- Cuando pierdes a tus padres se te llama huérfano. Cuando pierdes a tu pareja eres viudo… y cuando pierdes un hijo ¿Cómo nos dicen?

No recibió respuesta. Borsalino se limitó a su eterno silencio, al de siempre, a ese que analiza palabras por palabra para no errar el juicio… después de todo se conocían tan bien, sobre todo, porque sabía de lo que estaba hablando.

Así, que sentados en el sofá de la oficina de Sakazuki,aprovechando que todos se habían ido, dejo que Dove se expresará cuánto quisiera. El tiempo había llegado por fin...13 años después.

- ¡No existe!- se contestó a sí misma- el dolor es tan grande que no puede catalogarse, aún no se encuentran las palabras indicadas para traducirlo, para darle un sentido, una forma...es algo que no puede exorcizar… ni destruir... ya que se supone que son tus hijos los que te sobrevivirán. Mientras tienes las fuerzas, haces todo lo posible por darles la ventaja de la cual no gozaste a su edad… pero … Cuando se adelanta hacia el lugar a donde todos vamos… te preguntas de qué sirvió todo… ¿Qué otros motivos tienes para ver el amanecer día a día? Te consuelan falsamente con que ahora se encuentra en un lugar mejor…¡Que idiotez!¿Sabes por qué? Porque se supone que el mejor lugar de los hijos es al lado de sus padres, aún cuando se vuelven independientes, procuras estar cerca para ver qué no le suceda nada malo… una vez que te conviertes en padre jamás dejas de serlo… pero si se va de una forma tan abrupta a una edad temprana… hasta se podría decir que es algo antinatural.

Infantilmente deseas que la muerte respete las edades, que no debería llevarse a los jóvenes mucho menos a los niños...

Borsalino continúo con su mutismo. Por fin se podía externar el tema que tanto trabajo les ha costado poner sobre la mesa. Habían pasado 13 años... para ser más específico: en los cuales evitaron hablar de Amelie.

- pero la muerte es tan libre de llevarse a quien se le pega la gana…-siguió ella- estamos condenados. No es que me ponga ahora de víctima. Es que, con tanto dolor rodeando… ¡Puedo decir que los entiendo! Pero, a la vez ¡no es así! Porque mi Amelie Vivió lo suficiente para ver este mundo tan extravagante; para reír, para llorar, diferenciar lo bueno de lo malo, tomar decisiones, equivocarse, viajar, conocer, ampliar su perspectiva de vida.. ser a su vez madre, aunque no lo haya disfrutado… ¡y estas criaturas ni siquiera les han crecido las alas para surcar su futuro!¿Estoy siendo irrazonable, Borsalino? ¿Soy egoísta en recordar mi propio dolor en una situación tan cruel como está?


MIENTRAS TANTO

El olor aséptico se hacía más profundo conforme avanzaba por los pasillos, lo cual ponía sus menguados nervios al borde de la desesperación. No solo le irritaba la nariz ¡Le irritaba el alma!

Seguido del médico, contó mentalmente los pasos que le faltaban para llegar al área de cuarentena improvisada en los cuarteles de Marineford.

Día a día lo hacía, día tras día mientras los niños agonizaban la maldita enfermedad, llegada de quién sabe dónde, que no daba señas de desaparecer por más métodos que improvisaban.

No había pasado ni una semana y ya habían perecido más de veinte…¡Era algo insoportable!

Tanto él, como los otros padres, veían como la vida se les iba a sus preciados hijos. Impotentes de estar frente a un enemigo que no pueden vencer.

Tomó un profundo respiró, ya estaba frente a la puerta...esa maldita puerta que solo le hacía ver como los frutos de su existencia se desvanecen y amenazan con también abandonarlo... también...

- No eres egoísta,Dove...considero muy factible tu sentimiento ante está horrenda situación. Yo...no sé...si decir si lo comparto… Yo conocí a Amelie… cuando recién falleció… y yo estaba tan impactado por saber, hasta entonces, de que era mi hija.

- ¡Y así me dices que no soy egoísta! - grito ella.

Borsalino volteó a verla, y ella a él. Se miraron a los ojos, igual desde aquel ingrato impase.


EAST BLUE

13 AÑOS ANTES

La humedad era intensa, una sensación que se alargaba más allá del verano en estás islas, hogar del vicealmirante Garp.

Pensó que, a estás alturas de vida, era ridículo no haberse acostumbrado al sofoco y al sudor. Su piel estaba curtida ante el frío, en algunas islas de North Blue el invierno es perpetuo...pero el calor era otra cosa… así que no se asombró de alucinar con ver a Dove, con su larga cabellera índigo, en un vestido color rosa de finos tirantes y un sombrero a juego, pasar a un lado suyo como poseída por algo, a lo largo de Villa Fuusha… ¡Eso era imposible!

Su alucinación parecía haberse detenido en el tiempo, 18 años tenía cuando se alejó de él. ¿Cuántos años tendría ahora? ¡Pues claro! Tenían la misma edad.

No pudo evitar recordar la primera vez que se conocieron… Fue una de las tormentas más crudas de la estación. Justo a medianoche escuchó que alguien tocaba frenéticamente la puerta. Con recelo, se levantó de la cama, prendió un quinqué para alumbrar, se asomó por la rejilla de la puerta: no había nadie ¿Lo había soñado? Iba a darse la media vuelta y volvieron a tocar… fue a buscar una pala, solo por si las dudas. La dejó bien cerca y procedió a abrirla.

Grande fue su sorpresa, que al instante, como una tromba alguien,o algo, se lanzó hacía al centro de la habitación tiritando de frío. Vestía un extravagante abrigo negro y estaba completamente cubierto de nieve.

- Gra...gra…¡gracias por abrir!- espetó- ¡Por poco terminó como cubito de hielo!-menos mal parecía humano, bajo ese abrigo demasiado grande.

Había una pequeña chimenea encendida, el extraño no dudó en acercarse para sentir calor. Se quitó las botas llenas de nieve y procedió a acercar los pies al fuego, flexionando los dedos que poco a poco dejan de estar entumecidos.

Una vez que se cercioro de la movilidad de sus pies, procedió a quitarse la capucha, así como los guantes de sus manos.

- ¿Quién eres?- a Borsalino le asombró que alguien anduviera merodeando por ahí con semejante clima. Parecía tener su edad…

- ¿Yo? ¡Alguien sin importancia! ¡No te fijes en eso!

Tenía su cabello amarrado, lo soltó... era largo… era una chica... su sonrisa era encantadora y sus ojos claros como su cabello.

- ¿Qué clase de respuesta es esa?- Borsalino se intrigó.

- ¡ Qué tal si te lo respondo mañana!- la intrusa se acostó en el piso como si fuese lo más normal del mundo.- Buenas noches.

Borsalino no supo ni qué pensar.

- ahí te vas a congelar.- le dijo al fin, cuando vio que iba en serio a quedarse en el piso.

- No te preocupes, estoy acostumbrada.

- si, pero va a ser difícil levantar tu cadáver ¿Entiendes?

- A todo esto… ¿Vives solo?

- si …

- entonces, solo tienes una cama… no me gustaría incomodarte… pero, si no queda de otra… - se levantó muy dispuesta a encontrar la cama.

- ¡Tan siquiera dime cómo te llamas!

- mi nombre es muy feo...mira, cualquier duda que tengas, te la respondo mañana…¿Si? De dónde vengo, qué hago aquí…¿Te parece? La verdad, camine mucho y tengo mucho sueño… Ten compasión ¿No?

Al día siguiente no le contó gran cosa: solo que venía de un lugar lleno de idiotas, con padres con ideas idiotas, con una hermana mayor demasiada idiota y un hermano menor más idiota. Que la trataban como idiota, que por eso fue que huyó… y si le preocupaba, no la buscarían, ya que no la quería por creerla poco menos que una defectuosa idiota, que no valía la pena su nacimiento y existencia para ellos ¡Panda de idiotas!

Por lo menos, quería que le dijese su nombre...ella insistió que era muy feo, así que porqué no le ponía uno, si tanto le angustiaba ese asunto.

Dove...paloma...fue lo primero que se le cruzó por la cabeza, porque así como su apariencia era delicada, se imaginó que también era una plaga de la que no se iba a deshacer.

Y lo fue por 8 años… compartieron todo, tanto lo malo como lo bueno. Se soportaron pacientemente, ya que eran muy diferentes. Hubo paz y hubo guerra, hubo suerte y suerte perra … ese aciago día… donde su origen vino a fragmentar lo poco que habían cimentado.

"Dove...hasta la fecha me sigues doliendo...una palabra bastaba … y no la dije…¡No sabes cómo me arrepiento!"


- ¿Vieron pasar a la señorita Dove?- una chica de cabello castaño preguntó a uno de los transeúntes.

- corrió donde el doctor, Makino, al parecer su hermana agravó… Desde que tuvo al bebé, no ha dado señales de mejorar...¡Mira! ¡Ahí vienen de regreso!

¿Cómo...?Esta vez no era una alucinación ...había escuchado bien : Dove...su paloma … había pasado por un lado …

Tuvo que hacer amago de valor, efectivamente, pudo verla más de frente…¡Si era ella! El tiempo no había pasado … aunque eso sería lógico siendo ella parte de esa familia…¿Mencionaron a una hermana? Por lo que sabía, ella y su hermana se odiaban frenéticamente...

- Dove- apenas pudo articular… Ella no lo escuchó, con la prisa que tenía, seguida de un médico, no volteó a verlo, siguió indiferente su camino.

Sintió que se ahogaba en amargura. Pero eso no lo hizo quedarse estático. Con decisión, procedió a seguirla hasta poder hablar con ella.


CON SAKAZUKI

Akito aún estaba aquejado por la fiebre. La noche anterior había convulsionado. Los médicos se asombraron de que hubiera sobrevivido, otro niño en sus circunstancias no lo hubiese superado (por desgracia, había muchos ejemplos de eso alrededor) Demostró tener gran fuerza de voluntad...eso decían...pero, no sabían hasta cuándo podría aguantar si la situación seguía igual.

Sakazuki se acercó a la camilla donde yacía el mayor de sus retoños. Lo tomó con sumo cuidado, lo cargo con algo de recelo, ya que su respiración se escucha entrecortada. Acaricio su pelo, antes puntiagudo, ahora húmedo por la constante transpiración. Akito abrió sus afilados ojos castaños, al mirar a su padre sonrió. Quiso alzar su mano, pero estaba tan débil que no pudo. Emitió un leve quejido, como queriendo hablarle. Luego lo azotó una tos constante, en cada exhalación parecía irse.

Sakazuki lo abrazó contra su pecho, pensando, quizás, como deseando transmitir un poco de su fuerza para que continuará con vida.

Ninguno de ellos sacó su cabello oscuro. Ambos eran rubios como su madre, solo que el de Rhys era un poco castaño…

- Almirante,- la voz del doctor la devolvió a la cruda realidad- procedamos de una vez.

A pesar de su disgusto inicial, Sakazuki descubrió el brazo de su hijo para que el doctor pusiera la vacuna de prueba. Akito no dio muestras de dolor ni se sacudió como era habitual que un niño lo hiciera. Había recibido tantos pinchazos que tal vez ya lo sintiera como una costumbre.

Sakazuki lo devolvió a la camilla. Le acarició la cabeza, se quedó un rato con él, inclinando su basta estatura, arrodillado, hasta que pareció que Akito lograba dormitar un poco.

Pasaron a otra habitación… no pudo evitar sentirse descorazonado al ver a Rhys.

A diferencia de su hermano, Rhys estaba entubado. Hace un par de días que sus pulmones colapsaron.

"Se parece tanto a ella"

Se cubrió los ojos que se le humedecieron de repente. Tenía miedo que al tocarlo se disolviera. Pasó sus dedos, delicadamente, por el contorno de su pálida carita.

Con una seña le indicó al doctor que procediera... esperó alguna reacción, pero Rhys seguía sumido en ese sueño. Le hubiera gustado ver sus ojos azules...

¡Bueno! Lo más difícil se había realizado...pero, seguía lo peor: esperar…

La maldita espera… la maldita espera que consumía cada tira de su alma… no le quedaba de otra … tal vez… rezar… porque de nada le servía ser ahora Almirante de flota, no servía para nada ser el rango más elevado del poderío militar del Gobierno Mundial.

No podía ser exhaustivo en eliminar el mal inmediato ya que era un enemigo que no podía derrotar. Este mal no podía vencerse con fuerza, estrategia, fruta del diablo o técnica… se sentía acorralado, casi humillado... esa sensación lo hacía sentirse fútil y miserable ¡realmente odiaba eso!

Con furia contenida que amenazaba con desbordarse, golpeó la pared detrás de sí, está se resquebrajó de abajo hacia arriba, por fortuna, los escombros no cayeron sobre alguien más ¡Ya era demasiado! Ignorando el enorme boquete,y las expresiones de estupor que generó, Sakazuki pudo por fin exhalar su rabia en un grito que deseaba salir desde que se enteró de la desaparición de Cerise.


CON DOVE Y BORSALINO

- En verdad, lamento no haberte dicho...pero, en esos momentos no me di cuenta.

Para colmó descubriste que pertenecía a la familia del Germa 66...Hilda y Judge… eran los consentidos de mi padre...Demasiado Vinsmoke, demasiado perfectos...y yo era un maldito error...según él… ¡No soy un error! Solo pensé diferente… podía derrotar a Hilda y a Judge, no con fuerza, pero si con astucia y eso fue lo que más les molestó... por más que lo intentaban no podían matarme, por eso decidí huir de una buena vez.

Me avergüenza tener su sangre: idiotas, cerrados de mente, creyendo que son el epítome de la creación. Relamiendo sus heridas con glorias pasadas… Todo North Blue tiene razón en despreciarlos…

Era normal que te abrumaras al saber que era parte de esos monstruos.

- Nunca pensé que eras un monstruo… pero, nunca se me pasó por la cabeza tal posibilidad...

- ¡Lo sé! ¡Pero lo soy! ¿Qué más muestra quieres que haberte negado saber que ibas a ser padre? Evite que fueras parte de su vida...

- Te dio miedo…pasaste por mucho rechazo y mi reacción no fue muy favorable. Normal que te marcharas y no volvieras.

- Eso no quita lo despreciable que fui. Nadie me va a quitar esa idea de la cabeza… tal vez… recibí un merecido castigo por ello… Pero, tu pareces no guardarme rencor desde entonces ¿Por qué?¿Por qué tratas de justificar mi conducta? ¡Te hice daño!

- Porque te quiero… ¿Cómo es que no te das cuenta de ello?

Dove se levantó como si de repente el sofá se incendiara.

- ¿Pero qué dices?- estaba conmocionada, tanto que temblaba y retrocedió con lentitud para alejarse de Borsalino- ¡Eres demasiado amable! ¿Por qué? ¡Mírame! ¡Soy un asco!

- ¿Por qué?...- se cruzó de brazos y de piernas, sereno, dueño de la situación- ya te respondí… lo que tú me haces sentir, es algo que ha ido mutando con el tiempo… a veces disminuye o crece de golpe, no se queda quieto y no se desvanece por completo¡Te amo desde hace 49 años! ¿Cómo es que no te das cuenta? Que hasta la fecha lo dudes, también es mi culpa ...


13 AÑOS ANTES

- No puedo darle un diagnóstico favorable…

- Va a morir…-No era pregunta, era aseveración.

El doctor guardó silencio, por respeto salió de la habitación sin hacer otro comentario. Que la muchacha estaba más que grave era el elefante en la habitación.

Dove se sentó al lado de la cama. Hacía dos semanas que Amelie había dado a luz a un sano varón , eligió el nombre de Valentino, en honor al padre de su ahora fallecido marido… muerto en un asalto pirata por allá por la isla de Cozia. Ni siquiera habían llegado a los 30 años...ni uno de los dos presenciará el crecimiento del niño. Verla tan llena de vida y ahora notar cómo inexorablemente se marcha... era más de lo que podía soportar.

- Mamá…- apenas si se escuchaba- Mamá ¿Estás ahí?

- Estoy aquí- intento ser fuerte le tocó la mano para darle a entender que estaba ahí, y que Amélie miraba el techo con la mirada pérdida… y esos ojos tan cristalinos le dieron miedo- no hables, tienes que descansar...no ha sido fácil ¿Eh?

- siempre he querido decirte...que me he divertido mucho contigo… contrario a lo que tú nefasta familia diga, eres la mejor. Me encantó que le rompieras el hocico al mastodonte de tu hermano menor...y luego le dijiste a tu hermana bruja gruñona...que por amargada y criticona, nunca nadie la quería como esposa… echaba espuma por la boca al ver qué tú si tuviste una hija… peleaste con todo para que no me arrebataran de tu lado… y por eso hubo la necesidad de exiliarse en Wano… allí el Germa no tenía autoridad ni aliados... pero… no la pasamos mal...tú siempre hiciste lo posible por protegerme...me diste una buena vida...nunca te he dado las gracias… Gracias por todo...

- ¡Qué cosas dices!- hizo lo posible por reunir todas sus fuerzas para no derrumbarse ¡No podía ser que fuera la última conversación! ¡No, no podía ser!- ¿Agradecer qué? ¡Yo lo hice y lo seguiré haciendo con todo el amor del mundo! ¡Y lo haré un millón de veces más!

- Mamá, no me digas como es...solo dime...el nombre de mi padre…por favor… Dime…¿Lo quisiste mucho?...

- ¿A qué viene eso? ¡Y te dije que ese tema no es necesario! ¡Yo lo eche todo a perder!- el corazón se le aceleró a mil revoluciones, quiso sonreír, pero no le salió. Los ojos se le anegaron de lágrimas que hizo todo lo posible por no derramar

Y lo que Dove no sabía era que Borsalino se había colado a la vivienda, eludiendo las protestas de la mujer a cargo y utilizando su rango de Marine se permitió subir a la segunda planta donde todo el drama se desarrollaba. Era fácil solo tres habitaciones, de una de ellas salió el médico que se sorprendió de su presencia. Con una seña le ordenó silencio y que se retirara de una vez. Una vez solo, se inclinó, giró lentamente el picaporte para mirar hacia adentro y escuchar mejor. No perdió detalle de lo que hablaban...no pudo clasificar el torrente de sentimientos que lo embargaron, tanto que se le fue el aliento y se tuvo que recargar ...la puerta no pudo con su peso… se abrió y él cayó de bruces cuan largo era.

- ¡ Pero... qué rayos!-

Dove se lanzó en contra del intruso. Que al parecer era de la Marina ( debido a la típica capa que utilizan con la palabra "JUSTICIA" impresa en la espalda) vestia un taje gris a rayas y su sombrero a juego, el cual se le había caído… le jalo la corbata celeste, le alzó la cara y se paralizó…

Si...había ocasiones en que los Vinsmoke no dudan en experimentar en sus propios hijos para convertirlos en guerreros formidables. A Dove solo le tocó un desarrollo de inteligencia… ya que algo salió mal y no cumplió las expectativas físicas deseadas. Y aún hacía teorías del porque no envejeció desde un suceso fortuito nada claro. Debido a eso, en ocasiones no sabía darse cuenta del paso del tiempo en otras personas… más de las que ya no tenía contacto.

Lo reconoció...pese a la carga de los años…Dejó de apretarle el cuello…Por un momento, Dove no supo dónde estaba..trataba de asimilar todo lo que se le estaba viniendo encima. ¿Podía ser…? ¿Realmente era? ¡Los ojos! ¡El rictus de su boca!

Ante la secuencia de acciones que se sucedían en su presencia, Amélie pudo darse cuenta de la extrema palidez de su madre, la sudoración repentina y su sonrojo… el extraño estaba como aturdido, más que confundido y también sonrojado.

De golpe le vino el recuerdo de Kyoshiro… en cómo lo conocieron, como les ayudó a esconderse, en la habitación iluminada del barrio más festivo de la capital de las Flores… día a día el pasaba a saludar, con ese peinado tan estrambótico, portando de forma tan gallarda su espada... y podía percatarse del brillo en los ojos que con el paso del tiempo crecía… pero, por algún motivo íntimo, no se permitió expresar abiertamente… y aunque su madre se animó a confesarse, no le correspondió… Había un deber que debía cumplir, a eso estaba dedicado en cuerpo y alma por el resto de su vida.

El extraño miraba a Dove como "el dormilón" lo hizo a su vez, en aquellos tiempos de rosas...fue por eso (y algo más) que al hacer una rápida conjetura, se atrevió a decir…

- ¿Ustedes se conocen?

Para Dove fue un baño de agua fría. No fue fácil responder.

- él es...- su voz se vuelve inaudible conforme habla, algo que no podía evitar.- el es…- por más que lo intentó las palabras indicadas no le salían. Sus manos lo señalaron nerviosamente… pero, era algo que no podía verbalizar.

Borsalino se quedó clavado en su sitio, no sabiendo ni que pensar...es que jamás había barajado esa posibilidad.

- ¿Es él?... ¡Ah! ¡Ya veo! Usted es mi padre ¿verdad?

Dove se asombró que Amelie lo adivinara… Alguna vez escuchó que los que van a morir tienen una especie de premonición...lo cual la asustó más.

Sin darles tiempo de reaccionar ante lo sucedido , Amelie suplico:

- ¡Mamá! ¡Trae a Valentino! Tiene un nieto ¿Sabe?

Dove obedeció al ver qué eso le había proporcionado un poco de energía a su hija… una fugaz, una loca esperanza que se diluía al instante la invadió.

Amelie le pidió a Borsalino que se acercará. El sin saber qué decir, o tan siquiera hacer, lo hizo…

Por lo que podía observar no había mucho de él: quizás la mirada, el gesto burlón a ratos… por lo demás era muy "Dove"...lo bueno que no tenía los gestos duros y arrogantes de los Vinsmoke del Germa.

- Ella dice que todo fue su culpa- le soltó de sopetón en voz baja- de ser así, le suplicó que la perdone. Mamá no es mala… conmigo fue la mejor madre y amiga que pude tener… no se si eso la reivindica ante sus ojos… le pido que no le guarde rencor.

Borsalino suspiró ¿Acaso se lo podía negar? Tan solo unos instantes y ya sentía que la quería de toda la vida. Puso su mano en su cabeza… acarició su cabello como si fuese una niña.

- No fue su culpa… las circunstancias nos orillaron a tomar absurdas decisiones…

Dove se había detenido en la entrada, le dolió pensar en lo que pudo ser ...

- ¡Ah aquí está!- Amelie se alegró de tener a su hijo, que Dove acomodo entre sus brazos, mientras Borsalino lo observaba curioso- Se llama Valentino. Su padre era un buen hombre ¿Verdad, mamá? Su nombre era Martín, por desgracia ya no se encuentra entre nosotros… ¿Sabe cómo supe que usted era mi padre? ¡Mire buen! Siento que tiene un dejo de usted, aunque él es un poco oscurito como su papá jajajaja…¡Lo siento! No le pregunté su nombre...

-Borsalino-respondió titubeante, ya que Amelie, a medida que hablaba parecía que las fuerzas se le iban, palidecía... hablaba rápido como, quizá sabiendo que…

- casi parecido ¿No?... mamá, me siento débil- Amelie permitió que Borsalino cargará al bebé, mientras recuperaba la respiración- pero, estoy tan feliz…- Dove sostuvo a su hija yacente, acomodandola lo mejor que pudo en el lecho- de hecho fui muy feliz … tuve una buena vida...aunque... siento tanto… que Valentino no vaya a recordarme, y que no pueda quedarme con ustedes… justo ahora que...- Dove apretó sus manos tratando, en vano, de aparentar serenidad- siento dejarlos así...yo...los quiero...de verdad… gracias...

Amelie exhaló su último aliento. Con serenidad y una sonrisa esbozando en su rostro.

Dove le cerró sus ojos, ya no había brillo… no tenía caso seguirlos viendo...se derrumbó un momento sobre la cama…hundiendo su cara en el colchón, tratando de ahogar sus sollozos.

Borsalino se quedó brevemente en shock, ya que el pequeño bulto que cargaba comenzó a moverse.

Se fue antes de poder decirle, tan siquiera "hija'… le destrozó el alma.


- ellos piensan que Amelie es mi hermana,- dijo después de un rato del amargo suceso- desde que me cayó aquel maldito rayo deje de envejecer... Loco ¿No?… estábamos de paso… vino el parto... de improviso ella se puso mal…- ¡Bueno!... ¡Ya no se puede hacer nada!- Dove aún trataba de mostrar coraje, aunque las lágrimas no dejaban de caer, a la inverosímil, pero estaba resuelta- tengo que encargarme…

Borsalino se acercó a Dove y le puso el bebé en los brazos, este comenzó a jadear como si supiera lo que había pasado.

- por el momento, él te necesita. Si me permites, yo me encargaré de su sepelio.

- ¿Qué dices? ¡ Es mi responsabilidad…!

- ¡Por favor, Dove! ¡Era mi hija, después de todo!

Dove no supo qué responder… sin saber de él por tanto tiempo… no sabía qué esperar. Pero, le hizo caso a su instinto y le permitió actuar según su voluntad. En una cosa tenía razón: Valentino iba a necesitarla más que nunca.

Borsalino bajó las escaleras sintiendo un enorme peso en su cuerpo. El doctor no se había marchado de la casa, platicaba con la dueña en voz baja. Dejaron de hacerlo cuando se percataron de su presencia. Y por su cara se dieron cuenta de todo.

- ¿La chica acaba de morir?- el doctor se le acercó sintiéndose un poco oprimido por la elevada estatura del marine.

Borsalino movió la cabeza afirmativamente, se acomodó su sombrero gris y preguntó:

-¿Con quién debo dirigirme ahora, para notificar su fallecimiento?

- con el alcalde.

- ¿Podría llevarme?

- si, sígame, por favor.

Una vez fuera, y a pocos pasos, Borsalino se encontró con Kuzan y con Garp. Se detuvo, junto con el doctor.

- ¡Arararara! ¡Hasta que te encontramos! Ya íbamos a buscar con perros…¿ De quién te andas escondiendo? ¿Y ese milagro que no estas fumando?

- Tendré que quedarme más tiempo para arreglar un asunto personal.- respondió, mostrando que no le hizo gracia ese comentario.

- ¿Qué asunto es ese Borsalino?- pregunto Garp extrañado.- tenemos órdenes de embarcarnos de inmediato.

- Mi hija acaba de morir- se caló el sombrero, la voz se le había quebrado sin querer- por lo que tendré que hacerme cargo… usted... comprenderá.

Kuzan y Garp cruzaron miradas llenas de sorpresa; Y el doctor se sobresaltó.

- ¿Tienes una hija?- dijo Garp anonadado.

- Tenía…- una sonrisa amarga cruzó su rostro- así que si cuento con su permiso...

- Eso es algo que no se puede negar- contestó categórico - si necesitas más días, avísame, yo arreglaré todo.

- se lo agradezco de antemano, Vicealmirante Garp.

- lamento tu pérdida.

- Mi más sentido pésame.- tercio Kuzan.

Borsalino se limitó a hacer una pequeña genuflexión y continuó su búsqueda del alcalde.

- No sabía que tenía familia.- comentó Kuzan una vez que se fue.

- Nunca lo había mencionado… creo que me quedaré para echarle una mano. Tú ve por delante y dile a Sengoku el porqué de nuestra ausencia.

- Como usted diga.


- ¿como puedes decir que aun me amas después del trago amargo que te hice pasar?- Dove no podía creer lo que oía.

- Te sorprende porque a lo mejor, no sientes lo mismo qué yo. Lo cual es comprensible…- Borsalino se puso de pie, dándole la espalda para mirar la inmensidad del mar por la puerta principal.

- YO.. JAMAS DE LOS JAMASES HE DICHO LO CONTRARIO.

- entonces, responde: ¿tú aun me amas?- no tuvo el valor de mirarla ¿Qué tal si su rostro decia lo contrario?


MUY LEJOS, PERO MUY LEJOS, DE MARINEFORD

Cerise fingía dormir. La jornada fue más que agotadora,pero el cansancio no era suficiente para que tan siquiera cerrará los ojos. Se limitó a poner su brazo bueno sobre ellos. No le gustaba esa sensación. Súmale que se encuentra con alguien que sabe de mucho de ella ¡Que ella misma! Se siente mal estando en desventaja, tal vez sea porque su cotidianidad es estar en completa tensión. Nunca se acostumbró a Whole Cake… los habitantes se veían felices (en apariencia). Pero, para ella era tan aterrador, que las primeras semanas dormía con las pistolas cargadas debajo de la almohada. solo podía bajar la guardia cuando Jinbe y la tripulación estaban o Randolph… quién decidió volverse su sombra cuando estaba sóla … estando lejos de tanta presión psicológica que significaba servir al monstruo de Big Mom, era para que su alma descansará a pierna suelta. Lo haría…. El colmo es que el sujeto se obstina en quedarse a su lado...él duerme de én sabe cómo puede hacerlo en esa butaca tan incómoda. Al parecer, Drake es más tímido de lo que su feroz apariencia proyecta. Porque hasta sus ronquidos eran casi inaudibles… ¡A saber! Cómo que es contradictorio… ¿De verdad habrá andado con él? Porque hay algo en su mente que le advierte no hacerle tanto caso...que se aleje, que no permita que ni siquiera la mire...mucho menos, la toque. Porque puede ver en sus ojos esa ansia… es más ¿Por qué permanece ahí? ¿Por qué no aprovecha para huir? ¿Por qué no ir a la isla Gyojin? Pero… ¿Qué tal si eso acarreará problemas? A sabiendas como son los engendros Charlotte...tal vez, causará más problemas a Jinbe… se le acusara de la derrota... y es que allá todos penden de un hilo debido a la volátil personalidad de la matriarca…

O sea… ¿Hacer creer que murió en el enfrentamiento? ¿Otra vez? Porque, por lo poco que le contaron, ya la habían declarado muerta en una ocasión... ¿De qué trataba su maldita vida? Por el momento, la mejor opción: quedarse…

Siente agradecimiento con Drake por haberla salvado de una muerte inevitable a manos de los marines. Lo curioso, es que en el pasado ellos también lo fueron. A lo que viene a su mente: ¿Alguien más sabe de su existencia? Si la vieran ¿La reconocerían como X Drake lo hizo? Algo que no le ha dicho a nadie,(¡absolutamente a nadie!) Es lo que Erzebeth le confesó: habían traicionado a la Marina en un gran enfrentamiento ¡Para qué darle tantas vueltas! ¿Quién le dice que si llegan a reconocerla no la enviaría a Impel Down? Y para su suerte, Luffy no se arriesgaría a ir por ella (jajajaja… ¡ese Luffy le cae tan bien!) El tiempo lo dirá…

Pero… ¿Por qué siente angustia tan repentinamente? ¡Qué raro!...¿Por qué ahora siente tanto sueño?


Ya no le sorprende que las tinieblas sean dueñas de su lugar onírico. Sin embargo, ni una figura aparece… tal vez porque no las reconocería.

"Una amnesia total puede ser una bendición o una maldición" le dijo ese sujeto llamado Rayleigh ( quién entrenaba, en Amazon Lily, a ese chico que profesaba sería el próximo rey de los piratas… a quien Jinbe le tenía una alta estima y respeto, pese a su corta edad) "puedes reinventar tu vida, ser como tú quieras sin atadura alguna. Pero, por otro lado, no sabes que has dejado atrás… y es algo que te perseguirá siempre"

Eligió la primera opción… no se arriesgaría a ir a prisión por alta traición.

¿Pero qué es esto? Es la primera vez que la oscuridad toma una forma… una forma pequeña…

-¿Quién eres?

No recibe respuesta. La bruma se define. Tiene el tamaño de un niño pequeño… quién al notar su presencia, corre hacia ella y le abraza las piernas. Alza su cara para que ella lo noté.

- ¡Qué raro! ¿Acaso te conozco?

Sigue sin respuesta. Ahora puede verlo mejor:Los rasgos de su cara... ¡Se parece a ella! Aunque con el cabello un poco oscuro...pero ¡los ojos! ¡Esos son sus ojos!... Y da miedo… ahora entendía porque debía ocultarlos… ¡Cierta vez Aladine desapareció todos los espejos del Snapper Head para que no se viera!

-¿Cómo te llamas?

¿Acaso no la oye? Quiere que lo cargue… es tan liviano… pero, tan frío…

- ¿Qué pasa? ¿Te has perdido?

Su cara era de tristeza. Y la temperatura empezó a disminuir. Le caló hasta los huesos… no pudo evitar tiritar. Era tanto el dolor que producía el frío, que ya no podía permanecer de pie. Aun así, no se despegó de él. Algo le decía que tenía que protegerlo. De repente hubo viento a su alrededor… un torbellino negro los envolvió violentamente. Se sintió impotente, ya que, por más que lo intentaban, su cuerpo no reaccionaba para poder agarrarse de algo que los salvará. Gritó, pero no se escuchó. Era como estar en la nada…¡en el limbo!… en el limbo que alguna vez le contaron:donde las almas de los difuntos volaban al antojo de las infernales corrientes de aire, víctimas por toda la eternidad… ¡Hey!¿Cómo es que recordó eso? ¡Tal vez porque iba a morir…! ¿Qué otra cosa podía ser? ¡Este pequeño ser vino a anunciar su muerte! Era tanto el vértigo qué ahora deseaba realmente fallecer y no sentir este tormento...justo cuando pensó que perdería la cordura, una columna roja de fuego surgió de abajo… ¡no era fuego…! ¡Era lava! ¿¡Pero qué Demonios!? ¿En lugar de morir por los gélidos vientos, moriría incinerada?

Pasó todo lo contrario...la columna de lava no los quemó… los condujo hasta el piso donde las brumas aún predominan. El niño se soltó de sus brazos impulsivamente… corrió hacia la enorme columna ardiente… como si no tuviera miedo de aquello tan aterrador...

- ¡No vayas! ¡Vuelve!

Su voz aún era inaudible… fue tras él.

- ¡Niño! ¿Qué haces?

- ¡Cerise!- escuchó detrás suyo. Volteó para ver de dónde surgía el desgarrador lamento.

Una luz cegadora lo inundó todo… cerró los párpados para proteger su visión…


cuando pudo abrirlos, se dio cuenta que seguía en la enfermería del Liberal Hind.

El ambiente era de confusión reinando: el médico tenía un desfibrilador en sus manos, temblaba de forma inusitada; la mujer llamada Jessica, y otros hombres, sujetaban a Drake con todas sus fuerzas, quién parecía estar derramando lágrimas; había otra suerte de curiosos en la puerta…

"Vaya...qué incómodo" pensó Cerise " no me gusta que me vean… menos así". Se dio cuenta que tenía la blusa abierta. Por fortuna, tenía una camiseta interior lo bastante gruesa y larga para dejar todo a la imaginación.

- ¿Qué sucedió? ¿Por qué están así?- apenas pudo articular.

- Estuvo muerta cinco minutos…- respondió el doctor todo sudoroso.

- ¿Eh? ¡Cinco minutos! Para mí fue una eternidad…

"¿QUÉ FUE TODO ESO?"

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Snapper head es el barco de los piratas del sol.

Liberal Hind es el barco de Drake.

Quise incluir la historia de Borsalino y Dove (oc) porque son importantes en esta historia. Más adelante verán porque.

Lean el Infierno de Dante, ahí menciona el Limbo…

¿Cómo se le llama a un padre que pierde a su hijo?

En estos momentos, mi pregunta es ¿Cómo se le llama a alguien que pierde a un hermano? …

Porque he perdido a uno de mis compañeros de juegos, en la infancia nos poncharon mil pelotas y en ellas una ilusión…

Estoy en un perpetuo estado de negación…

He hecho este capítulo como una catarsis...en medio de un shock del cual no puedo salir.

La muerte es inevitable y algo tan natural en los seres vivos...pero…¡Bueno! Ustedes lo entenderán….

Gracias por leer...