Dulce Olvido
Capítulo 2
-Ya hemos entregado todos los premios, los invitamos a entonar el himno nacional…
…(Himno Nacional de España)
Todos entonaron con emoción el Himno. Muchos observaban al dueño del Museo, el cual era ya un anciano, aunque, por su preciosa voz, no lo parecía. Minutos después de haber entonado el himno y, a su vez, haber tomado asiento, el dueño del Museo se acercó al escenario, ayudado de su asistente.
-Buenas tardes. No vengo a aburrirlos ni a entretenerlos con un largo discurso, pues sé que eso no les gusta-su voz era firme, pero dulce-Les doy este discurso, con el único fin de decirles el secreto de la pasión con la que deben pintar. Pinten mirando algo, pero no lo copien en toda su imagen. Agreguen algo de su estilo, demuestren su talento expresando las emociones que le produce la imagen-se apoyó sobre su bastón-espero que nuestro trabajo, el de exhibir arte, sea recompensado de la mejor forma: que su entusiasmo crezca hasta que éste pueda lograr su sueño. Gracias por venir. –Dejó el micrófono y volvió a su ya observado asiento-
Ya eran las seis de la tarde. Hikari y Nicole regresaban a su hogar, felices de los premios que ambas habían recibido. Pero, aparte de eso, Hikari se ilusionaba con la despedida que le harían sus conocidos, especialmente sus colegas. Sabía que sería algo maravilloso, pues la querían mucho y no les causaría molestia un regalo así.
-Nico! ¿Qué tal si vamos a tomar un helado?-esto lo dijo esperanzada, señalando la heladería "Mint Love"-
-Claro! Pero luego de eso regresamos a casa, la despedida es a las ocho.
Ya había pasado una semana. El día que Hikari ansiaba había llegado. Era una preciosa mañana de domingo, llena de familias que salían de paseo, sonreían y no se preocupaban en gastar dinero para satisfacer a sus hijos. Hikari paseaba por el parque, uno de los lugares que se llenaban más durante el día domingo. Reflexionaba y planificaba su salida a Japón, lo que sucedería en más o menos cinco horas.
Sus pasos resonaban en el pasto. Tomó asiento en una banca, cercana a un árbol con sombra. En su mente, el silencio pareció apoderarse del parque. Aunque lo que ella pensaba no era la realidad en todo su esplendor, lo sentía de verdad. Sabía que algo ocurriría en Japón, y no era porque tuviera visiones o algo por el estilo, simplemente era el instinto que aparece en los momentos más precisos.
Pasaron unos minutos, Hikari parecía seguir en "trance." Pero de repente, un señor comenzó a cantar una bella canción, acompañado de su querida guitarra. Hikari reaccionó escuchando aquella melodía, pues le provocaba un extraño sentimiento. Sus ojos se alzaron hacia aquel señor.
La gente se comenzó a reunir alrededor del árbol, y del señor que tocaba con alegría la guitarra. Todo parecía preparado. El mismo señor repartió flores a todas las mujeres que se encontraban cerca de él, incluyendo a Hikari, la cual se había levantado de su banca al ver que la gente se amontonaba alrededor de ella. El señor finalizó su show con un poema que él mismo había creado, al parecer con mucho empeño y pasión.
"Así es como yo quiero trabajar…Con empeño y a la vez pasión…"-pensó Hikari. Se sintió identificada con aquel señor, que con mucho esmero había preparado aquel show.
A veces lo que siento
No lo siento dentro de mí
Cuando te canto te miento
Pues quizás yo no esté seguro
de este bello sentimiento.
Ya sabes que te quiero
Pero no lo expreso libremente
Si he sido caballero
Lo seré eternamente.
Remediarlo es muy difícil
Tú estas muy lejos de mí
Que aunque no te vea
Sentiré lo mismo por ti.
La multitud se conmovió con aquel poema, pues era simple, pero a la vez complejo…Finalmente muchos le dieron un poco de dinero, incluida Hikari.
Ya no podía seguir perdiendo el tiempo, pues el Aeropuerto quedaba a unos 45 minutos de donde ella se encontraba, y además debía de presentarse por lo menos con una hora de anticipación.
··
-Nicole! No olvides los boletos, mi cartera y la mochila cargada de comida, ¿vale?-Hikari se arreglaba apurada, se estaba haciendo una coleta debido a que sabía que la agotaría el hecho de viajar. Eran tres días de viaje, y los viajes en avión eran horriblemente desagradables, según Hikari. Pero a ella le encantaban las comidas de avión, decía que en casa nadie le hacía la comida, y suponían un trabajo más. Le encantaban los pescados y arroces que traían en el avión.
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-VUELO Nº4 , CON DESTINO A JAPÓN, TOKYO. LOS PASAJEROS, FAVOR DE PRESENTARSE ANTE LA RECEPCIÓN DE MALETAS. SU VUELO SALDRÁ EN DOS HORAS. ESPERAMOS QUE NO TENGAN NINGÚN INCOVENIENTE. LOS SALUDA:
AIR ESPAÑA.
-Kari-chan!..-Nicole apenas podía hablar, pues le costaba el hecho de llevar dos maletas. Hikari estaba en las mismas.
-¿Qué?-finalmente las dos lograron llegar ante la recepción de maletas.
-Nada, nada…
-Buenas tardes. Dejen sus maletas en la pasarela automática. Necesito sus carnés y sus boletos (pasajes)-la misma voz anterior las atendía. Destacaba en la mujer su estilo pelirosado y su nombre (el cual podían advertir con el sólo hecho de mirar la chapa que llevaba en el pecho: María Magdalena Rosa de las Mercedes Aguilar-Figueroa Goycolea)-
Fueron atendidas. Un fugaz recuerdo de Takeru apareció nuevamente ante la ingenua Hikari. Pero eso ocurrió en el avión, unas horas más tarde de haberse subido a éste, y luego de haber cenado.
Era una noche silenciosa, pero preciosa. En ella destacó la luz de la luna llena, la cual podía brillar en los ojos de las personas que rondaban de noche por la ciudad.
-Hikari…Yo…Quiero decirte que te amo. Siempre te he amado, y será por siempre.-aquella voz, era cálida y dulce. Era semejante al café.-Y…Quiero darte este anillo. –Sacó de su bolsillo un hermoso anillo con un rubí en el centro.- ¿Quieres ser mi novia?
-Por supuesto, Takeru.-sus labios se unieron en un tierno beso, un beso que no sería el último. En el futuro se dieron los mismos besos. Las lágrimas aparecieron. Sus brazos pudieron hacer lo mismo que sus labios. Su relación indicaba algo tierno, dulce, y por supuesto…En ellos destacaba la sinceridad que otras parejas carecían.
Ese fue el comienzo de todo. La luz de la luna llena, un anillo hermoso pero que sería olvidado, y por sobre todo…El nido de un amor sincero.
Hola!
Está corto?
Lo sé, pero no se impacienten, sacaré el próximo capítulo pronto. Les aseguro que no me demoraré…
R E V I E W S P L E A S E
Sé que está fome, pero me esforzaré en cambiarlo para los capítulos más importantes…
Sayonara!