IMPORTANTE
Primero...La relación Draco&Alexa, no será una relación profesor y alumna sino, una relación de profesor y ex-alumna (espero dejarme entender), por lo que Alexa ya será mayor de edad.
Segundo...Capitulo LEMON, así que para no herir suceptibilidades, mejor no entren ni lean y si eres menor de edad, estas realmente prohibido..(Espero no haberlo hecho muy grosero..Sorry)
8.-Ilusión / Desilusión..
Llovía demasiado fuerte para lo que solía llover. Las calles estaban completamente inundadas nadie en su sano juicio se atrevería a salir de su casa, mucho menos a asomar la nariz por la ventana. Según las viejas tradiciones muggles, cuando llovía demasiado como aquella noche, era porque algo malo se avecinaba...
Dos hombres encapuchados, vestidos con túnicas raídas se aparecían frente a la entrada de la familia Lupin. Ambos encogidos por el frío y en la búsqueda de algún refugio, apuraron su paso en entrar.
Con un susurro y el suave toque de su varita sobre el picaporte, uno de ellos abrió la puerta muy suavemente haciendo que esta emitiera un escalofriante crujir justo en el momento que un relámpago reventaba a lo lejos...
Una mujer no tan mayor los recibió con una sonrisa en los labios y abrazó primero a su marido y luego a su invitado.
-Que bueno que ya están de regreso dijo.- Les ayudaba a quitarse la capa.- Están cansados. Tienen frío o hambre..
-Gracias amor- le decía Remus a su linda y amada esposa. Miró a su acompañante- ¿Tú?..
-Tampoco, gracias de todos modos.
Ambos hombres tomaron asiento cerca al cálido fuego de la chimenea, mientras Grettel Lupin se empeñaba en darles algo caliente de beber. Finalmente ambos hombres accedieron.
Cuando Grettel se retiro..
-No puedo creerlo.! Estábamos tan cerca de atraparlo y por milésima se nos vuelve a escapar! MALDICIÓN!..- iba de un lado a otro caminando enojado, molesto...
-No te preocupes..Ya lo agarraremos, por el momento sólo hay que tener paciencia...
-La paciencia no es mi mejor aliada, y lo sabes de sobra Remus.
-Lo sé.- El hombre suspiró cansado y se frotó los ojos con los nudillos de sus dedos- Habrá que esperar a que nuestros hombres se sientan con fuerzas renovadas para volver a salir en busca de Goyle...
-Eso si la ministra lo permite. Ya la oíste ¿no?... Suficientes son todos los reos que hay en Azkaban, Goyle no representa peligro. Menuda Basura!... me gustaría volver a tener un intercambio de palabras con ella, haber si sigue pensando lo mismo.
-No lograras nada con la violencia, cariño- le decía Grettel, alcanzándole una tacita de chocolate, recién preparada. Le hizo una seña para que tomara asiento.
-Pero al parecer es la única manera que la gente entienda. Violencia... ó vas a negarme que para conseguir algo no es necesario emplearla.
-Pero, Harry. Tu no eres como ellos. No te conviertas como ellos- le decía la mujer muy preocupada. Le pasó una mano por la espalda. Harry cerró sus ojos y ahogo un suspiro. Mejor cambiaba de tema.
-Por cierto..¿Cómo esta Romi?- preguntó Harry. A Grettel se le dibujo una sonrisa de oreja a oreja..
-Muy bien.. y mas hermosa que nunca..
-Me gustaría verla... aunque supongo que debe estar durmiendo..
Remus también se moría de ganas de ver a su hijita. Sí, sí! Vayamos todos a verla. Si que estaba preciosa. Remus la contemplaba mientras dormía. Era tan hermosa su hija que se le caía la baba por ella. Ay! Ya se la imaginaba de grande, todo una princesa; entonces vio una larga cola de pretendientes. Frunció el seño. No quería ni imaginarse que su hija algún día tuviera que escoger a su marido y se iría de casa para hacer su vida. No! aún NO! Para eso faltaba mucho. Sí, Señor, mientras, su hija seguiría siendo su bebé. Sí...
Remus seguía mirando a su nenita, mejor dicho la estaba admirando, cuando en el cuarto contiguo se escuchó el llanto de un niño.
Grettel salió disparada de la habitación, dejando a un Harry y Remus confundidos. Ambos hombres la siguieron. Entraron a la habitación de a lado y entonces vieron que Grettel abrazaba a un pequeño niño.
Remus se acercó a ver de quien se trataba, mientras Harry se mantuvo distante, observaba todo desde la puerta.
-¿Ashton?- pronunció Remus extrañado. Que hacía su ahijado en su casa y..al parecer ¿solo?..
-Quiero ver a mi mamá- decía el pequeño..
-Ya querido. Mamá, seguro que también te quiere ver, pero ahora no puedes...
-Quiero ver a mi mamá- repitió el niño.
Desde la puerta, Harry no entendía nada, pero aquel niño..¿No era el mismo que vio el día de la fiesta en honor a Sirius? Y si se fijaba mejor... Era el mismo que Ginny protegía cuando resulto gravemente herida...
-¿Grettel¿me puedes explicar?- Pidió Remus. Su voz era ahogada, como si estuviera temiendo algo.
-Luego, Remus.. luego..
Los dos hombres salieron de la habitación, dejando a Grettel con el pequeño, ella no se movió del lado del niño hasta que este se quedara nuevamente dormido, aunque para eso tuvo que administrarle un poco de poción sin sueño.
Mientras tanto, abajo en la sala con el ambiente bastante tenso, Harry no dejaba de mirar a un preocupado Remus ¿Por qué había reaccionado así ante l presencia del niño? Bueno, sabía que se trataba de su ahijado, pero.. porque tanto nerviosismo.
Quiso saber, iba a preguntar, pero Grettel se apareció en la sala. Tenía en su rostro una expresión bastante afligida...
-Primero que nada, creo que ha llegado el momento de que tu, querido Harry te enteres de algo que hemos mantenido oculto por seguridad- dijo Grettel y Remus la miró alarmado.
-Grettel- dijo el licantropo negando suavemente con la cabeza. Harry seguía sin entender.
-Remus es necesario...
-Pero..
-Un momento..- intervino Harry- Si hay algo que tienen que decirme y se trata de mi, es mejor que me lo digan y ya!. Saben que odio los secretos..
Remus pareció considerar la propuesta de Grettel y luego... las palabras de Harry.. sí, mejor era hablar ya que había oportunidad...
-Harry- empezó a hablar Grettel- Recuerdas a la mujer que te presentamos ese día , cuando la rememoración a Sirius..
-Sí... claro que la recuerdo. Ashley, se llama y fue amiga de mis padres y de Sirius- hizo una pausa y luego mirando de Grettel a Remus, preguntó- ¿Por qué¿Qué hay con ella?
-Harry..
Grettel quiso continuar con el relato, pero se vio interrumpida por Remus..- Harry, Ashley... ella trabajo para la orden haciéndose pasar como mortifago... fue una espía en las filas de ya-sabes-quien...
-¿Una mortifago?- preguntó con incredulidad. Remus y Grettel asintieron- Ah¿Y?...
-Espera..deja que te diga mas...
-Esta bien..continua..
-Bien..verás.. - siguió Remus- Ashley.. Ashley y Sirius mantuvieron una relación en el pasado y no hace mucho, cuando El escapo de Azkaban.
Ahora sí que el morenito se quedó sin palabra. No dijo nada y espero a que Remus continuara.- Sirius cuando se monto a Buckbeak, fue en su busca y luego de encontrarla revivieron su romance y producto de ese romance nació Ashton...
Ginny salía del despacho del anciano director, cuando a la salida fue intersectada por Neville..
-Hola!- se saludaron con un beso en la mejilla como ya era costumbre..- Me gustaría que hablaramos..
-Claro Neville!. Dime..
-vamos a otro lugar.
Se mostraba serio. ¿Por qué sería?. Ya esta. Seguro y ya se enteró que Ginny ya no estaría mas como profesora en Hogwarts. Sí, seguro. Bueno, la verdad era que Ginny no quisiera seguir enseñando, le gustaba ser profesora, pero si quería terminar pronto con su carrera de auror era mejor dedicarse a ello de lleno..
-¿De que quieres hablarme?- pregunto pensando que ese era el tema a tratar..
- De nosotros..
Se encontraban en el jardín detrás del castillo. Ginny no se esperaba que Neville quisiera hablarle sobre ellos. Bueno, Ginny hace tiempo que quería hablarle sobre la situación que llevaban, pero, no se atrevía, pues no quería que Neville se sintiese mal ya que lo quería un montón...
-Neville...
-Nuestra relación no ha ido nada bien desde que empezamos y creo que.. debemos terminar..- Vaya! eso si que fue sin rodeos. Directo al grano.. Auch! Ginny pestaño varias veces, incrédula por lo que escuchaba.
Perpleja, era muy poco para decir como se sentía. Neville..¿Mandándola por un tubo¿Por qué?. Si era ella quien debía hacerlo y no él como le estaba ocurriendo..
-Neville... no sé que decir..
-Bueno..me habría gustado que te pusieras a llorar y me suplicaras que no te deje, pero sé que eso jamás se dará simplemente porque no me quieres como yo a ti..
Ginny se puso nerviosa y se frotó las manos entre sí. Sólo pudo atinar decir- Lo siento...
Suspiró cansado Neville- Esto jamás debió ser. Lo nuestro no tenía ni pies ni cabeza. Creo que nuca debí pedirle a Harry que me ayudara a conquistarte, mucho menos si... Dime Ginny... ¿Tú aún quieres a Harry como cuando tenías dieciséis?
-¿Por qué me lo preguntas?..
-Es sólo una pregunta..Contéstame...
Por alguna extraña razón, Ginny quería ser sincera con Neville aunque sea por una vez..- Sí!...
-¿ Y no se lo has dicho?- Ginny estaba mucho mas sorprendida. ¿ No se suponía que Neville tal vez se ponga mal por esa confesión y sin embargo, se mostraba bastante tranquilo y hasta feliz?
-No!
-¿Y eso por qué?
-Porque estoy segura de que él no siente lo mismo por mi. El sólo me ve como una amiga ó mejor dicho...como a su hermana.
Los dos se quedaron en silencio, sin ánimos de seguir pronunciando palabra.
-Es un tonto por no fijarse en lo que tiene en frente. Si eres grandiosa Ginny!.
-Gracias. Creo que eres el único que lo ha notado.
-Me gustaría no verte triste, pero no sé como ayudarte..
-No tienes que hacer nada Neville. Creo que con esto es suficiente..
-Sé que terminaré por arrepentirme después que te marches, pero creo que era lo justo..
-Otra vez, Neville...perdóname!
-No hay nada que perdonar. Sólo, por favor, prométeme una cosa..
-¿Cuál?
-Que intentaras ser feliz... con Harry.
-Neville..
-Promete que le dirás lo que sientes por él..
-Yo..-Neville apretó sus manos con las de Ginny. Era un gesto casi de suplica. Ginny no podía rehusarse a ser feliz..-Te lo prometo.
La tarde se aleja, el cielo esta gris. La noche aparece y Ronald Weasley sigue deambulando por las calles como si fuera un zombi, siendo guiado sólo por su instinto de supervivencia...
Aún no podía creer que Hermione ya no estuviera mas a su lado. ¿Por qué se tuvo que ir¿Por qué no se quedó con él¿Por qué¿Por qué?
Esa respuesta ya la sabía y por eso lloraba en silencio, ahogándose en sus penas. El había sido el causante de todo, porque por querer tenerlo todo dejo ir lo mas preciado de su vida.
Se metió a una cantina y buscó entre sus ropas dinero para pagarse una botella de whisky, no encontró nada, ni siquiera el anillo de compromiso que hace meses atrás le había comprado a Hermione, pero por su egoísmo no se lo dio, porque pensó una vez mas que el matrimonio no estaba hecho para él.
Sin dinero, sin nada decidió regresarse mejor a casa. A una casa seguramente vacía sin que nadie le espere, sin nadie que al verlo llegar le diera un abrazo o que al acariciar le diera mas vida al fuego que había en él..
-Hermione..- pensó. Lo peor e todo es que no sabía si algún día la llegaría a olvidar.
Se quedó en silencio en la oscura sala de su departamento, observando cada rincón, cada espacio que vivió y disfruto frente a Hermione. Unas lagrimas rodaron su mejilla y de la rabia y la impotencia que sentía, pateo con furia una silla estrellándola contra la pared.
Nuevamente todo en silencio, sólo su respiración se podía escuchar. Se sentó en otra silla que encontró y hundió su cabeza entre sus brazos aferrados al respaldo. Cerró los ojos y convocó una cerveza. Miró su botella y observó el liquido que había dentro. Ni siquiera ganas de eso tenía. Arrojó la botella con todo y su contenido esperando escuchar que este se quebrara en mil pedazos pero, pasado unos segundos se dio cuenta que no hubo sonido en la habitación... Giró su rostro. Alguien estaba frente a él...
-Her..mio..ne- dijo sin creer lo que estaba viendo.
Pero si era ella. Aunque no lo creyera. Hermione no se había ido. Ella, luego de subir al avión, cuando este estuvo a punto de despegar, una aeromoza de la aerolínea se le acercó para darle un encargo del joven pelirrojo que hace un buen rato había estado haciendo disturbio en el hall del aeropuerto.
Hermione no quiso ni mirar, pero la curiosidad que hay en toda chica la llevo a abrir el pequeño cofre franelado en azul. Se llevo una mano en la boca al descubrir que se trataba de un anillo de compromiso. Precioso. Muy sencillo pero realmente para ella precioso. Todo de oro y los brillantes que lo rodeaban..parecía el de un dueño. No había descripción...
Por eso ella regreso. Se bajo del avión y tomo un taxi que la llevara de regreso a casa. Que importaba todo lo que había sufrido si en realidad en ese momento se sentía feliz, además Ron ya le había pedido perdón y hasta se había humillado delante de gente desconocida.
Lo había estado esperando. Casi toda la tarde y cuando por fin se apareció, el corazón se le estrujo al ver a su pelirrojo tan deprimido, tan mal. Quiso acercársele pero, se espero un momento antes de hacerlo y cuando vio la botella que volaba en dirección a ella con un hábil movimiento de su varita detuvo el objeto. Y ahora él, en aquel momento se encontraba frente a ella mirándola desconcertado. sobandose los ojos con los nudillos de sus dedos, queriendo no creer que se trataba de un sueño.
Pero, Merlín! Sólo verla parada frente a él desprendiendo aquel aroma que tanto le fascinaba, que lo volvía loco..era incapaz de diferenciar un sueño de la realidad.
Hermione, claramente entendiendo sus dudas se acercó a él y cogió su rostro con ambas manos hasta atraerlo hacia ella, logrando juntar sus frentes. Rodeo su cuello con sus brazos y luego le dio un suave beso en los labios. Al separarse escasamente casi rozándole los labios le dijo..
-Realmente soy yo. No me fui..
Seguidamente se separó un poquito de él y le mostró su mano derecha, en donde un precioso anillo de oro reposaba elegantemente en uno de sus dedos.
Asombrado, dudoso y asustado, pasó de mirar a Hermione al anillo varias veces antes de arriesgarse a sonreír ya estrecharla entre sus brazos, aún con el temor de que en cualquier momento se evaporara en su boca, en su abrazo, pero nada pasaba y ella seguí ahí sonriéndole y dejándose besar desmedidamente.
Ron apurado y nervioso se deshizo de todo lo que pudiera opacar ese momento. Dejo la mesa de su comedor cubierta solo con un mantel y a hermione encima, desnuda y gimiendo, pronunciando su nombre y disfrutando del placer infinito que Ron le provocaba al masajear con su lengua su intimidad.
Después del orgasmo que hermione sufrio, se permitieron dar un descanzo, pero luego Ron nuevamente comenzó a besarla en la boca y después, poco a poco fue bajando hasta llegar a su aboltado abdomen. Se miraron a los ojos y Ron, con todo el amor y la ternura que nacía en él, besaba con veneración y repeto el vientre e la chica, donde su futuro hijo reposaba...
Hermione emocionada, derramo lagrimas de felicidad y Ron que no le gustaba verla llorar, la abrazó fuerte.
Mas tranquila y con renovadas energías, Hermione cogió la mano de Ron de Ron y lo condujo a la habitación. Se besaron en la boca y luego, Hermione subio a la cama, acomodandose en medio de esta y abriendo sus piernas para permitirle a Ron acomodarse en ella.
Hermione gimio conintenso placer y Ron dio un fuerte suspiro al momento que sus sexos se conectaron.
Con un poco de temor, Ron comenzó a moverse suavemente en el interior de Hermione, a entrar y salir con mucho cuidado para no dañar a ella ni a su bebé; sin embargo, aquel temor se fue desvaneciendo a la medida qie ella empezabaa moverse al ritmo de él y.. hasta mas rápido. Lo besó y mirandolo a los ojos, le dio la confianza que el necesitaba.
Se amaban. Se hacían el amor como dos irracionales. Los dos sentados en la cama, apretandose con fuerza, rozando sus labios. Se Miraban a los ojos complices de un gran secreto. El momento estaba cerca..
Harry no supo como reaccionar a esa noticia. Oséa¿qué Sirius tenía un hijo! Ó es que no había escuchado bien... Por otro lado, Remus Y Grettel intercambiaban miradas de pánico al no escuchar palabra de boca de Harry...
-Harry..
-¿Cómo¿En que momento¿Por qué no me lo dijeron?
-Calma..calma.. Una pregunta a la vez- decía Remus y Harry le lanzó una mirada asesina que al licántropo le hizo tragar en seco..
-No estoy jugando, Remus..
-Sí- sólo dijo el hombre..
-Quiero que me digan todo. Absolutamente todo.
-Esta bien..- suspiro agotado- Ashley fue compañera nuestra en Hogwart. No era del grupo, jamás la consideramos así, pero su terminación, su belleza, su arrogancia, armas con la que supo combatir a Sirius, terminó por flecharlo.- hizo una pausa y retrocedió en el tiempo – En fin... Sirius cayó como tonto y claro ella también, aunque le costo al pobre de Sirius.- rió- al terminar Hogwarts, Sirius le propuso matrimonio, ella acepto; sin embargo, una idea loca de Dumbledore hizo que sus planes de matrimonio quedaran zanjados- hizo una nueva pausa.- Ashley pertenecía a una familia de sangres puras, una muy antigua y poderosa como la de los Black.- Miró a Harry, este a su ves lo veía con atención- Ashley se hizo mortifago y trabajo como espía de la orden ¿Por qué ella? La verdad desde siempre ella aborrecía a los magos de padres muggles, como en el caso de tu madre, pero ella fue cambiando gracias a Sirius y a Grettel y a tus padres, pero sobre todo gracias a Sirius. Nadie sospecharía de ella pero algo falló. No me explico que. Nunca nos llegamos a enterar como fue que Ashley fue descubierta. Lo cierto fue que tuvo que huir. Por poco y la matan. Se escondió con Sirius y..Bueno cuando paso lo de tus padres y Sirius, ella desapareció de nuestras vidas al igual que Grettel- Ella que estaba a su lado lo miraba y se cogían de la mano...
-No supinos nada de ella hasta que Sirius escapo de Azkaban. El si sabía donde estaba ¿Como? No lo sabemos, Pero la fue a buscar y allí... ellos retomaron lo que dejaron pendiente. No se casaron, pues.. porque si no los agarraban y ya te imaginas lo que hubiese ocurrido- seguía Remus con la historia- Otra vez Sirius tuvo que dejarla, pero con la promesa de volverse a ver.. ¿Recuerdas la época navideña de quinto año?- Harry asintió, lo recordaba perfectamente, Sirius estaba muy feliz.. ahora entendía porqué. No sólo era por él, también por Ashley..
-Y bueno ya te imaginaras..que Ashton nació de esa relación..
Guardaron silencio por algunos momentos. Harry estaba feliz, por un lado porque había algo de Sirius aún en esta vida y por otro lado estaba enojado porque le ocultaron una verdad que él debía de saber desde un inicio.¿Por qué no se lo dijeron, su respuesta fue contestada de inmediato.
Por seguridad. Resulta que como, Ashton es hijo de Sirius y de Ashley, descendientes de una gran familia de linaje limpio, entonces los mortifagos pensaron en que seria un magnifico representante, un verdadero Señor Tenebroso. ¿Cómo se enteraron los mortifagos de la existencia de Ashton?. Por el tapete famililar. No por el de la mansión de los Black, sino por el tapete de la familia de Ashley Képler.
Al principio nadie le dio importancia pero, una vez muerto Voldemort quisieron resurgir con un nuevo rey y ese por ser descendiente de familia tan negra, lo escogieron ¿Por qué no a Malfoy?. El ya había renegado de lo suyos y tampoco a nadie mas como a Goyle o Zabini o Parkinson, no, ellos no eran los mas indicados. Si había que corromper a alguien, debía ser un ser puro.
-¿Por eso es que Ashley andaba con ese auror?- preguntaba Harry recordando el día que se la presentaron.
-Sí...- le contestó Remus- El era uno de sus custodios, pertenecía a la orden, pero..- se detuvo y miró a Grettel- Me puedes explicar¿qué hace Ashton aquí?..
-Esa es otra historia Remus..- dijo Grettel con pesadez mirando a ambos hombres.
-Queremos saberlo.- dijo Remus- ¿Qué ha pasado?
Suspiró con cansancio cerrando los ojos momentáneamente- El día del ataque, Ashley no se fue directamente del campus, se quedó paseando con Ashton y ahí..pues le compro un perro y al salir de la tienda paso todo eso. La atacaron y el auror que la cuidaba murió pero, ella...
-No esta muerta ¿verdad?- preguntó alarmado Harry..
-Gracias a Merlín aún no pero..
-¿Pero?- insistieron los hombres
-Esta muy mal y el sanador no le da mucha probabilidades.
-Mierda!- renegó Harry de su suerte. Grettel y Remus se quedaron sin habla ante la reacción de Harry- ¡Algo se debe hacer!
-Parece que nada Harry.. ellos, ellos creen que no se puede salvar.- la mujer comenzó a sollozar..
-Algo se debe hacer- repitió el chico en un susurro.- Ashton no se puede quedar sin padres...
Bastante enojada estaba Alexa cuando su padre se negó rotundamente a su relación con Draco. Ella odiándolo decidió que lo mejor era irse de aquella casa, sin importarle las suplicas de su madre. Ya luego hablaría con ella, después de todo su madre sabía desde hace mucho la relación de ella y de Draco y por lo tanto estaba de acuerdo, pero su padre, ese ser tan despreciable que cree que por tener dinero podía manejarla a su antojo diciéndole: si te vas, te desheredo. Y a ella que!. No le importaba su dinero, tenía manos y pies para poder trabajar y desenvolverse debidamente, sobre todo si se trataba de su mundo.
-¿Estas segura de esto?- le preguntaba Draco. Vivían juntos desde hace dos días y desde hace dos días el siempre le preguntaba lo mismo.
-Muy segura.- le miraba a los ojos- Y por favor. Ya no me sigas diciendo lo mismo..
-Es que solo quiero tu bien. Y me parece que estando conmigo...
-Shh! No digas nada. Ya no lo hagas por favor. No me hagas dudar de esto que siento por ti.- le daba un beso en los labios..
Estaban en la sala del departamento del joven Malfoy, frente a la chimenea, sobre la alfombra que habían gozado instantes atrás.
Ella vestía una camisa de su novio y del chico que estaba segura toda la vida amaría. Desde la primera vez en Hogwarts se deslumbró con él y después que el le salvara la vida en la guerra contra Voldemort, supo que no era sólo una ilusión su enamoramiento por él, supo que era mucho mas, era amor..
Algo parecido le paso a Draco, con la diferencia que al principio él la aborrecía por ser hija de muggles, pero después que ella le robara un beso y que él decidiera aprovecharse de esa situación para hacer saber su posición de quien manda, terminó por enamorarse de ella, de su candidez, de su dulzura; siendo ambos (aún) alumnos y luego esta relación siguió durando cuando él se convirtió en profesor. Hasta el curso anterior que ella terminó y al que ya podían decir que tenían una relación.
Pero el padre de Alexa al enterarse de esto, puso el grito en el cielo. Jamás iba a permitir que su hija se metiera con un profesor, mucho menos que sea mayor que ella. Pero Alexa no iba a permitir que nada enturbiara su relación, por eso se fue de su casa y busco refugió en Draco que la recibió con los brazos abiertos.
-Tengo que buscar un trabajo. No quiero ser una carga para ti.- le decía ella sirviéndole un poco de café.
-Y no lo eres- le daba un beso en la frente- Tengo el dinero suficiente como para que no trabajemos el resto de nuestras vidas.
La joven iba a replicar, cuando Draco actuaba rápidamente sellando la boca femenina con un profundo beso que comenzaba a tomar un rumbo mas intimo. Sin embargo, el llamado de la puerta los separó y Draco maldiciendo mil veces la intromisión fue a atender. Ginny Weasley estaba en la puerta de su casa.
-¿Qué quieres?- dijo odiándola
-Vengo a buscar a Alexa ¿Esta?- dijo entrando a la casa y mirando en torno- Buen gusto..- le sonrió al rubio y este le siguió odiando.- Fui a buscarla a su casa pero, su madre me dijo que estaba viviendo aquí..
-Para que la quieres.
-Necesito hablar con ella.
-¿Sobre que?
-Ese es un asunto que sólo nos compete a las dos.- dijo de mala gana. Draco ya iba a decirle una cosa bien fea, cuando Alexa asomó sus linda narices por la puerta. Así que Draquito tubo que irse a su habitación.
Un rato después, Alexa entraba y muy emocionada se colgaba del cuello del rubio que para nada estaba feliz si no refunfuñando.
-¿Qué quería la insípida de Weasley?
-¡No le digas así!- protestó la joven. Ella también se enojaba. Ya no le iba a hablar. Ninguno cruzó palabra en los próximos diez minutos, hasta que Draco se rindió y preguntó de buena manera- ¿Qué quería Weasley?- pero eso no le bastó para tratar de convencer a Alex (como le decía de cariño, sólo en la intimidad), para ganarse aunque sea una mirada.
Tubo que ser meloso, algo que no era del agrado del chico, pero por ella todo, entonces fue así que la llegó a convencer.
-Ya tengo trabajo!
-¿Que?- no entendía el rubio
-La profesora, digo, Ginny vino a ofrecerme su vacante como maestra en Runas Antiguas..- grito emocionada y Draco estaba algo confundido. No entendía el niño.- Se quiere dedicar a su carrera de auror de lleno y pues como quiere graduarse este año si sigue en Hogwarts no podrás estudiar y trabajar en dos lugares a la vez...
Ahora sí que el rubio comprendía. Okay! Estaba feliz porque tendría a Alexa cerca. Y todo gracias a Weasley.
Ya era mas de las diez de la noche cuando Ginny llegó a su departamento. Estaba bastante cansada después de una larga jornada. Había sido un día bastante pesado y lo que se merecía era un buen descanso pero, sólo dio algunos pasos cuando noto que en el recibidor había un equipaje. Eran las maletas de Hermione.
Ginny comenzó a gritar de felicidad y a dar saltitos por toda el departamento, muy emocionada como si fuera una niña.
"Genial! Si Hermione no fue entonces debe de estar con Ron"- pensó y cayó en la cuenta. No quiso ni imaginarse lo que debían estar haciendo- "Espero que no sea un tonto y sepa aprovechar esta nueva (y supongo) última oportunidad"- volvió a pensar mientras se relajaba y decidía darse un rico baño de agua caliente.
Mientras se desvestía pensaba en lo problemáticos que son sus hermanos. Primero Bill: Ese niño si que estaba loco porque andaba diciendo que el matrimonio no era para él, por eso que cuando Fleur le pidió formalizar la relación y entrar al compromiso, este huyó diciéndole que necesitaban darse un tiempo, pero la verdad era que no quería saber nada con el matri-suicidio. Por otro lado estaba Charlie, que según él, no era necesario casarse para tener una relación formal y procrear familia. Los gemelos! Mejor ni hablar de ellos: Según ellos aún les quedaba mucho por vivir. En cuanto a Ron, Ginny pensaba que era el mas idiota de todos al pensar siempre primero en él y luego en los demás! Ja! Pero casi pierde, ahora tenía un nueva oportunidad que no debía desaprovechar. El único que tenía una vida tranquila y feliz (que daba envidia) era Percy. Vivía con su eterna enamorada Penélope y tenían trillizas encantadoras que ya empezaban a romper corazones. Percy sólo esperaba que el próximo sea un niño, que porque las niñas le daban dolor de cabeza. (No es verdad, las niñas somos encantadoras- pensó la pelirroja). Aún así, Ginny le tenía mucha envidia. Ya quisiera tener al amor de su vida junto a ella y viviendo una feliz vida de casada con mucho pelirrojos o pelinegros.
Cerró sus ojos por unos instantes mientras el agua caía sobre su piel. Harry! Otra vez pensando en él. Pero no era cualquier pensamiento. Este era un pensamiento loco, digamos pervertido. Sí, esa sería la palabra para describir el pensamiento de la pelirroja hacia el morenito...
Ellos dos metidos en ese pequeño cubículo...Ella jabonándole los pectorales la espalda y u poquito mas abajo...
-Aish, No¿Qué cochinadas estoy pensando?- se dijo con las mejillas sonrojadas. Sacudió su cabeza para despejarse, pero una nueva imagen se le vino a la mente..
Harry besándola furiosamente mientras deslizaba el jabón por la piel humeda, por zonas bastante intimas y luego zas! Uy! Se le cayo el jabón al morenito..Ginny recógelo! .
-Arg! Que cochina! No debería estar pensando en esas cosas!. Eres niña mala, Ginny. Muy mala...- se dijo saliendo de la ducha.
Se hizo un moño desordenado en la cabeza. Se colocó una braga y luego una blusa de tirantes en algodón bastante ceñido. Salió de su habitación para servirse un vaso de leche cuando noto que intentaban entrar al departamento.
Por un momento creyó que se trataba de Hermione pero, se quitó esa idea de la cabeza, porque seguro y se la debía estar pasando muy bien, así que la única probabilidad era de que se tratase de intrusos.
Bajó la intensidad de las luces y se colocó detrás de la puerta empuñando fuertemente su varita. La puerta se abrió entonces ella grito Reducto, Un rayo violeta salió de su varita rozando al intruso que logro fácilmente evadir el hechizo escondiéndose detrás de un sofá. Ginny se acercó cautelosamente..
-Si no sale de ahí, le juro que le irá muy mal.
El hombre que escondía su rostro bajo la capucha de su capa, sonrió divertido. Jugaría un rato con ella. Se lanzó un hechizo a sí mismo para que la capucha no se le moviera y luego un hechizo silenciador alrededor del departamento, para que nada de lo que pase ahí se escuchara fuera de esa habitación.
-Vaya, pero si se trata de una ni.. ña...- se le quedó mirando de pies a cabeza por lo guapa que estaba, porque no tenía nada de niña mostrando lo que mostraba.
-¡Que miras!- chilló Ginny ofendida y muy enojada- ¡Alakazan!- le lanzó un hechizo hipnotizante, pero otra vez, el hombre encapuchado esquivaba con agilidad el ataque de la pelirroja, pero por poco y lo coge, claro! Si tan sólo dejara de mirar lo que no debe.
-Uf! Estuvo cerca- susurro para sí aquel individuo.
-¿Qué quiere¿Qué es lo que busca?
Retornando a la batalla el hombre volvió a sonreír con sorna –Sólo divertirme..
-Seré un juguete ¿acaso?. Fuera de aquí o si no..
-¿Que¿Me vas a hechizar?- seguía burlándose de ella- Si eres mujer, no tienes opción contra mi.
Con el orgullo herido, cortado en mil rodajitas, Ginny apretó fuerte su varita y empezó a lanzar adiestra y siniestra todos los hechizos y maleficios que se sabía. Era muy buena en el duelo. Excelente contrincante- pensaba el hombre, pero no era suficiente para vencerlo tratándose de quien se trataba.
Hechizos iban y venían destruyendo todo a su paso y el hombre pensó que ya era suficiente. No pudo negar que le costo desarmar a Ginny, pero fue entretenido mientras lo intentaba. Una vez Ginny desprovista de su única arma, maldijo por lo bajo. Se sintió fatal, pensó que todo iba a acabar ahí, aún así jamás bajo la mirada en todo momento se quedó en alerta permanente buscando el momento apropiado para poder defenderse con lo que tuviera al alcance..
-¿Piensa matarme?- preguntó con arrogancia y burla.
-¿Qué crees que debería hacer? o¿Qué quieres que te haga?- le dijo como si fuera la última Coca Cola del desierto, pero aún así ella no se amedrento y miró con odio al intruso, ese.
-Esto te va a costar muy caro..- le dijo Ginny amenazante.
-¿Así, no veo como.. se acercó a ella con malas intenciones, pero la verdad es que quería darle una sorpresa descubriendo su rostro y que todo se trataba de una broma; Sin embargo, ni tiempo a nada tuvo ya que, su vista se nublo y miles de estrellitas comenzaron a formar alrededor de su cabeza.
Se le acabó el juego, el dolor que sentía era intenso. Había olvidado por completo que Ginny era muy buena en defensa muggle y ahora, ahora sufría las consecuencias. ¿Por qué¿Por qué a él?. No se merecía recibir ese rodillazo en su "cosita". Que mala era su amiga .
-Si por el hecho de ser mujer, me crees inferior a ti, déjame decirte que estas muy equivocado.
El hombre trataba de hablarle de decir algo, pero con las rejustas de su boca sólo salía gemidos de dolor. Se fijo como la chica pelirroja recogía su varita y lo apuntaba amenazándole con lanzarle un nuevo hechizo cuando no supo de donde tuvo las fuerzas necesarias para hablar.
-No..no, por favor espera- su voz era poco audible- Por favor, ya no sigas... Ginny, yo...soy Harry.
-¿Que?- preguntó confundida la joven.
-Que soy Harry..- el pobre hacía un gran esfuerzo para hablar.
-¿Harry?- preguntó atontada. No creyéndole
-Sí..
Ante la afirmación, Ginny por poco y se lanza contra él pero todavía tenía muchas dudas. Por ejemplo, no se explicaba que su mejor amigo la mirara de manera pervertida. El no era así con ella (al menos no, que se haya dado cuenta) y por qué la atacó. No. Mejor no confiarse..
-¿Cómo puedo estar segura que eres tu y no otro?
A penas y el joven tuvo fuerzas para descubrirse el rostro. Ginny abrió la boca estúpidamente sin creerse lo que estaba viendo pero¿y si se trataba de una vil mentira y el que estaba ahí no era Harry si no otro que tomando poción multijugos se hacía pasar por él?
-Créeme... soy yo- decía el chico sintiéndose cada poco mejor..
-No sé.. no puedo estar segura..- Ginny dudaba y Harry comenzaba a desesperarse.
-Pregúntame lo que quieras- dijo incorporándose del piso mientras se recargaba en el respaldo del sofá.
Ginny pareció pensárselo dos veces (de verdad quería creer de que se tratase de Harry) así que preguntó-¿Por qué no me gusta los hospitales?
-No sé. Nunca me lo has dicho- decía el morenito con el ceño fruncido. Su voz comenzaba a ser normal y el estado de su cuerpo también.
Ginny no le dijo nada y de frente como si fuera ametralladora le preguntó- ¿Cuál es mi película favorita?.
-Eh... tienes un montón, pero la que mas te gusta es la trilogía de The Lord of the Ring- dijo triunfante al ver el rostro sorprendido de la joven..
-Y de películas hindú- tenía que estar bien segura.
-Oh, por favor!.. esto es ridículo!-intentó acercarse a Ginny, pero ella le apuntó con la varita directo al rostro..
-¡Dilo!- era una orden..
Con una mueca de fastidio dijo- Kuch Kuch Hota Hai, el primer amor..
-Como se llama los personajes y de que trata..
-Ginny!- protestó
-Dilo- repitió la orden..
-Anjaly y Rahúl; dos grandes amigos que se enamoran sin saberlo pero, Rahúl se fija en otra chica de la que supuestamente esta enamorado y pierde al amor de su vida que es Anjaly...
-Sí!- grito Ginny emocionadísima. Con una sonrisota de oreja a oreja. Se abrazó al cuello del morenito y se subió a su cintura. Harry perdió el equilibrio y para no caer al piso hizo mil maniobras para aterrizar en el sofá con Ginny encima. Un momento..¿Ginny encima?
La risa de Ginny cesó al sentir como la respiración de Harry comenzaba a agitarse y sentir las manos de él sobre sus caderas apretándola contra su cuerpo.
Desconcertada, nerviosa, asustada, Ginny quiso separarse de él, pero algo mucho mas fuerte que su sentido común, que sus ganas de huir, le obligo a dejarse envolver en una abrasante sensación de calor, que comenzaba en el estómago y terminaba por extenderse por todo su cuerpo.
Al rato, se encontraba sumergida en un mar de caricias, sintiendo como las manos de Harry recorrían su cuerpo sobre su ropa, como su lengua humedecía su garganta, sus hombros y más, provocando que ella suspirara y que diera pequeños gemidos ahogados.
Harry ni siquiera supo en que momento se quedó con el torax descubierto, pero lo que si sabía, era que sentir las pequeñas y tibias manos de Ginny recorrer sus pectorales, la espalda y luego acariciando su nuca.. llegando a tocar sin saberlo aquella zona erógena, lo estaba volviendo loco y deseoso por tenerla, hacerla suya; sin embargo, en su arrebato llevado por la locura y el deseo por ella, cometió una indiscreción que bien pudo tener un final hermoso, si no lo negaba..
Embargada por un emoción que no sabía como explicar, Ginny no estaba muy segura de lo que había escuchado. Realmente, Harry le había dicho ¿"te amo"?.
No estaba sorda ni tampoco alucinada como para escuchar mal, pero la expresión del rostro del morenito la confundía y necesitaba saber... volver a escuchar: te amo; Sin embargo, Harry, con la mirada perdida, respirando con dificultad se decía mentalmente a sí mismo "imbecil".
Estaba asustado. Temía lo peor, miró a Ginny y vio su expresión desconcertada y confundida. Creyó que si no hacía algo y pronto para arreglar las cosas, terminaría por perder la amistad de Ginny y a ella..
-Harry, tu..- estaba desconcertada, pálida ¿Qué había pasado?- tu.. me dijiste..
-Perdóname Ginny- le interrumpía.– Yo no..
-¿Por qué me pides perdón?- Estaba temblando, ella también quería gritarle que lo quería. Su corazón palpitaba mas de lo normal. Había llegado el momento que deseaba gritar a los cuatro vientos todo lo que sentía por él, pero antes debía estar segura de lo que escucho no fue una locura..- Si tu me dijiste que.. me amas..
-Lo siento, fue...fue por el momento- Mentira! No es verdad ¿Por qué se lastimaba así?
-¿Por el momento¿Qué quieres decir con eso?
-Yo... mira, no se como decirlo, pero no lo dije con mala intención- No quería perder la amistad de Ginny por lo que se tenía que inventar cualquier cosa que lo saque de ese apuro.- Perdí la cabeza. No supe lo que hacía, mucho menos lo que decía. Te confundí, entiende yo...yo hace tiempo que estoy sólo y al tenerte tan..tan cerca yo..¡esto no debe estar pasando!- gritó caminando de un lado a otro viendo el rostro enrojecido de su amiga, las muecas que hacía para no llorar- Ginny..tu y yo somos amigos y debes entender..
-No quiero entender..no me pidas que entienda..¿Qué te crees que soy¿Un juguete al que puedes usar y desechar cuando se te antoje porque sólo soy tu amiga..?..
-No, Ginny. No quise decir eso.. Pero nuestra amistad..
-¡Amistad¡Amistad¿dices!..¿Qué hay con nuestra amistad¿Qué clase de amistad tenemos, si por poco...si por poco- no sabía como continuar. Su voz se volvió un susurro y él no pudo escuchar cuando ella decía- casi hacemos el amor- Se estaba ahogando en su propio llanto. Comenzaba a odiarlo. Harry no entendiendo se acercó a ella, pensó que tal vez si le decía que lo olvidaran porque era un asunto sin importancia y que siguieran tan amigos como siempre, se le pasaría el enojo, pero fue peor. Ginny quiso matarlo..
-¿Por qué me haces esto¿Por qué me dañas de esta manera¿Es que no te das cuenta?
-¿Cuenta de que?..Gin... Yo no te quiero hacer daño. Tu eres muy importante para mi.. Eres mi mejor amiga, eres como mi hermana..
Esa fue la gota que colmo el vaso. Ginny ya estaba harta de escuchar siempre lo mismo: Te quiero porque eres mi mejor amiga, te quiero porque eres como mi hermana. ¡Al diablo con eso! Ahora Ginny le iba a decir un buen par de cosas que acabaría con toda esa farsa de una vez por todas.
-¡Yo no quiero ser tu mejor amiga!- gritó furiosa la pelirroja. – No me interesa serlo. Es mas.. nunca me ha interesado tu amistad..
Ahora era Harry el desconcertado, el herido. A cada palabra pronunciada por Ginny sentía como si le clavaran una daga en el corazón.
-¿Qué dices?
-Eso. Que no me interesa tu amistad.. y sabes por qué.- hizo una pausa. Necesitaba sacar fuerza y valor para lo que iba a decir- Hace un rato..en ese sofá- dijo señalando el bendito sofá rojo- Estuve a punto de entregarme a ti en cuerpo y alma .. Y sabes por qué..
Harry se quedó callado y de súbito se puso nervioso.
- Oh, Ginny!..No me digas que tu...
-Desde que te conozco siempre he estado enamorada de ti y.. y hasta hoy sigo estándolo como una estúpida- hizo una pausa y miró el desencajado rostro moreno. Era verlo así. De echo que la amistad que tenían se fue por la borda, todo había acabado..- Te amo..
"Te amo", resonaba una y otra vez en la cabecita del moreno que estaba confundido, mas de lo que se podría estar normalmente. Siempre se imagino escuchar aquella frase salir de los labios de Ginny, soñaba cada noche con escuchar aquella frase salir de ella a la vez que la amaba; pero escucharle ahí y de esa manera cuando le estaba negando a ella el derecho de saber que su amor era correspondido... Jamás se lo esperó y se sintió un verdadero imbécil, el mas estúpido de los magos que hay sobre la tierra..
La buscó con la mirada; en realidad buscaba sus ojos, pero ella no estaba. No había nadie en el lugar que ocupaba Ginny, ni una señal..sólo el aroma de su perfume..
-Ginny- la llamó buscándola en torno- Ginny, yo..- La buscó en la cocina, en el baño, en la terracita. Nada. Fue hasta el dormitorio; la puerta estaba cerrada.- Ginny- llamó tocando la puerta y ella no le respondía- Abre por favor.. necesito hablarte... necesito que sepas que yo..-se quedó en silenció al escuchar al otro lado de la maldita puerta el sollozo ahogado de la joven- Ginny..- insistió y sin ganas de nada, sintiéndose pésimo consigo mismo, se recargó en la pared y resbaló hasta caer al piso, maldiciendo y lamentando su mala suerte..
-Yo también te amo..
Asú! Y yo que pensé que este capitulo sería mucho mas largo, pero al final decidí cortar algunas cosas y dejarlo para el siguiente. Je! . En fin...
He demorado mucho en actualizar, pero créanme que no ha sido por gusto propio, he tenido mucho que hacer y ni tiempo he tenido para dedicarme a mis fics. (sobre todo al de Ellos&Ellas)..
Quiero pedirles disculpas a todos los que leen este fic y agradecer a los que me han dejado review:
natty¿Te gusto¿de verdad, pues me alegro y me emociona que te guste este fisquito. Espero que este nuevo capi también te guste y Calma, calma... no te me desesperes...
Ley-Ara: Un RHr.. tienes razón al decir que este capitulo fue mas un RHr, pero tenía que ser así, ya que como este fic esta llegando a su final, debía preocuparme a resolver las cosas entre RHr. .. Ahora solo me queda arreglar as cosas entre HG, en fin..jejeje en cuanto a las escenas de acción, ni te la creas.. esta me salio de pura suerte..
Celia: No te preocupes.. Ya viste que no se fue..ahí se quedo con su pelirrojo.
Lady Black: Por mas tonto que sea e idiota, Roncito tuvo su merecido. Ahora debe aprovechar su oportunidad.
Aseneth: Hola¿cómo has estado? Bien espero. Hace siglos que no conversamos.. jjeje espero verte prontito por el msn. Gracias por tu review y... por todo el apoyo que me brindas. Sé que aunque no me dejes review estas ahí pendiente de lo que escribo y creeme que me siento muy orgullosa y honrada por ti, sobre todo porque se trata de ti (principalmente). Bien, pasando a lo del fic. Si pues, ya era tiempo de que Ron deje de pensar en sí mismo y piense un poquito mas en los demas. En el siguiente capitulo lo veras metido en mil enredos que.. No mejor te dejo con la espinita, porque si te digo, que chiste tiene ¿verdad?. En cuanto a Harricito. Ya lo has visto..ahora el que esta a punto de perder es él..
RociRadcliffe: Me alegra que te haya gustado. Espero que este también sea de tu agrado..
natty: Bueno, pero no te enojes. Y sí tienes razón he demorado demasiado...
Trataré de actualizar pronto, pero para eso necesito motivación (mucho mas de lo que piensan porque este fic esta llegando a su final), así que ya saben.. Dejen review. Hagan clic en GO
Es todo. Muchos Bss y que pasen felices HARRYNAVIDADES Y PROSPERO AÑO NUEVO, 2006!
Con cariño..
RosAngels
