular dentro de su bolso, pero un sonido hueco le indico q este había caído al suelo. – maldición…

- Nueve en punto… - escucho decir a la voz masculina acompañado de una luz fosforescente proveniente de su muñeca – sabes lo q eso significa ¿no? – mirando hacia ella aunque en ese momento lo único q podía distinguir en la oscuridad eran los brillantes ojos de Megumi

- No lo digas ni en broma Sagara… yo tengo q ir a mi casa a estudiar – se puso de pie violentamente.

- Y a mi me espera mi bebe – dijo el recogiendo sus cosas, mas no se imaginaba lo q aquellas palabras habían provocado en la joven.

- Ti…tie…¡TIENES UN BEBE! – grito escandalizada sin poder evitarlo – acaso estará casado el muy sin vergüenza o ¿es padre soltero?…no pero… si ni siquiera trabaja –su mente trabajaba a mil por hora tratando de obtener una respuesta lógica a todo

- ¡No seas tonta! Me refiero a mi grandote… - pero el silencio de la chica le hizo saber q aun no entendía – es mi perro… estoy hablando de Notaro… sino llego yo el pobre se morirá de hambre – escucho un sonoro suspiro por parte de ella y sonrió burlonamente.

- Deberías fijarte mas en las palabras q usas… - el dejo de alivio fue notorio en Megumi.

- ¿Por qué? – se acerco mas a ella ahora q los dos estaban de pie – te hubieras preocupado si yo fuera el padre de alguien… -pregunto contento estirando su cuello hacia el rostro de ella.

La chica sintió claramente el acercamiento entre sus cuerpos, retrocedió torpemente provocando q sus manos se apoyaran en la mesa a sus espaldas y se dio cuenta q tenia aun a Sanosuke delante de ella

- No es q me incumba pero si tienes un bebe… deberías ser mas responsable, maduro, con un trabajo de medio tiempo… y…y... – sintió como si le faltara aire, la respiración se le hacia mas dificultosa con cada palabra q pronunciaba.

El por su lado disfrutaba increíblemente ver lo nerviosa q estaba, la tenia prácticamente apresada solo era cuestión de inclinarse un poco mas para lograr lo q su cuerpo deseaba inconscientemente.

- ¿Tú crees q seria un buen padre? – le pregunto mientras acercaba mas su rostro al de ella

- Pues… no se… lo averiguaras el día q te conviertas en uno… - miro hacia atrás buscando una salida mas lo único q lograba era darle mas espacio a Sanosuke quien buscaba un camino directo a su boca.

- Pues yo creo q tu serás una excelente mamá… una linda y bonita mamá… - a pesar de q la oscuridad no le permitía ver el rubor de la joven, sintió la calidez q desprendieron sus mejillas.

No pudo mas como si sus manos tuvieran cera, estas se deslizaron sobre la lisa superficie de la mesa de madera y cayo hacia atrás, quedando casi echada en el mueble pues pudo sostenerse antes q su cabeza chocara contra la mesa. Sanosuke no perdió tiempo y se inclino sobre ella, con una mano se apoyo en el mueble y con la otra acaricio sus largos cabellos, aprovechando la luz procedente de la ventana aprecio la belleza de la chica. La joven parecía incapaz de articular palabras, abría y cerraba la boca sin emitir sonido alguno, sintió un ligero temblor recorrer su cuerpo al momento de chocar su mirada con la de el, aquellos ojos llenos de deseo provocaron una corriente q la paralizo por completo.

- Si… serás una buena madre Megumi– fue lo ultimo q dijo antes de acariciar las encendidas mejillas de Megumi.

- T..tt..tu no conoces lo q es el espacio personal ¿no? – y con una fuerza de quien sabe donde volteo su mejilla en un intento inútil de terminar con las caricias de el.

Sanosuke sonrió y soltó su mejilla, pero no rompió la distancia entre ellos, siguió mirándola profundamente, Megumi noto q el deseo y pasión en los ojos de el se habían ido, la mirada q ahora le dirigía el castaño era pasiva, agradable, tierna e inevitablemente encantadora, bueno al menos eso pensó hasta q el replico…

- Si de verdad me quisiera lejos –acerco su nariz a la de ella - nada te costaría darme un buen empujón e irte corriendo… no te veo desesperada porque me aleje de ti Megumi – le susurro lentamente provocando con su aliento q el corazón de ella golpeara fuertemente su pecho.

- No soy tan incivilizada como para hacer eso – dijo mientras intentaba levantarse pues la posición q se encontraba podría ser agradable mas no cómoda, pero el chico de la banda roja no se movió de donde estaba, provocando q ella lo mirara ferozmente

- Me quito si es q tu me lo pides – q complicada le hacia las cosas pensó ella apartando sus ojos de los de el, pero aun así todas aquellas sensaciones en su interior no se iban.

No era la primera vez q lo tenia tan cerca y por supuesto q no se quería alejar de el, pero se sentía como un pequeño e indefenso ratón a merced de un travieso y hambriento gato y tampoco le gustaba ser victima de nadie.

- Escúchame bi… - sus palabras se detuvieron el seguía aun tan cerca de ella q su respiración causaba un agradable cosquilleo sobre sus labios, su aliento la invitaba a mas y su olor era simplemente adictivo, trago saliva sin quitarle la vista a los tentadores y carnosos labios del muchacho.

Sin perder más tiempo Sanosuke la tomo por la cintura sentándola sobre la mesa y ella dejo sus manos resbalar quedando así recostada sobre el escritorio. El se inclino mas sobre ella, sus narices se rozaron y los labios de ella se abrieron ligeramente impacientes por el tan anhelado beso, el joven acomodo sus piernas entre las de ella, ambos ya cerraban los ojos sintiendo la mezcla de sus alientos, el latido de sus corazones mas fuerte q nunca, y el calor de sus cuerpos… se olvidaron q estaban en la biblioteca de la universidad… se olvidaron de la luz q se prendió de repente… se olvidaron de aquella viejita con lentes de carey justo frente a ellos…

- ¡SR SAGAAARA!... – el grito de la anciana provoco q ambos se separaran como resortes– ¡SI QUIEREN HACER SUS COCHINADAS VAYANSE A UN HOTEL¡¡PERO LA BIBLIOTECA ES SAGRAADA!

Megumi se reincorporo, alejando su espalda de la mesa y Sanosuke recogió la mochila del suelo, ambos estaban con los rostros sonrojados y la muchacha intentaba de recuperar todo el aire q sentía había perdido, trato de acomodar sus cabellos y con horror noto q estaba transpirando.

Los gritos de la bibliotecaria los acompañaron hasta el primer piso, y en un edificio de 4 plantas donde no hay ascensor, bajar las escaleras se hizo increíblemente penoso, pero durante el transcurso ni el ni ella dijeron palabra alguna cada uno sumergido en sus pensamientos aun sorprendidos de la atracción q se despertaban mutuamente.

- Q demonios te pasa Megumi actúas como una loca adolescente con el… Dios mío ahora q estará pensando… - estaba completamente avergonzada y buscaba en sus pensamientos algo q decir una vez q aquella viejita los dejara solos.

- Estuvimos tan cerca y esta vez iba a ser diferente…–una sonrisa se dibujo en su bronceado rostro- Maldita momia… - miro molesto a la bibliotecaria- pero q pienso… por mas q nos hubiéramos llegado a besar… yo… yo simplemente no puedo, no hasta q regrese a Kyoto…- una mirada triste apareció en su rostro.

- ¡Y ya saben¡¡Este recinto es para estudiar no para incrementar la taza de natalidad! – les dio un ultimo grito antes de alejarse de ellos luego de haber cerrado la puerta principal del edificio.

Nuevamente estaban ahí parados uno frente al otro con los rostros totalmente rojos, sin saber q decir. Ella con su mirada en el suelo y el concentrado en las ventanas del segundo piso.

- Yo… - Megumi tomo la iniciativa aun sin atreverse a mirarlo – escucha yo…

- Somos como imanes ¿no? – soltó Sanosuke buscando los ojos de la chica bajo su negro flequillo.

- ¿Eh? – cuestiono pensando q aquel comentario estaba fuera de lugar

- Siempre es lo mismo… o terminamos peleándonos o… - la miro y al encontrarse con el par de ojos marrones de ella sintió nervios – o a punto de besarnos –terminando su frase torpemente

La muchacha no respondió nada, no sabia donde rayos había quedado Megumi Takani, la valiente, la aguerrida la q podía hacer callar a cualquiera con una sola palabra, al parecer ese lado de ella se había escondido en algún recóndito lugar de su ser y solo había dejado a Megumi Takani, la tonta adolescente insegura y tímida incapaz de articular palabra u oración.

- Sabes algo creo q es tonto andar peleándonos cuando obviamente…- al escuchar aquellas palabras su corazón salto… acaso le iría declarar sus sentimientos – tu... yo..tu y..

- ¿Si?... – pregunto esperanzadoramente – Q RAYOS TENGO QUITA ESA CARA DE IDIOTA MEGUMI ¿Q QUIERES Q PIENSE¿Q TE MUERES POR EL….? – su conciencia daba gritos furiosos en su mente – bueno te guste o no esa es tu triste realidad – intervino otra voz desde algún otro lado de su conciencia

- Q q tu y yo podemos ser… - miro aquel par de ojos q en aquel momento brillaban mas q nunca – primero corta lo otro IMBECIL con ella no puedes jugar – la voz de su conciencia le corto el habla – q podemos ser amigos – dijo finalmente sintiendo q en esa frase de le iban la vida y el alma.

Fue como si hubiera llenado su estomago de piedras, un peso increíble inundo su cuerpo y sintió un nudo en la garganta.

- Cálmate… respira cálmate… por nada del mundo pierdas la compostura… no le demuestres q esto te duele… ¡AHÍ TORI ATAMA IMBECIL ENTONCES POR QUE ME QUERIAS BESAR! – pensó la morocha conteniendo la rabia– Claro amigos… me parece excelente después de todo tenemos conocidos en común y no seria justo para ellos q siempre estemos peleando

- Tienes razón –asintió lentamente - y pues… sobre lo q paso yo… - no tenia ni idea q iba a decir y la mirada indiferente de Megumi no ayudo

- Ah eso… fue una tontería no te preocupes… - hizo un ademán con su mano en señal de poca importancia –estábamos solos, luces apagadas… añoranza de nuestros años de adolescente supongo… pero te juro q no se volverá a repetir después de todo vamos a ser amigos ¿no? – poco a poco la Megumi fuerte regresaba.

Se sintió el mas idiota del mundo, pero lo q había hecho era lo mejor. No podía pretender iniciar algo con ella cuando su vida personal no estaba en orden, además quien le aseguraba q ella lo fuera a aceptar aunque la actitud de Megumi en aquel cuarto de estudio de la biblioteca decía mucho.

- Es tarde me voy, hasta luego Sagara – estaba ya dando media vuelta cuando…

- Sanosuke…- la tenia tomada por el brazo y nuevamente aquel cosquilleo y temblor se apodero de su cuerpo - llámame por mi nombre vamos a ser amigos así q para q las formalidades –se encogió de hombros para luego acomodar sus manos en los bolsillos

Megumi le dio una última mirada analizadora, para luego sonreír forzadamente y despedirse no sin antes recalcarse mentalmente aquel juramento. Pues bien si el era de aquellos q podía pasar por alto un encuentro como el q acababan de vivir, era alguien q no valía la pena, se estaba obligando a convencerse de eso. Quizás como amigo Sanosuke Sagara seria alguien mas agradable después de todo se llevaba muy bien con Kenshin y eso ya era buena referencia para la joven.

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- Ujum… si… q si papá… - repetía por enésima vez con voz cansina

- Solo me quiero asegurar q estés bien – la voz al otro lado de la línea parecía bastante mortificada – Kenshin eres mi hijo y mi deber es velar por tu bienestar

- No es un poco tarde para tu rol de padre protector… papá – un dejo de resentimiento se escapo en sus palabras.

- No me hables así Kenshin, siempre me he preocupado por ti –un ofendido Saito respondía

- Si… te preocupabas tanto q no te importaba pasar mas de un mes fuera de casa… como sea papá agradezco tu preocupación – apoyo el teléfono en su oído mientras abría la nevera – pero te repito q estoy bien… buenas noches –presiono un botón dejando a un lado el aparato.

Se sintió un poco mal por la manera en q había contestado a su padre, pero le había parecido totalmente absurdo toda aquella preocupación repentina solo porque se había ido a vivir solo. Tenia 22 años y si vivía con su papa era solo de nombre. Saito Himura un hombre de negocios q podía pasar días y días de viaje y q pensaba q con llamadas telefónicas de pocos minutos, costosos juguetes y aquella gran mansión podía recompensar su ausencia, simplemente nunca había desempeñado bien su rol de padre. Pero Kenshin ya estaba harto de todo eso, vivir en una gran casa donde los únicos habitantes permanentes eran el y su servidumbre, quería algo mas suyo y mas personal. Recién tenia una semana en su nuevo departamento y la verdad es q estaba mas q encantado.

Toda su solitaria infancia paso delante de sus ojos mientras bebía de su lata de gaseosa cuando el timbre de la puerta evito q el muchacho se enterrara aun mas en sus tristes recuerdos de cuando era niño

- ¿A esta hora? – dió una mirada al moderno reloj de su sala q marcaba las 10 y pico – ¿quien podrá ser…?- se dirigió hacia la puerta con paso tranquilo acomodando su cabello y olvidándose por completo q solo llevaba puesto los pantalones de su pijama.

Giro la perilla de la blanca puerta y lo q vio tras abrirla provoco mil y un sensaciones, sus ojos se abrieron a mas no poder y su cuerpo se paralizo.

- Por que esa cara Kenshin… ¿no te da gusto verme? – su voz apenas si lo hizo reaccionar – no seas tan seco niño ¿q no me vas a saludar? – dio un paso ingresando a su departamento – veo q alguien ha estado haciendo ejercicio ¿no? – dando una mirada al pecho descubierto del pelirrojo – Ayy no sabes como te extrañe – sin aviso previo la muchacha se lanzo a su cuello quedándose apoyada en el pecho de el

- To...¿Tomoe?– por fin sentía su cuerpo y lo único q pudo hacer fue mirar a la pelinegra encima de el.


NA: WAAIT! ESPEREEN! ESPEREEN!... (chibi leslie corriendo como lok buscando su escudo y espadas) ya ahora si (con escudo en mano y escondiendose tras de el) Dios si hay algo a lo q le tengo mas miedo a la pelicula del exorcista son a las fans furiosas de KxK les ruego no me maten hasta el proximo capitulo...aunque.. creo q ahi tb me querran matar jojojojo (un tomatazo cae sobre el escudo) AJA LO SABIA! LAS ANTI-TOMOE ESTAN AQUI! (blandiendo su espada amenazadoramente) bueno siguiendo con lo demas, asi como tienen ganas algunas de matarte con esta visita de Tomoe, espero tengan piedad de mi, despues de todo creo q no me quedo tan mal la tierna escena entre Kao y Kenshi y es q ellos dos son simplemente adorables jejeje... en cuanto a Misao y Aoshi bueno ahroa son felices comiendo perdicesal menos hasta q yo lo decida ñacañaca: AIKO ESTA PLENEANDO MALDADES ASI Q PREPARENSE! y un dato q lanzo de una vez habra una visita a Kyoto... oh yeah! y un campamento para las tres parejitas jojojojo de delito de solo pensarlo, bueno eso seria todo, como siempre agradecer los reviews q me estimulan a seguir adelante con esta historia, un beso enorme a todas mis kazuko y ESPERO SUS COMENTARIOS PLZ! T.T