Disclaimer: Estos personajes, excepto Andrea y sus hijos, no son míos sino de J. K. Rowling, Warner Bros y no sé quien más; no gano dinero con ellos así que no me demanden, por favor.

Tras el velo

Por Elanor Black

Capítulo 12: La noticia que corrió como la pólvora.

Cuando Harry se despertó al día siguiente, aún era muy temprano, y el silencio era total, no se decidía a darse la vuelta e intentar dormir un poco pero en ese caso corría el riesgo de levantarse demasiado tarde, así que aunque aún no había amanecido, optó por salir de la cama, y quizás dar un paseo antes del desayuno Relajarse no le vendría mal para el día que le esperaba. Volver a la rutina de las clases le resultaba triste sabiendo como acabó el curso anterior, pero el dolor por la perdida de Sirius, si bien seguía muy vivo en él, ya no resultaba tan presente, y en cierto modo empezaba a aceptar la idea de haber perdido a la única persona que él sentía como familia.

Cuando bajó a la sala común ésta estaba desierta, pero los primeros rayos del sol hacían acto de presencia, entrando tímidamente por la ventana. Harry se acercó a esta para contemplar los terrenos que rodeaban el colegio. La vista desde aquella ventana era bastante hermosa, se podía ver a lo lejos el bosque prohibido, y muy cerca de él la cabaña de Hagrid. Girando la mirada, también se alcanzaba a ver el campo de quidditch, en el que descubrió dos pequeñas figuras que se movían rápidamente en el aire ejecutando veloces movimientos. ¿Quién estaría entrenando tan temprano? Harry tomó una bocanada de aire fresco y decidió bajar a los terrenos, tenía aún mucho tiempo.

Los pasillos del colegio estaban desiertos, aunque empezaban a oírse algunos ruidos, al parecer el bullicio del nuevo día empezaba a dejarse notar.

-Buenos días, señor Potter.

Al oír el saludo se detuvo y se volteó, encontrándose frente a la profesora Snape que parecía algo triste y preocupada.

-Buenos días profesora-La saludó Harry.

-Veo, que no soy la única madrugadora de hoy-

-Sí, bueno, me desperté temprano y pensé en dar una vuelta por los terrenos-explicó Harry.

-Espero que no te importe que te acompañe, yo también pensaba pasear un rato, pero si voy acompañada será más entretenido-sonrió levemente.

Harry se encogió de hombros, no le importaba, pero tampoco le resultaba común ir a pasear con una profesora a la que apenas conocía. ¿Sería algún tipo de vigilancia?, no le resultaba agradable pensar ser seguido a todas partes, así que optó por ser lo más claro posible.

-Disculpe, profesora, pero no la habrá mandado el director como guardaespaldas, ¿verdad?-preguntó Harry con tono de duda.

Andrea se sintió sorprendida por la pregunta, aunque en cierto modo le sirvió para tener una leve idea de cómo se sentía aquel chico. Y lo compadeció, la de cosas que le habrían pasado para sentirse siempre vigilado. Conocía la sensación, y sintió una cierta empatía con el chico, a pesar de sus preocupaciones, debería hacer algo para ayudarlo a relajarse.

-Por supuesto que no, Harry. No te importa que te tutee, ¿verdad? Sólo quería dar un paseo, lo prometo.

El chico se sintió un poco torpe. Aquella profesora lo tomaría por un egocéntrico.

-Lo siento- se disculpó.

Empezaron a caminar bordeando el lago, en silencio. Harry no sabía que decir, y en cierto modo eso lo ponía un poco tenso.

-Es agradable caminar con este frescor. En España, donde antes era profesora, a estas alturas del curso todavía hacía bastante calor, pero esta temperatura resulta muy relajante. Y este castillo me encanta, yo no estudié aquí, pero debe ser muy interesante, con tantos años de historia y todo eso.

-Sí está bien. El castillo es estupendo, además siempre puedes descubrir algo nuevo- contestó Harry.

- Y que tal las clases. Vi tus calificaciones en mi asignatura, y estás entre los mejores de tu curso.

Harry se sintió muy alagado por el comentario de su profesora- En realidad su asignatura es mi favorita- y tras un momento de duda, siguió-¿Puedo hacerle una pregunta?

-Sí, claro. Dime- lo animó la profesora.

- ¿Porqué hay dos profesores de Defensa este año?

-Ah, bueno, debido a las circunstancias, se pretende reforzar esta asignatura, para prepararos mejor por lo que pueda pasar, así que además de la asignatura propiamente dicha, se darán unas clases adicionales para todos los cursos, yo sola no podía con todas, así que el ministerio se mostró encantado de enviarnos a un nuevo profesor, el señor Shacklebolt, que además es un gran auror. Os serán muy útiles sus consejos.

Harry asintió a la explicación. Tenía muchas otras preguntas… pero no le parecía discreto.

-Y dime Harry, que tal en las otras asignaturas-se interesó Andrea.

-En general estoy satisfecho por los resultados de los timos, no me fue demasiado bien en adivinación ni en historia de la magia, pero de todos modos no me son necesarias para lo que quiero estudiar. Quiero ser auror.-afirmó Harry.

-Bueno, es una carrera un tanto arriesgada, y bastante difícil, pero lo importante es elegir algo que realmente nos guste. Tendrás muy buenas calificaciones en pociones, para que el profesor Snape te acepte en sus clases ¿no?

-Sí. Obtuve nota suficiente a pesar de que era la asignatura que creía que llevaba más floja, ese… profesor no tendrá más remedio que aceptarme, aunque ni el, ni yo, estemos contentos por seguir dando clases.

-Parece que no os lleváis demasiado bien-sonrió Andrea- la verdad es que imagino que Severus puede ser bastante tosco con los alumnos.

-¿Tosco?, ¡el profesor Snape es mucho más que tosco!-se quejó Harry- es un egoísta que sólo se preocupa de su casa, a los demás alumnos nos trata muy mal, él…

Pero Andrea lo interrumpió- Harry, antes de que sigas hablando de tu profesor de pociones creo que deberías saber algo. Él… él es mi esposo.

Harry se detuvo, aquello era algo que había pasado por la mente de algunos durante la cena, sabiendo el apellido de ella aunque muchos lo tomaron por una idea descabellada, pero no podía creerlo. ¡El profesor Snape casado! Si alguien se lo hubiese contado no lo habría creído, y además, aquella mujer parecía normal, de hecho parecía agradable, no aparentaba locura. ¿Estaría bajo el influjo de la maldición imperius?, ¿sería una mortífaga? Aunque recordaba haberla visto alguna vez en la orden. La noticia lo estaba haciendo desvariar.

Una carcajada volvió a centrar su atención en la profesora.

-Deberías ver tu cara Harry, ya me dijo Severus que la noticia sería impactante para la mayoría, pero tu expresión es un poema- dijo ella entre risas- Creo que esto va a ser muy divertido.

-Pero profesora, no es posible… ¿El profesor Snape?-Harry aún no terminaba de creerlo, pero volvió a emprender la marcha.

Llegaron a las proximidades del campo de quidditch, y Harry recordó a las figuras que vio aquella mañana, volando. Le parecía que había pasado una eternidad desde entonces, y buscó a los deportistas, pero el campo estaba desierto.

-Creo que va siendo hora de volver, supongo que algunos ya habrán llegado al comedor para el desayuno, y yo estoy hambrienta-dijo Andrea girándose.

Harry la imitó y se dirigieron al comedor, donde se separaron para ir a sus respectivas mesas.

-Te veré en las clases, Harry-Se despidió Andrea.

-Sí, claro- Harry aún estaba impactado por saber que aquella era la esposa de su profesor más odiado. Cuando se lo dijese a los chicos no se lo podrían creer.

Al llegar a la mesa de Gryffindor, Harry se percató de que sus amigos aún no habían llegado así que tomó asiento y empezó su desayuno, aunque no pasó mucho cuando un chico al que Harry reconoció como Brian Green se sentó junto a él.

-No te importa que me siente contigo ¿verdad? Es que mis compañeros son unos dormilones y aún no han bajado.

-No claro, ¿Qué tal en tu nueva casa?

-Oh, bien, los chicos de mi dormitorio son muy divertidos, sobre todo Euan y Marc no sé si los conoces.

-No, creo que sólo los conozco de vista.

-Oye, yo quería preguntarte por el equipo de Quidditch, ¿hay vacantes?-preguntó Brian muy ansioso y con los ojos brillando por la emoción.

-Creo que sí, los gemelos dejaron el equipo el pasado año, y aunque entraron otros en su lugar fueron medidas transitorias, supongo que volverán a hacer pruebas, de hecho, no se si yo tendré que hacerlas también, ya que tuve que dejar el equipo, lo mejor será preguntar a Angelina, que es la capitana del equipo- Harry alzó la mirada en busca de la chica y para su suerte acababa de llegar al comedor así que le hizo un gesto con la mano. La chica al verlo se acercó a donde estaban los chicos.

-Hola Harry, me alegro de volver a verte. Este año vuelves al equipo, ¿no? –dijo la chica en un tono que no admitía réplica.

-Sí, este año espero que no pase nada, y pueda volver al equipo, supongo que ya no lo tendré prohibido. Además estoy deseando darme una vuelta con mi escoba y practicar un poco. Por cierto creo que tengo un candidato a nuevo fichaje, te presento a Brian Green- dijo Harry.

-Así que estás interesado en unirte al equipo, ¿eh?- preguntó Angelina con mirada crítica.

-Sí, estoy muy interesado.-dijo Brian con ansiedad.

-Pero tú eres de primero, y los nuevos no pueden entrar en el equipo- negó la capitana del equipo de quidditch.

-No, no soy de primero, yo voy a segundo, es que me han trasladado de colegio, por eso me seleccionaron ayer- intentó justificarse el rubio.

-Ah bueno, en ese caso veremos que ocurre en las pruebas de selección, aunque lo más importante, además de volar bien, es tener realmente interés en el equipo, tendremos muchos entrenamientos, y no se puede faltar, el quidditch debe ser lo más importante.- dijo Angelina con voz severa pero entusiasta.

-Sí, claro, estuve entrenando durante el verano, y para mí es muy importante poder entrar en el equipo, es lo más importante de mi vida- se emocionó el chico igualmente con un brillo maníaco en los ojos.

A Harry le pareció un poco excesivo, aunque al nivel de Angelina, buenos se habían juntado.

-Bueno chicos, me voy con Katie a desayunar- dijo Angelina de muy buen humor.

-Disculpa Angelina, pero te importa que te acompañe, me encantaría que me hablases más sobre el equipo-pidió Brian con mirada de cachorrito.

-Claro Brian, vente con nosotras-Dijo Angelina alegremente.

-No te importa que me vaya con ellas, ¿verdad Harry?-dijo el chico levantándose.

Harry se encogió de hombros- No, claro. Además allí vienen ya Ron, Hermione y Roberto-contestó mientras hacía un gesto con la mano a sus amigos, que lo vieron sin dificultades y se dirigieron hacia él.

-Buenos días Harry-lo saludaron los chicos.

-Buenos días- contestó Harry con una sonrisa ancha al recordar LA NOTICIA que le tenía a sus amigos.

-Caramba Harry, hoy estuviste muy madrugador, y además eso parece ponerte de muy buen humor, a qué vienen tanta alegría tan temprano, acaso…

-No sigas por ahí Ron-lo cortó Harry pensando en que Ron volvería al tema de Claudia-Me enteré de algo que los hará caerse de espaldas así que sujétense bien a su silla.

-Caramba Harry, qué ha ocurrido. No será… ¿no será que los Chudley Cannons vendrán a hacer una exhibición?-Preguntó Ron emocionado.

-¡Buf! Ron, frío, frío.

-¿Tiene algo que ver con exámenes sorpresa?-preguntó Hermione asustada.

-¡No!, ¡por Dios!, ¡Hermione!, cómo se te ocurre nombrar los exámenes a principios de curso- Se quejó Harry.

-¿Pero es algo relacionado con la escuela?-Tanteó Roberto.

-Sí, es algo relacionado con la escuela-concedió Harry medio desesperado por lo mucho que tardaban sus amigos en acertar la noticia.

En aquel momento se acercó una chica de pelo negro y tez morena de la casa de Gryffindor, con cara de expresión indescifrable.

-Dios, el mundo esta a punto de acabarse, esto no puede ser nada bueno-negó con voz tétrica.

-Buenos días a ti también Parvati-la saludó Hermione con voz sarcástica- ¿Qué es lo que ha sucedido?-bufó esperando oír alguna barbaridad relacionada con augurios ridículos.

-Al parecer la profesora Snape es la "señora" de Snape-dijo haciendo alzando significativamente sus cejas.

-No-contestó Ron aterrorizado-¿Estás segura? ¿Cómo lo sabes?

-Al parecer anoche durmieron en la misma habitación ella y el profesor Snape.-Contestó Parvati en tono confidencial.

-Pero eso podría tener otras explicaciones-intentó justificar el pelirrojo.

-Es cierto, ella es su esposa-confirmó Harry enfadado porque acababan de reventarle la primicia.

-¿Y cómo lo sabes tú?-preguntó el pelirrojo anonadado.

-Ella me lo dijo-contestó el moreno.

-¿Ella te lo dijo? ¿Y cuándo pensabas contárnoslo?-preguntó el pelirrojo un poco enfadado, porque su amigo les había ocultado algo tan tan…

-Era lo que os estaba contando hace unos segundos de la noticia sorpresa-Contestó Harry exasperado.

-La verdad es que era algo concebible tras verla a ella, me refiero a su apellido y su familiaridad con el profesor Snape-Dijo Hermione pensativa

-¿quién querría casarse con Snape?-dijo Ron con cara de desagrado.-Podría estar bajo el imperius-se justificó Ron.

En aquel momento llegó la jefa de la casa de Gryffindor que miró a los chicos con gesto severo, con lo horarios del nuevo curso, que los chicos miraron con avidez.

-¡No me lo puedo creer!-Se quejó el pelirrojo- ¿Quien es la mente maquiavélica que nos pone doble clase de pociones los lunes a primera hora?

-A mi me encanta pociones- intervino Roberto.

-Eso es porque no has dado clases con Snape-afirmó Ron.

-¿Tan malo es?-Preguntó bromeando.-Algo hará bien para que hayáis obtenido nota suficiente y poder seguirla en sexto.

-bueno… supongo-concedió Ron- por cierto- dijo echando una ojeada a la mesa de los profesores-parece que hoy no vino a desayunar. Y la profesora Narodni tampoco.

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-Menos mal que por una vez llegamos con tiempo-Suspiró el pelirrojo de Gryffindor satisfecho al entrar en el aula.

La mazmorra que servía de clase para la asignatura de pociones, tenía el inconfundible estilo lúgubre de todos lo años, aunque a diferencia de los anteriores, el uniforme de los alumnos ya no sólo llevaba el escudo de Gryffindor y Slytherin, podían distinguirse fácilmente escudos de Ravenclaw y Hufflepuf, a pesar de lo cual, el numero de alumnos no parecía ser superior a cursos anteriores, ya que sólo los mejores de cada casa, en esa asignatura, eran admitidos en el sexto curso. El profesor Snape era muy exigente en ese sentido.

-Caramba, parece que este año, no daremos sólo con Slytherin, allí veo algunos chicos de Ravenclaw y de Hufflepuf-dijo Hermione, saludando con la mano a una chica rubia con el uniforme de Hufflepuf, llamada Hannah Abbott- A pesar de que estamos de todas las casas, somos menos que el año pasado, parece que no todos pasaron la criba de los TIMOS, ni son tan masoquistas como para seguir en esta asignatura.

-¡Hola chicos!-saludó Claudia, que se había acercado al grupo-Estaremos todos en esta clase, que bien-dijo alegremente.

-Siéntate con nosotros- Sugirió Roberto.

-Vaya, lo siento, pero ya tengo compañero, es aquel rubio tan simpático de allí-dijo claudia señalando a, ni más ni menos que Draco Malfoy, que en aquel momento hablaba muy entretenido con Blaise Zabini y Millicent Bulstrode.

Harry y Ron pusieron caras raras al oír describir a Draco como "aquel chico tan simpático", de sobra sabían que Draco podía ser muchas cosas, pero simpático, no era su cualidad más destacada, al menos para con la gente de casas distinta a la suya.

-¿Y qué tal en tu nueva casa?-se interesó Harry.

-Oh, muy bien, mis compañeros fueron muy amables, y mi habitación está muy bien- contestó la chica- bueno creo que es mejor que me vaya, según me dijo Draco, el profesor Snape puede ser un poco estricto-se despidió la chica- después hablamos-dijo dándose la vuelta para dirigirse hacia su asiento junto al prefecto de Slytherin.

Unos instantes después, se cerró la puerta de la mazmorra con un fuerte golpe, que anunciaba que el profesor de pociones ya había llegado.

-Buenos días-saludó el profesor a la clase-Al parecer ustedes son lo mejor de sus casas en la asignatura de pociones. El objetivo de los exámenes del curso anterior era discernir entre aquellos alumnos con aptitudes para la preparación de pociones, y aquellos que no tenían las cualidades necesarias. Obviamente el método no es infalible, ya que me consta que muchos de los presentes no tienen el nivel real necesario para proseguir con esta asignatura-dijo haciendo una pausa- en todo caso espero que no entorpezcan con su ineptitud el normal desarrollo de las clases-dijo mirando directamente a Harry.- Durante el primer trimestre de este curso estudiaremos diversos antídotos, utilizados para contrarrestar el efecto de venenos y de algunos encantamientos. No creo que sea necesario resaltar su importancia. Abran sus libros por la página 85…

-Parece que a Snape la vida de casado no le modifica en lo más mínimo-susurró Ron a Harry.

-¿Desde cuando estará casado?-preguntó Harry en voz baja.

-Quizás aprovechó el verano, con todo lo que se viene encima…-sugirió Ron.

-Parece que los señores Potter y Weasley tienen ya muy claro cómo debe hacerse el antídoto sobre el que versa la clase actual, ¿no es así?-dijo el profesor Snape, que se había ido acercando al pupitre en el que estaban sentados.

Harry lo miró desafiante, directamente a los ojos. Por culpa de él había perdido a Sirius, eso era algo que no le perdonaría. No lo temía.

-¿Tiene algo que decir, señor Potter?

Harry no contestó a la pregunta.

-En tal caso probaremos la efectividad de su antídoto en alguno de sus compañeros-Dijo Snape mirando al resto de la clase- comprobaremos hasta que punto podemos confiar en su fiabilidad, si despende de usted la vida de otros.

-Mucho más fiable que otros- dijo Harry mirando a su profesor significativamente sin desviar la vista.

El antídoto que debían hacer tardaba varios días en su preparación, no comprobarían aquel día la efectividad del antídoto, pero conociendo su responsabilidad, Harry desde aquel mismo instante puso todo su empeño y atención en cada línea y cada instrucción sobre la preparación del antídoto, aquello había pasado a ser un desafío entre él y Snape.

La mañana acabó resultando agotadora, tras la doble hora de pociones, los alumnos de Gryffindor, tuvieron una hora de encantamientos con los alumnos de Ravenclaw, en la que empezaron a estudiar el encantamiento golem viventum, según el cual, deberían ser capaces de hacer que una estatua adquiriese movimiento, cometiéndose a la voluntad del mago. Hermione y Roberto fueron los primeros en conseguir, para alegría del pequeño profesor, alguna animación de las pequeñas estatuas que les habían suministrado, Harry y Ron tan sólo consiguieron que las pequeñas figurillas acabasen saltando por los aires en varios trozos.

A la asignatura de Encantamientos le siguió una clase de Herbología con los alumnos de Hufflepuf, en la que el alumno más destacado con diferencia resultó ser Neville Longbotton.

En todas las clases asignaron, para disgusto de los alumnos, una buena cantidad de tarea, que pasaría a ocupar las horas libres que muchos habían conseguido gracias a que tenían menos asignaturas que otros años, en el caso de Harry y Ron se habían librado de Historia de la magia y de adivinación, dos materias que realmente no eran de su agrado, en ese sentido no tenían ningún remordimiento. Hermione y Roberto resultaron tener los mismos horarios, sin adivinación ni estudios muggles, pero con aritmancia y Runas.

Para alivio de todos, llegó la hora del almuerzo, hora límite que tenían los alumnos para inscribirse en la nueva asignatura de sortilegios mentales, que en la casa de Gryffindor tuvo gran aceptación ya que casi todos los alumnos se apuntaron en la lista que Hermione pasó a la profesora Macgonagall. Todos tenían gran curiosidad por conocer esa nueva asignatura, que los alumnos de sexto tendrían aquella misma noche, después de la cena.

Tras el almuerzo, Hermione y Roberto se dirigieron hacia la clase de Historia de la magia mientras Harry y Ron se encaminaron, para satisfacción de Hermione, a la biblioteca, aunque lo que no sabía la prefecta es que los chicos iban allí con la intención de ojear un nuevo libro sobre quidditch, que según Angelina era "la bomba".

Como era de suponer, el primer día de clases, después de la hora del almuerzo, la biblioteca estaba prácticamente desierta, y al entrar sólo la señora Pince era visible. Harry y Ron se dirigieron hacia la zona de libros relacionados con los deportes mágicos, aunque entre las estanterías, se dieron cuenta de que había alguien más en la biblioteca. De pie junto a la sección prohibida, y leyendo el cartel que indicaba que el paso a aquella zona estaba negado para los alumnos había una chica de pelo negro y corto, en una postura bastante tensa. Tras leer el cartel se giró, y su cara reflejaba claramente el enojo que tenía. La chica no los vio, y se dirigió hacia la zona donde estaba la bibliotecaria, tras discutir con ella, Claudia salió de la biblioteca más enfadada aún. Harry observó toda la escena absorto, y cuando giró la vista hacia su amigo, este le miraba con una sonrisa cómplice.

-A ver, porque te ríes ahora-preguntó Harry molesto.

-Eres muy poco disimulado amigo, no le has quitado ojo en todo el rato, y esta mañana, en pociones faltó poco para que la perforases con la mirada-dijo Ron con guasa.

-No digas tonterías, yo no miraba a nadie en concreto, sólo pensaba en… mis cosas -se defendió el moreno.

-¿y forma ella parte de "tus cosas"?-siguió Ron picándole.

-Ron, ya vale. Cambiando de tema, ¿Cómo te va con Hermione?-preguntó Harry intentando cambiar el centro de atención.

-¿A que te refieres con eso?- preguntó Ron susceptible.

-pues, que si ya habéis hecho las paces, hombre-dijo Harry como si fuese lo más obvio del mundo.

-Ah eso, pues, pse, no del todo, ya me habla, pero sigue enfadada conmigo-dijo Ron un poco apenado.

-¿Le has pedido disculpas?

-¿Disculpas? ¿Y por qué tendría que pedirle disculpas? ¿Por no haberme ido de vacaciones con mi amadísimo y estupendísimo novio Vicky?-dijo Ron irónicamente.

Hasta aquí este capítulo, siento no haber tocado más clases, pero se me alargaba mucho el capítulo, y tampoco quería tardar más es subirlo, espero que a pesar de eso, os guste este capítulo. Chao. .

En todo caso y como siempre se agradecen los reviews que queráis mandar con vuestras opiniones, críticas, preguntas y sugerencias. Muchísimas gracias.

Y respecto a los reviews del capítulo anterior, como siempre muchas gracias a todos:

gNdorZ!!: Muchas gracias por dejar el review y por decir que te gustó, eso siempre anima, espero que la continuación siga gustándote. Un beso.

Jessy Tonks: bueno ya tuvimos clases, y como has podido ver Snape sigue en su línea delante de sus hijos, no podía ser de otro modo, aunque no sabemos que les pareció a ellos, poco a poco irán dándose cuenta de que la gente no se quejaba por gusto, aunque se resistan a ver las cosas de ese modo…. En fin te mando un montón de besos. Hasta pronto.

Nocrala: Hola preciosa, espero que te gustase este capítulo. Respecto a la selección de Claudia no vas desencaminada, la chica peleo para poder ir a Slytherin, ya veremos si con el tiempo no se arrepiente. Jaja. En fin, hasta pronto. Un beso.

ANgiE SBM: Hola, me alegro que te gustase la escena de Snape, no prometo nada, pero intentaré que salga un poco más, pensaba en contar que pasó para que acabase con Andrea, pero no sé si hacerlo como flash back, o en un fic distinto. Por otro lado, la venganza de Brian fue bastante light, pero veremos más y mejor, jaja, este chico es un poco "peligroso". En fin, un beso. Hasta pronto.

Clau de Snape: Así que de juerga con las amigas ¿eh?, así me gusta, El deber principal de toda persona sana debe ser pasarlo bien. Ja Ja. Respecto a Snape y su esposa, bueno, ellos también deben pasarlo bien… (). Y parece que ya todo el colegio se enteró de la noticia, no tienen muchos detalles, pero la maquinaria cotilla del colegio, tiene mucho material. La clase de sortilegios mentales, ah, esa va a ser mi favorita, imagina todos leyendo las mentes unos de otros… puede ser muy interesante. Y la profe parecerá cada vez más misteriosa… Espero que te haya gustado el capítulo, a pesar de que las clases no me salieron muy allá, no terminaron de convencerme, pero si no lo dejo no subo el capítulo. En fin, un beso muy grande pa ti.

Tenshi Lain: En primer lugar, muchas gracias por tus reviews. Y contestando a tus preguntas, bueno, precisamente por lo que le dijo su padre, claudia quería demostrarle que ella no era una estúpida Gryffindor, así que discutió bastante con el sombrero para conseguir su objetivo, y desde luego, todos salieron bastante a su madre, aunque según parece, Snape tuvo una infancia difícil, no sabemos cómo sería si hubiese crecido en un ambiente mas agradable, que es lo que él ha querido para sus hijos. Respecto a lo del alumno de primero, en primer lugar decir que sobre uno de los profesores más temidos y odiados por el alumnado en general, siempre suelen correr muchos rumores, sean ciertos o no, en todo caso, lo de los juicios a posibles mortifagos fue público, y mucha gente desconfiada o enfadada, aunque se declare a alguien inocente, no cree en los veredictos, y siguen con si idea original de que el hombre era culpable, con todo lo que ha pasado del resurgimiento de Voldemort es posible que la gente vuelva a recordar a todos los que salieron libres, y podrían meter esas ideas a sus hijos. Es por eso que no me pareció descabellado el comentario del chico de primero. ¿HarryXClaudia? Es posible, je je. A Sirius le queda aún mucho para que vuelva, lo siento. En fin, que review tan largo. Hasta pronto. Un beso.

Y aquí me despido hasta el próximo capítulo.

Sed buenos.

Elanor Black.

Miembro de la Orden Severusiana.