Este es el tercer cap. De mi primer fic (por favor, no le hagan caso a la barrita que aparece al lado, me quedo invertido) espero que les guste. NOTA: Yo pienso en la voz de Ishizu como la que le pusieron cuando conoció a Kaiba, no la que le pusieron ahora, que la cambian cada 5 capítulos y la de Mokuba es la que ha usado casi siempre, la que uso con Noa (Lo pongo porque en "despertando a los dragones", que son los nuevos episodios que pasan en Nick le cambiaron bien gacho la voz)

Seto Kaiba estaba recargado en la pared de la habitación de enfrente, pues era solo un pasillo que terminaba, osea que no daba a ningún lado. Lo había confundido mucho la extraña forma en que había actuado Ishizu –Hubiera entendido si me hubiera gritado más fuerte, o incluso si me hubiera dado una cachetada, no se porque se detuvo- dijo el CEO (tengo entendido que CEO es un termino para definir al jefe de una empresa, es que ya lo he leído en muchos fics)- bueno, así es mejor para mi.

Después de unos minutos se abrió la puerta, salio Ishizu con el vestido que siempre usaba.

-¿Ya pediste la pizza? –dijo ella muy tranquila

-No, quería esperar a preguntarte de que la querías, la especial tiene salchicha, jamón, chorizo y extraqueso ¿te parece bien?

-Si se oye muy rica- dijo ella casi sonriendo

Seto le pidió a Mokuba que llamara a la pizzería y en cuestión de unos 10 minutos Moki ya estaba cruzando el comedor con 2 cajas de pizzas en sus manos.

-Yo pensaba que se tardaban como treinta minutos- dijo Ishizu con aire de "no lo sabía"

-Eso se tarda, si no eres dueño de una compañía – dijo Seto sonriendo con los brazos cruzados, auque había cierto aire de superioridad en su voz- ¿Qué esperas para venir a comer?

-Ya voy

En el comedor Mokuba no había esperado los platos y estaba comiendo con la pizza en su mano.-¿De verdad nunca has comido pizza?-dijo este con la pizza en la boca- no sabes lo que te has perdido.

-Nunca la he probado, cuando vivía con mi padre en el desierto solo comíamos cosas como serpientes, escorpiones o ratas, aunque eran muy difíciles de atrapar –cuando dijo esto los dos hermanos se le quedaron viendo de manera muy incómoda- creo que mejor voy a ver a que sabe- dijo tomando un pedazo y dándole una mordida –ay, esta caliente, ñom, ñom- eshta muy risha, muy risha – dijo Ishizu, que ya iba por la 5° mordida.

-Que bueno que te haya gustado- dijo Mokuba con una gota de sudor en la frente.

Estaban sentados en la mesa del comedor, que era muy grande, pero ellos se habían acomodado en los tres primeros lugares, con Mokuba en el lugar de en medio, el orden era Ishizu, Mokuba y Seto, de esta forma ellos dos se podían ver directamente. Después de unos minutos Ishizu se había comido su primer trozo, pero de ahí no comió nada, miraba al frente como si esperara algo, en esos momentos Seto estaba agarrando un pedazo de pizza con una sola mano, había cerrado los ojos y estaba a punto de morderla cuando pregunto aún con los ojos cerrados y poniendo su trozo en un plato:

-¿Acaso tengo algo en la cara Ishtar o es que te acabas de dar cuenta que estoy sentado frente a ti? –dijo Seto

-No, no, no-dijo Ishizu apenada- es solo que yo nunca te había visto comer y…

-¿Pensaste que yo no comía o que?

-No claro que no, es solo que nunca te había imaginado comiendo- dijo muy tranquila.

En estos momentos Mokuba estaba moviendo su cabeza hacia la persona que estaba hablando, como si estuviera en un partido de tenis.

Seto hizo como una risa reprimida de esas que parecen gemiditos, parecía que se estaban peleando, solo que a su manera, no como los pleitos que Seto hacía con Joey - Supongo que te imaginaste que yo me lavaba los dientes ¿o si?

-No, bueno, ya se que te lavas los dientes es solo que no te imagino haciéndolo, como no te imaginaba comiendo.

Pudieron haber seguido así toda la noche, pero como solo era una "conversación" hasta ahí le dejaron. Después de unos trozos más (y de otras miradas a Seto morder y masticar comida) Seto le dijo a Mokuba que se fuera a dormir, pues sino mañana no se podría levantar.

-De acuerdo- dijo Mokuba como niño chiquito, se acercó a Ishizu y le dio un beso en la mejilla- Buenas noches Ishizu,- y se acerco a su Seto- Buenas noches hermano- con lo que Seto le acaricio la cabeza, aun estando sentado, Seto era mucho más alto que Mokuba.

-Duerme bien- dijo este

Y así Mokuba se retiro del comedor, los dos vieron como salía del gran comedor y cuando cerró la puerta Ishizu comentó:

-Son sorprendentes ¿no? –dijo como hablando para sí- Mokuba te sigue admirando y queriendo, ojala siempre sea así, que no llegue a hacer algo que lo lastime y lo haga sentir mal, ya que si eso pasa, tu te sentirás peor.

Seto se sorprendió con este comentario, pero al instante recordó la situación de esa familia, aunque no se sabía toda su historia, sabía que habían tenido una infancia difícil, y que desde niños habían perdido a sus padres, lo que le recordó a… su propia familia.

Después de estos comentarios siguió un profundo silencio, que fue roto cuando Seto dijo que también para ellos era tarde y que debían de subirse a dormir.

Salieron despacio del comedor, pues no querían hacer ruido, pues eso podría despertar a Mokuba. Subieron las escaleras en silencio, pero cuando llegaron a sus respectivas puertas, que estaban en frente una de la otra Ishizu hizo un comentario que dejo perplejo a Kaiba:

-¿No quieres pasar?

-… Claro- dijo Seto

-Gracias, es que tengo que explicarte unas cosas

Cuando entraron a su habitación no habían cambiado muchas cosas, solo que ahora las maletas estaban en el suelo, a un lado de la cama. También la caja que había contenido la tiara (pues ahora Ishizu la estaba usando) debía de estar guardada, pues no se veía en la cama. Ishizu se acercó al cajón de donde sacó la susodicha caja, luego se sentó en la cama, pero de lado .Este la miro un poco extrañado, esperando a que ella hablara. Ishizu tomó la caja entre sus dos manos, la abrió y colocó su tiara ahí con mucho cuidado.

-Se que me comporte muy extraña cuando entraste a la habitación, pero es que al verla, me calme, siempre lo hace- dijo mientras acariciaba la tiara ya en su caja y sobre la cama.

Seto solo la miró extrañado y luego dijo con su acostumbrada voz de burla:

-Debes de querer mucho a ese pedazo de metal para que haya evitado que me medio mataras en mi propia casa.

-Bueno, si, es que, -dijo mientras dejaba de ver su tiara y volteaba a verlo a la cara con una sonrisa- este pedazo de metal me lo dio mi madre.

Cachetada con guante blanco. Seto no supo que decir, si disculparse o decir algo para callarla, es que él no se esperaba una respuesta tan inocente, así que mejor opto por no decir nada.

-Vaya, te quedaste callado, aunque, no lo dije para que me tengas lastima- dijo mientras se sentaba frente a Seto sosteniéndose con sus dos brazos hacia atrás y viendo al techo- cuando yo era niña vivíamos literalmente bajo tierra, no teníamos contacto con el mundo exterior y teníamos que cuidarnos de serpientes y escorpiones pero… a mi madre eso la tenía sin cuidado. Por ser la esposa del patriarca era la segunda al mando y aunque la vida de un cuidatumbas te pueda parecer muy triste ella no lo veía así.-dijo mientras agachaba la cabeza- recuerdo que en una ocasión estaba lloviendo en el exterior y el agua se filtraba por el piso, eso me asusto mucho, pero mi madre me abrazo y me dijo que no le tuviera miedo, pues hasta la más fuerte tormenta termina para dar paso al arcoiris, aunque yo nunca había visto uno solo en libros.

-¿Qué paso con ella?- pregunto Seto con voz un poco tímida

-Ella falleció cuando Marik nació, Odión fue el que la vio primero de los dos, yo tenía como 3 o 4 años y todavía no entendía muy bien el significado de "morir", claro que ahora lo comprendo perfectamente.

-Mi madre también murió cuando Mokuba nació-dijo Seto secamente- yo tenía como 6 o 7 años y lo último que me dijo fue… que cuidará a Mokuba como si fuera ella misma, y eso he intentado hacer toda mi vida y mi padre murió en un accidente cuando regresaba de trabajar, tuve que identificarlo personalmente porque el rostro le quedo completamente destrozado como para publicar su foto en el diario, aunque yo ya sabía que se trataba de él.

Ishizu se quedo callada y por dentro sus palabras le dieron un gran sentimiento, ella no sabía eso y le pareció muy triste y valiente a la vez.-…Creo que ya debemos dormir- dijo lo más claro que pudo.

-Si, que descanses-dijo mientras daba una vuelta y salía de la habitación. Era la primera vez que hablaba con alguien sobre sus padres y a su mente aparecieron las imágenes de un pasillo en un hospital así como las luces de un auto en un tarde lluviosa. Sin darse cuenta ya estaba en su cama, solo se quito la gabardina, el cinturón y los zapatos, y después se acostó intentando no pensar en lo que acababa de decir, pero a su mente le llegaban frases que no quería recordar y arrullado por las mismas se durmió.

-Si es mi papá…

-Cuídalo mucho…

-No sintió dolor pequeño

-Lo cuidare mami…

Espero que les haya gustado. Los datos de la muerte de los padres de Seto si son reales, los saque de una revista oficial y no se preocupen, les pondre más datos en el siguiento capítulo. Ahhh, otra cosa... REVIEWS por favor