'Cuanta falta me haces, mamá'.
Se lee la última línea escrita en el cuaderno gris. La última que el abogado Erwin Smith ha leído para el juez.
Un horror colectivo se apodera de los miembros del jurado, mas la conmoción no quita color al rostro tanto como en el de Armin Arlet y Levi Ackerman, quienes habían fundado sus esperanzas en el principio de la inocencia hasta que se demostrara lo contrario.
Lo contrario no solo se había demostrado, sino que además les había estampado en la cara una verdad que, para protegerse en la ignorancia, se negaban a dar crédito.
—Se declara a Mikasa Ackerman culpable del asesinato de Eren Jaeger.
El juicio ya no necesitaba más postergaciones. Eren lo había dejado claro: las letras de aquel cuaderno gris tenían voz, una voz que contó su historia cuando él no podía hacerlo con la suya.
—Solo tengo una última pregunta por hacerle, senorita Ackerman.
En sus ojos ennegrecidos no hay muestra de agitación.
— ¿Dónde está la cabeza del joven Jaeger?
—Nunca lo sabrán.
FIN
